Me estoy divorciando. Es de los divorcios duros, nada sencillos. Fui yo quien quiso divorciarse, y eso ya me posiciona dentro de la historia como el malo.
Llevábamos juntos 20 años. En ellos tuvimos dos hijos, un niño (Ángel), el mayor, y una niña (Susana). Y ella sabía que quiero a los niños muchísimo, y por eso pidió la custodia única. Por eso y por el dinero que también representa su custodia. Mi ex, Eva. está utilizando todas las cartas que puede para hacerme daño.
Hasta que exista una sentencia definitiva tenemos la custodia compartida por semanas y, además, la casa donde viven ellos es mía y, hasta que se me impida, puedo entrar en la casa. La historia es que mi ex estaba influyendo enórmemente en mi hijo mayor, y no entendía qué estaba pasando, así que, un día que sabía que no iban a estar en casa, instalé unas cámaras y unos micrófonos para saber qué estaba pasando. Lo que llegué a ver y oír me dejó petríficado.
Mi ex tiene un cuerpo que, hasta que abre la boca, te hipnotiza como una sirena: pelo largo castaño, pestañas largas, labios rellenos, unas tetas grandes y redondas, manos delicadas y con uñas bonitas, voz femenina....y sabe cómo moverse para conquistarte. Ni qué decir cómo folla, es una auténtica bomba sexual. Lo que decía, a primera vista se te empina rápido, pero cuando está hablando más de 5 minutos seguidos te das cuenta, si no estás muy hechizado, de que todo ese oro que parece tener a su alrededor es un espejismo. Pero si caes...caes profundo.
El caso es que mi hijo, Ángel, está en esa edad en la que todo lo que tiene en la cabeza es divertirse, pasarlo bien y pensar en las chicas (o más bien, en el sexo). Como mi ex no trabaja no puede darle caprichos en modo de objetos, y lo que termina haciendo es consentirle en cosas.
Lo que vi en los vídeos no me lo esperaba.
En el primero vi cómo ella estaba hablando con sus abogados que le decían que era muy complicado que un juez le diera la custodia única en las circunstancias actuales. Que yo era un padre ejemplar y que los niños me querían mucho.
- Joder, ¿no hay nada que yo pueda hacer? - espetó Eva al teléfono
- Mientras no haga nada malo a los niños o mientras ellos quieran estar con él, no creo que puedas hacer nada.
- Espera, espera....¿que los niños van a declarar?
- No, la niña tiene menos de 12 años, será el niño el que tenga que declarar, y sí. Declarará ante el juez y el fiscal.
- Ajá, es decir, que ¿si el niño dice que se quiere quedar conmigo, me darán la custodia?
- Puede que sí.
En ese momento ví cómo se llevaba la mano a la boca, como para morderse las uñas maquinando un plan...y vaya si maquinaba.
En el siguiente vídeo me extrañó lo que hacía. Iba vestida como nunca ha ido vestida en casa, con sujetadores transparentes, tangas, picardías y sandalias de tacón, maquillada....en casa....supuse que se habría echado un novio, sin embargo se vestía así para estar en casa sola, con los niños.
La niña, Susana, no decía nada, era demasiado pequeña, pero a Ángel se le caía la baba, no hacía más que mirar a su madre...eso y pajearse como un mono todo el rato en su habitación o en el cuarto de baño a solas. Bueno, hacía más cosas. Aprovechaba para hacerle fotos con el móvil cuando ella se daba la vuelta o se sentaba a ver la televisión, donde ella se abrá las piernas exageradamente en el chaise-longue. Cuando se masturbaba lo hacía mirando el móvil, supongo que, mirando las fotos que había hecho a su madre.
En el siguiente vídeo vi que ella se dejaba sobar cuando le abrazaba antes de que mi hijo se marchaba a estudiar. Parecía al principio un abrazo, pero luego sus manos iban bajando cada vez más con cada abrazo. Y otro abrazo, y sus manos más cerca de su trasero, hasta que un día lo agarró bien fuerte. Y a partir de ese día él directamente le agarraba el culo. Y eva no le daba besos en la mejilla exactamente, casi en el oído.
En otro vídeo vi que Eva dejó a mi hija en casa de una de sus amigas para que durmiera allí, y cuando llegó mi hijo mayor, ella no llevaba más que la ropa interior y las sandalias de tacón. Cuando mi hijo mayor llegó a casa no pudo contener su mandíbula, que cayó a la altura del suelo cuando vio a su madre.
Ella fue a recibirle y a darle un abrazo. Al abrir los brazos, sus pechos sobresalieron del sujetador, mostrando los pezones levemente. Fue hacia él, como desfilando, despacio, contoneando las caderas. Eso hizo que mi hijo no despegara la vista de sus pezones hasta que le abrazó mi ex. Eva le agarró de la cabeza cuando estuvo a su altura y se la llevó a sus pechos, diciendo:
- Pero mira qué grande estás...si eres casi un hombre ya hijo.
- Ehhh, hola mamá.
- Uy...sí que eres ya un hombre.- dijo mientras juntaba su pubis al de mi hijo, en referencia al bulto que le surgía a mi hijo de la entrepierna - y un gran hombre ya - le susurraba en la oreja
- Mamá.....uf...no sé....- tartamudeaba Ángel
- ¿Qué pasa Ángel, nunca has estado con ninguna mujer aún? ¿No te has acostado aún con ninguna chica? - cada sílaba parecía un suave roce de su lengua en el lóbulo de la oreja de Ángel.
- No mamá.
- No me lo puedo creer, con lo grande que se te ve - y mientras decía esto, Eva, llevó su mano a la entrepierna de mi hijo - pues si quieres que te ayude con eso, no tienes que pedírselo a mamá, haré todo lo que mi hijo necesite porque soy todo lo que necesitas....¿qué necesitas hijo, quieres que mamá te ayude con esto tan duro que tienes aquí abajo? - Y mientras iba hablando, se fue agachando para arrodillarse delante del paquete de mi hijo para quitarle los pantalones y que su miembro saliera de los boxers como un restorte.
- ss...ssss...sí...sí mamá...joder...¿me la vas a chupar por favor?
- Si es lo que necesitas hijo, claro que sí, mamá hará lo que le pidas.- y al decir esto agarró el falo de Ángel, suavemente.
Posó su lengua en la base del tronco y fue recorriendo despacio con ella la verga hasta la punta. Se detuvo en ella y jugó con su lengua en el glande hasta que se llevó la polla a la boca poco a poco.
Esto arrancó un gemido a Ángel y un:
- Joder mamá...ohh...qué bueno es esto..ohhh
- Mmmmfff te gusta cómo te la chupa mami, hijo mmmmmfff - acertaba a decir Eva entre lametón y chupetón
Con las manos ella acompasaba el masaje bucal, en el que metía y sacaba la polla que apresaban los labios de Eva. Disfrutando de cada centímetro, ensalibando cada milímetro, y gimiendo también, excitada por aquel trozo de carne.
