Jugodevida
Estrella Porno
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¡¡Quiero más!!
El maduro-lll
Lucía se sentó en el borde de la cama, yo aún estaba de rodillas en el suelo, pensaba que su experiencia en el sexo no seria muy notable por la corta edad que aún tenía, que sería yo quien tomara la iniciativa de nuestro juego, ya que esto no se trataba de un "aquí te pillo, aquí te mato" esto iba para largo, pero al menos esta vez no preguntó, sentada como estaba, quedaba su cabeza a la altura de la mía, paso sus manos a mí nuca y me llevo hasta su boca, me lamió mis labios con su lengua, yo saque también la mía fuera de mi boca y nos lamimos como perros, terminando con un excitante beso de lengua.
Me invitó a levantarme de mi postura de rodillas, cosa que le agradecí, ya estaba cansado de estar así, sus manos en cada lado de mi costado, tal como yo me levantaba ella las iba bajando con una suave caricia, al quedar erguido mi pene quedo frente a su boca, a pesar del momento lo tenía flácido, no tenía dureza, aunque si estaba algo crecido, ella, con sus manos en mi culo, una a cada lado, miraba mi cosa, qué estaba a escasos centímetros de su boca, alza la vista y me sonríe "como diciendo, me falta polla" yo pensaba para mis adentros, "no sabes lo que lo siento, bien que me gustaría de ser Mandingo en este momento" le da un lametón a mi capullo, luego otro, pero no lo deja bajar de su lengua, cierra los labios, me presiona la polla, noto su lengua lamer mi punta, a la vez que la va metiendo dentro toda de su boca, la deja salir, veo que sale más polla que entró, me alegro por ello, su calor la agrandó unas centímetros.
Yo estaba quieto, deje que ella decidiera, ahora ya no caía, ¡¡se mantenía horizontal, vencía a la fuerza de la gravedad, subió también mi entusiasmo!! no quería fallar a esta cría, la metió de nuevo en su boca, la apretó con sus labios e introdujo despacio, iba haciendo lento, esto a mí me gustaba, la colo hasta que su barbilla presiono mis huevos, puuuff, la dejo dentro un rato, yo notaba la presión de sus manos en mis muslos, sabía cuándo metía, sacaba o retenía, notaba como mi glande se estrechaba en el recodo de su garganta, noto que la saca de nuevo, mis manos las coloque en sus sienes, pero sin forzarla, al llegar lo ancho del glande a sus labios la retorna para dentro, otra vez hasta el fondo, ahora sube el ritmo, la mete y la saca unas diez veces hasta que la escupe de su boca, mi polla está llena de babas, a ella le caen hilos por sus labios, se ha puesto algo roja, pero no da ni una arqueada, me sorprende está chica, sin tener una gran experiencia, sin embargo posee una buena técnica.
Yo estaba casi a punto de correrme, le agradecí que se la sacará de su boca, mi polla parecía de tener electricidad estática, en contacto con su piel notaba que me hervía, ahora la tenía bien dura, la miraba y no parecía la mía, en los últimos diez años no la había visto tan grande. Me invita a sentarme en la cama, una vez sentado me baja la espalda, quedó acostado boca arriba, de rodillas se sube encima mío, se sitúa en buena medida, noto como baja su culo con idea de insertarse la polla mía, yo quería que ocurriera pronto, mi edad no es para que le dé mucho el aire, ya que se enfría, pero acertó pronto, en un juego de caderas noto su calor de nuevo, la piel gelatinosa de su sexo, el gusto divino que me provoca, se sienta por completo hasta clavarse toda.
Se mueve, sube y baja, una vez tras otra, noto que se agita, que gime, hasta que grita, se está corriendo, un pelerizo de frío atraviesa mi cuerpo, me viene desde la cabeza hasta mi sexo, reviento soltando mi leche, a la misma vez que ella enloquece, no sé si lloro, si me río, si me meo, si que se, esto que siento es lo que hace que amemos el sexo, porque más allá no hay nada que de un placer tan estupendo.
Después de un rato descansando miro el móvil y son las 21,18 mi estómago lo notaba vacío, le pregunto si tenía ella hambre, me dice que si, que se comería algo que no tuviera que retornar, pensamos en que pedir y llamo a recepción para encargarlo, les digo que lo suban a las diez, no antes.
Le propongo a Lucia de darnos una ducha, afirma con la cabeza me ofrece su mano y nos vamos juntos al baño, llegamos besándonos, que sensual es esta mujer, cada postura de su cuerpo era arte puro, se mantenía con los dedos de los pies, como si fuese una bailarina, era grácil y esbelta, me llevo al baño todo empalmado, yo pensaba, que jilipolla puede dejar perder una mujer así para conseguir otra.
