Incestlover
Virgen
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- Abr 4, 2019
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Es de día y debo ir a la escuela, salgo de bañarme toda desnudita y me miró al espejo, me encanta mi piel morenita clara, mi largo cabello negro y mis largas piernas.
Pero lo que más amo son mis nalgotas: grandes, redondas, firmes y tersas y mis tetotas, que para como van, serán tan grandes como las de mi mamá, que son auténticos melones.
Las mías apenas tienen el tamaño de toronjas grandes pero son muy firmes y suaves, con aureolas café claro y unos pezones chiquitos moreno obscuro.
Sólo de verme ya me excite, así que acarició mi vulva recorriendo mis labios con las yemas de mis dedos, ¡Uf! Se siente riquísimo. Mi conchita se calienta y suelta babita, empapo mis deditos y los chupo,
¡Mmmmmm! Sabe delicioso
En eso estoy cuando mi hermana entró a mi cuarto, meneando sus anchas caderas y sus enormes nalgotas, ¡Me encantan esas dos gigantes posaderas! Desearía tener verga para penetrar ese hermoso culote,
debe sentirse delicioso entrar ahí con un pene de verdad.
—¡Vaya vaya! Emi—así me llamo— veo que estas ocupada—dice picaramente y sonriendo con esa bella sonrisa suya—¡Ay hermanita!—exclama excitada—esa conchita de ve tan rica—dice super cachonda y salivando
tremendamente—¿Quii.quiere.quieres que yo?
Sobra decir que claro que deseo que mi hermana coma mi sexo,que lo devore, pero es más excitante si jugamos de esta forma, después de todo, es sencillamente enloquecedor ver a mi hermana mayor, una joven tan hermosa
y sensual, preguntar tan excitada. Ella es toda una belleza, además de sus anchas caderas y grandes nalgas, tiene unas gordas y hermosas tetas de aureola y pezones rosados, abdomen plano unos hermosos ojos castaños, largo pelo negro lacio
y una hermosa piel blanca como el arroz, y como olvidarlo, esa boca de labios gruesos y lengua ágil.
Abro mis piernitas y separó mis labios con mis dedos invitandola a comer.
—¡A desayunar Mai! —le digo con cara lasciva.
Ella se arrodilla y comienza a comer, pero no de forma agresiva como se ve en el porno, sino con precisión y delicadeza, lamiendo
mis labios externos, chupando mis labios internos, calentando el centro de mi sexo con su aliento. ¡Ufff! Es tan excitante que
las piernas me tiemblan, así que camino hacia atrás y me siento sobre mi cama con mi hermana pegada a mi gruta.
Ella voltea a verme, se ve hermosa con su cara empapada por mis jugos vaginales, yo respiro agitada y caliente.
—Estás riquísima hermanita—me dice super cachonda.
—Si...sigue por...favor Mai—digo con voz entre cortada.
Ella escucha y obedece, volviendo a posar su boca sobre mi, lame y chupa mientras sujeta mis nalgas con sus manos, así esta un buen rato
hasta que justo cuando voy a llegar a mi orgasmo se retira de mi, y me emociono, se lo que viene. Rápidamente se sienta sobre
mi cara y sus nalgotas cubren mi rostro. Entierro mi lengua en su rosado y apretado ano ¡Que rico! Pienso al saborear su entrada trasera y los rastros de semen de papi alojados
en los intestinos de Mai.
Devoró con pasión mientras me toco para venirme mientras mi hermana rebota su cola contra mi boca, se ve que desea un orgasmo anal.
Después de un rato así, ambas terminamos.
—¡Ahhh! —exclama mi hermana al venirse y siento como su ano ahorca mi lengua.
Se separa de mi para dejarme respirar y une sus dedos a los míos y mientras nos besamos con mucha pasión me vengo.
El orgasmo es tan intenso que me retuerso y mi vulva es una fuente de jugo vaginal.
Aliviadas y excitadas nos damos un profundo y dulce beso saboreando el interior propio y de la otra, nos metemos a bañar y nos
vestimos para la escuela, de camino vemos a una nena de unos seis añitos y nos recreamos la vista viendo sus nalguitas.
Las cuales su mami aprieta de una forma que tanto mi hermana como yo reconocemos, nos miramos y sonreimos cómplices.
—Esa nena ya—comienza mi hermana
—Toma algo más que leche materna—término yo.
