En primer lugar quiero agradecer a Veronicca por su ayuda siempre que le pido su apoyo ella me ayuda de Verdad muchas gracias.
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Me presento, mi nombre es Alejandro, tengo 38 y mi esposa tiene 35 llamándose Angélica no tenemos hijos aun pero pensamos tenerlos. Les cuento que una tarde venia de vuelta del trabajo y por esas cosas de la vida vi a un niño de unos 10 años que caminaba por la calle para el auto y le pregunte que si estaba perdido diciéndome él:
.- Sí, me quedé abajo del bus que tomaron mis papas y no se dieron cuenta que me había quedado abajo.
.- Te llevaré a mi casa mientras llamo a tus papas para que estén tranquilos, y les diré que te cuidaremos mientras vienen ellos a recogerte.
Llegamos a mi casa y mi esposa me miro raro ya que había llegado con el niño a la casa le explique lo que paso y ella no muy convencida de que se quedara al final acepto. Cuando llamé a sus papás nos dieron las gracias por cuidarlo, pero que ellos no podrían volver en 5 días.
A mi esposa le pareció mucho tiempo eso, pero le dio pena por el niño y ya no tuvo otro remedio que aceptarlo.
Bueno a todo esto el niño estaba todo sucio por andar por la calle así que le pedí a mi esposa que lo bañara. Mi esposa preparo el baño, lleno la tina con agua caliente para bañarlo mientras yo vea la TV.
Luego llamo al niño al baño y le pidió que se desvistiera, pero él no quería al principio ya que le daba vergüenza pero mi esposa le dijo que estuviera tranquilo que no le iba a pasar nada con nosotros.
El niño que a todo esto se llamaba Gabriel, al final de saco la ropa y mi esposa salió del baño a buscar toallas y que se metiera a la tina mientras ella volvía. Así lo hizo y cuando volvió mi esposa al baño tomo una esponja para enjabonarlo; a todo esto mi esposa para estar más cómoda se había colocado la ropa de dormir, un pijama algo transparente en la parte de arriba y corto ya que era verano, por lo que Gabriel no pudio dejar de ver los tremendos pechos que tiene (ella es de piel blanca y mide 1.65) lo que le produjo una erección la cual mi esposa no había visto ya que le estaba enjabonado la espalda cuando lo dio vuelta se encontró con el pito del Gabriel todo erecto.
A ella le sorprendió verle así y no podía dejar de mirarlo, por lo que bajó con la esponja para enjabonárselo también, poniéndose cada vez más duro y más grande, así que muy excitada, dejó la esponja y siguió con su mano enjabonándoselo mientras la niño le daba cada vez más gusto y la dijo:
.- Así me lo hace mi mamá también.
.- Claro que te lo hará, es que lo tienes muy rico.
.- ¿Usted se lo va a meter en la boca también?
.- ¿Eso hace tú mamá?
.- Sí, la gusta mucho, me dice, y a mí también me gusta que me lo haga.
.- Pues sí, a mí me gustaría también, levántate para que te quite todo el jabón.
El niño se puso de pie poniendo su colita delante de la cara de mi esposa, que después de limpiarlo, se la metió en boca, lamiéndola con la lengua y chupándola con mucho gusto mientras con sus manos se sobaba las tetas para darse más placer, quitándose el pijama y dejándolas a la vista del niño que empezó a sobárselas también.
Mi esposa, muy excitada ya, le puso una teta en la boca del niño y le dijo:
.- Tómala, chúpamela, sácame mi lechita.
Gabriel así lo hizo mientras Angélica seguía pajeándole hasta que empezó a echar un líquido transparente que ella quiso probar y empezó a chupar otra vez hasta sacárselo todo.
Cuando terminaron, mi esposa llevó al niño a la cama porque ya era tarde y vino conmigo a la Sala donde veía la TV:
.- ¿Sabes? Es un niño muy bueno y estoy contenta de que esté con nosotros. Lo vamos a cuidar muy bien.
.- Claro, ya te lo dije que te iba a gustar tenerlo en casa.
.-Si amor es un buen niño.
Nos quedamos viendo Tele hasta las 11 de la noche cuando ya nos dio sueño.
Yo note algo excitada a mi esposa ya cuando llegamos a la pieza me empezó a besar en forma bien fogosa por lo cual me calenté y me la termine follando de una forma que nunca habíamos follado intensamente. Estuvimos follando como dos horas como locos.
