Mis Sobrinos Consentidos

heranlu

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Bueno he de empezar este relato con la descripción de quienes le damos vida, comenzare con decirles que estamos inmiscuidos, mis sobrinos Carlos (20 años), Jaen (19), Miguel(22), mi esposo David (40), mi hijo Fernando(18) y Yo (35).

A continuación les daré una reseña de cómo era la situación que estábamos viviendo en esos momentos, mi marido y yo la verdad es que tenemos una intensa vida sexual, vamos ha el le encanta y a mi me enloquece, desde novios con nuestros cachondeos intensos y luego con nuestras relaciones prematrimoniales, pero ha estas alturas de nuestras vidas ya la monotonía estaba haciendo presa de nuestro matrimonio y nos encontrábamos en una continua búsqueda de nuevas experiencias cosa que hasta el momento no habíamos logrado, claro que eso de intercambios de pareja como que a ninguno de los dos nos parecía una buena opción por nuestros ya conocidos celos, a demás de que nos inquietaba mucho el hecho de relacionarnos con extraños, ya que cabe mencionar que gozamos de una buena posición económica gracias a nuestras profesiones; mi esposo Ingeniero en electrónica y yo Doctora. Claro que David y yo continuábamos con nuestra actividad sexual pero ya sin esa chispa inquietante que es el de los primeros años.

Con lo que respecta ha mi hijo Fernando le hemos podido rodear de muchas comodidades y juegos (claro que es parte del truco para que nos de privacidad) y esto es motivo de que en mi familia nos hemos convertidos en los tíos favoritos de mis sobrinos ya que les encanta venir a disfrutar de los juegos y entretenimiento de mi hijo y de las comodidades de nuestro hogar.

Este es el panorama en el cual se desarrollan los hechos que hacen la razón de éste relato.

En una ocasión en que mis sobrinos, como era ya costumbre, pidieron permiso a mis hermanas de que los dejaran el fin de semana en nuestro hogar argumentando que se divertían horrores con su primo, ellas nos preguntaron que si no había ningún inconveniente en ello y nosotros les contestamos que no al contrario, encantados de la vida, así comenzó el viernes, en que se pasaron toda la tarde jugando con las consolas de videojuegos y demás juguetes hasta ya entrada la noche, cuando yo al estar en la recamara con David pues ya poniéndonos ha tono con caricias y mimos sexuales, nos percatamos de la hora y decidimos acostar a los peques, entonces como yo ese día había decidido ir muy arreglada a la reunión familiar pues usaba unos pantys tipo tanga color azul pastel y un bra casi transparente del mismo color, el cual ya me lo había retirado mi esposo con sus caricias previas, por lo que se me hizo cómodo nada mas calzarme una lickra pequeña de color blanco que fue la que estuvo mas a la mano y una blusa interior blanca, la verdad es que si note que mis pechos se marcaban en ella, al igual que mi tanga se delataba aun a pesar de la lickra, pero siendo sincera no le preste importancia y decidí ir a ponerlos en sus camas ya que se encontraban en la planta baja de la casa.

Cuando me acerco a ellos diciendo que ya era hora de ir la cama, me percato de una fija mirada y cara como de asombro por parte de Miguel a la cual de primera intensión no presté importancia, pero llega a ser tal la su insistencia que empiezo a tratar de pensar cual puede ser el motivo y trato de seguir su mirada hacia donde se dirige, siendo mi sorpresa que estaba absorto al vaivén de mis pechos, los cuales a cada paso que daba retumbaban haciendo eco del contacto de mi píe con el suelo. Lo cual me causó una choque de emociones y sentimientos primero vergüenza, después enojo, luego ternura por el hecho de ser niños y algo de culpa por estar yo consiente de que esa ropa pues la verdad no dejaba mucho a la imaginación, pero también una sentimiento de sensualidad ya que la manera en que me veía denotaba un a gran tensión sexual del chico, por lo que creo que me excitó un poco, pero yo todavía algo incrédula pues sigo con naturalidad y pues disfrutando de la situación pues llego hasta ellos muy sonriente y cómoda y les informo que es hora de dormir y no quiero batallar por ello, mi hijo algo volado por sus primos me hace un berrinche por lo que me agacho en cuclillas para levantarlo dándole la espalda a Miguel el cual de reojo alcanzo a ver que no me quita la mirada de mis nalgas las cuales en ese momento estaba en todo su esplendor a muy poca distancia de su rostro. Tratándome de incorporar lo más rápido posible sin éxito ya que me lo dificultaba Fernandito, haciendo el momento eterno, al fin lo levanto y lo convenzo de irse a la cama no antes de lavarse los dientes y prepararse para dormir.

