Que tal chicos,
Hoy les traigo otro relato.
Espero y recuerden mis anteriores relatos de las sabrosas nalgotas de mi esposa,
bueno les recordare a mi me excita tanto como mi esposa provoca tanto con sus tremendas nalgas, se las a prestado a barios hombres para que jueguen con ellas sin dejar que la penetren pero uno que otro se salió con la suya.
Bueno comenzare este relato hoy es de incesto,
Todo comenzó una tarde, nos encontrábamos reunidos en la casa de nosotros, estaba un compañero de mi trabajo y un tío de ella hermano de su mama, nos encontrábamos reparando mi camioneta ya que ellos saben un poco de mecánica, mi compañero tubo que irse y solo nos quedamos el tío y yo, pasaron las horas y se hizo tarde y decidimos seguir al día siguiente, le propuse quedarse en la casa a dormir porque su casa esta a bastantes kilómetros y mañana tendría que regresar, el acepto se dio un baño y nos sentamos en la sala a conversar un rato el, mi esposa y yo, comenzamos a bromear y a tomar, cuando comencé a notar como se le iban los ojos al tío en las chichis de mi esposa, ella no traía bra porque acababa de bañarse solo una blusa amarilla delgada que con cada movimiento se le meneaban bien rico, pero lo peor fue cuando ella se paro para traer mas cerveza, traía puesto unos short de licra negros, pero cuando se volteo vaya espectáculo, los traía bien metidos en las dos nalgotas, y cuando caminaba se le meneaban las nalgas como devorando el short, note como se le fueros los ojos con eso, el se paro para ir al baño tambaleándose por el alcohol llego hasta allá, yo aproveche para preguntarle a mi esposa que tramaba con ese atuendo, me contesto –nada- cuando se escucha un fuerte golpe en el baño, ella corrió para ver que pasaba, al poco rato llego y le pregunte que avía pasado, me dice –nada, solo se resbalo de lo borracho, se va a volver a bañar a ver si se le corta poquito, rápido noto cuando se calienta ella, y le pregunto -y que mas-, me dice - solo le ayude a quitarse la ropa, le digo -toda la ropa- me dise -,si y te digo una cosa me queria agarrar las nalgas pero le dije que no, pero cuando baje la vista vi que la tenia bien parada, -me dice riéndose, –le respondo - si pero es tu tío.
Nos fuimos a dormir el se quedo en un sillón de la sala y nosotros en nuestra recamara, como a las 2 de la mañana se levanta ella y sale muy despacio del cuarto ella no supo que yo estaba despierto, traía sus mismas licras y solo una blusa de resaque dejando ver sus tetas por los lados, me asomo despacio para ver que asi, se dirigió a la sala y prendió la luz y fue a tomar agua tratando de hacer ruido para despertar al tío, cuando por fin despertó pregunto –que paso- le contesta ella –nada solo no me puedo dormir- el le dice con tono de burla – si quieres acuéstate aquí con migo- deberás – le dice ella- dirigiéndose al sillón, agacé mas para allá pues -le dice ella.
El se acostó de lado recargando su espalda en el respaldo y ella se acostó enseguida dándole la espalda para que el pudiera abrazarla por atrás dejándolo que se diera un festín sintiendo sus nalgotas, se taparon con una sabana, yo molesto pero exitado por lo que andaba viendo pero tapados no podía ver lo que hacían, quedaron quietos como 5 minutos, cuando ella le dice –tío que le paso- el contesta – nada porque – no nomas- dijo ella, a lo que me hizo pensar que ya estaba erecto.
