Relacion lesbica con Martina parte 2

Pipsqueak

Virgen
Registrado
Jun 7, 2019
Mensajes
34
Likes Recibidos
9
Puntos
18
Continuacion de http://javichuparadise.com/foros/relatos-eroticos/1108558-relacion-lesbica-con-martina.html



Tras la noche reparadora mi cuerpo estaba descansado, mi mente no. Al alba, como de costumbre mis ojos se abrieron, y los recuerdos de la noche vinieron. Sentimientos de culpabilidad me acusaban, pero en cierto modo disfrute de lo que hice, y más cuando observé como Martina estaba, de nuevo enganchada a mi teta, de nuevo su boca cubría mi pezón, y la utilizaba como chupete nocturno. Ambas desnudas, sobre la cama, y mis pensamientos lujuriosos llamaban a mi puerta. Las escenas de lo sucedido anoche llenaban mi mente con pensamientos lascivos, mezclándose con un sentimiento de haber fallado como madre.

¿De verdad hice lo que hice? ¿De verdad abuse de mi hija? Abuso, palabra fuerte sin duda, pero como denominarlo entonces. ¿Se daría cuenta Martina de lo sucedido? Tantas preguntas recorrían mi mente sin darles respuesta clara. Sabía que hice mal, no debí hacerlo, y sin embargo me gusto, lo disfrute, saboree el momento como algo excepcional, algo lujurioso y cargado de excitación, y del cual me decía, “Sandra, no se tiene que repetir, no se puede”.

.-Buenos días mami. (Martina se había despertado).

.-Hola cielo, descansaste bien.

.-Si mami, pero no llevo pijama.

.-Lo se cariño, anoche cuando me acostaba tropecé y derrame un vaso de leche sobre la cama y te moje el pijama, y para que no te enfriases te lo quite.

Mentirijilla piadosa lo podía llamar, era decirle eso, o que anoche te desnude, te manosee tu cuerpo dormido, te frote tu chochito, te lo lamí, y lo frote con el mío. No, no se lo podía decir, pero mi mente lo recordaba y no me lo podía quitar de la cabeza.

.-Martina, sabes que mientras anoche dormías me abrazaste y utilizaste una de mis tetas como chupete.

.-es verdad mami, es verdad, cuando me he despertado todavía la tenía en la boca.

.-Si cariño, como cuando eras más pequeña y te daba de comer. ¿Y te acuerdas de que soñaste anoche?

.-No mami.

Uf, me sentí aliviada tras oír que no se acordaba de lo que soñó anoche, o de lo que mis manos y boca le hicieron. “seguro que soñaste algo bonito para utilizar mi teta de chupete”, le dije riéndome. Martina también se rio con lo que le dije, y ambas permanecimos en la cama abrazadas un rato más. Ya bien despiertas tocaba hacer cosas, quitar las sabana, lavarlas, y darle una ducha a Martina, que seguro que su piel todavía tendría restos de la mezcla de meada y fluido vaginal que desprendí tras uno de esos orgasmos nocturnos. Así pues, fui abriendo el grifo de la ducha para que el agua caliente empezara a salir, al tiempo que mi hija entraba en la misma. Como de costumbre, con un ligero chorrito de agua tibia en su cuero, la empape un poquito, observando como las gotas finales correteaban por su joven cuerpo, como recorrían su espalda hacia su trasero, y como las delanteras, tras dejar atrás sus pechos de niña, entraban en la dobladez de su entrepierna. Me estaba calentando, mala señal.