- Ohhh, mamá, creo que me voy a correr si sigues así... - gemía Ángel
- Sí hijo, sí, córrete en la boquita de mami....córrete para mamá.
Entonces Eva aceleró el ritmo de su boca y sus manos hasta que mi hijo arqueó la espalda, alzando el volumen de sus gemidos, casi gruñendo, y Eva, le pajeó con la polla fuera de su boca pero cerca para que toda la lefa cayera dentro de ella y mi hijo pudiera ver cómo Eva, su madre, la tragaba con delicia.
Una vez que Eva le dejó la polla limpia, y Ángel relajó su cuerpo, aunque no su polla que seguía erguida, y continuó hablando con su madre:
- Joder mamá....qué buena estás...qué suerte tengo....¿podemos hacer esto más veces?
- Claro hijo, esto y lo que quieras, siempre que estés en casa conmigo, haré para ti lo que necesites, porque estoy aquí para ti.
- ¿De verdad mamá? ¿Lo que quiera?
- Claro, lo que quieras...¿qué quieres hijo?
- Es que me da algo de vergüenza pedírtelo...
- Ya me imagino lo que quieres, viendo a tu amiguito que me mira desde abajo - dijo Eva sonriendo picaronamente mientras apuntaba al pene de Ángel
- Sí, bueno....además de hacerlo...es que hay algo que he visto y querría hacer....
- Vaya, ¿que has estado viendo porno? ¿Qué es, alguna postura, o sin ropa...o?
- Bueno, sí...una postura no es exactamente...es...más bien...un sitio.
- ¿Un sitio? ¡Ah...ya entiendo! Quieres follarme el culo, ¿no? Pues mi culo para mi hijo, siempre que quiera.
- ¿De verdad mamá?
Y sin responder, Eva agarró el falo de Ángel y le obligó a seguirle al dormitorio principal. Allí Eva desnudó a Ángel completamente, y mientras le besaba Eva se quitó el sujetador y las bragas y cuando iba a descalzarse, Ángel le dijo:
- no mamá, quédate con las sandalias de tacón...te hacen muy sexy.
- lo que quiera mi niño. Ahora ven con mami.
Y se tumbaron en la cama, besándose, mientras Ángel le agarraba las tetas y ella suspiraba, por eso, y por el roce de la polla de su hijo en su entrepierna.
- Hijo, antes de follarme el culo, necesito que me folles mi chochito. ¿Vas a follar el chochito de mamá un poco?
- Síiiiii.
Eva ayudó a Ángel a introducirle la polla en su coño, y cuando ocurrió, Eva lanzó un gemido que casi parecía un orgasmo (es posible que lo fuera por el tiempo que pasó desde eso hasta que Ángel comenzó a pentenarla continuadamente).
El pobre Ángel no tenía experiencia en esas lides, se notaba por sus torpes y desacompasados movimientos, aunque poco a poco iban tomando un ritmo perceptible. Eva, bien abierta de piernas para que su hijo le pudiera follar sin problemas, se agarró un pecho para juguetear un pezón y se frotaba el clítoris mientras Ángel le ensartaba la polla en su maduro, pero ahora encharcado, coño.
- Ohhh...hijo...ohhh, qué polla tienes...ohhh, no pares...ohh...no pares...haz que mami se corra con tu polla...ohhh
- Oh, mamá...qué buena estás...ohhh
- Tócame las tetas hijo...ohhh
Y ángel le agarró las tetas mientras que la follaba.
Eva no pudo contener un orgasmo muy identificable, en el que le vibraban las piernas y con las manos sujetaba a mi hijo para que no la penetrara en ese momento.
- Qué bien follas hijo, has hecho que me corra.- Dijo ella al tiempo que dejó de sujetar a Ángel, quien, suavemente volvió a su movimiento de bombeo. - Pero ahora es momento de que me la metas en el culo, quiero correrme con tu polla en mi culo.- Y dicendo esto abrió la mesilla de noche que había cerca de la cama y tomó un bote de algo que supongo sería un lubricante, aplicándolo en su ano y, después de sacarse la polla de Ángel del coño, embadurnándola con ese líquido.
Y apuntando la polla de Ángel a su esfinter, le dijo:
- Primero despacio hijo, despacito, hasta que el culo de mamá se acostumbre.
Ángel fue insertando poco a poco su polla en el culo de Eva, hasta que este lo engulló por completo. Y luego lo fue sacando despacio, para volver a meterlo hasta el fondo suavemente. Repitió estos movimientos un par de veces más, hasta que tanto Ángel como Eva vieron que el ano ya estaba bien dilatado y que podrían comenzar a aumentar el ritmo de la follada, cosa que hizo Ángel de inmediato.
- Ohhh, sí....qué bueno es esto Ángel, fóllame el culo....ohhhh - y mientras Ángel le follaba el culo, Eva se follaba con 3 dedos el coño intentando acompasar el ritmo con las caderas de su hijo.
Él le volvió a agarrar las tetas, y el impulso dentro fuera cada vez era más rápido. Sus jadeos cada vez más intensos.
- Hijo, vas a hacer que me corra otra vez...no pares...ohhhh...no pareeeeees.
Y Eva sacó sus dedos del coño, y cerró las piernas, para volver a mostrar, entre temblores, que había llegado a otro gran orgasmo. Tan grande que duró cerca de 3 minutos. Mi hijo no podía tocarla ninguna parte del cuerpo sin que hiciera que Eva, su madre, se retorciera de nuevo de placer.
- Joder mamá...¡sí que te ha gustado! - dijo asombrado y satisfecho Ángel.
- Ay...sí hijo...ha sido maravilloso, follas fenomenal...pero ahora no pares y córrete en mi culo.
- Vale mamá.
Y Ángel retomó el ritmo, sin que Eva dejara de disfrutarlo, hasta que se corrió en el culo de su madre. Ángel siguió dentro de su madre hasta que recobró la respiración.
- Buff...mamá, mis amigos se van a morir de envidia...qué follada.
- Pero esto no se lo puedes decir a nadie Ángel. - El rostro de Eva cambió por completo, quedó serio, y hasta enfadado.
- No mamá, no se lo diré...bueno, no a todos, porque a Luisma se lo tengo que contar. Que te tenía unas ganas brutales. No hacía más que darme la plasta con que estás muy buena y que se pajea pensando en ti, y que le gustaría follarte.
- ¿Ah sí? ¿Habláis así de mí? - le miró sonriendo y con ganas de saber más.
- Bueno, mucha gente dice que estás muy buena, pero yo de esos paso. Al único que dejo que me cuente sus cosas es a Luisma. - Evidentemente, Luisma, es el mejor amigo de mi hijo.
- ¿Y eso te gusta hijo?
- Pues no me enfadaría que Luisma y tú...a ver, que a él, aunque le gustas mucho te tiene respeto, los demás sólo querrían utilizarte para el sexo.
- Ya veo...pero eso no puede ser hijo. No se lo puedes decir a nadie, es peligroso. Imagina que Luisma se lo dice a alguien, podríamos estar en problemas y nunca podría ser tuya para lo que quisieras.
