Hola a todos, les cuento que en el ’95-96 yo vivÃ*a en Bs.As. y trabajaba en Cba. (Argentina) y viaja muy seguido de una ciudad a la otra, lo hacÃ*a de noche y en colectivo, aprovechando para dormir. En un viaje junto a mi se sienta una chica muy mona y vestida con camisa y una pollera amplia, larga y con tajo. Empezamos a hablar de cosas comunes y al cabo de uno momentos pusieron la pelÃ*cula y apagaron la luz, después empezamos a besarnos. Era una chica muy dulce, besaba muy apasionadamente y se notaba que estaba muy caliente igual que yo.
Entonces la empecé a acariciar por todo el cuello hasta encontrar sus pechos, no eran muy grandes, eran normales y sus pezones eran redonditos y los tenÃ*a duros, su piel suave y más en esa zona es tan placentera al tacto. Con un poco de dificultad le pude desprender la camisa y el corpiño, tratando de que nadie se diera cuenta lo que estábamos haciendo. Ella cada vez estaba más excitada y Yo también, estaba muy caliente y tenÃ*a ganas de tocarla por todos lados. Después de desprenderle la camisa y el corpiño, le quedaron los pechos a la vista, eran preciosos o era que yo estaba muy caliente, que los creÃ* los mejores pechos del siglo, comencé a besárselos, le mordia suavemente los pezones para que se excitara más todavÃ*a. Mi boca recorrÃ*a todos sus pechos, Ella suspiraba bastante y Yo decidÃ* disfrutar también de su sexo, por eso lentamente fui metiendo mi mano por debajo de la pollera, acariciando sus piernas, suaves y largas, hasta encontrar su bombacha que cubrÃ*a el pubis, y sus pocos bellos, muy suaves al tacto, estaba húmeda por los flujos vaginales, que por su excitación ya habÃ*an empezado a salir de su interior, dejando en el ambiente un aroma excitante.
Estuvimos un rato largo tocándonos, acariciándonos y besándonos, mis dedos jugaban con sus labios vaginales tratando de sacar la mayor cantidad de placer. Yo deseaba algo más y se lo dije, “tengo ganas hacerte de todo, acá mismoâ€� ella me dijo que no podÃ*amos, porque la gente se iba a dar cuenta, le pedÃ* que me la chupara, y ella me dijo que allÃ* en los asientos era muy incómodo, entonces me dijo “porqué no vamos al baño, allÃ* hagamos cualquier cosa, ahora voy yo, espera un ratito y luego vas vosâ€�, asÃ* lo hicimos y a los 10 minutos los dos estábamos en el baño besándonos de nuevo y tocándonos por todos lados.- Los baños de los colectivos son muy estrechos, y el movimiento del colectivo en la ruta nos excitaba más, Ella no podÃ*a agacharse para chuparme la pija, pero nos alcanzaba el espacio para estar abrazados y tocarnos por todos lados, la piel de su cola era más suave todavÃ*a y además estaba muy caliente, con la mano derecha le tocaba los labios húmedos desde atrás y le metÃ*a el dedo mayor en su dulce huequito para deleitarme con esa preciosura, estábamos muy excitados y ella empezó a gemir tan suave que creÃ*a que terminarÃ*a en cualquier momento, yo escuchaba su corazón que latÃ*a muy fuerte cada vez que le chupaba los pezones.
AsÃ* como estábamos abrÃ* mi bragueta y saque la pija, -que es un poco más grande de lo normal según lo que me dicen las chicas con las que estuve- luego la abrasé fuerte, trayéndola hacia mi con el abrazo, le corrÃ* la bombacha con la mano derecha por sobre la nalga y empecé a frotarle la cabeza de la pija en los labios vaginales, hasta que encontré el lugar adecuado para penetrarla, entonces, agachándome un poquito, doblando las rodillas para dirigirla bien hacia adentro, la comencé a penetrar, muy despacito para que no le doliera. Ella estaba totalmente mojada, además se habÃ*a relajado muchÃ*simo (después me contó que habÃ*a tenido un orgasmo muy suavemente cuando tenÃ*a el dedo dentro de ella), tenÃ*a toda la vagina lubricada y caliente, mi pija entró toda, despacito, despacito, pero sin parar hasta el fondo, fue una sensación muy placentera, por que Ella se entregó completamente a Mi, estaba tan caliente y lubricada que el entrar en Ella, me produjo un placer enorme, tanto que no me di cuenta que al final ella se quejó un poquito, ya que le molestaba un poquito cuando llegaba al fondo, y me dijo que “la excitación y el pequeño dolor le hac&i
acute;a ver las estrellas, y el placer era cada vez más intenso�.