Acto seguido, con la esponja en mi mano, y con gel de ducha en la misma, empecé a enjabonarla, desde arriba hacia abajo, primero la espalda, y luego el frente. Mi mano mojada por el agua, y cubierta de espuma iba frotándole la espalda, suave, pero firme, eliminando la suciedad, sudor y demás restos orgánicos que podría tener, Mi mano fue bajando hacia su culo, y al llegar, y frotárselo, note como algo recorría mi cuerpo. Sí, me estaba excitando mientras enjabonaba el culo de mi hija. Continúe frotándoselo mientras iba bajando hacia sus piernas, frotándole bien la piel.
Con ese hormigueo recorriendo mi cuerpo, con esa sensación en el estómago, bueno, más bien en mi coño, pase a enjabonarle por delante. Uff, debía, tenía que contener mis ansias, mis deseos carnales sobre Martina, pues para ella podía ser un trauma según lo que le hiciera. Respire hondo y seguí frotándole el pecho, continúe enjabonándole los brazos, y fui bajando hacia su rajita. Y con la excitación, algo se me ocurrió que nunca había hecho. Deje la esponja a un lado, me eche jabón en mis manos, y empecé a enjabonarla con ellas. Martina se sorprendió, pues nunca la lavaba así, “No pasa nada corazón, pero he notado que con la esponja no te podía frotar bien, se estará rompiendo”, es lo que le comente ante ese cambio en la forma de enjabonarla. No puso pegas mi niña en que la siguiera enjabonandola, con lo que tras hacer con mis manos más espuma empecé de nuevo a frotarle la espalda hasta llegar a su culito.

El tacto de su piel con la mía hacia que mi temperatura se elevase, y notaba como mi coño segregaba ya algo. Tras frotarle bien el culo con mis manos, y pasarle un par de dedos por su agujerito, y así limpiárselo bien volvía a tocar el frente. Martina se lo estaba pasando bien, se dejaba hacer por su madre, así que con un poco más e jabón empecé a acariciarle sus pechos, bueno, a frotárselos y a enjabonárselos, con el consiguiente morbo que me daba y con la excitación aumentándome, pues la estaba manoseando de forma descarada mientras ella miraba y se dejaba.

Uff, y ahora me tocaba limpiarle su chochito, enjabonárselo y limpiárselo bien, ¿Cómo reaccionaría Martina al tacto?, al toque de mis dedos en su vagina’, lo iba a averiguar en breves momentos, así que mis manos, fueron bajando a dúo por su cuerpo y alcanzaron sus muslos. Tras un poco más de jabón en mis manos, y de hacer espuma empecé a frotarle con los dedos sus labios vaginales, “Uy mami, me haces cosquillas”, soltó Martina riéndose. Me reí, “cielo, si te molesta dímelo”. No dijo nada, seguía enjabonándola y frotándole su vagina con mis dedos.

La sensación que me invadía era brutal, mis dedos medio masturbando a mi hija, y ella notando, viendo como lo hacía. Mi coño se empapaba por momentos. Estaba decidida, y con suavidad le metí un dedo dentro de su chochito. “Uy mami, note algo”, soltó Martina con sorpresa, “perdona corazón, la mami te metió un dedito, tenía que limpiar un poco los restos de pipi”.

.-vale mami, pero he notado algo.

.-que has notado corazón.

.-Como un hormigueo por la espada, ( uff, Mi hija había sentido placer tras meterle el dedo por su vagina).

.-Uy eso es que te haces mayor y tu chorrete se hace más sensible, como el de una mujercita.

Martina se rio, y no le dio más importancia al hecho de que le hubiera metido un dedo. Así pues seguí enjabonándole el chochete, Poco a poco mi mano recorría ya su coño enjabonado dejándose muy limpio. Mi hija suspiraba en ciertos momentos, pero no me decía nada. Ante esos suspiros mis deseos eran frotárselo más, cosa que hice. Mi mano siguió enjabonándole su precioso y pequeño coño un buen rato, deslizándole de vez en cuando uno, o dos dedos dentro de él, con siguiendo que algún suspiro se le escapase.

.-Te gusta que te enjabone así.

.-Si mami, es diferente y me hace cosquillas el chorrete.

.-es que te haces mayor cariño y su chorrete se va pareciendo al de mama.