Después de descansar un poco le pregunte:
.- ¿Por qué el del calentón?
Ella me contesto lo que había pasado con Gabriel en el baño (nos tenemos una confianza muy grande entre los dos por lo cual nos contamos todo). Me lo conto con lujo de detalles lo cual provoco en mí una nueva erección de la cual mi esposa se dio cuenta y relamiéndose los labios se tiró a hacerme una mamada de campeonato mientras yo le decía:
.- ¿Así se la mamaste al crio?
Y ella me respondía moviendo su cabeza diciendo que si sin dejar de mamarme la verga.
Fue la mamada más placentera y rica que me había hecho a este momento hasta que me hizo correrme en su boca tragándose toda mi carga. Así quedamos los dos satisfechos y cansados
Después fui a ver a Gabriel a su cuarto estaba durmiendo muy feliz, quien no lo estaría después de la mamada que le había hecho mi esposa.
Al día siguiente por la tarde mi esposa me dijo que Gabriel estaba durmiendo la siesta y que ella se iba a acostar también, pero me sorprendió que en vez de ir a su habitación, se metió en la habitación donde estaba durmiendo el niño.
Un rato después me asomé al cuarto y vi a mi esposa montada sobre Gabriel que lo estaba follando, acompañando sus movimientos con sus gemidos.
Yo me quede en la puerta mirando la follada que le estaba dando el crio a mi esposa que estaba muy feliz y caliente siendo follada por su hijo, colocándose después en 4 y diciéndole a Gabrielito que se coloque detras de ella y que se la meta a lo perrito.
El niño le hace caso y se la mete de repente toda su pollita, dándole unas embestidas a mi esposa que se queda con los ojos en blanco, gimiendo y gritando de placer, mientras yo no pierdo detalles de lo que está pasando desde la puerta, ya tan caliente que me saqué mi tremenda polla y me la empecé a cascar. En ese momento me vio mi esposa y me hizo una seña para que me acercara a ella. Me puse a su lado y abrió la boca para que la metiera mi polla en su boca haciéndome una mamada que me hizo gemir de placer.
A todo esto Gabrielito le metía su verguita en el coño de mi esposa a todo dar sin parar provocando que ella me la chupara con más ganas haciendo que me corriera en abundancia en su boca, saliéndole por fuera un poco de mi leche.
Entonces mi esposa empezó a mover más su culo provocando en el crio se corriera en su coño en abundancia pero mi esposa quería más verga todavía, pero como yo no podía aun, el niño como es joven se recuperó enseguida y al momento ya la tenía nuevamente erecta, por lo que mi esposa se la empezó a mamar como una poseída queriéndole sacar todavía más leche al crio.
Yo, viendo esa escena, me vuelvo a excitar, poniéndoseme la verga otra vez dura, y colocándome detrás de mi esposa, se la meto por el culo, gritando ella por la sorpresa y protestando porque no se la había metido por el coño, pero enseguida empezó a gozar con mis embestidas, llegándole un nuevo orgasmo, que la dejó ya agotada en la cama, mientras Gabrielito y yo la comíamos las tetas para darla más placer.
Cuando se recuperó, me dijo:
.- Gabrielito tiene que dormir en nuestra cama a partir de ahora, porque quiero que me deis verga todas las noches los dos.
.- Está bien, porque yo solo ya no puedo contigo. Estás siempre caliente y necesitas que te den mucha verga.
-Después nos bañamos los tres en la ducha y mi esposa cocino para que comiéramos algo después de la gran follada que le dimos con Gabrielito a mi esposa.
Después de cenar nos fuimos a acostar, primero fue mi esposa y cuando llegamos Gabrielito y yo a la pieza matrimonial ya nos estaba esperando porque tenía más ganas de guerra, ósea más polla. Yo como seguía un poco cansado me acosté a un lado dejando a Gabrielito en el medio para que siguiera jugando con mi esposa, que le ofreció un pecho para que se lo mamara, lo que hizo enseguida lamiendo las tremenda tetas que tiene mi esposa y así durante toda la noche oyendo gemidos, por lo que yo ya no podía más, por lo ue me quedé dormido aunque la cama estuviera moviéndose toda la noche.
Al día siguiente sonó el teléfono contestando mi esposa y resultando que era una prima de ella que le dijo si podía venir unos días a nuestra casa para vernos. Mi esposa la dijo que si, encantada, brillándole los ojos de la emoción, diciéndole a Gabrielito que mañana tendría otra mamás que atender y yo pensé se iba a armar una buena orgia.