Estábamos tan excitados los dos, Ella en esa mezcla de placer y dolor y Yo con esa concha tan caliente y húmeda que me abrazaba la pija, además el movimiento del colectivo que tuvimos un hermoso orgasmo muy rápidamente los dos juntos, con la pija bien clavada hasta el fondo, llenándola de leche en su interior, los chorros salÃ*an con mucha presión, Ella gozó como una loca, gemÃ*a y me decÃ*a al oÃ*do, “que hermoso, que hermoso, nunca habÃ*a gozado asÃ* nunca, con nadie, ni con mi novioâ€�.
Nos quedamos quietos un rato y cuando se nos pasó la sensación de placer, Ella sacó la pija de su interior, se sentó en el pequeño inodoro y se la metió toda en la boca, la chupó toda, tratando de gozarla toda, más todavÃ*a, la apretaba un poquito en la base para que salieran los últimos hilos de leche que quedaban y degustaba el sabor de sus flujos vaginales que habÃ*an quedado en mi palo. Estuvo un rato chupándola, no se cuanto tiempo, en un momento dado, ella se paró y me dijo “a mi me gusta todo y quisiera terminar bien esta noche, con todoâ€�, después de decir eso se sacó la bombacha en el poco espacio que tenÃ*amos, se dio vuelta, se levantó la pollera, y apoyándose sobre el pequeño lavatorio del baño, me dijo “me encanta que me hagan la cola, con mi novio siempre lo hacemos y gozo como loca, quiero que me la metas toda, por favorâ€� y me agarró la pija con su mano y me la apoyó en la entrada de su hermoso ano, y me dijo nuevamente “metela, metela por favorâ€�.
Yo empecé a empujar despacito para no lastimarla, la cabeza de la pija entró sin problemas, me di cuenta que lo hacÃ*a con frecuencia por la cola, entonces empujé más fuerte, tratando de buscar el fondo de es culo hermoso que se me brindaba todo. Cuando más la metÃ*a, Ella se arqueaba cada vez más la espalda, gimiendo y gozando. Su cola estaba bien parada y empujaba hacia mi para lograr que se la metiera toda, su huequito estaba acostumbrado a recibir visitantes, lo movÃ*a muy bien, haciendo como una pequeña succión al presionarlo sobre la pija, eso me producÃ*a un placer inmenso, me encanta coger por la cola, me vuelve loco.
Cuando terminé de penetrarla, estaba tan excitado que se me habÃ*a puesto dura de nuevo, tanto que ella me dijo “se nota que la tenés grande, me gusta, me gusta tanto que estoy por terminar, dale, daleâ€� y a los minutos tuvo otro orgasmo muy intenso que se le escaparon algunos gritos de placer. Después recostó su cara contra el pequeño espejo y paró más la cola, sabÃ*a que no habÃ*a terminado y eso la excitó mucho porque jugaba con su mano en mi huevos y después me agarró de la nalga y me apretaba hacia ella. En ese momento le pedÃ* que me la chupara un rato y ella me pidió por favor que no se la sacara de la cola, que estaba excitadÃ*sima y que estaba en un estado orgásmico espectacular y no querÃ*a dejar de coger.
Esas palabras hicieron que me excitara más todavÃ*a, entonces comencé a bombear más fuerte, y más rápido, Ella comenzó a gemir y gemir, en un volumen bastante alto, me di cuenta que estaba por terminar nuevamente, querÃ*a llenarle el culo de leche para que gozara plenamente, tirarle chorros de leche dentro de esa cola preciosa. Yo bombeaba con toda mi fuerza, en un momento dado, Ella me sostenÃ*a de la cola y Yo me agarraba con una mano del hombro de ella y la otra me apoyaba en la pared, sin pensarlo siquiera, empecé a llenarla con chorros de leche caliente en su interior, un orgasmo intenso, placentero y muy largo. Yo arquee mi cuerpo hacia delante para meterla lo más profundo que podÃ*a y Ella hacÃ*a fuerza hacia atrás para lograr lo mismo, mientras me gritaba que era el mejor orgasmo de su vida.