Mientras yo voy a la cocina a hacer un café para mi esposo, el cual no se como me saldría porque consiente no estaba, ya que en mi cabeza solo revoloteaba la imagen de la mirada libidinosa de Miguel la cual me hacia sentir muy sexy y cachonda junto con una sensación de remordimiento por esos sentimientos; Vamos ellos eran mis sobrinos y unos peques aun, como era posible que yo me prendiera con eso.

Cuando me dirijo a la planta alta, ya con café en mano, me acerco al baño y alcanzó a escuchar una voces que dicen:


Viste!, viste! Que tetotas de mi tía?... Se le veían todas y no traía bra. Parecía la voz de Miguel.


...... Claro que si las vi, están lindísimas y se ven como que están bien duras... le contesta la otra voz; ....
Y viste que usa tangas?...(cuestiona Miguel)
No eso no lo vi.....(le contesta la otra voz)
Anda estaba bien bonita solo se notaba el triangulito arriba de sus nalgas .. Las tiene bien grandes y cuando se paro se le metió todo el short además se le ven unas piernotas bien ricas porque esta bien chiquito y apretado el short.(refiere Miguel)




Yo casi quedo pasmada al escuchar estos comentarios en esas voces tan pequeñas, hablando me mi con esos adjetivos y de esa manera, eso me confundió aun más en el sentimiento de excitación y culpa a la vez, por el hecho de estar calentando a mis sobrinos y lo peor del caso que me sentía muy bien de causar ese efecto en ellos.