Todo el resto del día fue normal ya que con todo el sexo que tubo mi esposa andaba tranquila, y tan solo él creo que le pidió que le hiciera una paja, porque claro a su edad se la pasan calientes todo el día.
Al día siguiente llego la prima de mi esposa que se llama Karen, es una mujer de 35 años con buenas tetas, mide 1.70cm y es de tez blanca, que se sorprendió al ver a Gabrielito en casa diciéndola mi esposa:
.- Mi marido me lo trajo, que lo encontró perdido en la calle y lo estamos cuidando hasta ue vengan sus papás a buscarlo.
.- Ah, qué bien, es un niño muy guapo. Así os hará compañía.
.- Sí, sobre todo a tu prima, jaja (diciéndola yo).
Karen se sonrojó suponiendo a lo que me refería, diciéndola a su prima:
.- No me digas que lo está metiendo en la cama.
.- Sí, pero si quieres esta noche lo disfrutamos las dos.
.- Ay, prima, ¿de verdad? Ya me has puesto bien caliente deseando que llegue la noche.
Las dos estaban muy nerviosas lo que quedaba del día y no esperaron mucho para acostarse con Gabrielito las dos.
Karen enseguida se puso a chuparle la pollita con verdaderas ganas:
.- ¡Ay! Que rico, prima, me encanta. Voy a sacarle toda le leche.
.- Déjame un poco a mí también, que yo quiero saborearla otra vez.
.- Tú ya lo tienes todo el día, déjame disfrutar a mí de él ahora, porque quiero que después me monte.
.- Bueno, pues túmbate, que yo te lo pongo encima.
.- Sí, que ya tengo ganas
.- Jaja, prima, estás muy ansiosa, parece que tu esposo no te coge.
.- Sí, pero muy poco, yo necesito más y no me lo da.
.- Aaahhh, que gusto, que pronto a ha aprendido a coger, no sé qué va a decir su madre cuando lo venga a recoger.
.- Bueno, pues mira, eso que va a ganar, a lo mejor ahora empieza a darla gustito a ella también y nos lo agradece, jaja.
.- Qué viciosa eres, me tenías una buena sorpresa guardada.
.- Es que recordé la conversación que tuvimos en la que me dijiste que tu esposo te daba poco sexo y que estabas muy deseosa. Por eso cuando me llamaste diciendo que venias quería que gozaras también a Gabrielito. Mira como te está montado el niño. Parce que estar con otra mujer lo esté calentado más todavía.
Mientras la decía eso, Gabrielito le chupaba sus tremendas tetas y ella gemía de placer.
Mi esposa mirando todo el espectáculo se empezó a calentar y atacar su coño que ya estaba todo mojado por lo cual no aguanto más y se colocó encima de su prima y le coloco el coño en su boca para que esta se lo lamiera como habían hecho otras veces, de más jovencitas, lo cual su prima lo hizo de una vez con lo caliente que ya estaba.
-Así estuvieron por unos 30 minutos, el niño metiendo su polla el coño de Karen mientas ella le comía el coño a mi esposa. Las dos tuvieron un tremendo orgasmo y Gabrielito también descargando toda su leche en el coño de Karen y Angélica sus jugos en la boca de su prima.
Las dos quedaron felices pero Karen quería más así que le empezó a mamar la pollita al crío otra vez, que se le empalmo enseguida, pero ahora fue mi esposa la que sentó encima de él, para follárselo a su gusto, y después de darle unos buenos sentones, a ella la vino otra vez el orgasmo y Gabrielito una nueva descarga de su leche que parecía no tener fin.
Esa noche la pasaron los tres juntos en la cama, mientras yo me fui a la otra habitación para dejarlas descansar, porque yo también me había corrido mientras me masturbaba viéndoles a ellos coger.
Al día siguiente llegaron los papas de Gabrielito y a mi esposa y mi prima se les quedó una cara de pena, porque no esperaban que se lo llevaran tan pronto.
Gabrielito les dijo a sus papás que quería quedarse unos días más en nuestra casa, porque se lo había pasado muy bien,, pero ellos le dijeron que no podía ser, que tenía que ir al Colegio, pero prometieron traérnoslo algún fin de semana para que estuviera con nosotros, por lo que mi esposa se puso muy contenta, esperando que llegaran esos días.
