¿Dónde está el clítoris? Echémosle un vistazo a la anatomía.
El clítoris no es solo la parte de la anatomía que se siente como un pequeño botón.
El clítoris está compuesto por muchas partes:
- el glande
- el cuerpo del clítoris
- los cuerpos pareados o crura y los bulbos vestibulares (4,5).
Partes externas del clítoris
El
glande del clítoris es la parte que la mayoría de las personas llaman “clítoris”.
Es la parte externa del clítoris, tiene aproximadamente el tamaño de un guisante y está arriba de la uretra. Debido a que el glande es es área del clítoris con mayor inervación, es extremadamente sensible al tacto (5,6).
La función del glande es percibir sensación y estimulación. Contrario al resto del clítoris, el glande no se hincha o crece durante la respuesta sexual femenina, ya que no tiene tejido eréctil (expandible) (5).
Justo sobre o encima del glande se encuentra el
prepucio del clítoris o capuchón, el cual está formado por los dos lados de los labios menores que se conectan (5). El prepucio puede variar en tamaño y grado de cobertura entre las personas (7).
Partes internas del clítoris
Normalmente, la mayor parte del clítoris no es visible en la vulva.
Conectado al glande está el
cuerpo del clítoris. El cuerpo del clítoris se proyecta hacia la pelvis y se fija al hueso pélvico por medio de ligamentos.
Desde el cuerpo del clítoris (ubicado en frente de la uretra), el clítoris se divide a la mitad para formar los cuerpos pareados o
crura (los cuales son como los “pilares” del clítoris), y los
bulbos vestibulares (1,4). Estos bulbos se extienden a través y por detrás de los labios, pasando por la uretra y el canal vaginal hacia el ano (4).
Los bulbos y crura contienen tejido eréctil que se hincha con sangre durante la excitación sexual. Esta hinchazón a ambos lados del canal vaginal hace que la lubricación de la vagina aumente, al igual que la estimulación sexual y la sensación (5,8). Igualmente, esta expansión del tejido del clítoris puede provocar presión en la parte anterior del canal vaginal (5).
Cómo se estimula el clítoris
Todas las personas son diferentes y, asimismo, tienen diferentes zonas erógenas, deseos y estimulantes. ¡No podemos poner mayor énfasis en esto! No existe una “mejor manera” de estimular el clítoris — deberás experimentar un poco.
Dicho esto, aquí te damos algunos consejos para ayudarte a ti y a tu pareja a alcanzar el orgasmo.
1. Crea el ambiente. Busca un lugar cómodo. Si estás con una pareja, crear el ambiente puede incluir besarse, juego previo, y explorar tu cuerpo y el de tu pareja.
Si no tienes compañía, siéntete libre de explorar otras zonas erógenas de tu cuerpo (como tus pezones). No olvides estimular tu mente: si tienes ganas pero tu imaginación no es suficiente, puedes entrar en ambiente con algo de porno o literatura erótica.
2. Familiarízate con el área cercana al clítoris.Usa lo que quieras: tus dedos, los de tu pareja o su boca/lengua, u otro objeto (que esté limpio), como un juguete sexual. También puedes usar un cabezal de ducha, un vibrador o, incluso, la fricción que crea tu ropa interior cuando te frotas contra otra cosa, como una almohada. Una vez hayas explorado bien el área alrededor del clítoris y sientas que te has preparado adecuadamente, puedes pasar a estimular el clítoris.
3. Comienza tocando el clítoris suavemente y de manera gradual. El clítoris no es un botón mágico y simplemente pulsarlo no causa automáticamente un orgasmo (en la mayoría de personas). Tampoco te creas DJ rayando un disco de un lado a otro—a nadie le gusta eso.
4. Tómate tu tiempo. Es un área pequeña y puede ser desalentador al principio. “
¿Dónde consigo suficiente creatividad para estimular un área tan pequeña de la piel?” Hazle caso a tu cuerpo o a tu pareja, y recibe comentarios sobre lo que se siente bien.
Puedes probar caricias repetitivas suaves, movimientos circulares pequeños o, incluso, un golpeteo leve.
Involucra también el prepucio del clítoris—recuerda que también tiene terminaciones nerviosas y el cuerpo del clítoris se curva detrás suyo antes de insertarse en la pelvis. Explora a solas o con tu pareja si eso se siente bien.
5. Puedes comenzar a experimentar con presión, velocidad, otras partes del cuerpo (como la lengua, con una pareja), juguetes o vibración. Cuando se sienten sexualmente estimuladas, la mayoría de personas comienzan a producir un fluido de excitación, el cual puede hacer que la estimulación del clítoris y la vagina sea mucho más cómoda.
6. Considera añadir algo de lubricante personal a la mezcla. ¡Nos encanta
el lubricante!
7. También puedes intentar estimular el clítoris desde adentro con un pene, un juguete o tus dedos. No todas las personas lograrán sentirse estimuladas o, incluso, alcanzar un orgasmo la primera vez, o todas las veces, que tienen relaciones sexuales o se masturban—y eso está bien.
Lo único realmente importante es que lo disfrutes. Si no lo disfrutas, no lo hagas.