Ese verano me invito mi nueva polola a pasar unos días en su casa de verano, en plena temporada. Como la quería impresionar partí en el Range Rover de mi viejo, que estaba fuera del país, con mi windsurf incluido. Iba equipado. Mi novia es una bella trigueña, esplendida en sus 22 años. Esta de comérsela.
Al llegar conozco a la suegra y me quita el aliento, es una bellísima hembra rubia, viuda hace un par de años, el pelo castaño de mi novia es del Papa, el Gerente General de la empresa que se monto a su bella secretaría. Ahora debe tener unos 45 pero es la cosa más exquisita que he visto en mucho tiempo, con un cuerpo ya dorado después de 1 mes de playa. Es altiva y desdeñosa, como tiene toda la plata del difunto marido toda la familia le rinde pleitesía, están en la casa 2 parejas mas de familiares con niños. Afortunadamente con mi llegada bien equipada me salvo y paso el primer examen. El resto del día trato de amigarme con mi suegrita.
La primera noche comienzo a destacarme, la suegra es fanática del bridge, afortunadamente para mí, en mi familia también se juega. Me propongo de compañero de mi suegra, todos me miran con compasión y con cara de agradecimiento, tal parece que no perdona los errores.
Es mi noche, todo me sale, con la suegra arrasamos, somos amigos, cómplices, les estamos dando paliza, al final le tomo la mano en forma muy galante, se la beso y le dijo que es la mejor compañera de bridge que he tenido. Esta en la dicha. Todos aprueban. Después seguimos conversando la noche y tomando distintos tragos, por supuesto yo sentado al lado de la suegra, ella me toca la mano, me pide que le pase cosas y yo aprovecho de mirarle las piernas que dejan ver su bello vestido de verano, como les dije esta totalmente tostada, sabe que le veo las piernas pero no se queja es mi premio para su afortunado compañero de bridge.
Al otro día, en la mañana vamos todos a jugar tenis, juego desde los 9 años, así que se algunos trucos. Por supuesto hago dobles con mi suegra, ella como siempre juega a ganar y es mala perdedora. Esta preciosísima, con su faldita corta mostrando los muslos dorados contra el blanco, zapatillas de tenis blancas y una polera que deja ver sus bellos y maduros pechos. Con mi primer saque le queda claro que puede contar conmigo. Nuevamente, le damos paliza a las otras parejas, ahora me gano un beso en la mejilla. Yo aprovecho de acariciarle el hombro, que solo tiene un tirante de su polera. Ella sabe que no deje de mirarle las piernas durante todo el partido.
En la tarde vamos a la playa, así que puedo saborearme con los bellos cuerpos de mi novia y de mi suegra en traje de baño, por supuesto tengo un par de erecciones que tengo que ocultar en la playa.
Otro día vamos a navegar, mi papa me salva nuevamente, es un fanático y yo tengo el carnet de patrón de yate. Vamos a salir en el yate del difunto suegro, no lo han movido en mucho tiempo, faltan marineros expertos, cuento con la entusiasta colaboración de uno de los papas de los niños que quiere aprender todo lo que pueda, aunque sabe que jamás tendrá el dinero para comprarse uno. La suegra trata desde el primer momento de ser ella la capitana, pero ahí aprovecho la oportunidad y la mando a guardar, el capitan es uno sólo y soy yo. Se queda callada y me comienza a obedecer mis ordenes de capitan como todos, ya la tendré de sumisa mientras me la chupa de rodillas. Obviamente, no hago locuras con una tripulación tan novata, hacemos unas pocas mangas a vela, el resto es a motor. Todos van en traje de baño, así que sigo mirando a la suegra que saca un traje negro de miedo. Salimos varios días y la suegra me sigue mostrando sus trajes de baño y pareos, sin duda ha visto mis erecciones.