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Me presento, mi nombre es Alejandro, tengo 38 y mi esposa tiene 35 llamándose Angélica no tenemos hijos aun pero pensamos tenerlos. Les cuento que una tarde venia de vuelta del trabajo y por esas cosas de la vida vi a un niño de unos 10 años que caminaba por la calle para el auto y le pregunte que si estaba perdido diciéndome él:
.- Sí, me quedé abajo del bus que tomaron mis papas y no se dieron cuenta que me había quedado abajo.
.- Te llevaré a mi casa mientras llamo a tus papas para que estén tranquilos, y les diré que te cuidaremos mientras vienen ellos a recogerte.
Llegamos a mi casa y mi esposa me miro raro ya que había llegado con el niño a la casa le explique lo que paso y ella no muy convencida de que se quedara al final acepto. Cuando llamé a sus papás nos dieron las gracias por cuidarlo, pero que ellos no podrían volver en 5 días.
A mi esposa le pareció mucho tiempo eso, pero le dio pena por el niño y ya no tuvo otro remedio que aceptarlo.
Bueno a todo esto el niño estaba todo sucio por andar por la calle así que le pedí a mi esposa que lo bañara. Mi esposa preparo el baño, lleno la tina con agua caliente para bañarlo mientras yo vea la TV.
Luego llamo al niño al baño y le pidió que se desvistiera, pero él no quería al principio ya que le daba vergüenza pero mi esposa le dijo que estuviera tranquilo que no le iba a pasar nada con nosotros.
El niño que a todo esto se llamaba Gabriel, al final de saco la ropa y mi esposa salió del baño a buscar toallas y que se metiera a la tina mientras ella volvía. Así lo hizo y cuando volvió mi esposa al baño tomo una esponja para enjabonarlo; a todo esto mi esposa para estar más cómoda se había colocado la ropa de dormir, un pijama algo transparente en la parte de arriba y corto ya que era verano, por lo que Gabriel no pudio dejar de ver los tremendos pechos que tiene (ella es de piel blanca y mide 1.65) lo que le produjo una erección la cual mi esposa no había visto ya que le estaba enjabonado la espalda cuando lo dio vuelta se encontró con el pito del Gabriel todo erecto.
A ella le sorprendió verle así y no podía dejar de mirarlo, por lo que bajó con la esponja para enjabonárselo también, poniéndose cada vez más duro y más grande, así que muy excitada, dejó la esponja y siguió con su mano enjabonándoselo mientras la niño le daba cada vez más gusto y la dijo:
.- Así me lo hace mi mamá también.
.- Claro que te lo hará, es que lo tienes muy rico.
.- ¿Usted se lo va a meter en la boca también?
.- ¿Eso hace tú mamá?
.- Sí, la gusta mucho, me dice, y a mí también me gusta que me lo haga.
.- Pues sí, a mí me gustaría también, levántate para que te quite todo el jabón.
El niño se puso de pie poniendo su colita delante de la cara de mi esposa, que después de limpiarlo, se la metió en boca, lamiéndola con la lengua y chupándola con mucho gusto mientras con sus manos se sobaba las tetas para darse más placer, quitándose el pijama y dejándolas a la vista del niño que empezó a sobárselas también.
Mi esposa, muy excitada ya, le puso una teta en la boca del niño y le dijo:
.- Tómala, chúpamela, sácame mi lechita.
Gabriel así lo hizo mientras Angélica seguía pajeándole hasta que empezó a echar un líquido transparente que ella quiso probar y empezó a chupar otra vez hasta sacárselo todo.
Cuando terminaron, mi esposa llevó al niño a la cama porque ya era tarde y vino conmigo a la Sala donde veía la TV:
.- ¿Sabes? Es un niño muy bueno y estoy contenta de que esté con nosotros. Lo vamos a cuidar muy bien.
.- Claro, ya te lo dije que te iba a gustar tenerlo en casa.
.-Si amor es un buen niño.
Nos quedamos viendo Tele hasta las 11 de la noche cuando ya nos dio sueño.
Yo note algo excitada a mi esposa ya cuando llegamos a la pieza me empezó a besar en forma bien fogosa por lo cual me calenté y me la termine follando de una forma que nunca habíamos follado intensamente. Estuvimos follando como dos horas como locos.
Después de descansar un poco le pregunte:
.- ¿Por qué el del calentón?