- Vaya...pues ya me había hecho a la idea de que te folláramos entre los dos.
- Eres un poco pervertido eh hijo, jijiji.
- Es lo que tiene esta edad y ver porno, me paso el día salido, jejejeje.
Rieron los dos.
- Bueno - continuó Eva - podemos hacer una cosa. Si te parece puedo meterme un consolador y mientras me follas podemos hacer ver que el consolador es Luisma, ¿te parece?
- ¡Vale! Pero yo decido qué consolador.
- ¿Y eso? ¡No me digas que me meta algo muy grande que mi coño no es un túnel! jajaja
Y riendo y hablando de otras cosas lo dejaron.
Cada vez que estaban solos mi ex y mi hijo acababan teniendo sexo. En más de una ocasión Eva se la chupaba a mi hijo bajo la mesa, mientras Susana estaba desayunando cerca, ignorante de todo eso. Supongo que eso les pondría a los dos a mil.
Pasados unos días mi hijo le enseñó a mi ex un consolador en la pantalla del ordenador (supongo que de una tienda virtual):
- Este mami, quiero que te metas este.
- Pero hijo...es muy raro...¿qué es exactamente? - Y cuando Eva leyó la descripción del artículo se dirigió a Ángel sorprendida para enfatizar - ¿De perro? ¿Es un consolador de pene de perro?
- Sí mamá, es que he...-
- Ya, no me digas más. Has visto porno de zoofilia.
- Jeje...sí. A las chicas que se las follan los perros parece gustarle mucho.
- Pero ¿qué dices? Eso es imposible.
- ¡Sí mira mamá!- Y al decir esto saltó a una página pornográfica de zoofilia. En ella había varios vídeos, Ángel escogió uno en la que una mujer se arrodilla boca abajo y de golpe se le pone un perro encima y la penetra de forma rápida. La chica del vídeo gime de placer pidiendo más. - Mamá abre las piernas - le pide Ángel.
Entonces mi hijo comienza un cunilingus mientras su madre ve el vídeo zoofílico. Eva no aparta la mirada, sin para de gemir, agarrándose las tetas y diciéndole a Ángel:
- Ohhh hijo, sigue chupando el coño a mamá...ohhh cómo folla el perro ese...oohhhh vas a hacer que mami se corra con tu lengua...oohhh sigue hijo, no pareeeeees
Fue uno de los orgasmos más rápidos que he visto a Eva tener.
- ¿Te ha gustado mamá?
- Mucho hijo.
- Me refiero al vídeo de internet.
- Pues la verdad es que me ha puesto muy cachonda sí.
- Mira este otro entonces - y Ángel pone un vídeo recopilatorio de mujeres haciéndoles mamadas a sus canes.
- ¿Pero eso se puede chupar?
- Sí mamá...- Al afirmar esto Ángel se saca su verga del pantalón del pijama y se lo acerca a su madre a la boca - como esta. Chúpamela mamá, chúpamela y dedeate mientras ves a las chicas chupárselas a los perros.
Y Eva se puso manos a la obra. Mientras metía y sacaba la verga de mi hijo en su boca ella jugaba con su encharcado coño sin dejar de mirar a las chicas hacer lo propio con sus perros. Esta vez fue Ángel que, con la visión de su madre desnuda, con su polla en la boca, mientras se introducía varios dedos en el coño y miraba el vídeo gimiendo como podía con su trozo de carne interrumpiendo que saliera bien el aire, avanzó que se iba a correr, lo que hizo que Eva sacara la polla de Ángel de la boca para pajearle hacia sus tetas haciendo que este se corriera en ellas.
Eva, cuando terminó de exprimir la polla de Ángel tomó toda la leche de su hijo y se lo llevó a su coño para frotárselo y follárselo mientras miraba de vez en cuando al vídeo, y de vez en cuando a su hijo, a quien le decía:
- Mami se quiere correr con tu leche hijo...ohhhh...mami estará aquí para tí siempre que quieras y haré lo que quieras...ohhhh...sí, me corroooo, me corro con tu leche hijo, ohhhh
Y tuvo otro orgasmo del que mi hijo disfrutó, atónito, en primera persona.
Lo más llamativo fue que el último vídeo que decidí dejar grabado no estaba completo. Sólo pude ver parte de él, en el que, sin saber cómo se habían hecho con un perro, porque sé que no lo tienen, mi hijo estaba sentado en el borde de la cama, desnudo, con su polla metida en la boca de su madre que, a cuatro frente a él, estaba siendo embestida por un perro. Eva se tenía que sacar de vez en cuando la verga de mi hijo de la boca para poder jadear del gusto que le daba.
Al final de las embestidas el perro quedó quieto unos segundos, insertado dentro de Eva, momento en el que Eva continuó chupando la barra de carne de mi hijo con ansia.
Segundos después el perro se salió del coño de Eva, y Ángel le dijo que se la chupara a los dos. Eva agarró la base de la verga del perro y se la acercó a donde estaba Ángel y se fue turnando de polla, lamía la del can, y luego la de Ángel.
Mientras hacía esto, la polla del perro no paraba de lanzar chorritos de esperma canino, que Eva no desaprovechaba y tragaba con total lujuria.
Pocos segundos después, Ángel se corrió en la cara de su madre, quien rebañó con sus dedos la leche para llevarlo a la polla del perro y chuparlo de ahí.
Después de ese vídeo sabía que, además de haber criado a un completo salido sexual, no tendría ninguna oportunidad de tener la custodia compartida.
Mi ex, Eva, preparando su estrategia del divorcio, se había camelado a mi hijo mayor, Ángel, para que si tuviera que declarar ante el juez, él pidiera la custodia única de su madre. Eva lo hizo casi todo, cedió su cuerpo para el disfrute sexual de nuestro hijo, que se encontraba en esa fase en la que se excitaba hasta viendo un tobillo.
Casi todo, pero no todo. Eva le había chupado la polla infinidad de veces, se había vestido como nuestro hijo le pedía, básicamente como una actriz porno, ligueros, zapatos de tacón alto, transparencias, y siempre maquillada. Ella se había masturbado frente a él, habían mantenido sexo, Eva le entregó el culo a mi hijo quien, además de follárselo en innumerables ocasiones, se lo penetró con consoladores a cada cual más grande, incluso le folló al tiempo coño y culo con consoladores. Dieron un paso más allá y, después de ver vídeos de zoofilia, Ángel incluso logró que Eva fuera penetrada por un can y además montaron un trío, donde Eva tenía que chupar la polla del perro y la de mi hijo.
Todo esto pude verlo, y oírlo, gracias a unas cámaras que instalé en el piso donde viven ellos, mi ex y mis hijos, Ángel y Susana. Piso que, hasta la sentencia de divorcio, pago yo.
El caso es que parecía que Ángel, mi hijo, tenía una fantasía que aún se le resistía con su madre. Ángel quería que Eva se follara a un amigo suyo de clase, al tiempo que se la chupaba a él. Eva le dijo que eso era imposible, porque nadie podía enterarse de lo que estaba pasando, era muy peligroso porque les podrían separar para siempre. Es más, Eva podría ir a la cárcel.