Pero en ese momento trato de actuar de una manera normal y realizo un ruido para anunciar que me acercaba, callando de inmediato las voces, al pasar por el baño me doy cuanta de que los que estaban hablando de mí eran Miguel y Carlos. Diciéndoles yo únicamente ya no se tarden y que pasen muy buenas noches. Llego a la habitación y lo primero que me pregunta mi esposo es que porque demore tanto, a lo que contesto aun algo sacudida, que por causa de los chicos, él me observa y me dice: tu tienes algo, que pasa? A lo cual respondo dudosa que nada, él me empieza ha besar y no tardo en ponerme a tono y corresponderle con un masaje en su miembro y posteriormente con una buena sesión de sexo oral, yo habida de su miembro lo caliento a más no poder y le pido que me penetre con él, incitándolo a que lo haga de una manera fuerte y profunda, la verdad es que me encontraba muy excitada y quería descargar esa tensión sexual, pero no podía sacarme a esa situación con los chicos de mi cabeza. Le pido que me lo haga de perrito mientras me da nalgadas y yo aferrándome a sus nalgas duras y firmes para impulsarme contra él en cada envestida eso me arranco mas de tres gemidos y uno que otro grito llegando mi esposo a decirme que bajara la voz porque nos podrían escuchar los chicos pero la verdad es que hice caso omiso y mi marido estaba tan caliente que poco le importo, estuvo tan acalorados los ánimos que incluso le pedí que jugara con mi ano, cosa que él insistía en otras ocasiones y yo no accedía tan fácilmente, a lo cual me respondió con un toqueteo circular y lubricado de su dedo, mientras me penetraba muy duro y profundo, hasta el momento en que se acercaba mi orgasmos y empecé ha sentir contracciones de mi periné al igual que mi ano se apretaba y relajaba, en ese momento sentí como introdujo su dedo dentro de mi provocando una contracción refleja al paso de su dedo estallando con mi orgasmo, siendo indescriptible la sensación. Quedando agota y satisfecha completamente, hasta la mañana siguiente que me despiertan los ruidos de los chicos y mi esposo viéndome fijamente sentado en el sillón de la recamara me sonríe y me da los buenos días, seguido de una pregunta ¿Ahora si me vas a decir que paso? ¿Qué fue lo que te puso de esa manera anoche? Dejándome sorprendida de inmediato, creo que nunca me había incorporado tan rápido de un sueño desde que hice mi internado medico en el servicio de urgencias. Él se había dado cuenta de que mi cachondería y excitación se habían puesto a mil anoche, y que la sesión de sexo la disfrute como ya asía a tiempo que no lo hacia. Y pues me anime ha decirle, claro que yo con cierta vergüenza y pues con el mayor tacto posible, pues no sabía cual podría ser su reacción ante los hechos, y le digo: Mira David te voy a decir algo pero escucha con atención y por favor no digas nada hasta que termine, porque después no sé si tenga el valor para acabar..... Pues le conté lo sucedido con los chicos y lo que había escuchado en el baño y le explique que fue una sensación muy rara la que me habían provocado, y de cierta manera yo sabía que no era correcto eso, pero no lo podía sacar de mi cabeza; Y eso fue lo que paso, Que opinas? Le pregunte .....

Él muy serio y casi afásico solo me mira fijamente y sin esperarlo suelta una carcajada incontenible y me dice:


¡Que! Unos mocosos te pusieron cachonda, pero mi amor eso es increíble!; Yo casi molesta por la situación le dije que no fuera estúpido, que ese no era el motivo, que sus miradas y comentarios me habían hecho sentir sumamente sexy y sensual, tal vez por el hecho de levantarme el ego, ó por ser una situación tachada de prohibido, además de no sentirme atemorizada por el hecho de excitar a otra persona que no fuera él.

Él ya percatado de mi enojo, cambia el tono y me dice que es increíble que mis sobrinos ya estén en esos menesteres y más aun los efectos que han causado en nuestras vidas, por lo que me dice que no me preocupe pues la situación estaba controlada ya que ellos no se habían enterado de ese efecto que causaron en mi, además de que nadie más lo sabría, haciendo una pausa pensativa en su habla; solo viéndome fijamente a mis ojos, con una mirada que yo conocía que era de picardía y que estaba fraguando algo, por lo que lo interrumpí de su silencio, y dije: ¿Qué estas pensando David? (con un tono amenazante), tienes esa mirada y no me gusta nada. Él solo sonríe y responde: Pues nada,..... solo lo que podríamos hacer ahora!. Qué? ,le dije, como que hacer ahora, estas loco?; para nada mi amor pero la verdad es que me agrada la idea de pues seguir con la racha, podemos manejarlo y controlarlo bien, ellos son niños y nosotros pues adultos, además que lo haremos de manera sutil y cautelosa que opinas(me cuestiono), ¿que acaso estas demente? eso no es correcto, le dije. A lo que el muy maldito respondió, pues la verdad es que anoche como que no te incomodo demasiado hasta por la colita pediste¡ provocándome un sonrojo y dejándome muda, solo baje la mirada. Porque la verdad es que al estar escuchando sus argumentos e ideas me empezaron a rondar millones de situaciones cachondas con ellos y sentí esas hormigas y mariposas en mi estomago que terminaron en un cosquilleo en mi sexo al cual respondí con un fuerte apretón de muslos. Y ya como agradándome la idea le cuestione que como lo haríamos y el me respondió que con cosas cotidianas nada del otro mundo como descuidos o simplemente ropa sexy, dejándome pensativa aun más, y luego que?, pues nada solo les metes una calentada y ya, Tu eres la que manda no lo olvides. Con eso termino de convencerme por lo que le dije que estaba bien pero que el tendría que estar vigilando la situación listo para intervenir si algo no andaba bien. Claro que si mi amor todo va ha salir bien respondió.


