Quiero agradecer que inviertas tu tiempo, en leer mi nueva historia Espero que te guste y que la disfrutes. Y recuerda todo puede pasar en tu mente..
Me llamo Luis Javier. Aunque todo el mundo me conoce como Luisja. Tengo 31 años, estoy divorciado. Si me casé muy joven con 23 años, con el amor de mi vida y mi novia desde el instituto. Pero lo nuestro duro unos cuantos años.
Todo se acaba, hasta el amor.
Hace ya varios años, por allí por el mes de septiembre, escuche una noticia que llamó mucho mi atención.
Decía que un 16% de la parejas a la vuelta de las vacaciones se divorciaban. Yo por aquel entonces no comprendía aquello, puesto que estaba pérdidamente enamorado de mi novia. Decían que al estar tanto tiempo juntos y salir de las rutinas diarias de trabajo - casa - trabajo, se cansaban y acaban divorciándose.
Y algo parecido es lo que me ha pasado a mi. Pero no al volver de la vacaciones. A mi me paso, como a muchos otros españoles que con la pandemia y el estar encerrado en casa con mi mujer, vi que la vida que llevaba no me gustaba y que me había cansado de aguantar los celos de mi mujer. Así que lo decidimos de mutuo acuerdo.
Al no tener hijos, se vendió todo lo que teníamos, anulamos hipotecas, repartimos el poco dinero que teníamos en la cuenta y cada uno por su lado.
Cada uno comenzamos nuestras nuevas vidas.
Yo me compré un piso en Zaragoza que es de donde soy. Pero el problema vino cuando al piso había que hacerle unas pequeñas reformas, y no seria hasta pasado el verano cundo me lo dieran.
Tenia varias opciones hasta que me dieran mi casa.
1- Volver con mis padres a su casa.
2 - Ir a casa de mi hermana que está separada y vive sóla.
3 - Ir al pueblo con mis abuelos.
4 - Alquilarme algo hasta que me dieran la casa.
Lo decidí rápido, iré a casa de mis padres. Mis padres un matrimonio normal de unos 53 años, con mi madre ama de casa. y mi padre, encargado de una fabrica.
Cuando volví a casa no fue como yo esperaba. Las cosas habían cambiado mucho desde que me marche. Mi madre estaba todo el día con que tenia que intentar arreglarlo con Laura.
Y como mi padre pasa la mayoría del tiempo trabajando, me volvía loco con las chapuzas del hogar. Este enchufe no me funciona, la puerta esta no cierra bien. Limpia tu habitación... Vaya como cuando estaba casado con mi mujer pero sin follar.
Yo trabajo en una empresa que reparan maquinaria de hostelería, por lo que estoy fueran de casa todo el día. Cuando empecé hace ya 12 años en este trabajo y vivía en casa de mis padres, los veranos los pasaba en el pueblo. De allí me desplazaba a trabajar. Mi pueblo además está a 20 min de Zaragoza.
Como llegaba el verano y mi madre me agobiaba mucho en casa, pensé en irme con mi hermana o irme al pueblo..
En el pueblo viven mis abuelos Antonio mi abuelo y Josefa mi abuela. Son un matrimonio de jubilados que viven desde siempre en el pueblo. Mi abuelo tiene 75 años y mi abuela tiene 74. Mi abuela tuvo a mi madre con 20 años y mi madre me tuvo a mi con 22 cosas de antes que había que tener los hijos jóvenes.
Yo mantengo mucha relación con mis abuelos, los llamó casi todos los días y los visito una vez al mes. Si sólo una vez al mes, mi mujer no me dejaba ir al pueblo, decía que un par de amigas mías de toda la vida me querían cazar....
En fin se ponía celosa y nunca me dejaba ir sólo. Siempre tenia que venir ella.
En el pueblo tengo mi cuadrilla de amigos de toda la vida. Hasta que me casé pasaba todos los veranos en el pueblo. Cuando estudiaba y cuando comencé a trabajar también. Para mi era la mejor época del año. Al igual que hasta que me casé pasaba todos los fines de semana en el pueblo.
La relación con los amigos nunca la perdí de echó llevaban una vida parecida a la mía en verano al pueblo y todo los fines de semana. Al estar cerca de la ciudad esta bien para ir a trabajar y por las noches hace mucho mas fresco que en Zaragoza, aquí en el pueblo se duerme con manta y todo...
Un fin de semana, el primero que tuve libre desde que me divorcie. Decidí ir a pasarlo al pueblo.
En el grupo de washap que tenemos de amigos del pueblo lo avise y preparé una cena de celebración de divorcio.
La verdad que nunca pensé que a mis amigos les cayera tan mal mi ex mujer. Tod@s me daban la enhorabuena. La noche se alargó tras la cena. Estábamos en la bodega de uno de mis amigos tomabamos unos gintonic y se estaba haciendo ya de día. Susana una de mis amigas de toda la vida del pueblo, ( La que decía mi mujer quería cazar) me dijo,
" Oye ahora que ya no tienes que aguantar a la asquerosa de tu mujer, porque no vienes mi casa y pasamos un buen rato?
Pues mira en esto tenia razón mi exmujer, está me quería llevar a la cama.
No lo dude ni un minuto y a poco más de media hora, estaba en su casa desnudándola y chupando eso coño peludo que tenía.
Resultó ser mas guarra de lo que pensaba y tras meterle una buena follada, ella se corrió tres veces, me dejo acabar en su boca tragándose todo....
Me dejó más que satisfecho.
' Quedate a dormir. Me dijo tirada en la cama.
- No, no quiero que mis abuelos se preocupen me voy para mi casa. Este verano estaré por aquí. No te preocupes repetiremos. Y diciéndole eso puse rumbo hacia mi casa..
En un pueblo no hay distancias, por lo que en 5 minutos, estaba en casa. El sol ya empezaba a calentar. Mis abuelos, estaban en la cocina desayunando.
- Buenos días yayos, les dije mientras le daba un beso a cada uno.
*Buenos días Luisja, dijo mi abuelo.
+ Buenos días hijo, se puede saber de donde vienes? Pensábamos que ya no ibas a venir a dormir.
- Ya pero es que al final ayer volvimos a Zaragoza y he dormido allí les mentí. He venido ahora de allí.
Seguimos desayunado y mi abuelo, anuncio que se iba a ir al huerto y luego a almorzar con sus amigos. Yo me quedé con mi abuela.
Con mis abuelos tengo muy buena relación, bueno mejor con mi abuela que con mi abuelo.
Para mi abuela soy el mayor de los nietos y soy su preferido..
Tras un rato de chachara con mi abuela, fue ella la que me dijo.
+ Luisja hijo, anda vete a la cama, a tu abuelo igual le has engañado pero a mi no. Tú no has dormido en toda la noche. Además tu coche lleva aparcado al lado del parque desde anoche... Dijo mi abuela poniendo su mano en mi cabeza.
- Tienes razón, abuela. Creo que has visto muchas series de detectives, dije riendo..
Bueno me voy dormir 4 o 5 horas.
Fui el olor a comida el que me despertó de mi profundo sueño. Me hubiese quedado en la cama todo el día, pero no me parecía lo correcto..
Abrí la ventana e hice la cama. Fui a la cocina.
- Hola yaya, buenos días de nuevo. Que bien huele. Le dije mientras le daba un beso en la mejilla.
+ Casi está listo. Así que cuando quieras comemos.
- Y el abuelo? no viene a comer?
+ Uy ese ya no viene hasta la noche. Los fines de semana se va con sus amigos almuerzan y luego juegan a las cartas toda la tarde...
- Joder después de tanto tiempo, pensaba que ya no hacia lo de antes. Pero veo que llevo mucho tiempo sin venir pero todo sigue igual.
+ Así es hijo, todo sigue igual.
Comenzamos a comer unas buenas migas y un corderito guisado que hace mi abuela, que me vuelve loco.
- Y tú abuela, no te aburres todo el día sola? Le pregunté.
+ Va no te creas hijo, ya me he acostumbrado, yo luego me voy de paseo con mis amigas, tomamos un café y damos una vuelta por el pueblo y no me importa.
-Como cambian las cosas y los tiempos yaya, le dije. Hoy en día un marido hace lo que lleva el abuelo haciendo toda la vida y a los pocos años acaban divorciados. Y vosotras las de antes tragais con carros y carretas. Y encima tenéis que poner buena cara cuando viene el marido a casa.
+ Bueno hijo, así es la cosa, yo lo veo de otra manera. Estamos más acostumbradas que las jóvenes. Mira Laura, dejarte escapar. No se que sé pensara esa estirada que se puede casar con el rey... Dijo mi abuela muy convencida.
- Bueno abuela, lo nuestro se acabo y fue de mutuo acuerdo. Yo le guardo respeto a Laura, la he querido con locura.
+ Bueno hijo, siento lo que he dicho de ella, pero comprende que ella fue la que te apartó de nosotros. Nunca te dejaba venir al pueblo, si venias siempre tenían que venir ella. Y nada más había llegado ya se quería ir.. No la soportaba dijo mi abuela..
- Bueno yaya, ya está. Ese problema se acabó. Ahora volveré a pasar más tiempo en el pueblo. De echo se me está ocurriendo una cosa. Qué te parece si en vez de vivir en Zaragoza en casa de mis padres hasta que me den el piso, me vengo al pueblo con vosotros? . Serian unos cuatro meses o así.
Una gran sonrisa se le puso a mi abuela en su cara y diciendo.
+ Me lo dices de verdad? hijo. Si de verdad quieres venir, por mi perfecto. Seguro que por poco que estés en casa, ya estas más que tu abuelo... Dijo mi abuela muy contenta.
- Pues no se hable más abuela, mañana voy a por la ropa y me instalo aquí, unos meses. Joder que guay sera como cuando era joven. Dije yo muy contento.
+ Si hijo, que alegría. Volver a tener a mi nieto favorito en casa de nuevo...Uy creo que lo de nieto favorito no tenia que haber lo dicho. Dijo mi abuela un poco arrepentida.
- Yaya, toda la vida se te ha notado que soy tu favorito. Siempre me has dado más paga, nunca me reñias y siempre que venia preparabas mi comida favorita. Se te notaba a la legua.
+ Si hasta que te casaste con esa marrana. Volvió a protestar mi abuela.
- Yaya, eso es agua pasada. Ya vale.
+ Lo siento hijo. Dijo mi abuela.
Por supuesto que mi abuela, no me dejo ni recoger un plato. En cuanto lo intenté me dijo.
+ Anda hijo, vete a descansar. Vete al sofá a echarte una buena siesta.
Y dándole un beso, me fui al sofá, en el que duró la siesta 4 horas..
Joder me he dormido como un oso. Me levanté y llamé a mi abuela.
- Yaya? yayo? hay alguien en casa?
Pero nadie me contesto. Miré el móvil que lo tenia en silencio y vi que tenia varios washap.
Uno era de Susana, decía que lo había pasado muy bien, que cundo quisiera repetíamos. Le conteste con un ok.
No se piense que estoy loco por sus huesos. Soy libre y quiero disfrutar de las mujeres, y no precisamente de una sola..
Los otros mensajes eran de mi cuadrilla de pueblo que habían quedado en el bar del pueblo a las 20. Joder y son las 19:30 voy a darme una ducha rápida y me acercó.
Apagué la tele y me levante del sofá. Joder que paliza le había pegado. Fui a mi habitación y cogí la ropa para darme una ducha. Me fui al baño.
Me desnude y me di una ducha rápida. Me apetecía hacerme una paja, pero no era el momento.
Cuando salí de la ducha, me sequé y eche mi camiseta y mis calzoncillos en el cesto de la ropa sucia. Pero una cosa llamó mi atención en el cesto.
Había poco ropa, solo una camisa de mi abuelo, una falda de mi abuela y un conjunto de braga y sujetador negros muy sujerentes.
Tanto llamaron mi atención que hasta los saqué del cesto para verlos bien. Era un sujetador de copa con un poco de relleno, con unos encages y los tirantes transparentes, las bragas también negras con encajes en el culo y un triángulo blanco de tela muy suave, para tapar el coño.
Joder con mi abuela, que moderna es. No me esperaba para nada que mi abuela, pudiera tener una ropa interior tan bonita. Joder la llevaba parecida a la de mi ex mujer y eso que tiene 35 años más.
Pero ahí quedó mi sorpresa.
Me reuní con mis amigos en el bar allí estaba mi abuela, con sus amigas tomando un café. Fui a saludarla.
- Hola, que tal? no estabas en casa, cuando me he despertado.
+ Ahí hijo, te he visto tan agusto, que no he querido despertarte. Vendrás a cenar?
- Buff no lo sé. Le dije, depende del plan que tengan. Yo te aviso.
+ Vale hijo, pasarlo bien dijo mi abuela, mientras retomaba la conversación con sus amigas.
Me senté en la mesa que estaban mis amigos, y comenzamos a charlar de cosas de la vida. La mesa en la que estaba mi abuela, estaba justo enfrente de la mesa en la que estaba nuestra.
En la mesa de mi abuela y su grupo de amigas, todas eran mujeres jubiladas que rondaban entre los 70 y 80 años. La verdad que no sé porque nunca me había pasado, me vino una pregunta a mi cabeza. Todas estas mujeres, llevabaran la ropa interior como mi abuela? o mi abuela sólo tiene ese conjunto? Pero que coño hago yo pensando estas tonterías? Joder.
Fue mi amigo Richar quien me sacó de mis pensamientos.
# Luisja, Luisjaaaa
- Ehh eh dime, lo siento estaba pensando una cosa.
# Que digo, si vas a venir a cenar y tomar algo a Zaragoza esta noche? O tienes planes con Susana rió el cabrón.
- No me jodas Richar, no me apetece una mierda ir a Zaragoza, creo que paso.
# Si ya lo que pasa es que te quieres follar otra vez a Susana. Tú si que sabes..
- Que no de verdad. Si os vais, me quedaré en casa con mis abuelos.
#Joder Luisja, mira que eres muermo. Que te lo pases bien jugando a los seises. Rió.
Tomamos un par de cañas mas, y mi cuadrilla, se fue para Zaragoza yo me quedé en la terraza del bar y pedí otra caña. Me quedé solo. Estaba de frente al grupo de amigas de mi abuela. Mi abuela estaba de espaldas a mi. Por lo que me fije en el grupo. La verdad que mi abuela era la que más joven parecía. No sé si lo seria pero si que lo aparentaba. La forma de vestir, era bastante más moderna y con más gusto que las otras mujeres.
Las mujeres se levantaron, y mi abuela me vio sólo en la mesa.
+ Que haces sólo ahí? Preguntó mi abuela.
- Pues tomarme una caña, mis amigos se han ido a Zaragoza y a mi no me apetecía. Así que me acabo la caña que me acaban de traer y me voy para casa.
+ Pues si no te importa me espero y voy contigo vale?
- Perfecto yaya, sientate aquí.
Se despidió de sus amigas y se sentó en la silla de mi derecha.
- Quiere algo? le pregunté, a mi me la acaban de traer.
+ Bueno un vino blanco. Dijo mi abuela.
Le pedi a Pedro el dueño del bar un vino para mi abuela y pague la consumición. Cuando me trajo la vueltas me dijo Pedro,
* Luisja hay veces que me falla la cafetera, cuando podrás venir a echarle un vistazo?
- Pues mañana por la mañana, antes que abras. Hoy no haré excesos así que mañana puedo madrugar y le echamos un vistazo.
* Hecho, mañana te espero.
+ Oye hijo, igual es mucho morro pero yo también, tenia que hacer unos arreglos en casa, si mañana acabas pronto los podíamos hacer si no te importa.
- Claro que si abuela, mañana cuando acabe con Pedro vamos a casa y los hacemos.
+ Hijo, eres un sol. Tu abuelo, no me ayuda nada en la casa.
Y tras tomarnos la cerveza y el vino, volvimos a casa dando un paseo, mi abuela y yo. Ella me cogió del brazo. Y tras un rato me dijo.