No se si fue un movimiento del colectivo o que mis piernas no me aguantaron más, porque casi me caigo, se me salió la pija de su cola con ese movimiento, Ella gimió de placer, Yo me sostuve de las cadera de ella, apoyando mi pecho en su cola, mojándome la remera con todos sus flujos y los mÃ*os. Me repuse un poco, no se cómo y después nos vestimos bien, salimos del baño juntos sin ningún problema. En la puerta del baño habÃ*a una señora esperando entrar al baño que nos dijo de todo y nosotros ni la oÃ*mos, nos dirigimos a nuestros asientos, nos sentamos abrazados y nos dormimos
besándonos.-
Entonces la empecé a acariciar por todo el cuello hasta encontrar sus pechos, no eran muy grandes, eran normales y sus pezones eran redonditos y los tenÃ*a duros, su piel suave y más en esa zona es tan placentera al tacto. Con un poco de dificultad le pude desprender la camisa y el corpiño, tratando de que nadie se diera cuenta lo que estábamos haciendo. Ella cada vez estaba más excitada y Yo también, estaba muy caliente y tenÃ*a ganas de tocarla por todos lados. Después de desprenderle la camisa y el corpiño, le quedaron los pechos a la vista, eran preciosos o era que yo estaba muy caliente, que los creÃ* los mejores pechos del siglo, comencé a besárselos, le mordia suavemente los pezones para que se excitara más todavÃ*a. Mi boca recorrÃ*a todos sus pechos, Ella suspiraba bastante y Yo decidÃ* disfrutar también de su sexo, por eso lentamente fui metiendo mi mano por debajo de la pollera, acariciando sus piernas, suaves y largas, hasta encontrar su bombacha que cubrÃ*a el pubis, y sus pocos bellos, muy suaves al tacto, estaba húmeda por los flujos vaginales, que por su excitación ya habÃ*an empezado a salir de su interior, dejando en el ambiente un aroma excitante.
Estuvimos un rato largo tocándonos, acariciándonos y besándonos, mis dedos jugaban con sus labios vaginales tratando de sacar la mayor cantidad de placer. Yo deseaba algo más y se lo dije, “tengo ganas hacerte de todo, acá mismoâ€� ella me dijo que no podÃ*amos, porque la gente se iba a dar cuenta, le pedÃ* que me la chupara, y ella me dijo que allÃ* en los asientos era muy incómodo, entonces me dijo “porqué no vamos al baño, allÃ* hagamos cualquier cosa, ahora voy yo, espera un ratito y luego vas vosâ€�, asÃ* lo hicimos y a los 10 minutos los dos estábamos en el baño besándonos de nuevo y tocándonos por todos lados.- Los baños de los colectivos son muy estrechos, y el movimiento del colectivo en la ruta nos excitaba más, Ella no podÃ*a agacharse para chuparme la pija, pero nos alcanzaba el espacio para estar abrazados y tocarnos por todos lados, la piel de su cola era más suave todavÃ*a y además estaba muy caliente, con la mano derecha le tocaba los labios húmedos desde atrás y le metÃ*a el dedo mayor en su dulce huequito para deleitarme con esa preciosura, estábamos muy excitados y ella empezó a gemir tan suave que creÃ*a que terminarÃ*a en cualquier momento, yo escuchaba su corazón que latÃ*a muy fuerte cada vez que le chupaba los pezones.
AsÃ* como estábamos abrÃ* mi bragueta y saque la pija, -que es un poco más grande de lo normal según lo que me dicen las chicas con las que estuve- luego la abrasé fuerte, trayéndola hacia mi con el abrazo, le corrÃ* la bombacha con la mano derecha por sobre la nalga y empecé a frotarle la cabeza de la pija en los labios vaginales, hasta que encontré el lugar adecuado para penetrarla, entonces, agachándome un poquito, doblando las rodillas para dirigirla bien hacia adentro, la comencé a penetrar, muy despacito para que no le doliera. Ella estaba totalmente mojada, además se habÃ*a relajado muchÃ*simo (después me contó que habÃ*a tenido un orgasmo muy suavemente cuando tenÃ*a el dedo dentro de ella), tenÃ*a toda la vagina lubricada y caliente, mi pija entró toda, despacito, despacito, pero sin parar hasta el fondo, fue una sensación muy placentera, por que Ella se entregó completamente a Mi, estaba tan caliente y lubricada que el entrar en Ella, me produjo un placer enorme, tanto que no me di cuenta que al final ella se quejó un poquito, ya que le molestaba un poquito cuando llegaba al fondo, y me dijo que “la excitación y el pequeño dolor le hac&i
acute;a ver las estrellas, y el placer era cada vez más intenso�.
