Otra madura

[ccbennet]

Como siempre les pregunto, quieres ser una gatita o una perrita. Les muestro dos collares, uno de cuero y otro de tela. El primero de perrita, el segundo de gatita. La gran mayoría de las mujeres eligen el de gatita. No saben que a las gatitas les debe gustar mamar y tomar leche. Mi leche. Y de todas maneras serán mis perritas. Ella escoge gatita, le paso el collar, ella se lo pone. Es un acto de confianza y dominación. Saben que ahora soy su amo. Le acaricio el pelo, ahora es una gatita. Algunas hasta maullan. Estoy como siempre con una madura, una solterona, flaca pero de buenos pechos, piernas flacas, el trasero plano, mejor para mi, me gusta el sexo anal y mientras mas expuesto el ano mejor. Es una solterona que quiere mojar sus labias con sus jugos y los mios. Trabaja en mi mismo edificio, en otra oficina de abogados, nos habíamos encontrado en el ascensor varias veces y nos habiamos saludado. Ella vestía impecable, al igual que yo, que estaba comenzado a trabajar en el bufete, despues me entere que era secretaria legal, hacia algo mas que servir café, llevaba los escritos de los abogados mas antiguos de su oficina. Un día viernes me quede tarde trabajando, al bajar me la encontre en el ascensor. Estabamos en verano, el ambiente era festivo, yo pensaba pasar a un bar cercano a tomar una cerveza. Iba con una linda blusa blanca y falda azul, se destacaban sus bellos pechos. No se como, pero vi mi oportunidad, me hice el simpatico y la invite al bar. Era día viernes despues de todo. Ella riendo, acepto. Salimos un par de veces mas y me invito a su departamento. Primero nos besamos, le gustaban los besos. Estabamos en un sillon del ****** de su departamento, ella vive sola. La segunda vez, subi mi mano mas arriba, hasta llegar a su calzón. Sólo meti un dedito por el costado, estaba humeda. Ella mientras tanto, puso su mano sobre mi erección, me abrí el pantalón y ella metio la mano, hasta tocar mi pene. Cuando lo hizo, lo tomo completo en su mano y oculto su cabeza en mi pecho, haciendose la tímida. Comenzo a masturbarme lentamente. Le tuve que decir: mejor, no sigas. Ella saco su mano, nos seguimos acariciando y besando, yo meti mi mano en sus pechos, los pezones estaban duros. Pero no seguimos, nos besamos por ultima vez y me fui. A la próxima vez, le saque los calzones, ella dejo que se los sacara y meti mi mano entre sus labias. Las acaricie una y otra vez mientras la besaba, ella pasaba su mano sobre mi erección. Quería mas, le advertí: si sale al aire sabes lo que va a pasar, es malo. Ella asintío, me pare frente a ella y me saque los zapatos, luego me baje los pantalones y calzonzillos quedando sólo en camisa, mi erección quedaba a la vista. Ella estaba sentada en el sillon y mi pene quedada frente a su cara. No dudo, lo tomo con una mano, le dio un beso y comenzo a mamar. No la deje terminar, la desnude. Me puse frente a ella de rodillas y le abri las piernas. Le haria un oral. Pase la lengua por sobre sus labias, ella suspiro y se echo para atrás, para gozar. Yo había tenido buenas maestras entre las amigas de mi madre, ella era feliz con mi padre. Cuando tenía 15 años, me contó que el hijo de una amiga de mi misma edad le habia dicho que no podia mas, tenía que estar con una mujer y que le ayudará. Me preguntó: tu tambien quieres ayuda, por que ya manchas las sabanas. Yo asentí. Me dijo: con una condición, jamas me faltes el respeto jovencito. Volví a asentir. A las pocas semanas, una linda amiga mayor me desvirgo, estuve un año con ella. El marido viajaba mucho por el país, así que durante la semana en las tarde, nos veiamos en el departamento de otra amiga que era guía de turismo y pasaba fuera del país. Yo era su toyboy, me enseño todas las posiciones posibles, sexo oral, sexo anal. Como era su juguete, nuestras sesiones comenzaban conmigo entre sus piernas, tenia que lamerla hasta que alcanzaba un orgasmo. Yo no me podia tocar, luego ella me montaba, de frente o dandome la espalda, me cabalgaba suavemente al principio hasta alcanzar otro orgasmo. Luego, se ponia en cuatro y yo la cogia de las caderas y podia meterselo vaginal o anal. Esto duro hasta que quedo embarazada, nunca supe si era mío. El marido estaba feliz, no tenian hijos. Nos dejamos de ver. Pero al poco tiempo, otra amiga de la mama se interesó por mi. Ella fue mi primera esclava. Desde el primer momento fui el macho alfa, no haria de toyboy. Aplicaba la misma rutina eso si, para que variar de lo bueno. Era lo mismo que estaba haciendo ahora, la estaba lamiendo hasta obtener un orgasmo. No me costo mucho, ella gimio y tuvo uno, cuando le tenía las labias abiertas y pasaba mi lengua por los lados mas sensibles, ya habia lamido como un botón su clitoris mojado. Quede con mi cabeza en su vientre, ella estaba sudada y su pecho subía y bajaba. Me puse a su lado y nos abrazamos. Nos besamos, le lami su sudor. Me dijo: gracias, lo necesitaba. Entonces, le dije: no me des las gracias, la noche es joven. Tu nuevo amigo es malo. Segura que quieres seguir. Bajo su cabeza y le dio un beso a su nuevo amigo. Riendose me miro, mientras lamia. La deje hacer, mis bolas estaban llenas, ella se dedico a lamerlas. Se bajo del