+ Luisja, tienes que tener más cuidado, con lo que haces en el pueblo. Ya se ha enterado todo el pueblo que tú y Susana la del Antonio, ( así se llama su padre), tuvisteis.... Mi abuela no siguió con la frase.
- Joder pues, ya veo que hay cosas que no cambian nunca. De todas formas yo no tengo nada que esconder. Abuela.
+ Si lo sé hijo, pero yo sólo te lo digo, porque me he enterado..
Llegamos a casa, mi abuelo estaba tirado en el sofá roncando.
+ Ves Luisja como bien dices, hay cosas que nunca cambian. Mira tu abuelo.. Antoniooo le pegó un grito mi abuela. Despiertate. Dijo mi abuela, mientras se iba a su habitación a quitarse la ropa y ponerse más cómoda.
Me senté en el sofá con mi abuelo, y nos pusimos a charlar. Mi abuela nos aviso que la cena ya estaba.
Cenamos y en contra de la voluntad de mi abuela, yo le ayudé a recoger. Mi abuelo se despidió y diciendo que se iba a ver la TV a la cama, nos dejó sólos.
Mi abuela y yo nos fuimos al salón a ver la tele. Pusimos una película. Fue mi abuela la que dijo.
+ Ojalá no te den el piso ese nunca, y te quedes mucho tiempo aquí. No me acuerdo cuando fue la ultima vez que vi una película con alguien. Tu abuelo todas las noche se va muy pronto a la cama.
- Bueno yaya, ahora un tiempo estaré yo.
Acabó la película y nos fuimos a la cama, yo me dormí. Me despertó el sonido de un washap era Susana, que me esperaba... Joder que pesada. Seguí durmiendo.
A la mañana siguiente, fui el primero en levantarme de la cama, fui a reparar la cafetera de Pedro. Era un válvula mal regulada 10 min me costó
Me tome un café con él, y charlamos de cotilleos del pueblo, lo conocía de toda la vida..
Volví a casa de mis abuelos, olía a café. En la cocina estaba mi abuela, desayunando sola.
- Buenos días reina, le dije mientras le daba un beso.
+ Buenos días hijo, quieres un café?
- Venga ya me he tomado dos, pero bueno.. Por cierto dónde esta el abuelo?
- Uff el abuelo hace rato, que se ha ido al huerto y luego con sus amigos hasta la tarde ya no viene, y cuando viene al sofá a dormir... En fin
+ Venga Yaya, no te enfades. Vamos a tomar el café y vamos hacer esos arreglos que tenias...
- Dejaló hijo, es domingo. Ya lo haremos.
No le hice caso al final, la convencí. Le repare dos enchufes, un grifo que fugaba una puerta que no cerraba y por último, le colgué una estantería que llevaba en casa más de tres años, me confeso mi abuela.
+ Hijo, para lo de la estantería necesitarás mi ayuda?
- No, yaya puedo solo, pues?
+ Si no te hago falta, yo me iré a misa de 11 como todos los domingos.
- Pues vete tranquila abuela, cuando vuelvas ya tendrás montada la estantería y todo recogido.
Mi abuela, se fue a dar una ducha mientras que yo montaba en el alto de la casa. La casa de mis abuelos tiene dos plantas una que se usa de vivienda y la parte de arriba, que se usa de trastero, para tender la ropa y hay un par de camas, por si cundo estamos toda la familia no cabemos en el piso de abajo.
La verdad que me pegué una buena sudada para montar la estantería, cuando estaba acabando oí a mi abuela, desde el piso de abajo que se iba. Que luego nos veíamos.
Acabé las faenas que mi abuela, me había puesto, y me fui a dar una ducha.
Tenía que ir a Zaragoza a por la ropa, para quedarme en el pueblo. Se me ocurrió esperar a mi abuela, por si quería venir a ver a mi padre, su hijo.
Así que me fui a la ducha. Me desnude y al echar la ropa a lavar volví a ver encima de toda la ropa unas bragas de mi abuela. Joder no me lo podía creer, mi abuela era muy coqueta con la ropa interior. Como una mujer de mas de 70 años, podía ser tan presumida. Las bragas eran sin tapar todo el culo, rojas y con alguna transparencia entre los encajes.
Joder no sé que me pasó, nunca lo había hecho ni cuando tenia 15 años y estaba
más salido que el pico de una plancha, llevé las bragas de mi abuela a mi nariz. Olían a mujer, a coño. Tenían la esencia de mujer. Joder mi polla, se puso a cien. Pensé en ver que ropa interior escondía mi abuela en su habitación. No lo pensé. Apagué el agua de la ducha, me puse las zapatillas, para no dejar marcas en el suelo y fui a la habitación de mis abuelos, no sin antes haber metido la llave por dentro para que si alguno volviera no podría abrir y me pillasen en mi violación de intimidad.
Entré en su habitación, y fui a su mesilla. Tenía tres cajones, en el primero había unos pañuelos de trapo, alguna bragas nuevas poco llamativas y un bote de gel lubricante de fresa. Joder con mis abuelos pensé, todavía le dan al tema...
En el segundo encontré sujetadores, me sorprendió había un montón y mirando la talla vi que mi abuela tenia una 95 copa C. Había transparentes, negros, blancos, con tirantes, sin tirantes. Pushup... joder con mi abuela. Los dejé como estaban.
En el tercero estaban las bragas, negras blancas, transparentes, de encajes normales, y hasta tenia varios tangas.. Tangas? una mujer de más de 70 años y usa tangas? no me lo podía creer. También había una pequeña caja con medias y pantis.
Mira que se pone mi abuela provocativa, y mi abuelo, un poco de lubricante y al tema...
La verdad que con la tontería tenía mi polla como una piedra. Dejé todo como estaba y volví al baño, sin dudarlo cogí las bragas rojas de mi abuela e hice lo que nunca había hecho, me hice una paja con ellas, enrolladas en mi polla.
La verdad que estaba tan cachondo que me corrí a los 4 o 5 minutos.
Tuve el máximo cuidado cuando me corrí de no manchar con mi leche las bragas de mi abuela. Las deje como estaban y me di una ducha.
Acabé y fui a quitar las llaves de la puerta, mi abuela estaba apunto de llegar.
Así fue justo había llegado a mi habitación y estaba en calzoncillos, cuando mi abuela abrió la puerta.
+ Luisja hijo, ya he vuelto éstas en casa?
- Si abuela, estoy en mi habitación.
Mi abuela, se acercó a mi habitación, mientras que yo me vestía.
- Oye yaya, yo tengo que ir a Zaragoza a por la ropa, quieres venir conmigo y comemos algo por el tubo? Así de paso ves a mis padres.
+ Vale, total aquí estaré sola todo el día, además así veo tu padre. Que mi queridisima nuera no lo deja venir, son las dos iguales de malas. Explotó mi abuela.
- Abuela, que es mi madre... Lo de mi ex pase pero lo de mi madre...
+ Hijo, lo siento pero ya sabes que las nueras no quieren mucho a las suegras, y tu madre es el caso. Yo tampoco. No entiendo porque esas dos mujeres, me quitaron lo que más quería a mi hijo y a mi nieto.
- Yaya, nadie te ha quitado nada. Yo ya estoy aquí. Además al abuelo también lo quieres.
+ Si pero al abuelo, lo encontré en la calle, vosotros dos sois de mi sangre. Y tu madre, no le gusta venir nada al pueblo..
Paré la conversación veía a mi abuela, con mucho rencor dentro. Estaba claro que tanto a mi padre como a mí, nos echaba mucho se menos. Cambié de tema.
-Abu, vamos a ver si te gusta como ha quedado la estantería. Dije mientras acaba de ponerme la zapatillas.
+ Si dijo mi abuela, saliendo delante de mi de la habitación y poniendo rumbo al desván.
Yo salí detrás de ella de la habitación. Comenzamos a subir las escaleras, mi abuela primero, yo detrás. Pero el ver el culón de mi abuela a la altura de mi cara, hizo que algo llamase mi atención.
Mi abuela, esa mañana vestía un pantalón de tipo traje de vestir de mujer negro, una blusa como de seda de flores de colores en verdes y blancos, unos zapatos abiertos de tacón relucientes de 6cm y una americana a juego del pantalón.
Lo que llamó mi atención, fue la silueta de su redondo culo en esos pantalones. Joder como le quedaban a mi abuela de bien esos pantalones, cuando mas me fijaba pude ver como la silueta de un tanga, se le dibujaba en su pantalón.
Joder con mi abuela, la verdad que no sólo tenía tangas entre su ropa interior, es que además se los ponía.
Subiendo aquellas, escaleras fue un punto de inflexión en mi vida, desde ese día empecé a sentir curiosidad por la ropa intima de mi abuela. También una pequeña excitación por ella.
Mientras que mi abuela, revisaba y colocaba en la estantería un par de cosas, la examiné de arriba a abajo, y pude ver algo que no había visto o que no había llamado mi atención en los 31 años que tengo.
Vi a una mujer madura, con algunas arrugas en la cara, con unas tetas, de un buen tamaño, no sé si caídas o no. Me imagino que caidas por la edad. Pero no recuerdo nunca de haber visto a mi abuela en bañador o en bikini. Pero lo que puede ver apenas tenía un poquito de barriga, cosas de la edad, pero tenía un buen y redondo culo. El culo lo tenía bien. Las piernas delgadas, de pelo castaño muy cuidado, tanto que todas las semanas va a la peluquería, con alguna cana, pero pocas. Joder con mi abuela el caso es que tenía 74 años, y era más presumida y elegante, que mi propia madre que tenía más de 20 años, menos.
Me sacó de mis pensamientos mi abuela.
+ Gracias hijo, lo has dejado de maravilla. Si es por el abuelo, esto se queda así 5 años más.
- Bueno es lo mínimo que puedo hacer por haberme acogido en tu casa yaya.
+ Está siempre será tu casa hijo, y espero que vengas siempre.
Tras la charla, nos montanos en el coche, como era principio de verano, estaba al rojo vivo. Esperamos que se enfriase un poco y fuimos a Zaragoza. Tomamos unos pinchos por el tubo, unas migas, unos calamares bravos...
Fui a mi casa a por la ropa.
Mi madre protestó
' Ahora te vas al pueblo, eres un caprichoso. Parece que tienes 20 años. Dijo mi madre mientras metía la ropa en mi maleta.
Al final va a tener razón, mi abuela que insoportable es mi madre....
Mi abuela estuvo, en el salón hablando con mi padre, mi madre casi ni se dirigió a hablarle. Cogí todo y nos despedimos.
Ya en el coche. Fue mi abuela la que dijo.
+ Ves tu madre casi ni me ha hablado. Entiendes lo que hemos hablado antes.
- Creo que tienes, razón además no creó que le ha hecho mucha ilusión que me vaya al pueblo..
+ No te preocupes hijo, ya se le pasará. Por cierto, gracias por llevarme a comer por ahí. Hace mas de 10 años, que no había estado en el tubo. Tu abuelo nunca me quiere traer. Ya nunca quiere salir del pueblo.
- Bueno abuela, no te preocupes para eso estoy yo..
Un flass paso por mi cabeza. Bañador, tetas, abuela, nunca.. y entonces dije.
- Yaya, cuanto hace que no vas a la playa?
+ Bueno hijo, de eso no hace tanto 3 años, antes en el pueblo ponían un autobús e íbamos y volvíamos a Salou, en el día. Pero ya no.
- Pues si quieres, y hace buen día el sábado que viene te llevo a la playa. pasamos el día allí. Qué te parece?
+ Eres un sol, dijo mi abuela dándome un beso en la mejilla. Buff que larga se me va hacer la semana...
******************
La semana paso, sin ningún sobre salto la verdad que la mayor parte del tiempo, la pase trabajando. Si que esa semana el miércoles, volví a quedar con mi amiga Susana y le di una buena ración de sexo. La verdad, que últimamente, estaba follando más que nunca.
El viernes por la tarde cuando regresaba a casa del pueblo, como todos los días volvió a mi mente mi abuela, mañana por fin iríamos a la playa y le prodría ver su cuerpo. Hacia más de 20 años que no la veía en bañador. Y cuando la veía por aquellos entonces no, levantaba la mínima pasión.
No sé muy bien porque, pero tenia mucha curiosidad por ver a mi abuela con poca ropa.
La verdad que mi abuela, gran parte por la ropa interior, que se ponía, empezó a levantar en mí cierto deseo. No sé, me parecía que si era tan coqueta con la ropa interior, seria todavía activa sexualmente. No sé muy bien, si es morbo, curiosidad o simplemente, que estoy desfogado...
Llegué a casa, mis abuelos estaban ya cenando.
- Buenas que tal? les pregunté mientras le daba un beso a cada uno en la mejilla.
* Hola Luisja que tal el día? preguntó mi abuelo.
- Bien ya ha acabado así que perfecto.
+ Hijo, al final lo de mañana, sigue en pie? Preguntó mi abuela.
- Si claro, por mi no hay problema. Si tú quieres saldremos pronto. Respondí a mi abuela.
+ Si, si claro que quiero. Estoy deseando. Por cierto Antonio, tu quieres venir?
- A dónde? preguntó mi abuelo sin ganas.
+ A pasar el día en la playa. Le replico mi abuela con sarcasmo.
- Que va, quita quita, para qué? para llenarme de arena y luego estar todo el día pegajoso. Conmigo no contéis.
+ Vale, ya lo suponía dijo mi abuela. Te dejaré la cena preparada, porque supongo que a comer no vendrás? le preguntó mi abuela a mi abuelo.
- No a comer ya sabes que ni el sábado ni el domingo. Deja la cena preparada y venir cuando queráis. Protestó mi abuelo
La verdad que yo quería mucho a mi abuelo, pero sus pensamientos de hombre chapado a la antigua no me gustaban nada. Mi abuela parecía su exclava, más que su mujer. Eso me enfadaba un poco.
Terminamos de cenar y salí a tomar una cerveza con mis amigos. Pero para mi sorpresa se iban al pueblo de al lado a tomar algo.
* No me digas que no vas a venir hoy tampoco dijo mi amigo Oscar. Hay unas chicas que deben estar calientes.
- Joder macho, protesté no voy a ir que os conozco y volvemos de día. Además mañana me voy a Salou a pasar el día con mi abuela.
* Menudo planazo, dijo en tono burlón Oscar. No me jodas me vas a comprar el follarnos a una pivitas con el ir a la playa con tu abuela de 70 años.. No me jodas Luisja.
Al final, se marcharon y yo volví a casa media hora mas tarde de lo que me fui.
Mi abuela, estaba en la cocina terminado de recoger, mi abuelo ya roncaba en la cama.
+ Que pronto has vuelto, hijo. No estaban tus amigos? Preguntó mi abuela.
- Se han ido a tomar algo al pueblo de al lado.
+ Y porque no has ido con ellos?
- Porque los conozco y nunca tienen prisa por volver. Mañana tenemos que madrugar. Quiero irme pronto para aprovechar el día.
+ Bueno hijo, ya me fastidia. Podías haber hecho planes, con tus amigos. En vez de ir con tu abuela a la playa, seguro que hasta te han vacilado. Dijo mi abuela muy segura.
- Bueno ya sabes, tonterías.
Fui al baño a echar una meada para irme a la cama, la verdad que el calor me agota. Cuando fui a mi habitación por el pasillo, vi que la luz de mi habitación estaba encendida.
Que raro, no recuerdo haber entrado esta noche. Pero cuando llegué me sorprendí. No me había dejado la luz, era mi abuela subida en una escalera, buscando algo en lo alto del armario de mi habitación.
- Abuela, que haces ahí? bajaté ahora mismo, te puedes caer y más con la escalera puesta de esa manera.
+ Que no pasa nada hijo, que no me caigo. Estoy buscando un bolso que tengo para ir a la playa. Lo guardé en este armario pero ahora no lo veo.