Al poco rato empecé a notar como ella se meneaba lentamente, y comenzó a murmúrale bajito – le gusta como se siente -yo creo que para que yo no escuchara, y el le respondía igual de bajito – si que ricas nalgas tienes, yo alcanzaba a notar como le agarraba las chichis, cuando de repente ella quita la sabana y se para se comienza a quitar los short de licra, quedándose con una hermosa tanga roja, y se vuelve a acostar, echándose la sabana encima otra ves, los movimientos eran mas bruscos yo notaba que ella lo estaba disfrutando tanto como yo, ella le dice – porque no se quita los bóxer- ella se recorrió poquito para que el se los quitara pero con tanto movimiento la sabana ya no los tapaba por completo fue cuando note porque lo estaba disfrutando tanto, el tío tenia un pedazo de carne bastante feroz ya madura por sus años el tiene alrededor de 40 años, el se la restregaba toda en las nalgotas y con las manos le sacaba las chichis de su blusa, ella hacia la mano para atrás para tocarle la verga, y se abría sus nalgotas y se la acomodaba en medio con lo grande de sus nalgas le aplastaba bien rico la verga, esa sensación yo la e sentido muchas veces y sabia lo bien que estaba sintiendo el tío, el le murmuraba bajito –te la quiero meter- ándale- ellas le respondía con su voz agitada – no tío como cree-mi esposo esta dormido, al poco rato ella se paro y el se sentó entonces ella se sentó en el, acomodándose la vara en medio de sus nalgas dándole la espalda se meneaba bien rico que cualquiera ya se hubiera venido sintiendo semejantes nalgotas, se volvió a parar y veo que se quita las tangas, yo pensé que va hacer, va dejar que se la meta, hizo como si se fuera a sentar en ese palo pero con una mano le agarraba la verga y se la raspaba en su puchita ella controlaba el movimiento y que tanto entraba en ella, solo era la punta pero notaba que quería mas ella gemía bajito para que yo no escuchara, porque pensaba que yo dormía, y no despertarme, cuando el la tomo por la cintura y la jalo hasta abajo metiéndosela toda, quedaron quietos un momento y ella le dijo- no tío sáquemela con su voz quebrándose por los gemidos- pero a la ves comenzó a menearse lentamente, el le dijo – espérate nomas tantito-, quedaron en silencio como dos minutos solo se escuchaba como chocaban sus nalgotas en el y sus ricos gemidos tratándolos de disimular, le vuelve a decir –ya no tío-, esta bien dice el, se pararon y ella se acostó boca arriba y el se coloco poniéndosela en medio de sus tetas ella se las apretó con las manos y el comenzó a disfrutar ese par de tetotas hasta que no aguanto y aventó un chorro de leche en todas sus tetas, el le dijo -quiero volver a repetirlo-, ella le dijo- será en otra ocasión tengo que irme a dormir, dejándolo todo agitado en el sillón, yo me fui acostar rapidamente con esa madre bien parada en cuanto entro le vi de reojo las tetas todas llenas de leche eso me éxito tanto, sentí de lo mas rico y me ponia a pensar lo bien que la paso
![img.php](http://[URL="http://img292.imagevenue.com/img.php?image=98463_normal_01042013044205_123_393lo.jpg"][IMG]http://img292.imagevenue.com/loc393/th_98463_normal_01042013044205_123_393lo.jpg)
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despues les contare el dia que disfrutaron los dos y solos
Hoy les traigo otro relato.
Espero y recuerden mis anteriores relatos de las sabrosas nalgotas de mi esposa,
bueno les recordare a mi me excita tanto como mi esposa provoca tanto con sus tremendas nalgas, se las a prestado a barios hombres para que jueguen con ellas sin dejar que la penetren pero uno que otro se salió con la suya.
Bueno comenzare este relato hoy es de incesto,
Todo comenzó una tarde, nos encontrábamos reunidos en la casa de nosotros, estaba un compañero de mi trabajo y un tío de ella hermano de su mama, nos encontrábamos reparando mi camioneta ya que ellos saben un poco de mecánica, mi compañero tubo que irse y solo nos quedamos el tío y yo, pasaron las horas y se hizo tarde y decidimos seguir al día siguiente, le propuse quedarse en la casa a dormir porque su casa esta a bastantes kilómetros y mañana tendría que regresar, el acepto se dio un baño y nos sentamos en la sala a conversar un rato el, mi esposa y yo, comenzamos a bromear y a tomar, cuando comencé a notar como se le iban los ojos al tío en las chichis de mi esposa, ella no traía bra porque acababa de bañarse solo una blusa amarilla delgada que con cada movimiento se le meneaban bien rico, pero lo peor fue cuando ella se paro para traer mas cerveza, traía puesto unos short de licra negros, pero cuando se volteo vaya espectáculo, los traía bien metidos en las dos nalgotas, y cuando caminaba se le meneaban las nalgas como devorando el short, note como se le fueros los ojos con eso, el se paro para ir al baño tambaleándose por el alcohol llego hasta allá, yo aproveche para preguntarle a mi esposa que tramaba con ese atuendo, me contesto –nada- cuando se escucha un fuerte golpe en el baño, ella corrió para ver que pasaba, al poco rato llego y le pregunte que avía pasado, me dice –nada, solo se resbalo de lo borracho, se va a volver a bañar a ver si se le corta poquito, rápido noto cuando se calienta ella, y le pregunto -y que mas-, me dice - solo le ayude a quitarse la ropa, le digo -toda la ropa- me dise -,si y te digo una cosa me queria agarrar las nalgas pero le dije que no, pero cuando baje la vista vi que la tenia bien parada, -me dice riéndose, –le respondo - si pero es tu tío.