Supongo que el miedo de enviar a su madre a la cárcel hacía que la petición cesara, hasta la siguiente sesión de sexo, que volvía a pedírselo, y Eva volvía a negarse.
Yo veía muy complicada la situación. No podía darle los vídeos a mi abogado, ya que mostraría que he puesto cámaras sin el conocimiento de mi ex en la casa, e incluso podría ir en mi contra. Creía que tendría el futuro muy negro y que, no sólo no podría ver a mis hijos con la regularidad que quería, sino que me tocaría pagar una cantidad elevada y que no me permitiría tener una vida tranquila, pero, en una de las conversaciones que mantuve con mi abogado a raíz de haber recibido la citación del juicio para el divorcio, me dijo:
- Tenemos suerte, conozco a la juez que nos han asignado.
- ¿A qué te refieres con que la conoces? – Pregunté extrañado
- Que sé de qué pie cojea. No le gustan nada las custodias únicas.
- ¿Pero estás seguro de eso?
- Sí, estoy seguro. Sólo ha cedido en algunas ocasiones la custodia única a una de las partes, y no siempre era la madre y siempre ha sido por cuestiones en las que de verdad era lo mejor para los hijos. En tu caso, seguro que pone custodia compartida.
- ¿Seguro? – Pregunté muy animado
- Seguro. No eres un borracho ni tienes adicciones, no les pegas, ni nunca has maltratado a tu mujer, no hay mal ambiente con ellos, vives cerca de los intereses vitales de tus hijos, les pagas todo…Vamos, que no hay nada que indique a tu ex que los niños tengan que vivir sólo con ella.
- Muchas gracias Enrique, son muy buenas noticias – Le agradecí emocionado.
Estaba muy contento la verdad. Mi ex se había prestado a todos esos juegos, que no sé si realmente la estarían satisfaciendo y mantendría con Ángel una vez obtuviera la custodia única. Eso hizo que esa tarde quisiera ver si ella también tendría una llamada de sus abogados, cosa que así pasó. Ahorraré el resto de la conversación que era meramente formal e iré directo a cuando sus abogados le explican quién será nuestra juez:
- ¿Cómo que no acepta custodias únicas? – Preguntó indignada
- [….] – No sé lo que le comentaron, pero supongo que lo mismo que mi abogado a mí
- Pero es que mi hijo quiere vivir conmigo, no quiere ir con su padre – Dijo muy molesta al teléfono – Él no quiere ir de ninguna manera.
- [….] – Tampoco sé qué dijeron sus abogados, pero por lo que dijo luego mi ex supongo que debieron preguntarle que porqué Ángel no querría ir conmigo.
- Bueno…su padre…no le trataba bien. ¡No, no! No ha llegado a pegarle, pero siempre lo ha tratado…muy mal. Y….y…seguro que si la juez le pregunta, él lo admitirá.
Y poco después colgó. La noté muy preocupada, todo lo que había hecho no servía para nada, me darían la custodia compartida, después de haber hecho todo lo que Ángel le había pedido…¿todo? Y creo que los dos debimos pensar lo mismo al mismo tiempo. Todo no, tendría que cruzar la línea que había puesto a mi hijo, tendría que follarse a su amigo.
Esa tarde, cuando Susana, mi hija pequeña se fue a la cama, Eva y Ángel comenzaron su sesión de sexo pero, justo antes de que ella comenzara a lamerle la polla vestida de zorra de película X, le dijo…
- Ángel….me está poniendo muy cachonda pensar que me pueden dar por culo mientras tengo tu polla metida en la boca – Y mientras decía eso le daba lametones suaves al glande, que no terminaba de engullir. – No sabes cómo me moja saber que soy tu puta, pero es que es muy peligroso…si hago esto por ti, tienes que hacer algo por mí – Y entonces sí que se llevó la polla a la boca
- Ahh mamá….lo que quieras….ahhhh – Decía completamente extasiado por la felación de su madre
- Mmmmm qué rica está tu polla hijo mmmmm. Quiero seguir disfrutando e tu polla pero tú tendrás que decir a la juez que tú te quieres quedar conmigo porque papá te hace sentir mal – y volvía a ensalivar la polla y a chupar con fruición - ¿Verdad que no quieres dejar a mamá sin que te pueda chupar tu polla?
- Pero….ohhhh…mamá….ahhhh… es que….papá….
- Yo me follaré a tu amigo y tú haces eso por mí…¿vale? Mmmmm…qué dura la tienes…estoy encharcada, fóllame ya que estoy chorreando.
Y sin más charla se puso Eva a horcajadas sobre Ángel y, agarrándose las tetazas que tiene, comenzó a cabalgar la polla de su hijo. Mientras se lo follaba dejó uno de sus pechos para acariciarse el clítoris. Bueno, más que acariciarse, jugaba con él con intensidad, gimiendo sin parar. Mi hijo le agarraba de las caderas y le ayudaba a subir y a bajar. Pocos segundos después mi ex se corrió en la polla de mi hijo, incapaz de controlar los temblores de su cuerpo en el clímax al que había llegado.
- Mamá….me quiero correr en tu cara ahora
- Claro hijo, dame tu leche en la cara
Mi ex se tumbó en la cama, boca arriba al tiempo que, mi hijo, de pie se masturbaba hasta correrse lanzando chorros encima de la cara de Eva, que mientras los recibía siguió dedeándose hasta llegar a un nuevo orgasmo con la cara embadurnada de lefa.
Se tumbaron el uno al lado del otro, exhaustos, cuando mi hijo rompió la cadencia de jadeos diciendo:
- Entonces, ¿se lo digo a Robert para que venga mañana?
- ¿Pero ya? ¿Mañana? No puedes esp…
- Mañana mamá – le cortó - ¿Y te podremos follar los dos a la vez?
- Joder qué perra me pones hijo, ya me han dado otra vez ganas de tu polla, pero ahora fóllame el culo.
Dicho y hecho, mi ex se puso a cuatro y llevó toda la corrida que tenía en su cara a su ano, a modo de lubrificante, y mi hijo le ensartó la polla de un empujón. Mi ex debía tener el ano ya muy dilatado de las continuas series de sexo que llevan.
Al igual que cuando ella le cabalgaba, ahora que estaba a 4, volvió a jugar con su coño y, a meterse los dedos, mientras que mi hijo le perforaba el culo.
- Oh, oh, no pares de follarte a mami, ahhh, me corro hijo no pares….ahhhhhhh
- Ohhh, qué culo tienes mamá, ohhh qué guarra eres, ohhhh
Y mi hijo, poco después se corrió dentro del culo de su madre.
Después de haber descansado un poco de esta nueva sesión de sexo, decidieron ir a ducharse y al volver a la habitación, estuvieron organizando cómo quedar con Rober para cumplir la fantasía de mi hijo.