- Baja yo lo busco. Le ordené. Dejame a mi.
+ Que no pasa nada tranquilo, me he subido así mil veces y nunca me he caído. Si es caso agarra la escalera por si acaso y vale.
Hice caso a mi abuela, estaba claro que no me iba a dejar a mi buscar el maldito bolso. Por lo que fui y agarré la escalera.
Una vez que tenía la escalera agarrada por los lados, miré a ver que hacia mi abuela, pero no pude ver que hacia, sólo pude ver, sus bragas negras, el vestido que llevaba para andar por casa, dejo ante mi todos los secretos de mi abuela. Joder aparté la vista. Pero mi polla dijo lo contrario y comenzó a despertarse. Volví a mirar, un demonio me decía mira mira, un angelito me decía no mires es tu abuela, no mires esta mal.
Pero como otras tantas veces que me hablaban mi ángel y mi demonio, hice caso al demonio, y volví a mirar.
Pude reconocer las bragas de mi abuela. Eran las que tenían un trozo de tela blanco delante, lo pude ver el trozo de tela. También pude ver la carne de su culo en la transparencia de los encajes. La verdad que estaba disfrutando hasta que oí.
+ Aquí esta lo encontré. Dijo mi abuela. Y baje raudo mi mirada al suelo.
Mi abuela, ordenó el armario y cerró la puerta, bajo de la escalera.
+ Muchas gracias. Ya está. Voy a preparar la toalla, el bikini y todo para mañana. Diciéndome esto y dándome un casto beso de buenas noches, salió de mi habitación.
Joder estaba empalmado. Joder que puto guarro. Soy un pervertido. Mi abuela una mujer de 74 años, ha puesto mi polla como la piedra de mármol. Creo que estoy más salido que cuando tenía 15 años. Con 15 años, nunca me empalme con mi abuela... Y eso que entonces me la ponían duras todas las mujeres.
Me metí en la cama, pero mi polla, no se bajaba. Vino a mi mente la palabra bikini bikini. Joder mi abuela no ha dicho bañador ha dicho bikini.
Buff, creo que está mal lo que voy hacer, pero me voy hacer una buena paja. Mi intención al igual que cuando me hice la paja con las bragas de mi abuela, era pensar en otra mujer que no fuese mi abuela. Pero por más que me imaginaba otra cosa a mi mente, siempre aparecía la imagen de las bragas negras de mi abuela, su transparencia de culo entre los encajes y la tela blanca pegada a su coño.
La piel de mi polla, subía y bajaba sin sacar de mi mente, la imagen de mi abuela.
La verdad que me estaba dando un buen gusto la paja tanto, que tuve que aumentar el ritmo todo lo que pude, hasta que 2 minutos más tarde me corrí como un loco.
Más tranquilo, después de la paja pensé. Si el miércoles folle, no entiendo como me ha podido poner cachondo mi abuela..
Pero me quede dormido al instante.
Me desperté sobre las 7 :15 de la mañana. Nada más abrir la puerta de mi habitación, comprobé que mi abuela se moría de ganas de ir a la playa. Joder ya olía a café.
Fui a la cocina y no sólo había hecho café, además ya estaba preparada para marcharnos. Tenia puesto un vestido veraniego hasta la rodilla con un escote. Me tomé rápido el café, y fui a por un bañador una toalla y ropa de cambio.
Antes de las 8am ya estábamos en la carretera. Nos habíamos ido antes de que se levantase mi abuelo. Nada más salir del pueblo nos cruzamos con el coche de mis amigos que volvían del pueblo de al lado. Lo sabia vuelven a las 8 bien de día.
- Ves abuela, ahora viene mis amigos. Les llevo toda la noche de ventaja durmiendo.
Le dije orgulloso.
+ Bueno hijo, pero la vida es para disfrutarla un poco, que luego te haces viejo y te arrepientes de no haber echo muchas cosas..
- Bueno creo que tiene que haber tiempo para todo abuela. Para trabajar, disfrutar, divertirte e incluso para pasarlo en familia.
+ Eso esperó hijo, que sigas teniendo tiempo para la familia. Porque creo que rápido te quiere cazar la Susana esa... El miércoles otra vez.... dijo mi abuela con rabia.
- Joder abuela, pareces de la CIA. Te enteras de todo. Madre mía no pude hacer nada uno sin que se entere todo el pueblo.
+ Hijo, entiendeme, por nada del mundo quiero que te vuelvan a apartar de mi otra vez otra mujer. Ya me ha pasaron con tu padre y una vez contigo. No quiero que contigo me pase dos. Daría lo que fuese para no volver a perderte.
- Tranquila abuela, eso no pasará. Te lo prometo.
Mi abuela, estaba obsesionada con que me volvieran a separar de ella. Verás cuando en octubre me tenga me marchar a mi casa, pensé.
Continuamos el viaje, y por fin llegamos a Salou. Fuimos a la playa que está entre Salou y Cambrils. Cogimos los trastos y buscamos el sitio que más nos gustó. Eran las 10'15 por lo que había sitio donde quisiéramos. Pusimos la sombrilla y las dos sillas, las toallas para coger un poco más de sitio. Yo empecé a buscar un sitio donde ponerme el bañador.
+ Qué te pasa hijo, pregunto mi abuela. Qué buscas?
- Joder pues busco un sitio donde ponerme el bañador. No lo traigo puesto.
Dije mirando a todos los lados.
+ No pasa nada hijo, ahí hay una duchas cerradas, por un Euro entras y te cambias. Yo tampoco traje el bikini puesto. Ahora vamos. Dijo mi abuela terminado de colocar todo.
Busqué en mis bolsillos y en mi cartera pero monedas de un € solo tenía 1.
- Abu, si va con 1€, ya puedes mirar si tienes tú alguno, yo sólo tengo uno. Le dije.
Mi abuela miro su cartera, pero no tenía ninguna moneda de €.
+ Pues no tengo ninguna. Dijo mi abuela. Cerrando la cartera.
- Bueno pues pasaré al supermercado de enfrente a por cambio. Le dije a mi abuela.
+ Pero no has dicho, que tenias una? preguntó mi abuela
- Si, pero eso sólo una. No entendía a mi abuela. Claro pero tú has dicho que tampoco lo traes puesto el bañador no?
Entonces, nos hace falta una para ti y una para mi..
+ Anda hijo, con una nos vale. Entramos los dos a la vez y nos cambiamos que cabemos de sobra.
No le quise preguntar más a mi abuela. Ella había estado más veces. Pensé que habría dos zonas una de ducha y otra de cambio de ropa.
Pero tras acercarnos ala caseta esa de hierro, echar el € por la rendija, abrirse la puerta y entrar dentro, me di cuenta que sólo había una estancia de ducha amplia pero una.
Mire a todos los sitios como buscando algo para no ver a mi abuela desnuda, pero no veía nada.
+ Qué buscas hijo, te veo inquieto. me preguntó mi abuela dejando el bolso en un banco que allí había.
- Es que abuela, aquí...
+ Aquí qué? hijo, no creo que te cree un trauma el ver a tu abuela desnudas no? Si te da vergüenza, que yo te vea espera que me cambié yo salgo y luego te cambias tú sólo.. Dijo mi abuela dando la opción, mientras se quitaba las sandalias.
- Que vergüenza abuela, yo lo decía por ti. Por si te sientes incomoda.
+ Hijo, por mi? que tengo 74 años, ya no me vas a ver algo que no hallas visto. Más caído y arrugado, pero todas las mujeres somos iguales. Tampoco creo que tú tengas algo que no halla visto. Dijo mi abuela, sin cortarse y sacándose el vestido por la cabeza y quedándose en ropa interior.
Joder no sé que me pasó, pero me quedé inmóvil viendo a mi abuela, joder con mi abuela a sus 74 años, me llevaba un conjunto de sujetador blanco, que dejaba transparencias, y unas bragas blancas a juego, que dejaban ver algo de su culo.
Me salió sin pensar.
- Abu, que ropa interior más, bonita llevas. Me has dejado sorprendido. Dije sin dejar de mirarla. Joder ni mi mujer 35 años mas joven que tú, cuidaba tanto el tema de su intimidad. Pero al instante, empecé a arrepentirme de lo que le dije. Joder eres tonto Luisja, como le dices a tu abuela, que lleva una bragas bonitas. La que has liado. Se enfadará y dirá que eres un guarro y un pervertido. Pensé. Pero mi abuela lejos de enfadarse contesto.
+ Te gusta? siempre he llevado ropa intima así. Sabes hace mas de 20 años que uso tangas, cuando se pusieron de moda. No sé antes me gustaba ser coqueta, y a tu abuelo también. Y ahora ya no quiero ponerme otra. Me niego a ponerme bragas blancas de algodón hasta la cintura. Esas me las pondré el día que me haga pis encima... dijo mi abuela muy convencida soltando su sujetador
Yo no podía dejar de mirarla, pero la estaba de espaldas a mi. Se bajó las bragas bajo mi atenta mirada. Yo comencé a quitarme la camiseta y el pantalón me quedé en calzoncillos. No podía ver el coño ni las tetas de mi abuela, sólo me enseñaba el culo. La verdad que tenía algo de celulitis y alguna arruga, pero todavía lo tenía redondo. No era muy grande. Levantó su pierna y metió la braga blanca del bikini, luego la otra. Yo me bajé los calzoncillos y me puse el bañador, me gustaba el ver a mi abuela así, y a mi polla también.
Joder se me puso dura, ostia ahora vera mi abuela, que me he empalmado al verla desnuda. Puse mi mochila tapando mi polla, para que no me vería mi abuela.
Empecé a pensar en la tabla periódica química para que de mi mente, se fuera la imagen de mi abuela desnuda...
+ Venga yo ya estoy, y tú? preguntó mi abuela.
- Si yo también, vamos a darnos un baño.
Salimos a la toalla, y nos dimos una baño, mi abuela dijo que estaba fría y se salio. Me quedé observando como se movía su culo bajo, la braga blanca del bikini, joder pues que no esta nada mal mi abuela para los años que tiene.
Me fijé como paseaba la gente por la orilla, unas en top les, otras con bañador...
Empecé a fijarme en las mujeres que mas o menos tenían la edad de mi abuela, y no vi a ninguna, que se pareciera a ellas. Todas tenía mas arrugas, estaban más gordas...
Tomamos, el sol y comimos, en un chiringuito que estaba al lado. No quitamos ni las toallas. Después de comer mientras que mi abuela, tomaba el sol yo me eche una siesta bajo la sombrilla.
Hablamos de cosas, de la vida, dimos paseos. Tomanos el sol nos bañamos... La verdad que fue un día muy ameno. Estuvimos en la playa hasta última hora. Fuimos los últimos en recoger.
+ Bueno ahora vamos a darnos una ducha, y cenamos algo aquí o quieres volver a casa preguntó mi abuela.
- Buena idea abu, podemos cenar aquí e incluso tomar algo en una terraza. Mañana es domingo no tenemos prisa.
Recogimos la sombrilla y las sillas y las lleve al coche. Fuimos a darnos una ducha a donde nos habíamos cambiado por la mañana.
Cuando llegamos a la cabina, saqué una moneda,
- Tú primero abuela, luego entro yo.
+ Vale, dijo mi abuela.
Pero cuando metimos la moneda nos la expulso no la cogía. Cambiamos de moneda y se la tragó, la puerta no se abría.
- No sé que le pasa, esto no funciona...proteste.
+ Ya veo yo, que vamos a tener que volver a casa sin duchar, dijo mi abuela derrotada.
- Espera abu, vamos a volver a probar.
Volvimos a meter otra moneda y nada con un golpe en el monedero la puerta se abrió.
- Buala le dije a mi abuela, haciendo con un gesto que entrase.
+ Hijo, no me fió mucho de esta maquina, porque no entras conmigo, Igual no se vuelve a abrir y tú no te puedes duchar. O lo que es peor que entre y no se abra la puerta y no pueda salir.... Dijo mi abuela con mucho miedo.
- No sé, dude por un momento, le dije mirando a mi abuela a la cara.
+ Buf hijo, no sé que son esas vergüenzas que tienes no las entiendo. Soy tu abuela, no una extraña. Recuerda que te he visto desnudo mil veces, si hasta te he bañado.
- Vergüenza abuela , lo decía porque estés incómoda..
+ Hijo, a mi edad, pierdes la vergüenza y todo...
Y diciendo esto, nos metimos los dos en la ducha portátil, hacia un poco de calor y no había mucha luz, pero bueno.
Mi abuela, se desnudo la primera, metió su bikini en una bolsa, y me dijo.
+ Mete luego el tuyo aquí, mañana los lavaré para quitar bien la arena.
Y diciendo esto se metió a la ducha. Pasó por mi lado y pude ver por primera vez el cuerpo desnudo de mi abuela.
No se veía mucho, pero vi sus tetas un poco caídas, pero todavía eran redondas, tenía un poco, de tripita pero es normal a esa edad, tenía el cuerpo con arrugas, pero no tenia la piel caída como alguna de las mujeres que había visto en la playa. Sus piernas todavía estaban firmes. Sus aureolas grandes y con unos pezones redonditos. El coño, tenía pelos, arreglados, pero algo de bello, se veía. No puede saber cuanto.
Comenzó a ducharse mientras yo me quitaba el bañador y lo metía en la bolsa que me dijo, mi abuela.
Me puse a pensar otra vez en la tabla periódica de los elementos químicos, no me quería empalmar y que me viera no abuela, ahora no podía esconderme.
Litio, sodio, potasio...
+ Ya estoy hijo, venga cambiamos de sito. Dijo mi abuela, rodeándose con una toalla.
Cambiamos de sitio y yo pasé a la ducha. Fue mi abuela, la que al pasar por mi lado dijo,
+ Pues si que has cambiado, la última vez que te vi desnudo no tenías eso, dijo mi abuela refiriéndose a mi polla.
-Abuela, le regañe.
+ Qué pasa hijo? era una broma. Tú y tus atributos, han crecido mientras que los mios se han caído y se han puesto más feos y arrugados. Dijo mi abuela secándose con la toalla.
- Abu, no digas tonterías, que más quisieran muchas de la he hemos visto hoy en la playa, estar la mitad del buen ver que estas tú. Estas perfecta para tú edad. El otro día cuando estabas con tus amigas tu eres la que más destacas para bien. Le dije a mi abuela, mientras me aclaraba el jabón en la ducha.
+ Hijo, no me compares, yo seré vieja por los años que tengo, pero de mente y de mi forma de ser y vestir siguen igual a lo largo de los años..
- Ya te digo yaya, Me gusta esa aptitud.
No pude ver que ropa interior se ponía mi abuela, dentro se veía poco y me alegre porque sino mi abuela, hubiera visto mi polla morcillona, por su culpa.
Salimos de allí y nos fuimos a cenar ni mi abuela ni yo no teníamos la más mínima prisa.
Después de cenar nos tomamos un café en una terraza la noche era espectacular.
Ya sobre las 0:30 decidimos ir camino a casa.
Nada más montarnos en el coche y comenzar el viaje, sonó mi teléfono y a los dos tonos, se descolgó.
+ Si acerté a decir,
" Hola Luisja soy Susana. Hoy no vas a venir a verme?.
- Pues no puedo, estoy volviendo en el coche, de Salou con mi abuela. Lo siento.
" Ah vale pues ya hablaremos y colgó.
+ Hija de puta, buscona, dijo mi abuela enfadada.
- joder abuela que cariño le tienes, parece que tienes celos de ella.
+ Celos no, hijo. Bueno sí. Bueno no lo sé.
-Abu, soy un hombre soltero y tengo que darle alegrías al cuerpo. Que todavía soy joven.
+ Haría lo que fuera, para que no te caza se esa lagarta. Dijo mi abuela muy convencida.
- Tranquila abuela, que no me separa nada, ni nadie de ti.
+ Eso espero. Dijo triste mi abuela.
