SITUACIÓN REAL CON CARMEN EN UN BAÑO. INICIO DE UNA OBSESIÓN...
… Sali un momento de clase. Tenia que ir al baño. Cuando entré estaba vacio. Me puse a mear en uno de los meaderos de pie. No habia nadie, hasta que de repente entra Carmen. Para mi asombro, se baja los pantalones y se pone a mear a mi lado, como un hombre más en el meadero de pie. Su chorro de pis parece no tener fin. Me pongo detrás suya y la agarro por la cintura mientras ella sigue meando. Hace un amago de apartarme pero la situación es súper excitante y continúa meando. De repente la giro y la pongo a mear hacia en suelo del baño, fuera del meadero. Su enorme meada choca contra las puertas, mojando sus pies y los mios. Está totalmente fuera de si, súper excitada. Para de mear mientras caminamos hacia una de las duchas. Llegamos y ella aguanta su meada hasta que yo me arrodillo a sus pies. Todavia le quedan unos segundos de meada que derrama sobre mi, mientras grita como una posesa mi nombre. Oimos a gente que entra en el baño y en lugar de callarse, Carmen no deja de jadear como una posesa gritando mi nombre, mientras yo saboreo las últimas gotas de pis que gotean de su coño.
Continuara...
… Sali un momento de clase. Tenia que ir al baño. Cuando entré estaba vacio. Me puse a mear en uno de los meaderos de pie. No habia nadie, hasta que de repente entra Carmen. Para mi asombro, se baja los pantalones y se pone a mear a mi lado, como un hombre más en el meadero de pie. Su chorro de pis parece no tener fin. Me pongo detrás suya y la agarro por la cintura mientras ella sigue meando. Hace un amago de apartarme pero la situación es súper excitante y continúa meando. De repente la giro y la pongo a mear hacia en suelo del baño, fuera del meadero. Su enorme meada choca contra las puertas, mojando sus pies y los mios. Está totalmente fuera de si, súper excitada. Para de mear mientras caminamos hacia una de las duchas. Llegamos y ella aguanta su meada hasta que yo me arrodillo a sus pies. Todavia le quedan unos segundos de meada que derrama sobre mi, mientras grita como una posesa mi nombre. Oimos a gente que entra en el baño y en lugar de callarse, Carmen no deja de jadear como una posesa gritando mi nombre, mientras yo saboreo las últimas gotas de pis que gotean de su coño.
Continuara...
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