Nos fuimos a dormir el se quedo en un sillón de la sala y nosotros en nuestra recamara, como a las 2 de la mañana se levanta ella y sale muy despacio del cuarto ella no supo que yo estaba despierto, traía sus mismas licras y solo una blusa de resaque dejando ver sus tetas por los lados, me asomo despacio para ver que asi, se dirigió a la sala y prendió la luz y fue a tomar agua tratando de hacer ruido para despertar al tío, cuando por fin despertó pregunto –que paso- le contesta ella –nada solo no me puedo dormir- el le dice con tono de burla – si quieres acuéstate aquí con migo- deberás – le dice ella- dirigiéndose al sillón, agacé mas para allá pues -le dice ella.
El se acostó de lado recargando su espalda en el respaldo y ella se acostó enseguida dándole la espalda para que el pudiera abrazarla por atrás dejándolo que se diera un festín sintiendo sus nalgotas, se taparon con una sabana, yo molesto pero exitado por lo que andaba viendo pero tapados no podía ver lo que hacían, quedaron quietos como 5 minutos, cuando ella le dice –tío que le paso- el contesta – nada porque – no nomas- dijo ella, a lo que me hizo pensar que ya estaba erecto.
Al poco rato empecé a notar como ella se meneaba lentamente, y comenzó a murmúrale bajito – le gusta como se siente -yo creo que para que yo no escuchara, y el le respondía igual de bajito – si que ricas nalgas tienes, yo alcanzaba a notar como le agarraba las chichis, cuando de repente ella quita la sabana y se para se comienza a quitar los short de licra, quedándose con una hermosa tanga roja, y se vuelve a acostar, echándose la sabana encima otra ves, los movimientos eran mas bruscos yo notaba que ella lo estaba disfrutando tanto como yo, ella le dice – porque no se quita los bóxer- ella se recorrió poquito para que el se los quitara pero con tanto movimiento la sabana ya no los tapaba por completo fue cuando note porque lo estaba disfrutando tanto, el tío tenia un pedazo de carne bastante feroz ya madura por sus años el tiene alrededor de 40 años, el se la restregaba toda en las nalgotas y con las manos le sacaba las chichis de su blusa, ella hacia la mano para atrás para tocarle la verga, y se abría sus nalgotas y se la acomodaba en medio con lo grande de sus nalgas le aplastaba bien rico la verga, esa sensación yo la e sentido muchas veces y sabia lo bien que estaba sintiendo el tío, el le murmuraba bajito –te la quiero meter- ándale- ellas le respondía con su voz agitada – no tío como cree-mi esposo esta dormido, al poco rato ella se paro y el se sentó entonces ella se sentó en el, acomodándose la vara en medio de sus nalgas dándole la espalda se meneaba bien rico que cualquiera ya se hubiera venido sintiendo semejantes nalgotas, se volvió a parar y veo que se quita las tangas, yo pensé que va hacer, va dejar que se la meta, hizo como si se fuera a sentar en ese palo pero con una mano le agarraba la verga y se la raspaba en su puchita ella controlaba el movimiento y que tanto entraba en ella, solo era la punta pero notaba que quería mas ella gemía bajito para que yo no escuchara, porque pensaba que yo dormía, y no despertarme, cuando el la tomo por la cintura y la jalo hasta abajo metiéndosela toda, quedaron quietos un momento y ella le dijo- no tío sáquemela con su voz quebrándose por los gemidos- pero a la ves comenzó a menearse lentamente, el le dijo – espérate nomas tantito-, quedaron en silencio como dos minutos solo se escuchaba como chocaban sus nalgotas en el y sus ricos gemidos tratándolos de disimular, le vuelve a decir –ya no tío-, esta bien dice el, se pararon y ella se acostó boca arriba y el se coloco poniéndosela en medio de sus tetas ella se las apretó con las manos y el comenzó a disfrutar ese par de tetotas hasta que no aguanto y aventó un chorro de leche en todas sus tetas, el le dijo -quiero volver a repetirlo-, ella le dijo- será en otra ocasión tengo que irme a dormir, dejándolo todo agitado en el sillón, yo me fui acostar rapidamente con esa madre bien parada en cuanto entro le vi de reojo las tetas todas llenas de leche eso me éxito tanto, sentí de lo mas rico y me ponia a pensar lo bien que la paso
despues les contare el dia que disfrutaron los dos y solos
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