- Oye abu, y el abuelo siempre hace la misma vida? No se preocupa por ti.
+ Hijo, te voy a decir una cosa que no sabe nadie, y que espero que siga sin saber nadie. vale?
- Si claro abu, seré una tumba pero que pasa?
+ Pues que el abuelo, no ha superado que ya no...dejo un silencio.
- Qué ya no qué? le pregunte a mi abuela.
+ Ay hijo no te hagas el tonto, que ya eres mayorcito.
- Ah que no se le levante, quieres decir
+ Si hijo, no lo ha superado. La verdad que hasta los 70 ha funcionado bien, pero lleva 5 años que nada de nada no hay forma. Y yo todavía quiero guerra pero nada el abuelo no me la da. Entonces me ve ponerme guapa, arreglarme, sigo llevando la misma ropa interior que antes tanto le gustaba y tan cachondo le ponía. Y ve que no puede darme placer y no lo supera. Por eso casi no pasa tiempo conmigo.
- Y tomar una viagra? Le pregunté intentando dar soluciones.
+ No hijo, ya sabes que esta fastidiado del corazón, y si toma le puede dar un infarto.
- Pues, es una puntada la verdad. Le dije triste a mi abuela.
Siempre hemos tenido muy buena relación, mi abuela y yo. También hemos tenido mucha confianza, pero nunca me había contado los secretos que su alcoba guardaba. La conversación me estaba poniendo cachondo, por lo que seguí hasta ver donde me contaría mi abuela.
- Y abu, a ti aún te?.. Ya sabes... Le dije cortado.
+ Qué si tengo ganas de tener sexo? a eso te refieres, me preguntó mi abuela sin tapujos.
- Si, yaya.
+ Pues si hijo, no es como cuando tenía 30 años, pero si que me sigue apeteciendo tener sexo. Y más días como hoy que veo a los hombres jóvenes y guapos, con esos cuerpos y....... Dijo mi abuela suspirando.
-Y nunca le has sido infiel al abuelo?
+ Nunca hijo, eso nunca lo he hecho. Cuando veo algún hombre guapo, joven pienso mil cosas, pero sólo eso pensar. Actuar nada. Dijo mi abuela muy convencida.
Osea que mi abuela a sus 74 años, le picaba tanto el coño, como a mi la polla a mis años.
- Bueno, y cuando te apetece abu, que haces? Ya sabes si te pones caliente.
+ Pues si me pongo caliente, y tu abuelo esta en casa nada, si no está pues ya sabes....
Joder mi abuela, se masturba. Eso me mató, hizo que la atracción que sentía hacia ella, se multiplicara por mil. Joder mi polla, se puso a reventar. Lo tenía claro iba a seducir a mi abuela, e intentar llevarmela al huerto.
Dejamos el tema del sexo, no podía estar todo el viaje cachondo y volvimos a hablar de cosas de casa y del pueblo. Por fin llegamos a casa. Eran ya las 4 am.
******************
Entramos en la casa, y nada más hacerlo, pudimos oír como mi abuelo, estaba profundamente dormido. Roncaba como un oso.
+ Ves, ahora si yo quisiera darle una alegría al cuerpo, con este hombre así dormido que hago? Me tengo que quedar con las ganas... Protestó mi abuela, ya en la cocina.
- Sí la verdad, pero te digo una cosa, mira que quiero al abuelo, pero creo que no te trata como debería, pareces su esclava, así que si el cuerpo te lo pide. Daté un revolcón con alguien. No se tiene porque enterar nadie.
+ No sé hijo, no me parece bien. Ya sabes que nosotros somos de otros tiempos, y que nuestra educación ha sido diferente a la vuestra. No lo termino de ver.. Dijo mi abuela.
- Piensalo abu, por lo menos una alegría.
+ Y como lo hago hijo, aquí en el pueblo no se pueden tener secretos, mira como se ha enterado todo el pueblo que te has tirado dos veces a Susana... Fíjate que me tiró a alguien y se entera todo el pueblo. A mi edad... Las cosas negativas del asunto, superan a las positivas.... Dijo mi abuela.
- Bueno, ya hablaremos otro rato, ahora vamos a la cama, que ya es tarde. Dije a mi abuela, dándole un beso en la mejilla.
Fui a mi habitación, estaba cachondo, no quise, seguir atosigando más a mi abuela, además mi abuelo estaba en casa dormido, pero estaba y se podía despertar en cualquier momento. Pensé que tenía que intentar poner cachonda a mi abuela y entonces atacar.
Dormí muy mal esa noche, me moría de ganas, por seguir con mi plan, por lo excitado que estaba no pude pegar ojo.
Escuché como se levantaba mi abuelo, desayunaba y se iba de casa. Mi abuela seguía en la cama.
Fui a la cocina en calzoncillos, quería que mi abuela, me empezará a ver como un objeto sexual no como su nieto. Preparé café y tostadas, empecé a oír movimiento en su habitación.
Corrí al único baño, de la casa, como tiene ventana no había que encender la luz, me desnude, y comencé a tocarme la polla para que estuviera medio morcillona, medio dura.
Me metí en la ducha, pero no abrí el grifo, si mi abuela escuchaba el agua, no entraría.
Oí, que habría la puerta de su habitación y que sus pasos se acercaban, entonces abrí el agua.
Mi abuela, entró en el baño, y me vio completamente desnudo.
+ Huff lo siento, hijo no sabia que estabas, duchandote. Dijo mi abuela, mientras salia del baño.
- Abu, pasa no pasa nada, luego me dices que el vergonzoso soy yo, dije riendo, sin dejar de tocarme la polla.
+ Vergüenza a mi edad. Dijo mi abuela.
Entró en baño, y se sentó en la taza. Justo me veía a mi y a mi polla, yo no la miré a ella. Pero se que ella me estaba mirando la polla. Acabó y se fue a la cocina.
- Has desayunado me preguntó.
+ No te estaba esperando. Estaba haciendo tiempo. Le dije mientras que jabonaba mi cuerpo.
- En la cocina te espero. Dijo mi abuela saliendo del baño.
La cosa funcionaba, pero quería más. Me Sequé y rodeándome una toalla, a la cintura, sin que quedase muy agarrada, me fui hacia la cocina.
Lo que quería es que se me cayese la toalla y quedarme desnudo delante de mí abuela.
Con la escusa de preguntarle por un pantalón entre así en la cocina.
-Oye, abu mi pantalón corto azul lo has visto? quería ponermelo hoy. Pude sentir como la toalla, aflojaba su presión en mi cintura y caía al suelo, esta vez ya tenía la polla, medio dura sólo del morbo.
+ Si está muy grande dijo mi abuela. joder está en tu habitación, dijo rectificando las palabras. Estaba claro que mi abuela se había confundido al hablar. Le había pasado una mala pasada su subconsciente...
Me hice un poco el tonto.
- Pero abu, ese pantalón no me esta grande, le dije mientras, que cogía la toalla del suelo.
+ Olvidalo hijo, no sabía lo que decía.
Estaba claro mi abuela, se había fijado en mi polla. Así que fui a mi habitación y volví en calzoncillos.
Cuando mi abuela, me voy entrar así en la cocina me dijo,
+ Hijo, porque no te vistes?
- No sé abu, como tenemos confianza y no está el abuelo, pues he salido así. En mi casa siempre estoy en calzoncillos.
+ Es que no sé Luisja, Es como si yo iría en bragas y sujetador todo el día por la casa. Protestó mi abuela. Qué te parecería?
- Por mi perfecto, abu no te cortes, si tú vas a estar mas cómoda, ni lo pieses. Dije mientras ponía mermelada a la tostada.
+ Creó que no has comprendido la indirecta, hijo recuerda lo que hablamos anoche en el viaje.
De sobra sabia por donde iba mi abuela, y sabía que se estaba poniendo nerviosa al verme así y eso me gustaba. La estaba llevando a mi terreno. Supe que todo mi plan estaba funcionando, cuando a la leche le puso la mermelada y a la tostada la azúcar.
- A lo que me lié con Susana? te refiere abuela.
+ No hijo, no a lo otro. Joder no sé ni que hago he puesto la mermelada al café.. Mira me voy a misa y a confesarme, no está bien, lo que estoy pensando. Dijo mi abuela, saliendo de la cocina y dirigiéndose a su habitación.
Joder con mi abuela, creo que estaba cachonda y había pensado algo obsceno conmigo. Eso me gustaba. No la presione más, de echo ella fue a la ducha y yo a mi habitación. Cuando se preparó y se iba a ir, oí los tacones que se acercaban a mi habitación. Entonces empecé a gemir como si me estuviera haciendo una paja.
+ Ahh ahhh ahh siii sii. Dije mientras hacia mi cama.
Sé que mi abuela, me escuchó y se imaginó lo que yo quería, aunque en realidad no era. Se dio la vuelta antes de llagar a mi habitación. Ya en la puerta chilló.
-Luisja me voy a misa. Luego vuelvo.
No le conteste. Mi plan creó que funcionaba.
Me fui de casa, quedé con unos amigos y nos fuimos a Zaragoza a pasar el día le avisé a mi abuela, que no iba a comer. Quería dejarle su espacio y no agobiarle. Además así, se podía hacer una buena paja y relajarse..
Llegué cuando mis abuelos, ya estaban cenando. Yo actué con normalidad. Les di un beso a los dos y me puse a cenar, pero mi abuela la veía nerviosa, no me miraba a la cara. Se le caían los cubiertos...
Cenamos y me fui a la cama, quería evitar estar a solas con mi abuela. Lunes y martes volví tarde a casa, quería asegurarme de que mi abuelo ya estaría en casa.
Pero el miércoles, había poco trabajo y a la hora de comer, ya estaba en casa de mis abuelos, Esperé a que mi abuelo, saliera de casa para entrar y estar a solas con mi abuela.
Entre y fui hacia la cocina, que es donde estaba mi abuela,
- Hola abu, ya estoy aquí hoy he terminando pronto. Tienes algo de comer para mí?
+ Si claro hijo, sientate ahora te pongo algo. Dijo mi abuela abriendo el frigorífico.
- Yaya, qué tal va la semana? casi no nos hemos visto.
+ Bien, hijo sin casi novedad. Contentó.
- Sabes abu, un cliente de Peñíscola, le ha regalado a mi jefe, un fin de semana en su hotel, pero no puede ir, así que me lo ha regalado para que me valla yo. Le mentí a mi abuela.
+ Ah, pues que suerte hijo, me alegro mucho. Así lo pasas bien.
- Había pensado que como el sábado pasado lo pasamos tan bien en la playa, podíamos volver este finde los dos.
Mi abuela no contestó, se hizo el silencio. Pero al final respondió.
+ Lo siento hijo, si que lo pasamos muy bien el sábado pasado, pero no creo que sea buena idea. Además no quiero dejar sólo a tu abuelo todo el fin de semana. Vete con algún amigo.
Tenía una opción, que sabía que a mi abuela no le iba a gustar nada y que haría que cambiase de opinión y se la hice saber.
- No pasa nada abu, le diré a Susana.
+ No, a esa no. No le digas nada, prefiero ir yo. Respondió mi abuela como un rayo.
- Vale, entonces Vienes? Debe de ser un hotel precioso sólo para adultos, sin niños, que molesten. Bueno un lujo para parejas.. Le dije a ver que decía mi abuela.
+ Para para para parejas, respondió medio tartamudeando. Se volvió a poner nerviosa.
Dejamos ahí el tema, por el momento yo tenía claro que si o si, me la tenia que tirar ese fin de semana. Después de comer me fui a dormir un poco al salón.
Cuando me desperté de la siesta, me levanté empalmado perdido, lo primero que hice fue buscar a mi abuela, para ver si la ponía un poco cachonda, me quité el pantalón y la camiseta. Entonces la llamé.
+ Abu. Éstas en casa?
- Si hijo estoy en el alto. Chillo mi abuela desde allí.
Cuando subí mi abuela, estaba sudando a chorro.
- Pero abu, que haces aquí con el calor que hace? Y con tanta ropa? Te va a dar un soponcio de calor.
+ Tenia que dejar esto ordenado. Estaba manga por hombro. Por cierto hijo, creo que quedó claro el otro día lo de ir medio desnudo por la casa.
- Al final, no quedó claro. Dijiste que te ibas a confesar, por unos pensamientos. Y creo que tú tenias que hacer como yo, y por lo menos el rato que estés aquí quitarte la ropa, estas empapada. Dije a mi abuela mirando su camiseta mojada.
+ Hijo, por favor. Parece que más que para que no tenga calor, lo que quieres es verme medio desnuda. Ya no sé que pensar.
- Bueno, ya nos hemos visto varias veces desnudos, bueno tú me has visto mas que yo a ti, pero bueno... Lo que creo que dices que eres muy moderna, y que no tienes vergüenza, pero creo que eres lo contrario. Piqué a mi abuela a ver si entraba en mi juego.
+ Que soy vergonzosa? Ahora veras dijo mi abuela. Y quitándose la camiseta mojada, y el pantalón corto vaquero que llevaba se quedo en un conjunto de braga negra de licra y un sujetador a juego, que alzaba sus pechos.
- Jolin abu, pues me he equivocado, al final veo que era mas moderna de lo que pensaba.
+ Te sorprenderías, si me conocieses bien. Dijo mirándome a mi paquete.
- Bueno, si tan moderna eras, porque te has asustado antes cuando te he dicho, que el hotel era sólo para parejas? Le pregunté a mi abuela.
+ Porque me estas empezando a asustar Luisja, el domingo después de exibirte medio desnudo delante de mí, te fuiste a tu habitación a hacerte una paja. Ya no sé que pensar...
Mi plan había funcionado se pensaba que estaba, masturbandome...
- Bueno, soy un hombre muy fogoso y necesito, sexo abu. Si no lo consigo de una manera lo hago de otra...
+ Yo también, tengo mis necesidades y no me hago pajas a cualquier hora en casa..
- Seguro que el domingo despues de misa, te hiciste una buena paja. Estabas sola en casa y aprovechaste a que si? Le pregunté a discreción a mi abuela.
+ Luis Javier. Eso son cosas mías, pero tu que te has creído, Eres un guarro. Seguro que serías capaz de tener pensamientos obscenos conmigo. Soltó mi abuela cogiendo su ropa.
Había llegado a un punto de no retorno. Tenía que echarle morro a la cosa yo creó que a mi abuela, también le picaba la curiosidad de echar un polvo conmigo.
- Pues si abuela, la verdad que he tenido pensamientos obscenos contigo, de echo esta tarde al levantarme de la siesta he pensado en ti y mira como tengo a mi amiga... Le dije a mi abuela cogiendo mi polla sobre el calzoncillo.
+ Me voy cerdo, guarro y diciendo esto mi abuela y con la ropa en la mano, bajo al piso de abajo.
Creo que se estaba haciendo la estrecha pero le picaba tanto o más que a mí.
Bajé tras darle un rato. Cuando baje mi abuela ya estaba otra vez vestida se habia puesto una bata de verano de andar por casa. Pero cuando iba a volver a atacar, mi abuelo entró por la puerta.
Por lo que no pude presionar un poco más a mi abuela.
Reserve una habitacion con una sola cama grande, y con una ducha muy grande. Estaba claro que me tenia que follar a mi abuela si o si.
El jueves pasó rápido, y por la noche, cuando llegué a casa, mis abuelos ya habían cenado.
Mi abuela estaba en la cocina y mi abuelo en el salón viendo la tele.
Mi abuela intentaba evitarme, pero no le deje.
- Abu, última llamada, vienes a pasar el finde de semana conmigo o me voy con Susana?
+ Hijo, me das miedo, no sé hasta donde eres capaz de llegar. Creo que....
Dijo mi abuela en voz baja para que no nos escuchara mi abuelo, desde el salón.
- Cree lo que quieras abuela, pero si mañana cuando vuelva de trabajar a las 15h no estas preparará me voy con Susana. Asi que tú decides.. Le dije a mi abuela.