Por lo pronto vamos a bañarnos para empezar, me dijo. El selecciono la ropa que llevaría esa mañana desde la interior hasta la exterior, me escogió una tanga muy chica de color rosa de esas que solo tienen un lazo en la parte de atrás, sin triángulo, con una blusa de tubo de esas sin mangas ni cuello solo como top de color blanco, me alisto mi percing del ombligo el que tiene un par de dijes con una piedra en cada punta, mi cadena de tobillo, además una mini falda de color negro de esas algo sueltas que me llegaba hasta mitad de muslo. Con unas zapatillas blancas de tacón bajo (5cm). Me peine con una media cola y mi pelo suelto, la verdad estaba muy coqueta, me sentí muy bien, claro algo nerviosa pero tolerable, muy bien vamos a bajar ya, pero hazlo tu primero y se normal con ellos aquí no ha pasado nada solo deja te ver. Y así lo hice, ellos ya estaban en la planta baja en la sala donde habían dejado los juguetes anoche, pero mal apenas abrí la puesta y rápido Miguel se coloco en una buena posición para ver las escaleras y observar quien bajaba por ellas, inmediatamente lo vi muy atento a mi andar, yo trataba de verlo despistadamente para no cohibirlo, pero la verdad es que talvez eso no lo hubiera desanimado, como que a ese chico le agradaba en verdad su tía y a mi eso me encantaba me halagaba demasiado. Yo acentuaba mis pasos haciéndolos firmes, ha sabiendas que mis pechos retumbarían a mi paso ya que solo los sujetaba la tela delgada y restirada de mi blusa, el muchacho ya ni hizo caso a los comentarios y peticiones de sus otros primos, solo viéndome como hipnotizado por mis encantos, al llegar a la planta baja me acerco ha él y le digo que buenos días dándole un beso en la mejilla, cosa que no se lo esperaba, supongo, por la cara de asombro que puso y para no verme tan evidente hice lo mismo con los demás, les pregunto si desean algo de desayunar a lo que responden que hot cakes, y les digo que en un momento se los tengo listos metiéndome a la cocina, en eso se acerca Miguel con Carlos me imagino que a decirle de que nuevamente no usaba bra, cual fue mi sorpresa que el par de chicos los tenia ya en la cocina alegando que si no necesitaba ayuda, (me imagino que solo era una excusa para entrar a seguir disfrutando del show) y ese nerviosismo con el que baje se fue disipando y aproveche para hacer el primer movimiento, claro que sí chicos, les respondí, y les fui ordenando que cosas necesitaba para que ellos los sacaran de la alacena, parece hecho de adrede pero ya estaba vacía la caja de la harina, diciéndome los chicos que no tenia nada en su interior, pero como contamos con una alacena grande teníamos otras guardada en la parte superior y fue cuando me decidí a meterme de lleno en el papel, no se preocupen chicos ahora la saco de la alacena y tomo una pequeña escalera plegadiza que guardamos en la cocina para ese motivo, y les digo con permiso niños dejen me la busco y al escuchar mis palabras de inmediato se juntan el par de sobrinos detrás de la escalera como prediciendo lo que se avecinaba, empiezo a subir a sabiendas de que mis piernas y muslos quedarían al descubierto debido a la pequeñez de la mini y lo peor, que desde ese ángulo podrían ver hasta mis nalgas, eso me puso a sudar , a cada paso que daba era una sensación de excitación y en cierta manera culpa, pero fue más mi cachondez que me atreví a más, ya estando allá arriba y con las nalgas al aire y sin escuchar el más mínimo ruido de los chicos (seguramente pasmados de la visión que tenían) Cuando los llamo Miguel ayúdame con la caja y Carlos tu con el chocolate líquido, los cuales tardan en responder temblorosamente Sisi! Se acercan a mi y volteo a verles discretamente solo para afirmar mis sospechas, sus miradas clavadas debajo de mi falda, yo sin hacer mas alarde solo les paso las cosas y empiezo a bajar inclinándome un poco más de la cuenta para exponer lo más posible mi nalguitas; ellos aun incrédulos solo se me quedan viendo y luego se ven entre sí, yo continúo como si nada hablándoles, aun que algo me decía que no me estaban escuchando, noto muy inquieto con sus piernas a Carlos seguramente estaba teniendo una erección y quería esconder su pequeño miembro ó estaba frotándolo contra sus muslos y pantalón. Entonces les digo que voy por su tío arriba y que se quedan a cargo del desayuno, me salgo de la cocina y paro bien la oreja para escuchar sus comentarios, los cuales no se hacen esperar, No manches wey viste a mi tía, le vi todas las nalgotas no traía nada debajo de la falda, decía Carlos....