La alegría y tranquilidad que había sentido después de la conversación con mi abogado se disiparon ipso facto después de esa escena, en la que estaban organizando cómo mi hijo tendría que testificar contra mí, mintiendo, y haciendo imposible que pudiera tener la custodia compartida
Llevábamos juntos 20 años. En ellos tuvimos dos hijos, un niño (Ángel), el mayor, y una niña (Susana). Y ella sabía que quiero a los niños muchísimo, y por eso pidió la custodia única. Por eso y por el dinero que también representa su custodia. Mi ex, Eva. está utilizando todas las cartas que puede para hacerme daño.
Hasta que exista una sentencia definitiva tenemos la custodia compartida por semanas y, además, la casa donde viven ellos es mía y, hasta que se me impida, puedo entrar en la casa. La historia es que mi ex estaba influyendo enórmemente en mi hijo mayor, y no entendía qué estaba pasando, así que, un día que sabía que no iban a estar en casa, instalé unas cámaras y unos micrófonos para saber qué estaba pasando. Lo que llegué a ver y oír me dejó petríficado.
Mi ex tiene un cuerpo que, hasta que abre la boca, te hipnotiza como una sirena: pelo largo castaño, pestañas largas, labios rellenos, unas tetas grandes y redondas, manos delicadas y con uñas bonitas, voz femenina....y sabe cómo moverse para conquistarte. Ni qué decir cómo folla, es una auténtica bomba sexual. Lo que decía, a primera vista se te empina rápido, pero cuando está hablando más de 5 minutos seguidos te das cuenta, si no estás muy hechizado, de que todo ese oro que parece tener a su alrededor es un espejismo. Pero si caes...caes profundo.
El caso es que mi hijo, Ángel, está en esa edad en la que todo lo que tiene en la cabeza es divertirse, pasarlo bien y pensar en las chicas (o más bien, en el sexo). Como mi ex no trabaja no puede darle caprichos en modo de objetos, y lo que termina haciendo es consentirle en cosas.
Lo que vi en los vídeos no me lo esperaba.
En el primero vi cómo ella estaba hablando con sus abogados que le decían que era muy complicado que un juez le diera la custodia única en las circunstancias actuales. Que yo era un padre ejemplar y que los niños me querían mucho.
- Joder, ¿no hay nada que yo pueda hacer? - espetó Eva al teléfono
- Mientras no haga nada malo a los niños o mientras ellos quieran estar con él, no creo que puedas hacer nada.
- Espera, espera....¿que los niños van a declarar?
- No, la niña tiene menos de 12 años, será el niño el que tenga que declarar, y sí. Declarará ante el juez y el fiscal.
- Ajá, es decir, que ¿si el niño dice que se quiere quedar conmigo, me darán la custodia?
- Puede que sí.
En ese momento ví cómo se llevaba la mano a la boca, como para morderse las uñas maquinando un plan...y vaya si maquinaba.
En el siguiente vídeo me extrañó lo que hacía. Iba vestida como nunca ha ido vestida en casa, con sujetadores transparentes, tangas, picardías y sandalias de tacón, maquillada....en casa....supuse que se habría echado un novio, sin embargo se vestía así para estar en casa sola, con los niños.
La niña, Susana, no decía nada, era demasiado pequeña, pero a Ángel se le caía la baba, no hacía más que mirar a su madre...eso y pajearse como un mono todo el rato en su habitación o en el cuarto de baño a solas. Bueno, hacía más cosas. Aprovechaba para hacerle fotos con el móvil cuando ella se daba la vuelta o se sentaba a ver la televisión, donde ella se abrá las piernas exageradamente en el chaise-longue. Cuando se masturbaba lo hacía mirando el móvil, supongo que, mirando las fotos que había hecho a su madre.
En el siguiente vídeo vi que ella se dejaba sobar cuando le abrazaba antes de que mi hijo se marchaba a estudiar. Parecía al principio un abrazo, pero luego sus manos iban bajando cada vez más con cada abrazo. Y otro abrazo, y sus manos más cerca de su trasero, hasta que un día lo agarró bien fuerte. Y a partir de ese día él directamente le agarraba el culo. Y eva no le daba besos en la mejilla exactamente, casi en el oído.
En otro vídeo vi que Eva dejó a mi hija en casa de una de sus amigas para que durmiera allí, y cuando llegó mi hijo mayor, ella no llevaba más que la ropa interior y las sandalias de tacón. Cuando mi hijo mayor llegó a casa no pudo contener su mandíbula, que cayó a la altura del suelo cuando vio a su madre.
Ella fue a recibirle y a darle un abrazo. Al abrir los brazos, sus pechos sobresalieron del sujetador, mostrando los pezones levemente. Fue hacia él, como desfilando, despacio, contoneando las caderas. Eso hizo que mi hijo no despegara la vista de sus pezones hasta que le abrazó mi ex. Eva le agarró de la cabeza cuando estuvo a su altura y se la llevó a sus pechos, diciendo:
- Pero mira qué grande estás...si eres casi un hombre ya hijo.
- Ehhh, hola mamá.
- Uy...sí que eres ya un hombre.- dijo mientras juntaba su pubis al de mi hijo, en referencia al bulto que le surgía a mi hijo de la entrepierna - y un gran hombre ya - le susurraba en la oreja
- Mamá.....uf...no sé....- tartamudeaba Ángel
- ¿Qué pasa Ángel, nunca has estado con ninguna mujer aún? ¿No te has acostado aún con ninguna chica? - cada sílaba parecía un suave roce de su lengua en el lóbulo de la oreja de Ángel.
- No mamá.
- No me lo puedo creer, con lo grande que se te ve - y mientras decía esto, Eva, llevó su mano a la entrepierna de mi hijo - pues si quieres que te ayude con eso, no tienes que pedírselo a mamá, haré todo lo que mi hijo necesite porque soy todo lo que necesitas....¿qué necesitas hijo, quieres que mamá te ayude con esto tan duro que tienes aquí abajo? - Y mientras iba hablando, se fue agachando para arrodillarse delante del paquete de mi hijo para quitarle los pantalones y que su miembro saliera de los boxers como un restorte.
- ss...ssss...sí...sí mamá...joder...¿me la vas a chupar por favor?
- Si es lo que necesitas hijo, claro que sí, mamá hará lo que le pidas.- y al decir esto agarró el falo de Ángel, suavemente.
Posó su lengua en la base del tronco y fue recorriendo despacio con ella la verga hasta la punta. Se detuvo en ella y jugó con su lengua en el glande hasta que se llevó la polla a la boca poco a poco.
Esto arrancó un gemido a Ángel y un:
- Joder mamá...ohh...qué bueno es esto..ohhh
- Mmmmfff te gusta cómo te la chupa mami, hijo mmmmmfff - acertaba a decir Eva entre lametón y chupetón
Con las manos ella acompasaba el masaje bucal, en el que metía y sacaba la polla que apresaban los labios de Eva. Disfrutando de cada centímetro, ensalibando cada milímetro, y gimiendo también, excitada por aquel trozo de carne.
- Ohhh, mamá, creo que me voy a correr si sigues así... - gemía Ángel
- Sí hijo, sí, córrete en la boquita de mami....córrete para mamá.