No Cené y me fui a la cama.
Me llamo Luis Javier. Aunque todo el mundo me conoce como Luisja. Tengo 31 años, estoy divorciado. Si me casé muy joven con 23 años, con el amor de mi vida y mi novia desde el instituto. Pero lo nuestro duro unos cuantos años.
Todo se acaba, hasta el amor.
Hace ya varios años, por allí por el mes de septiembre, escuche una noticia que llamó mucho mi atención.
Decía que un 16% de la parejas a la vuelta de las vacaciones se divorciaban. Yo por aquel entonces no comprendía aquello, puesto que estaba pérdidamente enamorado de mi novia. Decían que al estar tanto tiempo juntos y salir de las rutinas diarias de trabajo - casa - trabajo, se cansaban y acaban divorciándose.
Y algo parecido es lo que me ha pasado a mi. Pero no al volver de la vacaciones. A mi me paso, como a muchos otros españoles que con la pandemia y el estar encerrado en casa con mi mujer, vi que la vida que llevaba no me gustaba y que me había cansado de aguantar los celos de mi mujer. Así que lo decidimos de mutuo acuerdo.
Al no tener hijos, se vendió todo lo que teníamos, anulamos hipotecas, repartimos el poco dinero que teníamos en la cuenta y cada uno por su lado.
Cada uno comenzamos nuestras nuevas vidas.
Yo me compré un piso en Zaragoza que es de donde soy. Pero el problema vino cuando al piso había que hacerle unas pequeñas reformas, y no seria hasta pasado el verano cundo me lo dieran.
Tenia varias opciones hasta que me dieran mi casa.
1- Volver con mis padres a su casa.
2 - Ir a casa de mi hermana que está separada y vive sóla.
3 - Ir al pueblo con mis abuelos.
4 - Alquilarme algo hasta que me dieran la casa.
Lo decidí rápido, iré a casa de mis padres. Mis padres un matrimonio normal de unos 53 años, con mi madre ama de casa. y mi padre, encargado de una fabrica.
Cuando volví a casa no fue como yo esperaba. Las cosas habían cambiado mucho desde que me marche. Mi madre estaba todo el día con que tenia que intentar arreglarlo con Laura.
Y como mi padre pasa la mayoría del tiempo trabajando, me volvía loco con las chapuzas del hogar. Este enchufe no me funciona, la puerta esta no cierra bien. Limpia tu habitación... Vaya como cuando estaba casado con mi mujer pero sin follar.
Yo trabajo en una empresa que reparan maquinaria de hostelería, por lo que estoy fueran de casa todo el día. Cuando empecé hace ya 12 años en este trabajo y vivía en casa de mis padres, los veranos los pasaba en el pueblo. De allí me desplazaba a trabajar. Mi pueblo además está a 20 min de Zaragoza.
Como llegaba el verano y mi madre me agobiaba mucho en casa, pensé en irme con mi hermana o irme al pueblo..
En el pueblo viven mis abuelos Antonio mi abuelo y Josefa mi abuela. Son un matrimonio de jubilados que viven desde siempre en el pueblo. Mi abuelo tiene 75 años y mi abuela tiene 74. Mi abuela tuvo a mi madre con 20 años y mi madre me tuvo a mi con 22 cosas de antes que había que tener los hijos jóvenes.
Yo mantengo mucha relación con mis abuelos, los llamó casi todos los días y los visito una vez al mes. Si sólo una vez al mes, mi mujer no me dejaba ir al pueblo, decía que un par de amigas mías de toda la vida me querían cazar....
En fin se ponía celosa y nunca me dejaba ir sólo. Siempre tenia que venir ella.
En el pueblo tengo mi cuadrilla de amigos de toda la vida. Hasta que me casé pasaba todos los veranos en el pueblo. Cuando estudiaba y cuando comencé a trabajar también. Para mi era la mejor época del año. Al igual que hasta que me casé pasaba todos los fines de semana en el pueblo.
La relación con los amigos nunca la perdí de echó llevaban una vida parecida a la mía en verano al pueblo y todo los fines de semana. Al estar cerca de la ciudad esta bien para ir a trabajar y por las noches hace mucho mas fresco que en Zaragoza, aquí en el pueblo se duerme con manta y todo...
Un fin de semana, el primero que tuve libre desde que me divorcie. Decidí ir a pasarlo al pueblo.
En el grupo de washap que tenemos de amigos del pueblo lo avise y preparé una cena de celebración de divorcio.
La verdad que nunca pensé que a mis amigos les cayera tan mal mi ex mujer. Tod@s me daban la enhorabuena. La noche se alargó tras la cena. Estábamos en la bodega de uno de mis amigos tomabamos unos gintonic y se estaba haciendo ya de día. Susana una de mis amigas de toda la vida del pueblo, ( La que decía mi mujer quería cazar) me dijo,
" Oye ahora que ya no tienes que aguantar a la asquerosa de tu mujer, porque no vienes mi casa y pasamos un buen rato?
Pues mira en esto tenia razón mi exmujer, está me quería llevar a la cama.
No lo dude ni un minuto y a poco más de media hora, estaba en su casa desnudándola y chupando eso coño peludo que tenía.
Resultó ser mas guarra de lo que pensaba y tras meterle una buena follada, ella se corrió tres veces, me dejo acabar en su boca tragándose todo....
Me dejó más que satisfecho.
' Quedate a dormir. Me dijo tirada en la cama.
- No, no quiero que mis abuelos se preocupen me voy para mi casa. Este verano estaré por aquí. No te preocupes repetiremos. Y diciéndole eso puse rumbo hacia mi casa..
En un pueblo no hay distancias, por lo que en 5 minutos, estaba en casa. El sol ya empezaba a calentar. Mis abuelos, estaban en la cocina desayunando.
- Buenos días yayos, les dije mientras le daba un beso a cada uno.
*Buenos días Luisja, dijo mi abuelo.
+ Buenos días hijo, se puede saber de donde vienes? Pensábamos que ya no ibas a venir a dormir.
- Ya pero es que al final ayer volvimos a Zaragoza y he dormido allí les mentí. He venido ahora de allí.
Seguimos desayunado y mi abuelo, anuncio que se iba a ir al huerto y luego a almorzar con sus amigos. Yo me quedé con mi abuela.
Con mis abuelos tengo muy buena relación, bueno mejor con mi abuela que con mi abuelo.
Para mi abuela soy el mayor de los nietos y soy su preferido..
Tras un rato de chachara con mi abuela, fue ella la que me dijo.
+ Luisja hijo, anda vete a la cama, a tu abuelo igual le has engañado pero a mi no. Tú no has dormido en toda la noche. Además tu coche lleva aparcado al lado del parque desde anoche... Dijo mi abuela poniendo su mano en mi cabeza.
- Tienes razón, abuela. Creo que has visto muchas series de detectives, dije riendo..
Bueno me voy dormir 4 o 5 horas.
Fui el olor a comida el que me despertó de mi profundo sueño. Me hubiese quedado en la cama todo el día, pero no me parecía lo correcto..
Abrí la ventana e hice la cama. Fui a la cocina.
- Hola yaya, buenos días de nuevo. Que bien huele. Le dije mientras le daba un beso en la mejilla.
+ Casi está listo. Así que cuando quieras comemos.
- Y el abuelo? no viene a comer?
+ Uy ese ya no viene hasta la noche. Los fines de semana se va con sus amigos almuerzan y luego juegan a las cartas toda la tarde...
- Joder después de tanto tiempo, pensaba que ya no hacia lo de antes. Pero veo que llevo mucho tiempo sin venir pero todo sigue igual.
+ Así es hijo, todo sigue igual.
Comenzamos a comer unas buenas migas y un corderito guisado que hace mi abuela, que me vuelve loco.
- Y tú abuela, no te aburres todo el día sola? Le pregunté.
+ Va no te creas hijo, ya me he acostumbrado, yo luego me voy de paseo con mis amigas, tomamos un café y damos una vuelta por el pueblo y no me importa.
-Como cambian las cosas y los tiempos yaya, le dije. Hoy en día un marido hace lo que lleva el abuelo haciendo toda la vida y a los pocos años acaban divorciados. Y vosotras las de antes tragais con carros y carretas. Y encima tenéis que poner buena cara cuando viene el marido a casa.
+ Bueno hijo, así es la cosa, yo lo veo de otra manera. Estamos más acostumbradas que las jóvenes. Mira Laura, dejarte escapar. No se que sé pensara esa estirada que se puede casar con el rey... Dijo mi abuela muy convencida.
- Bueno abuela, lo nuestro se acabo y fue de mutuo acuerdo. Yo le guardo respeto a Laura, la he querido con locura.
+ Bueno hijo, siento lo que he dicho de ella, pero comprende que ella fue la que te apartó de nosotros. Nunca te dejaba venir al pueblo, si venias siempre tenían que venir ella. Y nada más había llegado ya se quería ir.. No la soportaba dijo mi abuela..
- Bueno yaya, ya está. Ese problema se acabó. Ahora volveré a pasar más tiempo en el pueblo. De echo se me está ocurriendo una cosa. Qué te parece si en vez de vivir en Zaragoza en casa de mis padres hasta que me den el piso, me vengo al pueblo con vosotros? . Serian unos cuatro meses o así.
Una gran sonrisa se le puso a mi abuela en su cara y diciendo.
+ Me lo dices de verdad? hijo. Si de verdad quieres venir, por mi perfecto. Seguro que por poco que estés en casa, ya estas más que tu abuelo... Dijo mi abuela muy contenta.
- Pues no se hable más abuela, mañana voy a por la ropa y me instalo aquí, unos meses. Joder que guay sera como cuando era joven. Dije yo muy contento.
+ Si hijo, que alegría. Volver a tener a mi nieto favorito en casa de nuevo...Uy creo que lo de nieto favorito no tenia que haber lo dicho. Dijo mi abuela un poco arrepentida.
- Yaya, toda la vida se te ha notado que soy tu favorito. Siempre me has dado más paga, nunca me reñias y siempre que venia preparabas mi comida favorita. Se te notaba a la legua.
+ Si hasta que te casaste con esa marrana. Volvió a protestar mi abuela.
- Yaya, eso es agua pasada. Ya vale.
+ Lo siento hijo. Dijo mi abuela.
Por supuesto que mi abuela, no me dejo ni recoger un plato. En cuanto lo intenté me dijo.
+ Anda hijo, vete a descansar. Vete al sofá a echarte una buena siesta.
Y dándole un beso, me fui al sofá, en el que duró la siesta 4 horas..
Joder me he dormido como un oso. Me levanté y llamé a mi abuela.
- Yaya? yayo? hay alguien en casa?
Pero nadie me contesto. Miré el móvil que lo tenia en silencio y vi que tenia varios washap.
Uno era de Susana, decía que lo había pasado muy bien, que cundo quisiera repetíamos. Le conteste con un ok.
No se piense que estoy loco por sus huesos. Soy libre y quiero disfrutar de las mujeres, y no precisamente de una sola..
Los otros mensajes eran de mi cuadrilla de pueblo que habían quedado en el bar del pueblo a las 20. Joder y son las 19:30 voy a darme una ducha rápida y me acercó.
Apagué la tele y me levante del sofá. Joder que paliza le había pegado. Fui a mi habitación y cogí la ropa para darme una ducha. Me fui al baño.
Me desnude y me di una ducha rápida. Me apetecía hacerme una paja, pero no era el momento.
Cuando salí de la ducha, me sequé y eche mi camiseta y mis calzoncillos en el cesto de la ropa sucia. Pero una cosa llamó mi atención en el cesto.
Había poco ropa, solo una camisa de mi abuelo, una falda de mi abuela y un conjunto de braga y sujetador negros muy sujerentes.
Tanto llamaron mi atención que hasta los saqué del cesto para verlos bien. Era un sujetador de copa con un poco de relleno, con unos encages y los tirantes transparentes, las bragas también negras con encajes en el culo y un triángulo blanco de tela muy suave, para tapar el coño.
Joder con mi abuela, que moderna es. No me esperaba para nada que mi abuela, pudiera tener una ropa interior tan bonita. Joder la llevaba parecida a la de mi ex mujer y eso que tiene 35 años más.
Pero ahí quedó mi sorpresa.
Me reuní con mis amigos en el bar allí estaba mi abuela, con sus amigas tomando un café. Fui a saludarla.
- Hola, que tal? no estabas en casa, cuando me he despertado.
+ Ahí hijo, te he visto tan agusto, que no he querido despertarte. Vendrás a cenar?
- Buff no lo sé. Le dije, depende del plan que tengan. Yo te aviso.
+ Vale hijo, pasarlo bien dijo mi abuela, mientras retomaba la conversación con sus amigas.
Me senté en la mesa que estaban mis amigos, y comenzamos a charlar de cosas de la vida. La mesa en la que estaba mi abuela, estaba justo enfrente de la mesa en la que estaba nuestra.
En la mesa de mi abuela y su grupo de amigas, todas eran mujeres jubiladas que rondaban entre los 70 y 80 años. La verdad que no sé porque nunca me había pasado, me vino una pregunta a mi cabeza. Todas estas mujeres, llevabaran la ropa interior como mi abuela? o mi abuela sólo tiene ese conjunto? Pero que coño hago yo pensando estas tonterías? Joder.
Fue mi amigo Richar quien me sacó de mis pensamientos.
# Luisja, Luisjaaaa
- Ehh eh dime, lo siento estaba pensando una cosa.
# Que digo, si vas a venir a cenar y tomar algo a Zaragoza esta noche? O tienes planes con Susana rió el cabrón.
- No me jodas Richar, no me apetece una mierda ir a Zaragoza, creo que paso.
# Si ya lo que pasa es que te quieres follar otra vez a Susana. Tú si que sabes..
- Que no de verdad. Si os vais, me quedaré en casa con mis abuelos.
#Joder Luisja, mira que eres muermo. Que te lo pases bien jugando a los seises. Rió.
Tomamos un par de cañas mas, y mi cuadrilla, se fue para Zaragoza yo me quedé en la terraza del bar y pedí otra caña. Me quedé solo. Estaba de frente al grupo de amigas de mi abuela. Mi abuela estaba de espaldas a mi. Por lo que me fije en el grupo. La verdad que mi abuela era la que más joven parecía. No sé si lo seria pero si que lo aparentaba. La forma de vestir, era bastante más moderna y con más gusto que las otras mujeres.
Las mujeres se levantaron, y mi abuela me vio sólo en la mesa.
+ Que haces sólo ahí? Preguntó mi abuela.
- Pues tomarme una caña, mis amigos se han ido a Zaragoza y a mi no me apetecía. Así que me acabo la caña que me acaban de traer y me voy para casa.
+ Pues si no te importa me espero y voy contigo vale?
- Perfecto yaya, sientate aquí.
Se despidió de sus amigas y se sentó en la silla de mi derecha.
- Quiere algo? le pregunté, a mi me la acaban de traer.
+ Bueno un vino blanco. Dijo mi abuela.
Le pedi a Pedro el dueño del bar un vino para mi abuela y pague la consumición. Cuando me trajo la vueltas me dijo Pedro,
* Luisja hay veces que me falla la cafetera, cuando podrás venir a echarle un vistazo?
- Pues mañana por la mañana, antes que abras. Hoy no haré excesos así que mañana puedo madrugar y le echamos un vistazo.
* Hecho, mañana te espero.
+ Oye hijo, igual es mucho morro pero yo también, tenia que hacer unos arreglos en casa, si mañana acabas pronto los podíamos hacer si no te importa.
- Claro que si abuela, mañana cuando acabe con Pedro vamos a casa y los hacemos.
+ Hijo, eres un sol. Tu abuelo, no me ayuda nada en la casa.
Y tras tomarnos la cerveza y el vino, volvimos a casa dando un paseo, mi abuela y yo. Ella me cogió del brazo. Y tras un rato me dijo.