Estábamos tan excitados los dos, Ella en esa mezcla de placer y dolor y Yo con esa concha tan caliente y húmeda que me abrazaba la pija, además el movimiento del colectivo que tuvimos un hermoso orgasmo muy rápidamente los dos juntos, con la pija bien clavada hasta el fondo, llenándola de leche en su interior, los chorros salÃ*an con mucha presión, Ella gozó como una loca, gemÃ*a y me decÃ*a al oÃ*do, “que hermoso, que hermoso, nunca habÃ*a gozado asÃ* nunca, con nadie, ni con mi novioâ€�.
Nos quedamos quietos un rato y cuando se nos pasó la sensación de placer, Ella sacó la pija de su interior, se sentó en el pequeño inodoro y se la metió toda en la boca, la chupó toda, tratando de gozarla toda, más todavÃ*a, la apretaba un poquito en la base para que salieran los últimos hilos de leche que quedaban y degustaba el sabor de sus flujos vaginales que habÃ*an quedado en mi palo. Estuvo un rato chupándola, no se cuanto tiempo, en un momento dado, ella se paró y me dijo “a mi me gusta todo y quisiera terminar bien esta noche, con todoâ€�, después de decir eso se sacó la bombacha en el poco espacio que tenÃ*amos, se dio vuelta, se levantó la pollera, y apoyándose sobre el pequeño lavatorio del baño, me dijo “me encanta que me hagan la cola, con mi novio siempre lo hacemos y gozo como loca, quiero que me la metas toda, por favorâ€� y me agarró la pija con su mano y me la apoyó en la entrada de su hermoso ano, y me dijo nuevamente “metela, metela por favorâ€�.
Yo empecé a empujar despacito para no lastimarla, la cabeza de la pija entró sin problemas, me di cuenta que lo hacÃ*a con frecuencia por la cola, entonces empujé más fuerte, tratando de buscar el fondo de es culo hermoso que se me brindaba todo. Cuando más la metÃ*a, Ella se arqueaba cada vez más la espalda, gimiendo y gozando. Su cola estaba bien parada y empujaba hacia mi para lograr que se la metiera toda, su huequito estaba acostumbrado a recibir visitantes, lo movÃ*a muy bien, haciendo como una pequeña succión al presionarlo sobre la pija, eso me producÃ*a un placer inmenso, me encanta coger por la cola, me vuelve loco.
Cuando terminé de penetrarla, estaba tan excitado que se me habÃ*a puesto dura de nuevo, tanto que ella me dijo “se nota que la tenés grande, me gusta, me gusta tanto que estoy por terminar, dale, daleâ€� y a los minutos tuvo otro orgasmo muy intenso que se le escaparon algunos gritos de placer. Después recostó su cara contra el pequeño espejo y paró más la cola, sabÃ*a que no habÃ*a terminado y eso la excitó mucho porque jugaba con su mano en mi huevos y después me agarró de la nalga y me apretaba hacia ella. En ese momento le pedÃ* que me la chupara un rato y ella me pidió por favor que no se la sacara de la cola, que estaba excitadÃ*sima y que estaba en un estado orgásmico espectacular y no querÃ*a dejar de coger.
Esas palabras hicieron que me excitara más todavÃ*a, entonces comencé a bombear más fuerte, y más rápido, Ella comenzó a gemir y gemir, en un volumen bastante alto, me di cuenta que estaba por terminar nuevamente, querÃ*a llenarle el culo de leche para que gozara plenamente, tirarle chorros de leche dentro de esa cola preciosa. Yo bombeaba con toda mi fuerza, en un momento dado, Ella me sostenÃ*a de la cola y Yo me agarraba con una mano del hombro de ella y la otra me apoyaba en la pared, sin pensarlo siquiera, empecé a llenarla con chorros de leche caliente en su interior, un orgasmo intenso, placentero y muy largo. Yo arquee mi cuerpo hacia delante para meterla lo más profundo que podÃ*a y Ella hacÃ*a fuerza hacia atrás para lograr lo mismo, mientras me gritaba que era el mejor orgasmo de su vida.
No se si fue un movimiento del colectivo o que mis piernas no me aguantaron más, porque casi me caigo, se me salió la pija de su cola con ese movimiento, Ella gimió de placer, Yo me sostuve de las cadera de ella, apoyando mi pecho en su cola, mojándome la remera con todos sus flujos y los mÃ*os. Me repuse un poco, no se cómo y después nos vestimos bien, salimos del baño juntos sin ningún problema. En la puerta del baño habÃ*a una señora esperando entrar al baño que nos dijo de todo y nosotros ni la oÃ*mos, nos dirigimos a nuestros asientos, nos sentamos abrazados y nos dormimos
besándonos.-