Una Nochevieja en casa de mis abuelos compartiendo pajas con mi primo y luego con su hermana, no llegue a correrme por falta de tiempo y demasiado riesgo, aunque cuando ya no pudimos seguir me fui al baño y pegue la corrida del siglo.
Sentado en el copiloto del coche de mi padre con el conduciendo y yo dale que te pego, en aquella época mis corridas eran pequeñas pero gustosas.
Sentado en el copiloto del coche de mi padre con el conduciendo y yo dale que te pego, en aquella época mis corridas eran pequeñas pero gustosas.