+ Luisja, tienes que tener más cuidado, con lo que haces en el pueblo. Ya se ha enterado todo el pueblo que tú y Susana la del Antonio, ( así se llama su padre), tuvisteis.... Mi abuela no siguió con la frase.
- Joder pues, ya veo que hay cosas que no cambian nunca. De todas formas yo no tengo nada que esconder. Abuela.
+ Si lo sé hijo, pero yo sólo te lo digo, porque me he enterado..
Llegamos a casa, mi abuelo estaba tirado en el sofá roncando.
+ Ves Luisja como bien dices, hay cosas que nunca cambian. Mira tu abuelo.. Antoniooo le pegó un grito mi abuela. Despiertate. Dijo mi abuela, mientras se iba a su habitación a quitarse la ropa y ponerse más cómoda.
Me senté en el sofá con mi abuelo, y nos pusimos a charlar. Mi abuela nos aviso que la cena ya estaba.
Cenamos y en contra de la voluntad de mi abuela, yo le ayudé a recoger. Mi abuelo se despidió y diciendo que se iba a ver la TV a la cama, nos dejó sólos.
Mi abuela y yo nos fuimos al salón a ver la tele. Pusimos una película. Fue mi abuela la que dijo.
+ Ojalá no te den el piso ese nunca, y te quedes mucho tiempo aquí. No me acuerdo cuando fue la ultima vez que vi una película con alguien. Tu abuelo todas las noche se va muy pronto a la cama.
- Bueno yaya, ahora un tiempo estaré yo.
Acabó la película y nos fuimos a la cama, yo me dormí. Me despertó el sonido de un washap era Susana, que me esperaba... Joder que pesada. Seguí durmiendo.
A la mañana siguiente, fui el primero en levantarme de la cama, fui a reparar la cafetera de Pedro. Era un válvula mal regulada 10 min me costó
Me tome un café con él, y charlamos de cotilleos del pueblo, lo conocía de toda la vida..
Volví a casa de mis abuelos, olía a café. En la cocina estaba mi abuela, desayunando sola.
- Buenos días reina, le dije mientras le daba un beso.
+ Buenos días hijo, quieres un café?
- Venga ya me he tomado dos, pero bueno.. Por cierto dónde esta el abuelo?
- Uff el abuelo hace rato, que se ha ido al huerto y luego con sus amigos hasta la tarde ya no viene, y cuando viene al sofá a dormir... En fin
+ Venga Yaya, no te enfades. Vamos a tomar el café y vamos hacer esos arreglos que tenias...
- Dejaló hijo, es domingo. Ya lo haremos.
No le hice caso al final, la convencí. Le repare dos enchufes, un grifo que fugaba una puerta que no cerraba y por último, le colgué una estantería que llevaba en casa más de tres años, me confeso mi abuela.
+ Hijo, para lo de la estantería necesitarás mi ayuda?
- No, yaya puedo solo, pues?
+ Si no te hago falta, yo me iré a misa de 11 como todos los domingos.
- Pues vete tranquila abuela, cuando vuelvas ya tendrás montada la estantería y todo recogido.
Mi abuela, se fue a dar una ducha mientras que yo montaba en el alto de la casa. La casa de mis abuelos tiene dos plantas una que se usa de vivienda y la parte de arriba, que se usa de trastero, para tender la ropa y hay un par de camas, por si cundo estamos toda la familia no cabemos en el piso de abajo.
La verdad que me pegué una buena sudada para montar la estantería, cuando estaba acabando oí a mi abuela, desde el piso de abajo que se iba. Que luego nos veíamos.
Acabé las faenas que mi abuela, me había puesto, y me fui a dar una ducha.
Tenía que ir a Zaragoza a por la ropa, para quedarme en el pueblo. Se me ocurrió esperar a mi abuela, por si quería venir a ver a mi padre, su hijo.
Así que me fui a la ducha. Me desnude y al echar la ropa a lavar volví a ver encima de toda la ropa unas bragas de mi abuela. Joder no me lo podía creer, mi abuela era muy coqueta con la ropa interior. Como una mujer de mas de 70 años, podía ser tan presumida. Las bragas eran sin tapar todo el culo, rojas y con alguna transparencia entre los encajes.
Joder no sé que me pasó, nunca lo había hecho ni cuando tenia 15 años y estaba
más salido que el pico de una plancha, llevé las bragas de mi abuela a mi nariz. Olían a mujer, a coño. Tenían la esencia de mujer. Joder mi polla, se puso a cien. Pensé en ver que ropa interior escondía mi abuela en su habitación. No lo pensé. Apagué el agua de la ducha, me puse las zapatillas, para no dejar marcas en el suelo y fui a la habitación de mis abuelos, no sin antes haber metido la llave por dentro para que si alguno volviera no podría abrir y me pillasen en mi violación de intimidad.
Entré en su habitación, y fui a su mesilla. Tenía tres cajones, en el primero había unos pañuelos de trapo, alguna bragas nuevas poco llamativas y un bote de gel lubricante de fresa. Joder con mis abuelos pensé, todavía le dan al tema...
En el segundo encontré sujetadores, me sorprendió había un montón y mirando la talla vi que mi abuela tenia una 95 copa C. Había transparentes, negros, blancos, con tirantes, sin tirantes. Pushup... joder con mi abuela. Los dejé como estaban.
En el tercero estaban las bragas, negras blancas, transparentes, de encajes normales, y hasta tenia varios tangas.. Tangas? una mujer de más de 70 años y usa tangas? no me lo podía creer. También había una pequeña caja con medias y pantis.
Mira que se pone mi abuela provocativa, y mi abuelo, un poco de lubricante y al tema...
La verdad que con la tontería tenía mi polla como una piedra. Dejé todo como estaba y volví al baño, sin dudarlo cogí las bragas rojas de mi abuela e hice lo que nunca había hecho, me hice una paja con ellas, enrolladas en mi polla.
La verdad que estaba tan cachondo que me corrí a los 4 o 5 minutos.
Tuve el máximo cuidado cuando me corrí de no manchar con mi leche las bragas de mi abuela. Las deje como estaban y me di una ducha.
Acabé y fui a quitar las llaves de la puerta, mi abuela estaba apunto de llegar.
Así fue justo había llegado a mi habitación y estaba en calzoncillos, cuando mi abuela abrió la puerta.
+ Luisja hijo, ya he vuelto éstas en casa?
- Si abuela, estoy en mi habitación.
Mi abuela, se acercó a mi habitación, mientras que yo me vestía.
- Oye yaya, yo tengo que ir a Zaragoza a por la ropa, quieres venir conmigo y comemos algo por el tubo? Así de paso ves a mis padres.
+ Vale, total aquí estaré sola todo el día, además así veo tu padre. Que mi queridisima nuera no lo deja venir, son las dos iguales de malas. Explotó mi abuela.
- Abuela, que es mi madre... Lo de mi ex pase pero lo de mi madre...
+ Hijo, lo siento pero ya sabes que las nueras no quieren mucho a las suegras, y tu madre es el caso. Yo tampoco. No entiendo porque esas dos mujeres, me quitaron lo que más quería a mi hijo y a mi nieto.
- Yaya, nadie te ha quitado nada. Yo ya estoy aquí. Además al abuelo también lo quieres.
+ Si pero al abuelo, lo encontré en la calle, vosotros dos sois de mi sangre. Y tu madre, no le gusta venir nada al pueblo..
Paré la conversación veía a mi abuela, con mucho rencor dentro. Estaba claro que tanto a mi padre como a mí, nos echaba mucho se menos. Cambié de tema.
-Abu, vamos a ver si te gusta como ha quedado la estantería. Dije mientras acaba de ponerme la zapatillas.
+ Si dijo mi abuela, saliendo delante de mi de la habitación y poniendo rumbo al desván.
Yo salí detrás de ella de la habitación. Comenzamos a subir las escaleras, mi abuela primero, yo detrás. Pero el ver el culón de mi abuela a la altura de mi cara, hizo que algo llamase mi atención.
Mi abuela, esa mañana vestía un pantalón de tipo traje de vestir de mujer negro, una blusa como de seda de flores de colores en verdes y blancos, unos zapatos abiertos de tacón relucientes de 6cm y una americana a juego del pantalón.
Lo que llamó mi atención, fue la silueta de su redondo culo en esos pantalones. Joder como le quedaban a mi abuela de bien esos pantalones, cuando mas me fijaba pude ver como la silueta de un tanga, se le dibujaba en su pantalón.
Joder con mi abuela, la verdad que no sólo tenía tangas entre su ropa interior, es que además se los ponía.
Subiendo aquellas, escaleras fue un punto de inflexión en mi vida, desde ese día empecé a sentir curiosidad por la ropa intima de mi abuela. También una pequeña excitación por ella.
Mientras que mi abuela, revisaba y colocaba en la estantería un par de cosas, la examiné de arriba a abajo, y pude ver algo que no había visto o que no había llamado mi atención en los 31 años que tengo.
Vi a una mujer madura, con algunas arrugas en la cara, con unas tetas, de un buen tamaño, no sé si caídas o no. Me imagino que caidas por la edad. Pero no recuerdo nunca de haber visto a mi abuela en bañador o en bikini. Pero lo que puede ver apenas tenía un poquito de barriga, cosas de la edad, pero tenía un buen y redondo culo. El culo lo tenía bien. Las piernas delgadas, de pelo castaño muy cuidado, tanto que todas las semanas va a la peluquería, con alguna cana, pero pocas. Joder con mi abuela el caso es que tenía 74 años, y era más presumida y elegante, que mi propia madre que tenía más de 20 años, menos.
Me sacó de mis pensamientos mi abuela.
+ Gracias hijo, lo has dejado de maravilla. Si es por el abuelo, esto se queda así 5 años más.
- Bueno es lo mínimo que puedo hacer por haberme acogido en tu casa yaya.
+ Está siempre será tu casa hijo, y espero que vengas siempre.
Tras la charla, nos montanos en el coche, como era principio de verano, estaba al rojo vivo. Esperamos que se enfriase un poco y fuimos a Zaragoza. Tomamos unos pinchos por el tubo, unas migas, unos calamares bravos...
Fui a mi casa a por la ropa.
Mi madre protestó
' Ahora te vas al pueblo, eres un caprichoso. Parece que tienes 20 años. Dijo mi madre mientras metía la ropa en mi maleta.
Al final va a tener razón, mi abuela que insoportable es mi madre....
Mi abuela estuvo, en el salón hablando con mi padre, mi madre casi ni se dirigió a hablarle. Cogí todo y nos despedimos.
Ya en el coche. Fue mi abuela la que dijo.
+ Ves tu madre casi ni me ha hablado. Entiendes lo que hemos hablado antes.
- Creo que tienes, razón además no creó que le ha hecho mucha ilusión que me vaya al pueblo..
+ No te preocupes hijo, ya se le pasará. Por cierto, gracias por llevarme a comer por ahí. Hace mas de 10 años, que no había estado en el tubo. Tu abuelo nunca me quiere traer. Ya nunca quiere salir del pueblo.
- Bueno abuela, no te preocupes para eso estoy yo..
Un flass paso por mi cabeza. Bañador, tetas, abuela, nunca.. y entonces dije.
- Yaya, cuanto hace que no vas a la playa?
+ Bueno hijo, de eso no hace tanto 3 años, antes en el pueblo ponían un autobús e íbamos y volvíamos a Salou, en el día. Pero ya no.
- Pues si quieres, y hace buen día el sábado que viene te llevo a la playa. pasamos el día allí. Qué te parece?
+ Eres un sol, dijo mi abuela dándome un beso en la mejilla. Buff que larga se me va hacer la semana...
******************
La semana paso, sin ningún sobre salto la verdad que la mayor parte del tiempo, la pase trabajando. Si que esa semana el miércoles, volví a quedar con mi amiga Susana y le di una buena ración de sexo. La verdad, que últimamente, estaba follando más que nunca.
El viernes por la tarde cuando regresaba a casa del pueblo, como todos los días volvió a mi mente mi abuela, mañana por fin iríamos a la playa y le prodría ver su cuerpo. Hacia más de 20 años que no la veía en bañador. Y cuando la veía por aquellos entonces no, levantaba la mínima pasión.
No sé muy bien porque, pero tenia mucha curiosidad por ver a mi abuela con poca ropa.
La verdad que mi abuela, gran parte por la ropa interior, que se ponía, empezó a levantar en mí cierto deseo. No sé, me parecía que si era tan coqueta con la ropa interior, seria todavía activa sexualmente. No sé muy bien, si es morbo, curiosidad o simplemente, que estoy desfogado...
Llegué a casa, mis abuelos estaban ya cenando.
- Buenas que tal? les pregunté mientras le daba un beso a cada uno en la mejilla.
* Hola Luisja que tal el día? preguntó mi abuelo.
- Bien ya ha acabado así que perfecto.
+ Hijo, al final lo de mañana, sigue en pie? Preguntó mi abuela.
- Si claro, por mi no hay problema. Si tú quieres saldremos pronto. Respondí a mi abuela.
+ Si, si claro que quiero. Estoy deseando. Por cierto Antonio, tu quieres venir?
- A dónde? preguntó mi abuelo sin ganas.
+ A pasar el día en la playa. Le replico mi abuela con sarcasmo.
- Que va, quita quita, para qué? para llenarme de arena y luego estar todo el día pegajoso. Conmigo no contéis.
+ Vale, ya lo suponía dijo mi abuela. Te dejaré la cena preparada, porque supongo que a comer no vendrás? le preguntó mi abuela a mi abuelo.
- No a comer ya sabes que ni el sábado ni el domingo. Deja la cena preparada y venir cuando queráis. Protestó mi abuelo
La verdad que yo quería mucho a mi abuelo, pero sus pensamientos de hombre chapado a la antigua no me gustaban nada. Mi abuela parecía su exclava, más que su mujer. Eso me enfadaba un poco.
Terminamos de cenar y salí a tomar una cerveza con mis amigos. Pero para mi sorpresa se iban al pueblo de al lado a tomar algo.
* No me digas que no vas a venir hoy tampoco dijo mi amigo Oscar. Hay unas chicas que deben estar calientes.
- Joder macho, protesté no voy a ir que os conozco y volvemos de día. Además mañana me voy a Salou a pasar el día con mi abuela.
* Menudo planazo, dijo en tono burlón Oscar. No me jodas me vas a comprar el follarnos a una pivitas con el ir a la playa con tu abuela de 70 años.. No me jodas Luisja.
Al final, se marcharon y yo volví a casa media hora mas tarde de lo que me fui.
Mi abuela, estaba en la cocina terminado de recoger, mi abuelo ya roncaba en la cama.
+ Que pronto has vuelto, hijo. No estaban tus amigos? Preguntó mi abuela.
- Se han ido a tomar algo al pueblo de al lado.
+ Y porque no has ido con ellos?
- Porque los conozco y nunca tienen prisa por volver. Mañana tenemos que madrugar. Quiero irme pronto para aprovechar el día.
+ Bueno hijo, ya me fastidia. Podías haber hecho planes, con tus amigos. En vez de ir con tu abuela a la playa, seguro que hasta te han vacilado. Dijo mi abuela muy segura.
- Bueno ya sabes, tonterías.
Fui al baño a echar una meada para irme a la cama, la verdad que el calor me agota. Cuando fui a mi habitación por el pasillo, vi que la luz de mi habitación estaba encendida.
Que raro, no recuerdo haber entrado esta noche. Pero cuando llegué me sorprendí. No me había dejado la luz, era mi abuela subida en una escalera, buscando algo en lo alto del armario de mi habitación.
- Abuela, que haces ahí? bajaté ahora mismo, te puedes caer y más con la escalera puesta de esa manera.
+ Que no pasa nada hijo, que no me caigo. Estoy buscando un bolso que tengo para ir a la playa. Lo guardé en este armario pero ahora no lo veo.
- Baja yo lo busco. Le ordené. Dejame a mi.