Estaba contenta de que cambiara la esponja por mi mano, pues de es manera había sentido, notado como su chorrete le hacía cosquillas y eso la hacía mayor, jajaja. Así pues seguí lavándola, enjabonándole los pies, con lo que estaba ya lista para enjuagarse. Cogí la alcachofa, abrí un poco más el agua y fui dejando que una capa fina de lluvia eliminase los restos de jabón que quedaban en su cuerpo, dejándole completamente su cuerpo limpio. Y con ella limpia solo quedaba yo para darme una ducha. Así, cuando la hija a sacar para secarla mi hija me sorprendió con lo que me dijo,

.-mami, ¿tú no te duchas?

.-si cariño, ahora cuando te seque y te ponga el desayuno me daré una duchita.

.-Mami, y si te duchas ahora antes de salir yo, te podría ayudar como tú a mí.

Uff, sus inocentes palabras terminaron por encender mi cuerpo y mi coño. Imaginar cómo Martina con sus
pequeñas manos me enjabonaba, como sus manos recorrerían mi cuerpo, quizás entrando en mi coño como más mías en ella. Estaba derritiéndome por sentirlo. “vale corazón, pero solo hoy”. Martina toda contenta se apartó a un lado, mientras yo entraba en la ducha. Yo me senté en la bañera y me empecé a echar agua por encima a lo que Marina cogió el jabón y con sus pequeñas manos hizo una buena espuma. Con tal cantidad de espuma empezó a frotarme la espalda.
Sin duda que iba a hacer el mismo recorrido que yo con ella, espalda, culo, y más tarde la parte de adelante. Excitada no era la palabra exacta, cachonda si, pues cada vez que notaba sus manos frotar mi espalda y sentí como iba bajando y bajando mientras la frotaba, hacía que mi coño palpitase de gusto, y que empezara a sentir como mi fluido vaginal empapaba mis labios inferiores.

.-mami, no puedo enjabonarte el culito, estas sentada

.-perdona corazón, (con lo que me incorpore y le deje mi culo a altura de sus manos para que lo enjabonara bien.)

Mmm,. Que sensación el sentir el recorrido de sus manos, ambas sobre mis glúteos, como frotaba y enjabonaba en círculo mi culo, y como entre ese frote una de sus manos se deslizo por la rajita del culo y llego hasta mi agujero. Uff, que rico hubiera sido sentir como uno de sus dedos hubiera entrado en él, pero solamente me lo enjabono con ayuda de los deditos. Aun así la excitación no hacia más que aumentar., pue sabía lo que venía a continuación.
Martina, muy avispada, se puso dejante, tras enjabonarme el culo y, empezó a echarme un buen chorro de gel por mis pechos. Acto seguido, con un poco de espuma que tenía en sus manos empezó a embadurnarme los pechos con el jabón, a pasar sus manos por mis pechos, a manosearlos directamente. Sus manos eran tan pequeñas todavía y mis pechos tan grandes, tengo una 100 de pecho, que tenía que utilizar ambas manos para enjabonarme uno solo. Me corría de gusto al sentir sus manos de esa manera, acariciándomelos, enjabonándome mis teas y notando como mis pezones se endurecían pro la excitación.

.-mami tus tetas son muy grandes,” decía mientras las enjabonaba”.

.-Lo se cariño.

.-Y las mías ¿cómo serán?, pregunto con curiosidad.

.-Pues no lo sé princesa, seguro que más bonitas que las de mama.

Martina se echó a reír y siguió enjabonando las de mami. Enjabonármelas, masajearlas, estimularlas, con sus manos le llevo un buen rato, le llevo su tiempo, pero era un juego para ella. Para mí era una excitación sentir sus manos en mis pechos, en mis tetas y notar como las manoseaba, como las acariciaba y como las limpiaba con sus dedos. Y así después de dejarme las tetas más limpias que nunca siguió enjabonándome las piernas y llego a mis muslos, a mi coño, pero como de nuevo estaba sentada no podía alcanzarlo.
No hacía falta que me dijera que me levantara, sabía muy bien lo que tenía que hacer, y mis ganas de sentirla en esa zona eran muchas, así que antes de que alcanzar mi zona publica me levante dejando a la altura de su ojos todo mi coño depilado. Martina al verlo se sorprendió un poco, pues al ver el mío, cosa que no solía ver mucho, por no decir casi nunca, y compararlo con el suyo vio que eran diferentes.