Sonriendo seguimos nuestro camino, pensando en lo que pasará en la escuela.
Continuará....
Pero lo que más amo son mis nalgotas: grandes, redondas, firmes y tersas y mis tetotas, que para como van, serán tan grandes como las de mi mamá, que son auténticos melones.
Las mías apenas tienen el tamaño de toronjas grandes pero son muy firmes y suaves, con aureolas café claro y unos pezones chiquitos moreno obscuro.
Sólo de verme ya me excite, así que acarició mi vulva recorriendo mis labios con las yemas de mis dedos, ¡Uf! Se siente riquísimo. Mi conchita se calienta y suelta babita, empapo mis deditos y los chupo,
¡Mmmmmm! Sabe delicioso
En eso estoy cuando mi hermana entró a mi cuarto, meneando sus anchas caderas y sus enormes nalgotas, ¡Me encantan esas dos gigantes posaderas! Desearía tener verga para penetrar ese hermoso culote,
debe sentirse delicioso entrar ahí con un pene de verdad.
—¡Vaya vaya! Emi—así me llamo— veo que estas ocupada—dice picaramente y sonriendo con esa bella sonrisa suya—¡Ay hermanita!—exclama excitada—esa conchita de ve tan rica—dice super cachonda y salivando
tremendamente—¿Quii.quiere.quieres que yo?
Sobra decir que claro que deseo que mi hermana coma mi sexo,que lo devore, pero es más excitante si jugamos de esta forma, después de todo, es sencillamente enloquecedor ver a mi hermana mayor, una joven tan hermosa
y sensual, preguntar tan excitada. Ella es toda una belleza, además de sus anchas caderas y grandes nalgas, tiene unas gordas y hermosas tetas de aureola y pezones rosados, abdomen plano unos hermosos ojos castaños, largo pelo negro lacio
y una hermosa piel blanca como el arroz, y como olvidarlo, esa boca de labios gruesos y lengua ágil.
Abro mis piernitas y separó mis labios con mis dedos invitandola a comer.
—¡A desayunar Mai! —le digo con cara lasciva.
Ella se arrodilla y comienza a comer, pero no de forma agresiva como se ve en el porno, sino con precisión y delicadeza, lamiendo
mis labios externos, chupando mis labios internos, calentando el centro de mi sexo con su aliento. ¡Ufff! Es tan excitante que
las piernas me tiemblan, así que camino hacia atrás y me siento sobre mi cama con mi hermana pegada a mi gruta.
Ella voltea a verme, se ve hermosa con su cara empapada por mis jugos vaginales, yo respiro agitada y caliente.
—Estás riquísima hermanita—me dice super cachonda.
—Si...sigue por...favor Mai—digo con voz entre cortada.
Ella escucha y obedece, volviendo a posar su boca sobre mi, lame y chupa mientras sujeta mis nalgas con sus manos, así esta un buen rato
hasta que justo cuando voy a llegar a mi orgasmo se retira de mi, y me emociono, se lo que viene. Rápidamente se sienta sobre
mi cara y sus nalgotas cubren mi rostro. Entierro mi lengua en su rosado y apretado ano ¡Que rico! Pienso al saborear su entrada trasera y los rastros de semen de papi alojados
en los intestinos de Mai.
Devoró con pasión mientras me toco para venirme mientras mi hermana rebota su cola contra mi boca, se ve que desea un orgasmo anal.
Después de un rato así, ambas terminamos.
—¡Ahhh! —exclama mi hermana al venirse y siento como su ano ahorca mi lengua.
Se separa de mi para dejarme respirar y une sus dedos a los míos y mientras nos besamos con mucha pasión me vengo.
El orgasmo es tan intenso que me retuerso y mi vulva es una fuente de jugo vaginal.
Aliviadas y excitadas nos damos un profundo y dulce beso saboreando el interior propio y de la otra, nos metemos a bañar y nos
vestimos para la escuela, de camino vemos a una nena de unos seis añitos y nos recreamos la vista viendo sus nalguitas.
Las cuales su mami aprieta de una forma que tanto mi hermana como yo reconocemos, nos miramos y sonreimos cómplices.
—Esa nena ya—comienza mi hermana
—Toma algo más que leche materna—término yo.
Sonriendo seguimos nuestro camino, pensando en lo que pasará en la escuela.
Continuará....