+ Que no pasa nada tranquilo, me he subido así mil veces y nunca me he caído. Si es caso agarra la escalera por si acaso y vale.
Hice caso a mi abuela, estaba claro que no me iba a dejar a mi buscar el maldito bolso. Por lo que fui y agarré la escalera.
Una vez que tenía la escalera agarrada por los lados, miré a ver que hacia mi abuela, pero no pude ver que hacia, sólo pude ver, sus bragas negras, el vestido que llevaba para andar por casa, dejo ante mi todos los secretos de mi abuela. Joder aparté la vista. Pero mi polla dijo lo contrario y comenzó a despertarse. Volví a mirar, un demonio me decía mira mira, un angelito me decía no mires es tu abuela, no mires esta mal.
Pero como otras tantas veces que me hablaban mi ángel y mi demonio, hice caso al demonio, y volví a mirar.
Pude reconocer las bragas de mi abuela. Eran las que tenían un trozo de tela blanco delante, lo pude ver el trozo de tela. También pude ver la carne de su culo en la transparencia de los encajes. La verdad que estaba disfrutando hasta que oí.
+ Aquí esta lo encontré. Dijo mi abuela. Y baje raudo mi mirada al suelo.
Mi abuela, ordenó el armario y cerró la puerta, bajo de la escalera.
+ Muchas gracias. Ya está. Voy a preparar la toalla, el bikini y todo para mañana. Diciéndome esto y dándome un casto beso de buenas noches, salió de mi habitación.
Joder estaba empalmado. Joder que puto guarro. Soy un pervertido. Mi abuela una mujer de 74 años, ha puesto mi polla como la piedra de mármol. Creo que estoy más salido que cuando tenía 15 años. Con 15 años, nunca me empalme con mi abuela... Y eso que entonces me la ponían duras todas las mujeres.
Me metí en la cama, pero mi polla, no se bajaba. Vino a mi mente la palabra bikini bikini. Joder mi abuela no ha dicho bañador ha dicho bikini.
Buff, creo que está mal lo que voy hacer, pero me voy hacer una buena paja. Mi intención al igual que cuando me hice la paja con las bragas de mi abuela, era pensar en otra mujer que no fuese mi abuela. Pero por más que me imaginaba otra cosa a mi mente, siempre aparecía la imagen de las bragas negras de mi abuela, su transparencia de culo entre los encajes y la tela blanca pegada a su coño.
La piel de mi polla, subía y bajaba sin sacar de mi mente, la imagen de mi abuela.
La verdad que me estaba dando un buen gusto la paja tanto, que tuve que aumentar el ritmo todo lo que pude, hasta que 2 minutos más tarde me corrí como un loco.
Más tranquilo, después de la paja pensé. Si el miércoles folle, no entiendo como me ha podido poner cachondo mi abuela..
Pero me quede dormido al instante.
Me desperté sobre las 7 :15 de la mañana. Nada más abrir la puerta de mi habitación, comprobé que mi abuela se moría de ganas de ir a la playa. Joder ya olía a café.
Fui a la cocina y no sólo había hecho café, además ya estaba preparada para marcharnos. Tenia puesto un vestido veraniego hasta la rodilla con un escote. Me tomé rápido el café, y fui a por un bañador una toalla y ropa de cambio.
Antes de las 8am ya estábamos en la carretera. Nos habíamos ido antes de que se levantase mi abuelo. Nada más salir del pueblo nos cruzamos con el coche de mis amigos que volvían del pueblo de al lado. Lo sabia vuelven a las 8 bien de día.
- Ves abuela, ahora viene mis amigos. Les llevo toda la noche de ventaja durmiendo.
Le dije orgulloso.
+ Bueno hijo, pero la vida es para disfrutarla un poco, que luego te haces viejo y te arrepientes de no haber echo muchas cosas..
- Bueno creo que tiene que haber tiempo para todo abuela. Para trabajar, disfrutar, divertirte e incluso para pasarlo en familia.
+ Eso esperó hijo, que sigas teniendo tiempo para la familia. Porque creo que rápido te quiere cazar la Susana esa... El miércoles otra vez.... dijo mi abuela con rabia.
- Joder abuela, pareces de la CIA. Te enteras de todo. Madre mía no pude hacer nada uno sin que se entere todo el pueblo.
+ Hijo, entiendeme, por nada del mundo quiero que te vuelvan a apartar de mi otra vez otra mujer. Ya me ha pasaron con tu padre y una vez contigo. No quiero que contigo me pase dos. Daría lo que fuese para no volver a perderte.
- Tranquila abuela, eso no pasará. Te lo prometo.
Mi abuela, estaba obsesionada con que me volvieran a separar de ella. Verás cuando en octubre me tenga me marchar a mi casa, pensé.
Continuamos el viaje, y por fin llegamos a Salou. Fuimos a la playa que está entre Salou y Cambrils. Cogimos los trastos y buscamos el sitio que más nos gustó. Eran las 10'15 por lo que había sitio donde quisiéramos. Pusimos la sombrilla y las dos sillas, las toallas para coger un poco más de sitio. Yo empecé a buscar un sitio donde ponerme el bañador.
+ Qué te pasa hijo, pregunto mi abuela. Qué buscas?
- Joder pues busco un sitio donde ponerme el bañador. No lo traigo puesto.
Dije mirando a todos los lados.
+ No pasa nada hijo, ahí hay una duchas cerradas, por un Euro entras y te cambias. Yo tampoco traje el bikini puesto. Ahora vamos. Dijo mi abuela terminado de colocar todo.
Busqué en mis bolsillos y en mi cartera pero monedas de un € solo tenía 1.
- Abu, si va con 1€, ya puedes mirar si tienes tú alguno, yo sólo tengo uno. Le dije.
Mi abuela miro su cartera, pero no tenía ninguna moneda de €.
+ Pues no tengo ninguna. Dijo mi abuela. Cerrando la cartera.
- Bueno pues pasaré al supermercado de enfrente a por cambio. Le dije a mi abuela.
+ Pero no has dicho, que tenias una? preguntó mi abuela
- Si, pero eso sólo una. No entendía a mi abuela. Claro pero tú has dicho que tampoco lo traes puesto el bañador no?
Entonces, nos hace falta una para ti y una para mi..
+ Anda hijo, con una nos vale. Entramos los dos a la vez y nos cambiamos que cabemos de sobra.
No le quise preguntar más a mi abuela. Ella había estado más veces. Pensé que habría dos zonas una de ducha y otra de cambio de ropa.
Pero tras acercarnos ala caseta esa de hierro, echar el € por la rendija, abrirse la puerta y entrar dentro, me di cuenta que sólo había una estancia de ducha amplia pero una.
Mire a todos los sitios como buscando algo para no ver a mi abuela desnuda, pero no veía nada.
+ Qué buscas hijo, te veo inquieto. me preguntó mi abuela dejando el bolso en un banco que allí había.
- Es que abuela, aquí...
+ Aquí qué? hijo, no creo que te cree un trauma el ver a tu abuela desnudas no? Si te da vergüenza, que yo te vea espera que me cambié yo salgo y luego te cambias tú sólo.. Dijo mi abuela dando la opción, mientras se quitaba las sandalias.
- Que vergüenza abuela, yo lo decía por ti. Por si te sientes incomoda.
+ Hijo, por mi? que tengo 74 años, ya no me vas a ver algo que no hallas visto. Más caído y arrugado, pero todas las mujeres somos iguales. Tampoco creo que tú tengas algo que no halla visto. Dijo mi abuela, sin cortarse y sacándose el vestido por la cabeza y quedándose en ropa interior.
Joder no sé que me pasó, pero me quedé inmóvil viendo a mi abuela, joder con mi abuela a sus 74 años, me llevaba un conjunto de sujetador blanco, que dejaba transparencias, y unas bragas blancas a juego, que dejaban ver algo de su culo.
Me salió sin pensar.
- Abu, que ropa interior más, bonita llevas. Me has dejado sorprendido. Dije sin dejar de mirarla. Joder ni mi mujer 35 años mas joven que tú, cuidaba tanto el tema de su intimidad. Pero al instante, empecé a arrepentirme de lo que le dije. Joder eres tonto Luisja, como le dices a tu abuela, que lleva una bragas bonitas. La que has liado. Se enfadará y dirá que eres un guarro y un pervertido. Pensé. Pero mi abuela lejos de enfadarse contesto.
+ Te gusta? siempre he llevado ropa intima así. Sabes hace mas de 20 años que uso tangas, cuando se pusieron de moda. No sé antes me gustaba ser coqueta, y a tu abuelo también. Y ahora ya no quiero ponerme otra. Me niego a ponerme bragas blancas de algodón hasta la cintura. Esas me las pondré el día que me haga pis encima... dijo mi abuela muy convencida soltando su sujetador
Yo no podía dejar de mirarla, pero la estaba de espaldas a mi. Se bajó las bragas bajo mi atenta mirada. Yo comencé a quitarme la camiseta y el pantalón me quedé en calzoncillos. No podía ver el coño ni las tetas de mi abuela, sólo me enseñaba el culo. La verdad que tenía algo de celulitis y alguna arruga, pero todavía lo tenía redondo. No era muy grande. Levantó su pierna y metió la braga blanca del bikini, luego la otra. Yo me bajé los calzoncillos y me puse el bañador, me gustaba el ver a mi abuela así, y a mi polla también.
Joder se me puso dura, ostia ahora vera mi abuela, que me he empalmado al verla desnuda. Puse mi mochila tapando mi polla, para que no me vería mi abuela.
Empecé a pensar en la tabla periódica química para que de mi mente, se fuera la imagen de mi abuela desnuda...
+ Venga yo ya estoy, y tú? preguntó mi abuela.
- Si yo también, vamos a darnos un baño.
Salimos a la toalla, y nos dimos una baño, mi abuela dijo que estaba fría y se salio. Me quedé observando como se movía su culo bajo, la braga blanca del bikini, joder pues que no esta nada mal mi abuela para los años que tiene.
Me fijé como paseaba la gente por la orilla, unas en top les, otras con bañador...
Empecé a fijarme en las mujeres que mas o menos tenían la edad de mi abuela, y no vi a ninguna, que se pareciera a ellas. Todas tenía mas arrugas, estaban más gordas...
Tomamos, el sol y comimos, en un chiringuito que estaba al lado. No quitamos ni las toallas. Después de comer mientras que mi abuela, tomaba el sol yo me eche una siesta bajo la sombrilla.
Hablamos de cosas, de la vida, dimos paseos. Tomanos el sol nos bañamos... La verdad que fue un día muy ameno. Estuvimos en la playa hasta última hora. Fuimos los últimos en recoger.
+ Bueno ahora vamos a darnos una ducha, y cenamos algo aquí o quieres volver a casa preguntó mi abuela.
- Buena idea abu, podemos cenar aquí e incluso tomar algo en una terraza. Mañana es domingo no tenemos prisa.
Recogimos la sombrilla y las sillas y las lleve al coche. Fuimos a darnos una ducha a donde nos habíamos cambiado por la mañana.
Cuando llegamos a la cabina, saqué una moneda,
- Tú primero abuela, luego entro yo.
+ Vale, dijo mi abuela.
Pero cuando metimos la moneda nos la expulso no la cogía. Cambiamos de moneda y se la tragó, la puerta no se abría.
- No sé que le pasa, esto no funciona...proteste.
+ Ya veo yo, que vamos a tener que volver a casa sin duchar, dijo mi abuela derrotada.
- Espera abu, vamos a volver a probar.
Volvimos a meter otra moneda y nada con un golpe en el monedero la puerta se abrió.
- Buala le dije a mi abuela, haciendo con un gesto que entrase.
+ Hijo, no me fió mucho de esta maquina, porque no entras conmigo, Igual no se vuelve a abrir y tú no te puedes duchar. O lo que es peor que entre y no se abra la puerta y no pueda salir.... Dijo mi abuela con mucho miedo.
- No sé, dude por un momento, le dije mirando a mi abuela a la cara.
+ Buf hijo, no sé que son esas vergüenzas que tienes no las entiendo. Soy tu abuela, no una extraña. Recuerda que te he visto desnudo mil veces, si hasta te he bañado.
- Vergüenza abuela , lo decía porque estés incómoda..
+ Hijo, a mi edad, pierdes la vergüenza y todo...
Y diciendo esto, nos metimos los dos en la ducha portátil, hacia un poco de calor y no había mucha luz, pero bueno.
Mi abuela, se desnudo la primera, metió su bikini en una bolsa, y me dijo.
+ Mete luego el tuyo aquí, mañana los lavaré para quitar bien la arena.
Y diciendo esto se metió a la ducha. Pasó por mi lado y pude ver por primera vez el cuerpo desnudo de mi abuela.
No se veía mucho, pero vi sus tetas un poco caídas, pero todavía eran redondas, tenía un poco, de tripita pero es normal a esa edad, tenía el cuerpo con arrugas, pero no tenia la piel caída como alguna de las mujeres que había visto en la playa. Sus piernas todavía estaban firmes. Sus aureolas grandes y con unos pezones redonditos. El coño, tenía pelos, arreglados, pero algo de bello, se veía. No puede saber cuanto.
Comenzó a ducharse mientras yo me quitaba el bañador y lo metía en la bolsa que me dijo, mi abuela.
Me puse a pensar otra vez en la tabla periódica de los elementos químicos, no me quería empalmar y que me viera no abuela, ahora no podía esconderme.
Litio, sodio, potasio...
+ Ya estoy hijo, venga cambiamos de sito. Dijo mi abuela, rodeándose con una toalla.
Cambiamos de sitio y yo pasé a la ducha. Fue mi abuela, la que al pasar por mi lado dijo,
+ Pues si que has cambiado, la última vez que te vi desnudo no tenías eso, dijo mi abuela refiriéndose a mi polla.
-Abuela, le regañe.
+ Qué pasa hijo? era una broma. Tú y tus atributos, han crecido mientras que los mios se han caído y se han puesto más feos y arrugados. Dijo mi abuela secándose con la toalla.
- Abu, no digas tonterías, que más quisieran muchas de la he hemos visto hoy en la playa, estar la mitad del buen ver que estas tú. Estas perfecta para tú edad. El otro día cuando estabas con tus amigas tu eres la que más destacas para bien. Le dije a mi abuela, mientras me aclaraba el jabón en la ducha.
+ Hijo, no me compares, yo seré vieja por los años que tengo, pero de mente y de mi forma de ser y vestir siguen igual a lo largo de los años..
- Ya te digo yaya, Me gusta esa aptitud.
No pude ver que ropa interior se ponía mi abuela, dentro se veía poco y me alegre porque sino mi abuela, hubiera visto mi polla morcillona, por su culpa.
Salimos de allí y nos fuimos a cenar ni mi abuela ni yo no teníamos la más mínima prisa.
Después de cenar nos tomamos un café en una terraza la noche era espectacular.
Ya sobre las 0:30 decidimos ir camino a casa.
Nada más montarnos en el coche y comenzar el viaje, sonó mi teléfono y a los dos tonos, se descolgó.
+ Si acerté a decir,
" Hola Luisja soy Susana. Hoy no vas a venir a verme?.
- Pues no puedo, estoy volviendo en el coche, de Salou con mi abuela. Lo siento.
" Ah vale pues ya hablaremos y colgó.
+ Hija de puta, buscona, dijo mi abuela enfadada.
- joder abuela que cariño le tienes, parece que tienes celos de ella.
+ Celos no, hijo. Bueno sí. Bueno no lo sé.
-Abu, soy un hombre soltero y tengo que darle alegrías al cuerpo. Que todavía soy joven.
+ Haría lo que fuera, para que no te caza se esa lagarta. Dijo mi abuela muy convencida.
- Tranquila abuela, que no me separa nada, ni nadie de ti.
+ Eso espero. Dijo triste mi abuela.
- Oye abu, y el abuelo siempre hace la misma vida? No se preocupa por ti.