Ella me contesto lo que había pasado con Gabriel en el baño (nos tenemos una confianza muy grande entre los dos por lo cual nos contamos todo). Me lo conto con lujo de detalles lo cual provoco en mí una nueva erección de la cual mi esposa se dio cuenta y relamiéndose los labios se tiró a hacerme una mamada de campeonato mientras yo le decía:
.- ¿Así se la mamaste al crio?
Y ella me respondía moviendo su cabeza diciendo que si sin dejar de mamarme la verga.
Fue la mamada más placentera y rica que me había hecho a este momento hasta que me hizo correrme en su boca tragándose toda mi carga. Así quedamos los dos satisfechos y cansados
Después fui a ver a Gabriel a su cuarto estaba durmiendo muy feliz, quien no lo estaría después de la mamada que le había hecho mi esposa.
Al día siguiente por la tarde mi esposa me dijo que Gabriel estaba durmiendo la siesta y que ella se iba a acostar también, pero me sorprendió que en vez de ir a su habitación, se metió en la habitación donde estaba durmiendo el niño.
Un rato después me asomé al cuarto y vi a mi esposa montada sobre Gabriel que lo estaba follando, acompañando sus movimientos con sus gemidos.
Yo me quede en la puerta mirando la follada que le estaba dando el crio a mi esposa que estaba muy feliz y caliente siendo follada por su hijo, colocándose después en 4 y diciéndole a Gabrielito que se coloque detras de ella y que se la meta a lo perrito.
El niño le hace caso y se la mete de repente toda su pollita, dándole unas embestidas a mi esposa que se queda con los ojos en blanco, gimiendo y gritando de placer, mientras yo no pierdo detalles de lo que está pasando desde la puerta, ya tan caliente que me saqué mi tremenda polla y me la empecé a cascar. En ese momento me vio mi esposa y me hizo una seña para que me acercara a ella. Me puse a su lado y abrió la boca para que la metiera mi polla en su boca haciéndome una mamada que me hizo gemir de placer.
A todo esto Gabrielito le metía su verguita en el coño de mi esposa a todo dar sin parar provocando que ella me la chupara con más ganas haciendo que me corriera en abundancia en su boca, saliéndole por fuera un poco de mi leche.
Entonces mi esposa empezó a mover más su culo provocando en el crio se corriera en su coño en abundancia pero mi esposa quería más verga todavía, pero como yo no podía aun, el niño como es joven se recuperó enseguida y al momento ya la tenía nuevamente erecta, por lo que mi esposa se la empezó a mamar como una poseída queriéndole sacar todavía más leche al crio.
Yo, viendo esa escena, me vuelvo a excitar, poniéndoseme la verga otra vez dura, y colocándome detrás de mi esposa, se la meto por el culo, gritando ella por la sorpresa y protestando porque no se la había metido por el coño, pero enseguida empezó a gozar con mis embestidas, llegándole un nuevo orgasmo, que la dejó ya agotada en la cama, mientras Gabrielito y yo la comíamos las tetas para darla más placer.
Cuando se recuperó, me dijo:
.- Gabrielito tiene que dormir en nuestra cama a partir de ahora, porque quiero que me deis verga todas las noches los dos.
.- Está bien, porque yo solo ya no puedo contigo. Estás siempre caliente y necesitas que te den mucha verga.
-Después nos bañamos los tres en la ducha y mi esposa cocino para que comiéramos algo después de la gran follada que le dimos con Gabrielito a mi esposa.
Después de cenar nos fuimos a acostar, primero fue mi esposa y cuando llegamos Gabrielito y yo a la pieza matrimonial ya nos estaba esperando porque tenía más ganas de guerra, ósea más polla. Yo como seguía un poco cansado me acosté a un lado dejando a Gabrielito en el medio para que siguiera jugando con mi esposa, que le ofreció un pecho para que se lo mamara, lo que hizo enseguida lamiendo las tremenda tetas que tiene mi esposa y así durante toda la noche oyendo gemidos, por lo que yo ya no podía más, por lo ue me quedé dormido aunque la cama estuviera moviéndose toda la noche.
Al día siguiente sonó el teléfono contestando mi esposa y resultando que era una prima de ella que le dijo si podía venir unos días a nuestra casa para vernos. Mi esposa la dijo que si, encantada, brillándole los ojos de la emoción, diciéndole a Gabrielito que mañana tendría otra mamás que atender y yo pensé se iba a armar una buena orgia.