Para la noche de sábado, la suegra quiere seguir jugando brigde, pero las otras parejas ya saben el resultado así que se propone salir a bailar al club-discoteca de moda esa temporada. La suegra no quiere ir y se hace de rogar, ella se queda con los niños, pero mi polola en el auto me dice que quiere que su mama se divierta un poco y que yo la convenza de ir. Así que regreso, pregunto a una de las empleadas donde esta y me dice que esta en la cocina, entro y veo un paisaje que no me lo esperaba, mi suegra esta con una bata corta, agachada recogiendo algo y dejando ver su bello trasero enfundado en un bello, transparente y diminuto calzón de seda. Las labias se le marcaban claramente. La llamo por su nombre, se da vuelta y se cubre con su bata mientras me sonríe con cara de picara, por supuesto yo tengo otra erección, los jeans me salvan un poco. Me acerco y le tomo la mano, le pido que nos acompañe, que no me puede dejar sólo siendo mi compañera. Se hace la niña consentida, le sigo el juego y logro convencerla que voy a bailar sólo con ella. Parte a vestirse. Es verano y no se tarda mucho, hace mucho calor en la noche así que no hay que ponerse mucha ropa. Vuelve con unas sandalias a la moda, minifalda y una blusa blanca de seda, no pensaba ir pero tenía toda la tenida.
Llegando, tomamos unos tragos y le explico a mi novia que tengo que bailar con la suegra, ella queda encantada, todo por su madre. Le prometo que nos vamos a turnar. Así que parto a bailar con la suegra, es una gran discoteca con varios ambientes y obviamente muchos lugares oscuros para las parejas. Ahora si que le tomo la mano a la suegra, en algunos bailes la tomo de la cintura, hasta que la llevo a la zona lenta. Sólo lentos. Comenzamos tímidamente, apartados guardando las proporciones, pero poco a poco la música nos lleva a apretarnos, llega a tener su cabeza en mi pecho, a esa altura ya le acaricio la espalda suavemente. Ahora viene el quiebre, llego hasta el borde inferior, donde comienza la minifalda, le levanto la blusa y le meto la mano mientras le acaricio la espalda suavemente, se deja hacer ni siquiera tuvo un escalofrió cuando puse mi mano sobre su piel desnuda. Estamos así un rato y ella se aparta. Y dice que volvamos donde su hija, no esta molesta sólo sabe que pasamos un límite. Ahora sigo bailando con mi polola junto con otras parejas más jóvenes el resto de la noche, otros sacan a bailar a la suegra.
Más tarde volvemos todos a la casa, obviamente la suegra tiene la mejor habitación, con vista al mar, grandes ventanales y que da a la terraza. Espero que se apaguen las luces, y que todos se queden dormidos para ir a verla. Llego a su habitación por la terraza, el ventana esta cerrado pero sin pestillo. Entro y ahí esta ella. Sobre la cama con un babydoll y unos calzones negros, sin duda todo de seda. Me mira y se da vuelta boca abajo sin mostrarme la cara, se hace la tímida pero me estaba esperando.