+ Hijo, te voy a decir una cosa que no sabe nadie, y que espero que siga sin saber nadie. vale?
- Si claro abu, seré una tumba pero que pasa?
+ Pues que el abuelo, no ha superado que ya no...dejo un silencio.
- Qué ya no qué? le pregunte a mi abuela.
+ Ay hijo no te hagas el tonto, que ya eres mayorcito.
- Ah que no se le levante, quieres decir
+ Si hijo, no lo ha superado. La verdad que hasta los 70 ha funcionado bien, pero lleva 5 años que nada de nada no hay forma. Y yo todavía quiero guerra pero nada el abuelo no me la da. Entonces me ve ponerme guapa, arreglarme, sigo llevando la misma ropa interior que antes tanto le gustaba y tan cachondo le ponía. Y ve que no puede darme placer y no lo supera. Por eso casi no pasa tiempo conmigo.
- Y tomar una viagra? Le pregunté intentando dar soluciones.
+ No hijo, ya sabes que esta fastidiado del corazón, y si toma le puede dar un infarto.
- Pues, es una puntada la verdad. Le dije triste a mi abuela.
Siempre hemos tenido muy buena relación, mi abuela y yo. También hemos tenido mucha confianza, pero nunca me había contado los secretos que su alcoba guardaba. La conversación me estaba poniendo cachondo, por lo que seguí hasta ver donde me contaría mi abuela.
- Y abu, a ti aún te?.. Ya sabes... Le dije cortado.
+ Qué si tengo ganas de tener sexo? a eso te refieres, me preguntó mi abuela sin tapujos.
- Si, yaya.
+ Pues si hijo, no es como cuando tenía 30 años, pero si que me sigue apeteciendo tener sexo. Y más días como hoy que veo a los hombres jóvenes y guapos, con esos cuerpos y....... Dijo mi abuela suspirando.
-Y nunca le has sido infiel al abuelo?
+ Nunca hijo, eso nunca lo he hecho. Cuando veo algún hombre guapo, joven pienso mil cosas, pero sólo eso pensar. Actuar nada. Dijo mi abuela muy convencida.
Osea que mi abuela a sus 74 años, le picaba tanto el coño, como a mi la polla a mis años.
- Bueno, y cuando te apetece abu, que haces? Ya sabes si te pones caliente.
+ Pues si me pongo caliente, y tu abuelo esta en casa nada, si no está pues ya sabes....
Joder mi abuela, se masturba. Eso me mató, hizo que la atracción que sentía hacia ella, se multiplicara por mil. Joder mi polla, se puso a reventar. Lo tenía claro iba a seducir a mi abuela, e intentar llevarmela al huerto.
Dejamos el tema del sexo, no podía estar todo el viaje cachondo y volvimos a hablar de cosas de casa y del pueblo. Por fin llegamos a casa. Eran ya las 4 am.
******************
Entramos en la casa, y nada más hacerlo, pudimos oír como mi abuelo, estaba profundamente dormido. Roncaba como un oso.
+ Ves, ahora si yo quisiera darle una alegría al cuerpo, con este hombre así dormido que hago? Me tengo que quedar con las ganas... Protestó mi abuela, ya en la cocina.
- Sí la verdad, pero te digo una cosa, mira que quiero al abuelo, pero creo que no te trata como debería, pareces su esclava, así que si el cuerpo te lo pide. Daté un revolcón con alguien. No se tiene porque enterar nadie.
+ No sé hijo, no me parece bien. Ya sabes que nosotros somos de otros tiempos, y que nuestra educación ha sido diferente a la vuestra. No lo termino de ver.. Dijo mi abuela.
- Piensalo abu, por lo menos una alegría.
+ Y como lo hago hijo, aquí en el pueblo no se pueden tener secretos, mira como se ha enterado todo el pueblo que te has tirado dos veces a Susana... Fíjate que me tiró a alguien y se entera todo el pueblo. A mi edad... Las cosas negativas del asunto, superan a las positivas.... Dijo mi abuela.
- Bueno, ya hablaremos otro rato, ahora vamos a la cama, que ya es tarde. Dije a mi abuela, dándole un beso en la mejilla.
Fui a mi habitación, estaba cachondo, no quise, seguir atosigando más a mi abuela, además mi abuelo estaba en casa dormido, pero estaba y se podía despertar en cualquier momento. Pensé que tenía que intentar poner cachonda a mi abuela y entonces atacar.
Dormí muy mal esa noche, me moría de ganas, por seguir con mi plan, por lo excitado que estaba no pude pegar ojo.
Escuché como se levantaba mi abuelo, desayunaba y se iba de casa. Mi abuela seguía en la cama.
Fui a la cocina en calzoncillos, quería que mi abuela, me empezará a ver como un objeto sexual no como su nieto. Preparé café y tostadas, empecé a oír movimiento en su habitación.
Corrí al único baño, de la casa, como tiene ventana no había que encender la luz, me desnude, y comencé a tocarme la polla para que estuviera medio morcillona, medio dura.
Me metí en la ducha, pero no abrí el grifo, si mi abuela escuchaba el agua, no entraría.
Oí, que habría la puerta de su habitación y que sus pasos se acercaban, entonces abrí el agua.
Mi abuela, entró en el baño, y me vio completamente desnudo.
+ Huff lo siento, hijo no sabia que estabas, duchandote. Dijo mi abuela, mientras salia del baño.
- Abu, pasa no pasa nada, luego me dices que el vergonzoso soy yo, dije riendo, sin dejar de tocarme la polla.
+ Vergüenza a mi edad. Dijo mi abuela.
Entró en baño, y se sentó en la taza. Justo me veía a mi y a mi polla, yo no la miré a ella. Pero se que ella me estaba mirando la polla. Acabó y se fue a la cocina.
- Has desayunado me preguntó.
+ No te estaba esperando. Estaba haciendo tiempo. Le dije mientras que jabonaba mi cuerpo.
- En la cocina te espero. Dijo mi abuela saliendo del baño.
La cosa funcionaba, pero quería más. Me Sequé y rodeándome una toalla, a la cintura, sin que quedase muy agarrada, me fui hacia la cocina.
Lo que quería es que se me cayese la toalla y quedarme desnudo delante de mí abuela.
Con la escusa de preguntarle por un pantalón entre así en la cocina.
-Oye, abu mi pantalón corto azul lo has visto? quería ponermelo hoy. Pude sentir como la toalla, aflojaba su presión en mi cintura y caía al suelo, esta vez ya tenía la polla, medio dura sólo del morbo.
+ Si está muy grande dijo mi abuela. joder está en tu habitación, dijo rectificando las palabras. Estaba claro que mi abuela se había confundido al hablar. Le había pasado una mala pasada su subconsciente...
Me hice un poco el tonto.
- Pero abu, ese pantalón no me esta grande, le dije mientras, que cogía la toalla del suelo.
+ Olvidalo hijo, no sabía lo que decía.
Estaba claro mi abuela, se había fijado en mi polla. Así que fui a mi habitación y volví en calzoncillos.
Cuando mi abuela, me voy entrar así en la cocina me dijo,
+ Hijo, porque no te vistes?
- No sé abu, como tenemos confianza y no está el abuelo, pues he salido así. En mi casa siempre estoy en calzoncillos.
+ Es que no sé Luisja, Es como si yo iría en bragas y sujetador todo el día por la casa. Protestó mi abuela. Qué te parecería?
- Por mi perfecto, abu no te cortes, si tú vas a estar mas cómoda, ni lo pieses. Dije mientras ponía mermelada a la tostada.
+ Creó que no has comprendido la indirecta, hijo recuerda lo que hablamos anoche en el viaje.
De sobra sabia por donde iba mi abuela, y sabía que se estaba poniendo nerviosa al verme así y eso me gustaba. La estaba llevando a mi terreno. Supe que todo mi plan estaba funcionando, cuando a la leche le puso la mermelada y a la tostada la azúcar.
- A lo que me lié con Susana? te refiere abuela.
+ No hijo, no a lo otro. Joder no sé ni que hago he puesto la mermelada al café.. Mira me voy a misa y a confesarme, no está bien, lo que estoy pensando. Dijo mi abuela, saliendo de la cocina y dirigiéndose a su habitación.
Joder con mi abuela, creo que estaba cachonda y había pensado algo obsceno conmigo. Eso me gustaba. No la presione más, de echo ella fue a la ducha y yo a mi habitación. Cuando se preparó y se iba a ir, oí los tacones que se acercaban a mi habitación. Entonces empecé a gemir como si me estuviera haciendo una paja.
+ Ahh ahhh ahh siii sii. Dije mientras hacia mi cama.
Sé que mi abuela, me escuchó y se imaginó lo que yo quería, aunque en realidad no era. Se dio la vuelta antes de llagar a mi habitación. Ya en la puerta chilló.
-Luisja me voy a misa. Luego vuelvo.
No le conteste. Mi plan creó que funcionaba.
Me fui de casa, quedé con unos amigos y nos fuimos a Zaragoza a pasar el día le avisé a mi abuela, que no iba a comer. Quería dejarle su espacio y no agobiarle. Además así, se podía hacer una buena paja y relajarse..
Llegué cuando mis abuelos, ya estaban cenando. Yo actué con normalidad. Les di un beso a los dos y me puse a cenar, pero mi abuela la veía nerviosa, no me miraba a la cara. Se le caían los cubiertos...
Cenamos y me fui a la cama, quería evitar estar a solas con mi abuela. Lunes y martes volví tarde a casa, quería asegurarme de que mi abuelo ya estaría en casa.
Pero el miércoles, había poco trabajo y a la hora de comer, ya estaba en casa de mis abuelos, Esperé a que mi abuelo, saliera de casa para entrar y estar a solas con mi abuela.
Entre y fui hacia la cocina, que es donde estaba mi abuela,
- Hola abu, ya estoy aquí hoy he terminando pronto. Tienes algo de comer para mí?
+ Si claro hijo, sientate ahora te pongo algo. Dijo mi abuela abriendo el frigorífico.
- Yaya, qué tal va la semana? casi no nos hemos visto.
+ Bien, hijo sin casi novedad. Contentó.
- Sabes abu, un cliente de Peñíscola, le ha regalado a mi jefe, un fin de semana en su hotel, pero no puede ir, así que me lo ha regalado para que me valla yo. Le mentí a mi abuela.
+ Ah, pues que suerte hijo, me alegro mucho. Así lo pasas bien.
- Había pensado que como el sábado pasado lo pasamos tan bien en la playa, podíamos volver este finde los dos.
Mi abuela no contestó, se hizo el silencio. Pero al final respondió.
+ Lo siento hijo, si que lo pasamos muy bien el sábado pasado, pero no creo que sea buena idea. Además no quiero dejar sólo a tu abuelo todo el fin de semana. Vete con algún amigo.
Tenía una opción, que sabía que a mi abuela no le iba a gustar nada y que haría que cambiase de opinión y se la hice saber.
- No pasa nada abu, le diré a Susana.
+ No, a esa no. No le digas nada, prefiero ir yo. Respondió mi abuela como un rayo.
- Vale, entonces Vienes? Debe de ser un hotel precioso sólo para adultos, sin niños, que molesten. Bueno un lujo para parejas.. Le dije a ver que decía mi abuela.
+ Para para para parejas, respondió medio tartamudeando. Se volvió a poner nerviosa.
Dejamos ahí el tema, por el momento yo tenía claro que si o si, me la tenia que tirar ese fin de semana. Después de comer me fui a dormir un poco al salón.
Cuando me desperté de la siesta, me levanté empalmado perdido, lo primero que hice fue buscar a mi abuela, para ver si la ponía un poco cachonda, me quité el pantalón y la camiseta. Entonces la llamé.
+ Abu. Éstas en casa?
- Si hijo estoy en el alto. Chillo mi abuela desde allí.
Cuando subí mi abuela, estaba sudando a chorro.
- Pero abu, que haces aquí con el calor que hace? Y con tanta ropa? Te va a dar un soponcio de calor.
+ Tenia que dejar esto ordenado. Estaba manga por hombro. Por cierto hijo, creo que quedó claro el otro día lo de ir medio desnudo por la casa.
- Al final, no quedó claro. Dijiste que te ibas a confesar, por unos pensamientos. Y creo que tú tenias que hacer como yo, y por lo menos el rato que estés aquí quitarte la ropa, estas empapada. Dije a mi abuela mirando su camiseta mojada.
+ Hijo, por favor. Parece que más que para que no tenga calor, lo que quieres es verme medio desnuda. Ya no sé que pensar.
- Bueno, ya nos hemos visto varias veces desnudos, bueno tú me has visto mas que yo a ti, pero bueno... Lo que creo que dices que eres muy moderna, y que no tienes vergüenza, pero creo que eres lo contrario. Piqué a mi abuela a ver si entraba en mi juego.
+ Que soy vergonzosa? Ahora veras dijo mi abuela. Y quitándose la camiseta mojada, y el pantalón corto vaquero que llevaba se quedo en un conjunto de braga negra de licra y un sujetador a juego, que alzaba sus pechos.
- Jolin abu, pues me he equivocado, al final veo que era mas moderna de lo que pensaba.
+ Te sorprenderías, si me conocieses bien. Dijo mirándome a mi paquete.
- Bueno, si tan moderna eras, porque te has asustado antes cuando te he dicho, que el hotel era sólo para parejas? Le pregunté a mi abuela.
+ Porque me estas empezando a asustar Luisja, el domingo después de exibirte medio desnudo delante de mí, te fuiste a tu habitación a hacerte una paja. Ya no sé que pensar...
Mi plan había funcionado se pensaba que estaba, masturbandome...
- Bueno, soy un hombre muy fogoso y necesito, sexo abu. Si no lo consigo de una manera lo hago de otra...
+ Yo también, tengo mis necesidades y no me hago pajas a cualquier hora en casa..
- Seguro que el domingo despues de misa, te hiciste una buena paja. Estabas sola en casa y aprovechaste a que si? Le pregunté a discreción a mi abuela.
+ Luis Javier. Eso son cosas mías, pero tu que te has creído, Eres un guarro. Seguro que serías capaz de tener pensamientos obscenos conmigo. Soltó mi abuela cogiendo su ropa.
Había llegado a un punto de no retorno. Tenía que echarle morro a la cosa yo creó que a mi abuela, también le picaba la curiosidad de echar un polvo conmigo.
- Pues si abuela, la verdad que he tenido pensamientos obscenos contigo, de echo esta tarde al levantarme de la siesta he pensado en ti y mira como tengo a mi amiga... Le dije a mi abuela cogiendo mi polla sobre el calzoncillo.
+ Me voy cerdo, guarro y diciendo esto mi abuela y con la ropa en la mano, bajo al piso de abajo.
Creo que se estaba haciendo la estrecha pero le picaba tanto o más que a mí.
Bajé tras darle un rato. Cuando baje mi abuela ya estaba otra vez vestida se habia puesto una bata de verano de andar por casa. Pero cuando iba a volver a atacar, mi abuelo entró por la puerta.
Por lo que no pude presionar un poco más a mi abuela.
Reserve una habitacion con una sola cama grande, y con una ducha muy grande. Estaba claro que me tenia que follar a mi abuela si o si.
El jueves pasó rápido, y por la noche, cuando llegué a casa, mis abuelos ya habían cenado.
Mi abuela estaba en la cocina y mi abuelo en el salón viendo la tele.
Mi abuela intentaba evitarme, pero no le deje.
- Abu, última llamada, vienes a pasar el finde de semana conmigo o me voy con Susana?
+ Hijo, me das miedo, no sé hasta donde eres capaz de llegar. Creo que....
Dijo mi abuela en voz baja para que no nos escuchara mi abuelo, desde el salón.
- Cree lo que quieras abuela, pero si mañana cuando vuelva de trabajar a las 15h no estas preparará me voy con Susana. Asi que tú decides.. Le dije a mi abuela.
No Cené y me fui a la cama.