Nos duchamos ayudándonos mutuamente, ella más a mí que yo a ella, me frotaba todo, me lavo mi polla, los huevos, hasta metia sus dedos untados de gel dentro de mi ano, le decía entre risas ¡¡Joder, estate quieta, que te voy a tener que follar otra vez antes de la cena!! Jajajaja, se reía, yo me salí a secarme y ella termino de aclararse, nos pusimos los albornoces y preparamos la mesa, a los cinco minutos tocan la puerta ¡¡ la cena!! ( Continuará)
Jugodevida
El maduro-lll
Lucía se sentó en el borde de la cama, yo aún estaba de rodillas en el suelo, pensaba que su experiencia en el sexo no seria muy notable por la corta edad que aún tenía, que sería yo quien tomara la iniciativa de nuestro juego, ya que esto no se trataba de un "aquí te pillo, aquí te mato" esto iba para largo, pero al menos esta vez no preguntó, sentada como estaba, quedaba su cabeza a la altura de la mía, paso sus manos a mí nuca y me llevo hasta su boca, me lamió mis labios con su lengua, yo saque también la mía fuera de mi boca y nos lamimos como perros, terminando con un excitante beso de lengua.
Me invitó a levantarme de mi postura de rodillas, cosa que le agradecí, ya estaba cansado de estar así, sus manos en cada lado de mi costado, tal como yo me levantaba ella las iba bajando con una suave caricia, al quedar erguido mi pene quedo frente a su boca, a pesar del momento lo tenía flácido, no tenía dureza, aunque si estaba algo crecido, ella, con sus manos en mi culo, una a cada lado, miraba mi cosa, qué estaba a escasos centímetros de su boca, alza la vista y me sonríe "como diciendo, me falta polla" yo pensaba para mis adentros, "no sabes lo que lo siento, bien que me gustaría de ser Mandingo en este momento" le da un lametón a mi capullo, luego otro, pero no lo deja bajar de su lengua, cierra los labios, me presiona la polla, noto su lengua lamer mi punta, a la vez que la va metiendo dentro toda de su boca, la deja salir, veo que sale más polla que entró, me alegro por ello, su calor la agrandó unas centímetros.
Yo estaba quieto, deje que ella decidiera, ahora ya no caía, ¡¡se mantenía horizontal, vencía a la fuerza de la gravedad, subió también mi entusiasmo!! no quería fallar a esta cría, la metió de nuevo en su boca, la apretó con sus labios e introdujo despacio, iba haciendo lento, esto a mí me gustaba, la colo hasta que su barbilla presiono mis huevos, puuuff, la dejo dentro un rato, yo notaba la presión de sus manos en mis muslos, sabía cuándo metía, sacaba o retenía, notaba como mi glande se estrechaba en el recodo de su garganta, noto que la saca de nuevo, mis manos las coloque en sus sienes, pero sin forzarla, al llegar lo ancho del glande a sus labios la retorna para dentro, otra vez hasta el fondo, ahora sube el ritmo, la mete y la saca unas diez veces hasta que la escupe de su boca, mi polla está llena de babas, a ella le caen hilos por sus labios, se ha puesto algo roja, pero no da ni una arqueada, me sorprende está chica, sin tener una gran experiencia, sin embargo posee una buena técnica.
Yo estaba casi a punto de correrme, le agradecí que se la sacará de su boca, mi polla parecía de tener electricidad estática, en contacto con su piel notaba que me hervía, ahora la tenía bien dura, la miraba y no parecía la mía, en los últimos diez años no la había visto tan grande. Me invita a sentarme en la cama, una vez sentado me baja la espalda, quedó acostado boca arriba, de rodillas se sube encima mío, se sitúa en buena medida, noto como baja su culo con idea de insertarse la polla mía, yo quería que ocurriera pronto, mi edad no es para que le dé mucho el aire, ya que se enfría, pero acertó pronto, en un juego de caderas noto su calor de nuevo, la piel gelatinosa de su sexo, el gusto divino que me provoca, se sienta por completo hasta clavarse toda.
Se mueve, sube y baja, una vez tras otra, noto que se agita, que gime, hasta que grita, se está corriendo, un pelerizo de frío atraviesa mi cuerpo, me viene desde la cabeza hasta mi sexo, reviento soltando mi leche, a la misma vez que ella enloquece, no sé si lloro, si me río, si me meo, si que se, esto que siento es lo que hace que amemos el sexo, porque más allá no hay nada que de un placer tan estupendo.
Después de un rato descansando miro el móvil y son las 21,18 mi estómago lo notaba vacío, le pregunto si tenía ella hambre, me dice que si, que se comería algo que no tuviera que retornar, pensamos en que pedir y llamo a recepción para encargarlo, les digo que lo suban a las diez, no antes.
Le propongo a Lucia de darnos una ducha, afirma con la cabeza me ofrece su mano y nos vamos juntos al baño, llegamos besándonos, que sensual es esta mujer, cada postura de su cuerpo era arte puro, se mantenía con los dedos de los pies, como si fuese una bailarina, era grácil y esbelta, me llevo al baño todo empalmado, yo pensaba, que jilipolla puede dejar perder una mujer así para conseguir otra.
Nos duchamos ayudándonos mutuamente, ella más a mí que yo a ella, me frotaba todo, me lavo mi polla, los huevos, hasta metia sus dedos untados de gel dentro de mi ano, le decía entre risas ¡¡Joder, estate quieta, que te voy a tener que follar otra vez antes de la cena!! Jajajaja, se reía, yo me salí a secarme y ella termino de aclararse, nos pusimos los albornoces y preparamos la mesa, a los cinco minutos tocan la puerta ¡¡ la cena!! ( Continuará)
Jugodevida