Le subo el babydoll y comienzo a besarla y a lamerle la espalda. Hago que se saque el calzón, le abro las piernas y empiezo a besarle las labias mientras le meto un dedo, esta mojada. Me pongo entre sus piernas y hago que se ponga de rodillas inclinada hacia delante y abajo. La sigo lamiendo, incluyendo sus nalgas y sus piernas. Es muy bella, es rubia natural y esta con un bello color tostado. Solo estamos alumbrados por un pedazo de luna. Finalmente, no puedo aguantar más y la bajo un poco para introducir mi pene, será sin preservativo. Pongo el pene entre sus labias y empiezo a pasarlo de arriba abajo. Llego al ano y también la punteo pero por el momento no será por ahí. Finalmente, le pongo la puntita en su vulva y comienzo a metérsela. Tengo que decir que tengo un pene respetable XL y que he tenido buenas maestras. Entro un poco y lo saco. Me gusta la sensación de la penetración en mi glande cuando cede la entrada de la mujer. Es mi juego. Poco a poco se lo voy metiendo más, retrocedo y se lo meto más hasta las bolitas. Como todas las mujeres, puede ser más pequeña que el hombre pero igual se traga todo mi aparato. Tiene una vaina estrecha, tal vez por la falta de uso, es exquisita la sensación de apreté en mi pene. Como no quiero terminar todavía, me salgo y la pongo de espaldas. Le levanto las piernas y la penetro. Tengo sus piernas en mi hombros. Esta totalmente entregada y ahora puedo seguir bombeando. Como no queremos despertar a nadie se ha autocontenido y varias veces se ha llevado la mano a la boca. Así que la bajo las piernas y la logro besar. Nuestras bocas se unen, y nuestras lenguas luchan para entrar en la boca del otro. Ahora le subo sólo una pierna, quiero que llegue a un orgasmo y para ello debo bombear. Falta poco, sigo y sigo, mientras le meto un dedo en la boca. Finalmente, arquea su espalda y tiene un orgasmo. Y luego otro y me pide que no me mueva, es cobarde, pero siento su vagina palpitando y sigo hasta tener mi explosión de semen junto con su orgasmo final. Queda bañada en semen y en sus propios jugos. Ensuciamos las sabanas, pero ella es la señora de la casa y sabrá que hacer. Parte a su baño privado, en donde enciende la luz. Yo espero a que regrese, para pararme. La atrapo en la pasada y la besó. Me voy al baño a lavarme. Al volver me esta dando la espalda cubierta por la sabana, mejor así. Me acuesto con ella bajo las sabanas en posición cucharita, y la comienzo a besar y a acariciar. Otro más salvaje se despide y se va. Pero ella esta desnuda, quiere más. Estamos así un buen rato no me canso de acariciarla, finalmente vuelve a estar húmeda y le meto mis dedos en su conchita. Mi pene se pone erecto y comienzo a introducirlo en su ano. Ella me dice que espere, se levanta y trae una caja. Esta con llave y es donde tiene sus juguetes, saca un consolador de color negro (tiene varios por lo que alcanzo a ver, es golosa y tiene el dinero para darse el gustito), me pasa un preservativo y se unta su ano y su vulva con crema intima. Me pasa el consolador, y se pone de rodillas abriendo las piernas. Me salgo de la cama y la pongo en el borde, comienzo con el consolador. Poco a poco se lo voy metiendo en la vulva. Con cuidado se lo voy metiendo mas y mas, es grande y no le quiero hacer daño. La crema ayuda y se lo meto y se lo saco mientras la acaricio con la otra mano. La dejo con el consolador metido en la vagina y tomo otro para empezar con su ano. Me aseguro que tenga crema suficiente y se lo meto suavemente, empiezo a sacarlo y a meterselo una y otra vez, alternando entre ambos consoladores. No me puedo aguantar más y me pongo un preservativo y voy su ano. Esta extendido por el consolador así que la penetro facilmente, ahora me doy el gusto, la agarro de las caderas y comienzo a bombear su ano, buscando mi placer. Finalmente, ejaculo dentro de su ano. He sido egoista pero ella a gozado igual, ambos quedamos con el cuerpo cubierto de sudor. Me echo a un lado, ella se saca el consolador de la vagina y se va al baño. Al volver se acuesta en la cama y me dice que me puedo ir. Voy al baño y regreso a darle un beso. Lo rechaza. Le debe doler la vagina o el ano. Me arrodillo, le tomo un pie y comienzo a besarselo y a lamerlo. Es mi ama y es mi manera de pedir perdon. Se levanta y me besa, no es mi culpa si ha ella le gustan los juegos violentos, ella saco su caja y sus juguetes. Despues se recuesta y se da vuelta para dormir.