Entonces Eva aceleró el ritmo de su boca y sus manos hasta que mi hijo arqueó la espalda, alzando el volumen de sus gemidos, casi gruñendo, y Eva, le pajeó con la polla fuera de su boca pero cerca para que toda la lefa cayera dentro de ella y mi hijo pudiera ver cómo Eva, su madre, la tragaba con delicia.
Una vez que Eva le dejó la polla limpia, y Ángel relajó su cuerpo, aunque no su polla que seguía erguida, y continuó hablando con su madre:
- Joder mamá....qué buena estás...qué suerte tengo....¿podemos hacer esto más veces?
- Claro hijo, esto y lo que quieras, siempre que estés en casa conmigo, haré para ti lo que necesites, porque estoy aquí para ti.
- ¿De verdad mamá? ¿Lo que quiera?
- Claro, lo que quieras...¿qué quieres hijo?
- Es que me da algo de vergüenza pedírtelo...
- Ya me imagino lo que quieres, viendo a tu amiguito que me mira desde abajo - dijo Eva sonriendo picaronamente mientras apuntaba al pene de Ángel
- Sí, bueno....además de hacerlo...es que hay algo que he visto y querría hacer....
- Vaya, ¿que has estado viendo porno? ¿Qué es, alguna postura, o sin ropa...o?
- Bueno, sí...una postura no es exactamente...es...más bien...un sitio.
- ¿Un sitio? ¡Ah...ya entiendo! Quieres follarme el culo, ¿no? Pues mi culo para mi hijo, siempre que quiera.
- ¿De verdad mamá?
Y sin responder, Eva agarró el falo de Ángel y le obligó a seguirle al dormitorio principal. Allí Eva desnudó a Ángel completamente, y mientras le besaba Eva se quitó el sujetador y las bragas y cuando iba a descalzarse, Ángel le dijo:
- no mamá, quédate con las sandalias de tacón...te hacen muy sexy.
- lo que quiera mi niño. Ahora ven con mami.
Y se tumbaron en la cama, besándose, mientras Ángel le agarraba las tetas y ella suspiraba, por eso, y por el roce de la polla de su hijo en su entrepierna.
- Hijo, antes de follarme el culo, necesito que me folles mi chochito. ¿Vas a follar el chochito de mamá un poco?
- Síiiiii.
Eva ayudó a Ángel a introducirle la polla en su coño, y cuando ocurrió, Eva lanzó un gemido que casi parecía un orgasmo (es posible que lo fuera por el tiempo que pasó desde eso hasta que Ángel comenzó a pentenarla continuadamente).
El pobre Ángel no tenía experiencia en esas lides, se notaba por sus torpes y desacompasados movimientos, aunque poco a poco iban tomando un ritmo perceptible. Eva, bien abierta de piernas para que su hijo le pudiera follar sin problemas, se agarró un pecho para juguetear un pezón y se frotaba el clítoris mientras Ángel le ensartaba la polla en su maduro, pero ahora encharcado, coño.
- Ohhh...hijo...ohhh, qué polla tienes...ohhh, no pares...ohh...no pares...haz que mami se corra con tu polla...ohhh
- Oh, mamá...qué buena estás...ohhh
- Tócame las tetas hijo...ohhh
Y ángel le agarró las tetas mientras que la follaba.
Eva no pudo contener un orgasmo muy identificable, en el que le vibraban las piernas y con las manos sujetaba a mi hijo para que no la penetrara en ese momento.
- Qué bien follas hijo, has hecho que me corra.- Dijo ella al tiempo que dejó de sujetar a Ángel, quien, suavemente volvió a su movimiento de bombeo. - Pero ahora es momento de que me la metas en el culo, quiero correrme con tu polla en mi culo.- Y dicendo esto abrió la mesilla de noche que había cerca de la cama y tomó un bote de algo que supongo sería un lubricante, aplicándolo en su ano y, después de sacarse la polla de Ángel del coño, embadurnándola con ese líquido.
Y apuntando la polla de Ángel a su esfinter, le dijo:
- Primero despacio hijo, despacito, hasta que el culo de mamá se acostumbre.
Ángel fue insertando poco a poco su polla en el culo de Eva, hasta que este lo engulló por completo. Y luego lo fue sacando despacio, para volver a meterlo hasta el fondo suavemente. Repitió estos movimientos un par de veces más, hasta que tanto Ángel como Eva vieron que el ano ya estaba bien dilatado y que podrían comenzar a aumentar el ritmo de la follada, cosa que hizo Ángel de inmediato.
- Ohhh, sí....qué bueno es esto Ángel, fóllame el culo....ohhhh - y mientras Ángel le follaba el culo, Eva se follaba con 3 dedos el coño intentando acompasar el ritmo con las caderas de su hijo.
Él le volvió a agarrar las tetas, y el impulso dentro fuera cada vez era más rápido. Sus jadeos cada vez más intensos.
- Hijo, vas a hacer que me corra otra vez...no pares...ohhhh...no pareeeeees.
Y Eva sacó sus dedos del coño, y cerró las piernas, para volver a mostrar, entre temblores, que había llegado a otro gran orgasmo. Tan grande que duró cerca de 3 minutos. Mi hijo no podía tocarla ninguna parte del cuerpo sin que hiciera que Eva, su madre, se retorciera de nuevo de placer.
- Joder mamá...¡sí que te ha gustado! - dijo asombrado y satisfecho Ángel.
- Ay...sí hijo...ha sido maravilloso, follas fenomenal...pero ahora no pares y córrete en mi culo.
- Vale mamá.
Y Ángel retomó el ritmo, sin que Eva dejara de disfrutarlo, hasta que se corrió en el culo de su madre. Ángel siguió dentro de su madre hasta que recobró la respiración.
- Buff...mamá, mis amigos se van a morir de envidia...qué follada.
- Pero esto no se lo puedes decir a nadie Ángel. - El rostro de Eva cambió por completo, quedó serio, y hasta enfadado.
- No mamá, no se lo diré...bueno, no a todos, porque a Luisma se lo tengo que contar. Que te tenía unas ganas brutales. No hacía más que darme la plasta con que estás muy buena y que se pajea pensando en ti, y que le gustaría follarte.
- ¿Ah sí? ¿Habláis así de mí? - le miró sonriendo y con ganas de saber más.
- Bueno, mucha gente dice que estás muy buena, pero yo de esos paso. Al único que dejo que me cuente sus cosas es a Luisma. - Evidentemente, Luisma, es el mejor amigo de mi hijo.
- ¿Y eso te gusta hijo?
- Pues no me enfadaría que Luisma y tú...a ver, que a él, aunque le gustas mucho te tiene respeto, los demás sólo querrían utilizarte para el sexo.
- Ya veo...pero eso no puede ser hijo. No se lo puedes decir a nadie, es peligroso. Imagina que Luisma se lo dice a alguien, podríamos estar en problemas y nunca podría ser tuya para lo que quisieras.
- Vaya...pues ya me había hecho a la idea de que te folláramos entre los dos.