.-mami, tu chorrete está abierto. El mío esta cerradito.

.-cariño, la mama es mayor y con la edad se abre, además tu saliste de allí, y me lo agrandaste.

Martina se rio muchísimo con mis palabras, y con su inocencia dijo, “ahora mami te lo limpio”, y con su mano, de nuevo enjabonada empezó a pasar su mano por él, por mi coño ardiente. Era una inexperta en cuanto a frotar coños, jajaj pero sus pequeñas manos alcanzaban mis labios vaginales sin problemas, y sus dedos rozaban y frotaban esos labios, que cada vez que me rozaba, mi coño palpitaba de gusto y algo de fluido vaginal se me escapaba. Martina seguía frotándome con sus manos, y al poco, un par de sus dedos se metieron dentro de mi coño y alcanzaron mi clítoris. Gemí de gusto como perra en celo. Mi hija al ver que yo también gemía soltó, “mami, también te hago cosquillas”. “si hija, muchas cosquillas me haces, pero no pares”. Y así con mis palabras, mi hija siguió limpiándome el coño con sus manos, y con cada roce mi coño se empapaba más y dejaban una mezcla en los dedos de mi hija deliciosa.
Y con cada frotamiento de sus manos yo gemía un poco más, cuando se le volvía a deslizar un dedo dentro de mi coño, volvía a gemir, y pronto se dio cuenta de que cada vez que su dedo entraba, yo gemía, y al haberle dicho que eran cosquillas empezó cada vez más y más a meterme sus dedos dentro para seguir haciéndome cosquillas. Me estaba matando a órganos con sus dedos, uff, me estaba corriendo con cada penetración de sus dedos, y no podía parar de gemir, ni de decirle que parase.

De esa manera Martina me dejo el coño bien limpio, bueno empapado y limpio, con lo que tras dejar de frotarme el chorrete empezó a echarme agua para limpiar el jabón, tal y como yo le había hecho antes. Sin duda que una buena hija haciendo a su madre lo que yo le había hecho antes. Y una vez limpia de jabón, ambas las dos contentas tras la ducha, salimos y nos secamos con un par de toallas. Martina estaba limpia y contenta, y yo limpia y muy caliente y excitada por semejante ducha.

Así, tras la noche en que disfrute de su chochito y de su cuerpo, Martina me ofreció, sin saberlo otro placer más, sentir como sus manos recorrían mi cuerpo y me hacían gozar como perra en celo. Había vuelto a sucumbir a mis deseos carnales, a la lujuria más baja y a aprovecharme de la inocencia de mi hija para satisfacer mis deseos más ocultos. Me había dicho a mí mismo que no tenía, que no debía de repetirse algo así, pero lo hice, volví a pecar, y peor aún, las posibilidades de volver a sucumbir a la tentación de ese joven cuerpo eran mayores. ¿Y si en uno de esos alguien se enteraba?, ¿Y si Martina se lo contaba a alguien? Solo fueron tocamientos entre madre e hija, no tan inocentes para mí, pero si para ella. Tanto en que pensar, tanto que controlar y no sé si lo podre, o podría hacer, solo el tiempo lo dirá. Y así, limpias y con cosquillas en el coño, ambas desayunamos y empezamos un fin de semana juntas.
 

jaku48

Virgen
Registrado
Jun 25, 2019
Mensajes
64
Likes Recibidos
3
Puntos
18
muy bueno se espera la continuación gracias:2:
 

Sirango

Pajillero
Registrado
Jun 1, 2015
Mensajes
103
Likes Recibidos
60
Puntos
28
Muy bueno espero la continuacion y mas detalles recreate que se te da muy bien las descripciones
 
Arriba Pie