Cuando salgo de la habitación, me encuentro con mi novia. Mete su mano en mi pantalon y estruja mis huevos. Sabe que no tengo jugo para ella. Me dice que mañana le toca a ella, y que piense en su madre. (continuara)
Al llegar conozco a la suegra y me quita el aliento, es una bellísima hembra rubia, viuda hace un par de años, el pelo castaño de mi novia es del Papa, el Gerente General de la empresa que se monto a su bella secretaría. Ahora debe tener unos 45 pero es la cosa más exquisita que he visto en mucho tiempo, con un cuerpo ya dorado después de 1 mes de playa. Es altiva y desdeñosa, como tiene toda la plata del difunto marido toda la familia le rinde pleitesía, están en la casa 2 parejas mas de familiares con niños. Afortunadamente con mi llegada bien equipada me salvo y paso el primer examen. El resto del día trato de amigarme con mi suegrita.
La primera noche comienzo a destacarme, la suegra es fanática del bridge, afortunadamente para mí, en mi familia también se juega. Me propongo de compañero de mi suegra, todos me miran con compasión y con cara de agradecimiento, tal parece que no perdona los errores.
Es mi noche, todo me sale, con la suegra arrasamos, somos amigos, cómplices, les estamos dando paliza, al final le tomo la mano en forma muy galante, se la beso y le dijo que es la mejor compañera de bridge que he tenido. Esta en la dicha. Todos aprueban. Después seguimos conversando la noche y tomando distintos tragos, por supuesto yo sentado al lado de la suegra, ella me toca la mano, me pide que le pase cosas y yo aprovecho de mirarle las piernas que dejan ver su bello vestido de verano, como les dije esta totalmente tostada, sabe que le veo las piernas pero no se queja es mi premio para su afortunado compañero de bridge.
Al otro día, en la mañana vamos todos a jugar tenis, juego desde los 9 años, así que se algunos trucos. Por supuesto hago dobles con mi suegra, ella como siempre juega a ganar y es mala perdedora. Esta preciosísima, con su faldita corta mostrando los muslos dorados contra el blanco, zapatillas de tenis blancas y una polera que deja ver sus bellos y maduros pechos. Con mi primer saque le queda claro que puede contar conmigo. Nuevamente, le damos paliza a las otras parejas, ahora me gano un beso en la mejilla. Yo aprovecho de acariciarle el hombro, que solo tiene un tirante de su polera. Ella sabe que no deje de mirarle las piernas durante todo el partido.
En la tarde vamos a la playa, así que puedo saborearme con los bellos cuerpos de mi novia y de mi suegra en traje de baño, por supuesto tengo un par de erecciones que tengo que ocultar en la playa.
Otro día vamos a navegar, mi papa me salva nuevamente, es un fanático y yo tengo el carnet de patrón de yate. Vamos a salir en el yate del difunto suegro, no lo han movido en mucho tiempo, faltan marineros expertos, cuento con la entusiasta colaboración de uno de los papas de los niños que quiere aprender todo lo que pueda, aunque sabe que jamás tendrá el dinero para comprarse uno. La suegra trata desde el primer momento de ser ella la capitana, pero ahí aprovecho la oportunidad y la mando a guardar, el capitan es uno sólo y soy yo. Se queda callada y me comienza a obedecer mis ordenes de capitan como todos, ya la tendré de sumisa mientras me la chupa de rodillas. Obviamente, no hago locuras con una tripulación tan novata, hacemos unas pocas mangas a vela, el resto es a motor. Todos van en traje de baño, así que sigo mirando a la suegra que saca un traje negro de miedo. Salimos varios días y la suegra me sigue mostrando sus trajes de baño y pareos, sin duda ha visto mis erecciones.