- Eres un poco pervertido eh hijo, jijiji.
- Es lo que tiene esta edad y ver porno, me paso el día salido, jejejeje.
Rieron los dos.
- Bueno - continuó Eva - podemos hacer una cosa. Si te parece puedo meterme un consolador y mientras me follas podemos hacer ver que el consolador es Luisma, ¿te parece?
- ¡Vale! Pero yo decido qué consolador.
- ¿Y eso? ¡No me digas que me meta algo muy grande que mi coño no es un túnel! jajaja
Y riendo y hablando de otras cosas lo dejaron.
Cada vez que estaban solos mi ex y mi hijo acababan teniendo sexo. En más de una ocasión Eva se la chupaba a mi hijo bajo la mesa, mientras Susana estaba desayunando cerca, ignorante de todo eso. Supongo que eso les pondría a los dos a mil.
Pasados unos días mi hijo le enseñó a mi ex un consolador en la pantalla del ordenador (supongo que de una tienda virtual):
- Este mami, quiero que te metas este.
- Pero hijo...es muy raro...¿qué es exactamente? - Y cuando Eva leyó la descripción del artículo se dirigió a Ángel sorprendida para enfatizar - ¿De perro? ¿Es un consolador de pene de perro?
- Sí mamá, es que he...-
- Ya, no me digas más. Has visto porno de zoofilia.
- Jeje...sí. A las chicas que se las follan los perros parece gustarle mucho.
- Pero ¿qué dices? Eso es imposible.
- ¡Sí mira mamá!- Y al decir esto saltó a una página pornográfica de zoofilia. En ella había varios vídeos, Ángel escogió uno en la que una mujer se arrodilla boca abajo y de golpe se le pone un perro encima y la penetra de forma rápida. La chica del vídeo gime de placer pidiendo más. - Mamá abre las piernas - le pide Ángel.
Entonces mi hijo comienza un cunilingus mientras su madre ve el vídeo zoofílico. Eva no aparta la mirada, sin para de gemir, agarrándose las tetas y diciéndole a Ángel:
- Ohhh hijo, sigue chupando el coño a mamá...ohhh cómo folla el perro ese...oohhhh vas a hacer que mami se corra con tu lengua...oohhh sigue hijo, no pareeeeees
Fue uno de los orgasmos más rápidos que he visto a Eva tener.
- ¿Te ha gustado mamá?
- Mucho hijo.
- Me refiero al vídeo de internet.
- Pues la verdad es que me ha puesto muy cachonda sí.
- Mira este otro entonces - y Ángel pone un vídeo recopilatorio de mujeres haciéndoles mamadas a sus canes.
- ¿Pero eso se puede chupar?
- Sí mamá...- Al afirmar esto Ángel se saca su verga del pantalón del pijama y se lo acerca a su madre a la boca - como esta. Chúpamela mamá, chúpamela y dedeate mientras ves a las chicas chupárselas a los perros.
Y Eva se puso manos a la obra. Mientras metía y sacaba la verga de mi hijo en su boca ella jugaba con su encharcado coño sin dejar de mirar a las chicas hacer lo propio con sus perros. Esta vez fue Ángel que, con la visión de su madre desnuda, con su polla en la boca, mientras se introducía varios dedos en el coño y miraba el vídeo gimiendo como podía con su trozo de carne interrumpiendo que saliera bien el aire, avanzó que se iba a correr, lo que hizo que Eva sacara la polla de Ángel de la boca para pajearle hacia sus tetas haciendo que este se corriera en ellas.
Eva, cuando terminó de exprimir la polla de Ángel tomó toda la leche de su hijo y se lo llevó a su coño para frotárselo y follárselo mientras miraba de vez en cuando al vídeo, y de vez en cuando a su hijo, a quien le decía:
- Mami se quiere correr con tu leche hijo...ohhhh...mami estará aquí para tí siempre que quieras y haré lo que quieras...ohhhh...sí, me corroooo, me corro con tu leche hijo, ohhhh
Y tuvo otro orgasmo del que mi hijo disfrutó, atónito, en primera persona.
Lo más llamativo fue que el último vídeo que decidí dejar grabado no estaba completo. Sólo pude ver parte de él, en el que, sin saber cómo se habían hecho con un perro, porque sé que no lo tienen, mi hijo estaba sentado en el borde de la cama, desnudo, con su polla metida en la boca de su madre que, a cuatro frente a él, estaba siendo embestida por un perro. Eva se tenía que sacar de vez en cuando la verga de mi hijo de la boca para poder jadear del gusto que le daba.
Al final de las embestidas el perro quedó quieto unos segundos, insertado dentro de Eva, momento en el que Eva continuó chupando la barra de carne de mi hijo con ansia.
Segundos después el perro se salió del coño de Eva, y Ángel le dijo que se la chupara a los dos. Eva agarró la base de la verga del perro y se la acercó a donde estaba Ángel y se fue turnando de polla, lamía la del can, y luego la de Ángel.
Mientras hacía esto, la polla del perro no paraba de lanzar chorritos de esperma canino, que Eva no desaprovechaba y tragaba con total lujuria.
Pocos segundos después, Ángel se corrió en la cara de su madre, quien rebañó con sus dedos la leche para llevarlo a la polla del perro y chuparlo de ahí.
Después de ese vídeo sabía que, además de haber criado a un completo salido sexual, no tendría ninguna oportunidad de tener la custodia compartida.
Mi ex, Eva, preparando su estrategia del divorcio, se había camelado a mi hijo mayor, Ángel, para que si tuviera que declarar ante el juez, él pidiera la custodia única de su madre. Eva lo hizo casi todo, cedió su cuerpo para el disfrute sexual de nuestro hijo, que se encontraba en esa fase en la que se excitaba hasta viendo un tobillo.
Casi todo, pero no todo. Eva le había chupado la polla infinidad de veces, se había vestido como nuestro hijo le pedía, básicamente como una actriz porno, ligueros, zapatos de tacón alto, transparencias, y siempre maquillada. Ella se había masturbado frente a él, habían mantenido sexo, Eva le entregó el culo a mi hijo quien, además de follárselo en innumerables ocasiones, se lo penetró con consoladores a cada cual más grande, incluso le folló al tiempo coño y culo con consoladores. Dieron un paso más allá y, después de ver vídeos de zoofilia, Ángel incluso logró que Eva fuera penetrada por un can y además montaron un trío, donde Eva tenía que chupar la polla del perro y la de mi hijo.
Todo esto pude verlo, y oírlo, gracias a unas cámaras que instalé en el piso donde viven ellos, mi ex y mis hijos, Ángel y Susana. Piso que, hasta la sentencia de divorcio, pago yo.
El caso es que parecía que Ángel, mi hijo, tenía una fantasía que aún se le resistía con su madre. Ángel quería que Eva se follara a un amigo suyo de clase, al tiempo que se la chupaba a él. Eva le dijo que eso era imposible, porque nadie podía enterarse de lo que estaba pasando, era muy peligroso porque les podrían separar para siempre. Es más, Eva podría ir a la cárcel.
