Asomándome a...

[mikelo]

Asomándome a la ventana
Viajo raudo,
-por la memoria-
llevado por la felicidad...

Desfilan,
ante mi perdida mirada,
a la velocidad de la luz del atardecer,
los naranjos sin adornos
y los olivos que el sudor ya ha vareado.
Desfilan,
la campiña con su mosaico multicolor
de manos multirraciales
y los taludes terrosos
cortados a cuchillo
mostrándome fugazmente
sus laminas de historia.

Me acompañan,
desperdigadas,
unas cándidas nubes
ajenas al inmenso y radiante manto azul.

Entretanto, el horizonte
tras las suaves lomas salpicadas
de sarmentosos viñedos,
se va tiñendo,
perezosamente de cobalto.

Me distancio del pasado
a trescientos kilómetros por hora,
mientras el presente
en un instante de vida,
con su abrazo,
me acerca al futuro...

Viajero, contemplo reflejada
en el ventanal de mi memoria,
ya perenne,
colmándome de gozo,
el paisaje de tu imagen,
amada.

 

[Gamber]

Asomándome a las noticias del día de hoy, mejor apago el televisor.
Asomándome a mi comunidad de vecinos, compruebo si respiran los enemigos.
Asomándome al día del sábado, mejor haré en dejarlo acabado.

 

[Gamber]

Asomándome a la nevera, el medio limón abandonado en la soledad del estante inferior, creo que trata de insinuarme algo.
Asomándome al armario, las camisas arrugadas y aprisionadas por otras camisas y los pantalones tratando de escapar por piernas, creo que quieren decirme algo.
Asomándome al comedor, el televisor apagado, las cortinas echadas y todo en orden, creo que tratan de decirme algo.

Asomándome a mi interior, en esta hora que jamás imaginé, me enfrento al silencio que esconde el viento rugiendo fuera de la ventana; me enfrento a la roca firme que sujeta las responsabilidades del ayer y del mañana; me enfrento a la música de las cometas de lindos y alegres colores que me obligan a mirar al cielo en busca de ilusiones.