Todo el resto del día fue normal ya que con todo el sexo que tubo mi esposa andaba tranquila, y tan solo él creo que le pidió que le hiciera una paja, porque claro a su edad se la pasan calientes todo el día.
Al día siguiente llego la prima de mi esposa que se llama Karen, es una mujer de 35 años con buenas tetas, mide 1.70cm y es de tez blanca, que se sorprendió al ver a Gabrielito en casa diciéndola mi esposa:
.- Mi marido me lo trajo, que lo encontró perdido en la calle y lo estamos cuidando hasta ue vengan sus papás a buscarlo.
.- Ah, qué bien, es un niño muy guapo. Así os hará compañía.
.- Sí, sobre todo a tu prima, jaja (diciéndola yo).
Karen se sonrojó suponiendo a lo que me refería, diciéndola a su prima:
.- No me digas que lo está metiendo en la cama.
.- Sí, pero si quieres esta noche lo disfrutamos las dos.
.- Ay, prima, ¿de verdad? Ya me has puesto bien caliente deseando que llegue la noche.
Las dos estaban muy nerviosas lo que quedaba del día y no esperaron mucho para acostarse con Gabrielito las dos.
Karen enseguida se puso a chuparle la pollita con verdaderas ganas:
.- ¡Ay! Que rico, prima, me encanta. Voy a sacarle toda le leche.
.- Déjame un poco a mí también, que yo quiero saborearla otra vez.
.- Tú ya lo tienes todo el día, déjame disfrutar a mí de él ahora, porque quiero que después me monte.
.- Bueno, pues túmbate, que yo te lo pongo encima.
.- Sí, que ya tengo ganas
.- Jaja, prima, estás muy ansiosa, parece que tu esposo no te coge.
.- Sí, pero muy poco, yo necesito más y no me lo da.
.- Aaahhh, que gusto, que pronto a ha aprendido a coger, no sé qué va a decir su madre cuando lo venga a recoger.
.- Bueno, pues mira, eso que va a ganar, a lo mejor ahora empieza a darla gustito a ella también y nos lo agradece, jaja.
.- Qué viciosa eres, me tenías una buena sorpresa guardada.
.- Es que recordé la conversación que tuvimos en la que me dijiste que tu esposo te daba poco sexo y que estabas muy deseosa. Por eso cuando me llamaste diciendo que venias quería que gozaras también a Gabrielito. Mira como te está montado el niño. Parce que estar con otra mujer lo esté calentado más todavía.
Mientras la decía eso, Gabrielito le chupaba sus tremendas tetas y ella gemía de placer.
Mi esposa mirando todo el espectáculo se empezó a calentar y atacar su coño que ya estaba todo mojado por lo cual no aguanto más y se colocó encima de su prima y le coloco el coño en su boca para que esta se lo lamiera como habían hecho otras veces, de más jovencitas, lo cual su prima lo hizo de una vez con lo caliente que ya estaba.
-Así estuvieron por unos 30 minutos, el niño metiendo su polla el coño de Karen mientas ella le comía el coño a mi esposa. Las dos tuvieron un tremendo orgasmo y Gabrielito también descargando toda su leche en el coño de Karen y Angélica sus jugos en la boca de su prima.
Las dos quedaron felices pero Karen quería más así que le empezó a mamar la pollita al crío otra vez, que se le empalmo enseguida, pero ahora fue mi esposa la que sentó encima de él, para follárselo a su gusto, y después de darle unos buenos sentones, a ella la vino otra vez el orgasmo y Gabrielito una nueva descarga de su leche que parecía no tener fin.
Esa noche la pasaron los tres juntos en la cama, mientras yo me fui a la otra habitación para dejarlas descansar, porque yo también me había corrido mientras me masturbaba viéndoles a ellos coger.
Al día siguiente llegaron los papas de Gabrielito y a mi esposa y mi prima se les quedó una cara de pena, porque no esperaban que se lo llevaran tan pronto.
Gabrielito les dijo a sus papás que quería quedarse unos días más en nuestra casa, porque se lo había pasado muy bien,, pero ellos le dijeron que no podía ser, que tenía que ir al Colegio, pero prometieron traérnoslo algún fin de semana para que estuviera con nosotros, por lo que mi esposa se puso muy contenta, esperando que llegaran esos días.
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