sillón, se puso de rodillas y me abrio las piernas, yo las subi. Jugaba fuerte, se dedico a lamer bajo las bolas hasta el ano. Se las metía en su boca y les pasaba la lengua, luego bajaba a lamer mi ano. Termino, lamiendo desde abajo hasta la punta de mi pene, luego de lamerlo a lo largo. Se lo metio en la boca y me miro. Era una mala. Le pase la mano por el cabello, era linda. Se puso a mi lado y nos besamos. Ambos ya estabamos desnudos, nos tocabamos y besabamos por todo el cuerpo. Yo no podia más tenia que estar dentro de ella. La levante y la empuje hasta otro sillón. Puso sus manos en él y se echo hacia adelante, mostrandome su trasero mientras abría las piernas. Sus dos hoyitos estaban a mi disposición, me decidi por vaginal, estaba demasiado excitado, puse mi miembro en su entrada y presione suavemente, estaba lubricada entro fácilmente, segui entrando con mi largo pene, ya saben por que mama adora a papa y mis maduran me adoran, es herencia familiar. Su vagina era muy rica, estrecha, se ajustaba a mi pene como un guante y ademas estaba bien lubricada, no poco, lo cual es malo, ni mucho, lo cual es molesto. Por lo ultimo, habia desechado a algunas mujeres, demasiado lubricadas, es como meter el pene en una lata de aceite. La penetre profundamente, ella gemía, lo saque e ingrese nuevamente, luego aplique un poco de tao, la puntita varias veces y luego profundo. Alcanzamos juntos el orgasmo, apenas senti que ella estaba teniendo uno, la penetre profundo y fuerte hasta eyacular, la llene con mi semen que era mucho. Me sali, dejando su vagina con semen a medida que salia, la penetre de nuevo, busque una segunda eyaculación de inmediato, esto no lo hago siempre, va contra el tao que dice que hay que cuidar el semen, pero llegaba muchas semanas sin sexo. Aporree sus nalgas, la penetre sin contemplaciones, mis caderas contra sus nalgas, buscando mi placer. Ella me decía: si dame, duro, duro. Le pregunte al oido: ¿eres mi putita, ahora?. Ella me respondio: si soy tu putita, tratame como tu putita. Tomaba sus pechos que colgaban como fruta madura y se los apretaba, estaban redonditos con los pezones duros. Me hubiera gustado darle anal, pero estaba sin preservativo. Eyacule de nuevo, ella tuvo otro orgasmo y se puso de rodillas. Le acaricie la espalda, la aparte y me sente el sillon, ella se levanto y se sento en mis piernas. Nos quedamos tranquilos mientras se secaba el sudor de ambos, en sus muslos corria mi semen. Habia sido bueno para ambos. Yo la abrazaba. Ella me dijo: vamos a la pieza, nos va a dar frío, a pesar de que era verano. Fuimos tomados de la mano, hasta el dormitorio principal, mas adelante la tomaría por todo el departamento. Tenía una cama grande de 2 plazas, estaba con una colcha liviana y sabanas. Nos metimos adentro y yo la me puse detrás de ella, con mi pene en su trasero. Así la podia acariciar con una mano, mientras esperabamos que recuperará la erección. Mi pene era joven, pronto estaría duro de nuevo, sobretodo cuando tenía nueva carne a su disposición. Nos besabamos, descansabamos y nos acariciabamos, todo con calma. Me aparte un poco de ella, le acaricie sus nalgas y fui por su hoyito anal. Cuando lo toque por primera vez, salto. Me dijo: no seas malo. Pero no le hice caso, presione un poco y le meti mi dedo, sólo un poco. Le pregunte si tenía una crema, de manos, de cuerpo. Me dijo, eres un malo. Pero, se levanto y fue a su closet. Tomo una llave y abrio un cajón. Saco un tubo. Volvio a la cama, me lo paso y volvio a darme la espalda. Era crema intima para mujeres, por anteriores experiencias sabia que la usaban las mujeres que se lubricaban poco o que usaban consoladores. Aposte por el segundo caso, por que tener crema en un cajon cerrado, seguramente ahí tenía todo tipo de dildos. Me eche un poco de crema en un dedo y fui por su ano. Lo unte bien, luego meti el dedo con mas crema. Estaba lista. Deje la crema al lado y me puse para que mi pene se posicionará en su ano. Ella bajo las sabanas y subio una pierna, ofreciendome su hoyito. No era virgen de por ahí. Yo habia llevado preservativos y ya me habia puesto uno, así que le habia puesto un poco de crema tambien, sobre todo en la punta. Puse mi miembro en su entrada, ella se acomodo tambien. Era una golosa. La penetre, me apretaba pero eso era lo rico. Entraba y salía. Ella tenía los ojos cerrados, gozando. Me sali y la puse en cuatro, con una pierna al lado, la penetre analmente de nuevo. Ya no tenía la potencia de antes, así que gozamos de a poco. Me sali nuevamente y ella se puso de espaldas, levanto las piernas para ofrecerme su trasero, queria seguir el anal. La penetre de nuevo. Ella puso sus brazos al lado gozando, le pregunte quieres mi semen. Me dijo: sí. Se puso de rodillas, yo me baje de la cama, me puse al lado y ella se acerco, me saque el preservativo y le meti mi miembro en su boca, utilizandola como una vagina. Cuando estaba próximo, ella abrio la boca, puse mi pene en su lengua y eyacule, mi semen salto, ella se lo trago todo, era una mamadora de semen. La próxima vez que nos reunimos, le presente los collares, sería mi gatita. Estuvimos juntos un año, luego ella se caso con uno de los abogados y yo segui con mis maduras.