Para la noche de sábado, la suegra quiere seguir jugando brigde, pero las otras parejas ya saben el resultado así que se propone salir a bailar al club-discoteca de moda esa temporada. La suegra no quiere ir y se hace de rogar, ella se queda con los niños, pero mi polola en el auto me dice que quiere que su mama se divierta un poco y que yo la convenza de ir. Así que regreso, pregunto a una de las empleadas donde esta y me dice que esta en la cocina, entro y veo un paisaje que no me lo esperaba, mi suegra esta con una bata corta, agachada recogiendo algo y dejando ver su bello trasero enfundado en un bello, transparente y diminuto calzón de seda. Las labias se le marcaban claramente. La llamo por su nombre, se da vuelta y se cubre con su bata mientras me sonríe con cara de picara, por supuesto yo tengo otra erección, los jeans me salvan un poco. Me acerco y le tomo la mano, le pido que nos acompañe, que no me puede dejar sólo siendo mi compañera. Se hace la niña consentida, le sigo el juego y logro convencerla que voy a bailar sólo con ella. Parte a vestirse. Es verano y no se tarda mucho, hace mucho calor en la noche así que no hay que ponerse mucha ropa. Vuelve con unas sandalias a la moda, minifalda y una blusa blanca de seda, no pensaba ir pero tenía toda la tenida.
Llegando, tomamos unos tragos y le explico a mi novia que tengo que bailar con la suegra, ella queda encantada, todo por su madre. Le prometo que nos vamos a turnar. Así que parto a bailar con la suegra, es una gran discoteca con varios ambientes y obviamente muchos lugares oscuros para las parejas. Ahora si que le tomo la mano a la suegra, en algunos bailes la tomo de la cintura, hasta que la llevo a la zona lenta. Sólo lentos. Comenzamos tímidamente, apartados guardando las proporciones, pero poco a poco la música nos lleva a apretarnos, llega a tener su cabeza en mi pecho, a esa altura ya le acaricio la espalda suavemente. Ahora viene el quiebre, llego hasta el borde inferior, donde comienza la minifalda, le levanto la blusa y le meto la mano mientras le acaricio la espalda suavemente, se deja hacer ni siquiera tuvo un escalofrió cuando puse mi mano sobre su piel desnuda. Estamos así un rato y ella se aparta. Y dice que volvamos donde su hija, no esta molesta sólo sabe que pasamos un límite. Ahora sigo bailando con mi polola junto con otras parejas más jóvenes el resto de la noche, otros sacan a bailar a la suegra.
Más tarde volvemos todos a la casa, obviamente la suegra tiene la mejor habitación, con vista al mar, grandes ventanales y que da a la terraza. Espero que se apaguen las luces, y que todos se queden dormidos para ir a verla. Llego a su habitación por la terraza, el ventana esta cerrado pero sin pestillo. Entro y ahí esta ella. Sobre la cama con un babydoll y unos calzones negros, sin duda todo de seda. Me mira y se da vuelta boca abajo sin mostrarme la cara, se hace la tímida pero me estaba esperando.