Supongo que el miedo de enviar a su madre a la cárcel hacía que la petición cesara, hasta la siguiente sesión de sexo, que volvía a pedírselo, y Eva volvía a negarse.
Yo veía muy complicada la situación. No podía darle los vídeos a mi abogado, ya que mostraría que he puesto cámaras sin el conocimiento de mi ex en la casa, e incluso podría ir en mi contra. Creía que tendría el futuro muy negro y que, no sólo no podría ver a mis hijos con la regularidad que quería, sino que me tocaría pagar una cantidad elevada y que no me permitiría tener una vida tranquila, pero, en una de las conversaciones que mantuve con mi abogado a raíz de haber recibido la citación del juicio para el divorcio, me dijo:
- Tenemos suerte, conozco a la juez que nos han asignado.
- ¿A qué te refieres con que la conoces? – Pregunté extrañado
- Que sé de qué pie cojea. No le gustan nada las custodias únicas.
- ¿Pero estás seguro de eso?
- Sí, estoy seguro. Sólo ha cedido en algunas ocasiones la custodia única a una de las partes, y no siempre era la madre y siempre ha sido por cuestiones en las que de verdad era lo mejor para los hijos. En tu caso, seguro que pone custodia compartida.
- ¿Seguro? – Pregunté muy animado
- Seguro. No eres un borracho ni tienes adicciones, no les pegas, ni nunca has maltratado a tu mujer, no hay mal ambiente con ellos, vives cerca de los intereses vitales de tus hijos, les pagas todo…Vamos, que no hay nada que indique a tu ex que los niños tengan que vivir sólo con ella.
- Muchas gracias Enrique, son muy buenas noticias – Le agradecí emocionado.
Estaba muy contento la verdad. Mi ex se había prestado a todos esos juegos, que no sé si realmente la estarían satisfaciendo y mantendría con Ángel una vez obtuviera la custodia única. Eso hizo que esa tarde quisiera ver si ella también tendría una llamada de sus abogados, cosa que así pasó. Ahorraré el resto de la conversación que era meramente formal e iré directo a cuando sus abogados le explican quién será nuestra juez:
- ¿Cómo que no acepta custodias únicas? – Preguntó indignada
- [….] – No sé lo que le comentaron, pero supongo que lo mismo que mi abogado a mí
- Pero es que mi hijo quiere vivir conmigo, no quiere ir con su padre – Dijo muy molesta al teléfono – Él no quiere ir de ninguna manera.
- [….] – Tampoco sé qué dijeron sus abogados, pero por lo que dijo luego mi ex supongo que debieron preguntarle que porqué Ángel no querría ir conmigo.
- Bueno…su padre…no le trataba bien. ¡No, no! No ha llegado a pegarle, pero siempre lo ha tratado…muy mal. Y….y…seguro que si la juez le pregunta, él lo admitirá.
Y poco después colgó. La noté muy preocupada, todo lo que había hecho no servía para nada, me darían la custodia compartida, después de haber hecho todo lo que Ángel le había pedido…¿todo? Y creo que los dos debimos pensar lo mismo al mismo tiempo. Todo no, tendría que cruzar la línea que había puesto a mi hijo, tendría que follarse a su amigo.
Esa tarde, cuando Susana, mi hija pequeña se fue a la cama, Eva y Ángel comenzaron su sesión de sexo pero, justo antes de que ella comenzara a lamerle la polla vestida de zorra de película X, le dijo…
- Ángel….me está poniendo muy cachonda pensar que me pueden dar por culo mientras tengo tu polla metida en la boca – Y mientras decía eso le daba lametones suaves al glande, que no terminaba de engullir. – No sabes cómo me moja saber que soy tu puta, pero es que es muy peligroso…si hago esto por ti, tienes que hacer algo por mí – Y entonces sí que se llevó la polla a la boca
- Ahh mamá….lo que quieras….ahhhh – Decía completamente extasiado por la felación de su madre
- Mmmmm qué rica está tu polla hijo mmmmm. Quiero seguir disfrutando e tu polla pero tú tendrás que decir a la juez que tú te quieres quedar conmigo porque papá te hace sentir mal – y volvía a ensalivar la polla y a chupar con fruición - ¿Verdad que no quieres dejar a mamá sin que te pueda chupar tu polla?
- Pero….ohhhh…mamá….ahhhh… es que….papá….
- Yo me follaré a tu amigo y tú haces eso por mí…¿vale? Mmmmm…qué dura la tienes…estoy encharcada, fóllame ya que estoy chorreando.
Y sin más charla se puso Eva a horcajadas sobre Ángel y, agarrándose las tetazas que tiene, comenzó a cabalgar la polla de su hijo. Mientras se lo follaba dejó uno de sus pechos para acariciarse el clítoris. Bueno, más que acariciarse, jugaba con él con intensidad, gimiendo sin parar. Mi hijo le agarraba de las caderas y le ayudaba a subir y a bajar. Pocos segundos después mi ex se corrió en la polla de mi hijo, incapaz de controlar los temblores de su cuerpo en el clímax al que había llegado.
- Mamá….me quiero correr en tu cara ahora
- Claro hijo, dame tu leche en la cara
Mi ex se tumbó en la cama, boca arriba al tiempo que, mi hijo, de pie se masturbaba hasta correrse lanzando chorros encima de la cara de Eva, que mientras los recibía siguió dedeándose hasta llegar a un nuevo orgasmo con la cara embadurnada de lefa.
Se tumbaron el uno al lado del otro, exhaustos, cuando mi hijo rompió la cadencia de jadeos diciendo:
- Entonces, ¿se lo digo a Robert para que venga mañana?
- ¿Pero ya? ¿Mañana? No puedes esp…
- Mañana mamá – le cortó - ¿Y te podremos follar los dos a la vez?
- Joder qué perra me pones hijo, ya me han dado otra vez ganas de tu polla, pero ahora fóllame el culo.
Dicho y hecho, mi ex se puso a cuatro y llevó toda la corrida que tenía en su cara a su ano, a modo de lubrificante, y mi hijo le ensartó la polla de un empujón. Mi ex debía tener el ano ya muy dilatado de las continuas series de sexo que llevan.
Al igual que cuando ella le cabalgaba, ahora que estaba a 4, volvió a jugar con su coño y, a meterse los dedos, mientras que mi hijo le perforaba el culo.
- Oh, oh, no pares de follarte a mami, ahhh, me corro hijo no pares….ahhhhhhh
- Ohhh, qué culo tienes mamá, ohhh qué guarra eres, ohhhh
Y mi hijo, poco después se corrió dentro del culo de su madre.
Después de haber descansado un poco de esta nueva sesión de sexo, decidieron ir a ducharse y al volver a la habitación, estuvieron organizando cómo quedar con Rober para cumplir la fantasía de mi hijo.
La alegría y tranquilidad que había sentido después de la conversación con mi abogado se disiparon ipso facto después de esa escena, en la que estaban organizando cómo mi hijo tendría que testificar contra mí, mintiendo, y haciendo imposible que pudiera tener la custodia compartida