Le subo el babydoll y comienzo a besarla y a lamerle la espalda. Hago que se saque el calzón, le abro las piernas y empiezo a besarle las labias mientras le meto un dedo, esta mojada. Me pongo entre sus piernas y hago que se ponga de rodillas inclinada hacia delante y abajo. La sigo lamiendo, incluyendo sus nalgas y sus piernas. Es muy bella, es rubia natural y esta con un bello color tostado. Solo estamos alumbrados por un pedazo de luna. Finalmente, no puedo aguantar más y la bajo un poco para introducir mi pene, será sin preservativo. Pongo el pene entre sus labias y empiezo a pasarlo de arriba abajo. Llego al ano y también la punteo pero por el momento no será por ahí. Finalmente, le pongo la puntita en su vulva y comienzo a metérsela. Tengo que decir que tengo un pene respetable XL y que he tenido buenas maestras. Entro un poco y lo saco. Me gusta la sensación de la penetración en mi glande cuando cede la entrada de la mujer. Es mi juego. Poco a poco se lo voy metiendo más, retrocedo y se lo meto más hasta las bolitas. Como todas las mujeres, puede ser más pequeña que el hombre pero igual se traga todo mi aparato. Tiene una vaina estrecha, tal vez por la falta de uso, es exquisita la sensación de apreté en mi pene. Como no quiero terminar todavía, me salgo y la pongo de espaldas. Le levanto las piernas y la penetro. Tengo sus piernas en mi hombros. Esta totalmente entregada y ahora puedo seguir bombeando. Como no queremos despertar a nadie se ha autocontenido y varias veces se ha llevado la mano a la boca. Así que la bajo las piernas y la logro besar. Nuestras bocas se unen, y nuestras lenguas luchan para entrar en la boca del otro. Ahora le subo sólo una pierna, quiero que llegue a un orgasmo y para ello debo bombear. Falta poco, sigo y sigo, mientras le meto un dedo en la boca. Finalmente, arquea su espalda y tiene un orgasmo. Y luego otro y me pide que no me mueva, es cobarde, pero siento su vagina palpitando y sigo hasta tener mi explosión de semen junto con su orgasmo final. Queda bañada en semen y en sus propios jugos. Ensuciamos las sabanas, pero ella es la señora de la casa y sabrá que hacer. Parte a su baño privado, en donde enciende la luz. Yo espero a que regrese, para pararme. La atrapo en la pasada y la besó. Me voy al baño a lavarme. Al volver me esta dando la espalda cubierta por la sabana, mejor así. Me acuesto con ella bajo las sabanas en posición cucharita, y la comienzo a besar y a acariciar. Otro más salvaje se despide y se va. Pero ella esta desnuda, quiere más. Estamos así un buen rato no me canso de acariciarla, finalmente vuelve a estar húmeda y le meto mis dedos en su conchita. Mi pene se pone erecto y comienzo a introducirlo en su ano. Ella me dice que espere, se levanta y trae una caja. Esta con llave y es donde tiene sus juguetes, saca un consolador de color negro (tiene varios por lo que alcanzo a ver, es golosa y tiene el dinero para darse el gustito), me pasa un preservativo y se unta su ano y su vulva con crema intima. Me pasa el consolador, y se pone de rodillas abriendo las piernas. Me salgo de la cama y la pongo en el borde, comienzo con el consolador. Poco a poco se lo voy metiendo en la vulva. Con cuidado se lo voy metiendo mas y mas, es grande y no le quiero hacer daño. La crema ayuda y se lo meto y se lo saco mientras la acaricio con la otra mano. La dejo con el consolador metido en la vagina y tomo otro para empezar con su ano. Me aseguro que tenga crema suficiente y se lo meto suavemente, empiezo a sacarlo y a meterselo una y otra vez, alternando entre ambos consoladores. No me puedo aguantar más y me pongo un preservativo y voy su ano. Esta extendido por el consolador así que la penetro facilmente, ahora me doy el gusto, la agarro de las caderas y comienzo a bombear su ano, buscando mi placer. Finalmente, ejaculo dentro de su ano. He sido egoista pero ella a gozado igual, ambos quedamos con el cuerpo cubierto de sudor. Me echo a un lado, ella se saca el consolador de la vagina y se va al baño. Al volver se acuesta en la cama y me dice que me puedo ir. Voy al baño y regreso a darle un beso. Lo rechaza. Le debe doler la vagina o el ano. Me arrodillo, le tomo un pie y comienzo a besarselo y a lamerlo. Es mi ama y es mi manera de pedir perdon. Se levanta y me besa, no es mi culpa si ha ella le gustan los juegos violentos, ella saco su caja y sus juguetes. Despues se recuesta y se da vuelta para dormir.
Cuando salgo de la habitación, me encuentro con mi novia. Mete su mano en mi pantalon y estruja mis huevos. Sabe que no tengo jugo para ella. Me dice que mañana le toca a ella, y que piense en su madre. (continuara)