claro que si traía calzones era una tanga rosa solo que el hilo estaba muy delgadito y se le metía muy dentro afirmaba Mike. Esta bien buena me puso la verga bien dura y luego las piernas que tiene están de poca exclamaba Carlos, Sí respondía Mike, se escuchaban muy animados, y de pronto dicen algo que no estaba planeado, ayer los escuchaste coger? No contesta Carlos, ¿como? si se escuchaba como gritaba mi tía yo creo que le dieron muy duro la verdad es que yo me hice una paja escuchándolos. Eso hizo un eco inmenso en mi cabeza, me imaginaba a ese pequeño fantaseando conmigo imaginando que era el él que me hacia el amor, sentí como mi vagina empezó a trasudar y lubricar mis labios hasta depositarse mis jugos en mi tanga que sentía que era insuficiente, casi corrí a informar a mi marido el cual aun estaba arriba, a cada paso en las escaleras sentía como rozaba la tanga mi clítoris haciendo más delicioso cada paso, llegue con el y le dije que estaba muy caliente explicando todo lo que había sucedido y el de inmediato se prendió se bajo el pants y el boxer y se expuso ante mi su miembro venudo y palpitando casi gritándome que lo hiciera mío, el mientras toco mis senos sin demorarse demasiado bajo a tocar mi vulva la cual estaba muy mojada ya, paso sus dedos como lubricándolos por un lado de la débil tanga y me dio un masaje con gran habilidad en mi clítoris ya muy hinchado, no resistió más y se arrodillo para tomar mi clítoris con su boca y hacerlo trizas con su lengua juguetona, yo rogaba por terminar y de pronto fue como si se pusiera en pausa el tiempo, se despego de mi y me dijo vamos a bajar, yo bastante encabronada por el paro tan brusco le digo que no, que termine su trabajo, a lo que responde burlonamente así de vas a quedar hasta que estés ha reventar, eso siempre le ha encantado a David hacerme desquiciar de excitación. Sin tener más que hacer bajamos al desayunador toda la familia de lo más normal. Yo me quede en un ambiente muy alebrestado, me sentía como muy tensa y el almuerzo me paso como si nada ya que no estaba muy al pendiente de la platica, al final cuando terminaron todos, me disponía a recoger la mesa mi marido les dijo a Mike y Carlos que nos ayudarán con ello, permaneciendo los chicos en la cocina sin mucho en fado ya que al parecer les agrado la idea, entonces permanecimos los 4 levantando todo cuando de improvisto al voltear bruscamente tropecé con David que llevaba un vaso con agua y lo derramo encima de mi torso, yo grite de primera intención llamando la atención de todos y cual fue mi sorpresa que al voltearme a ver, estaba la blusa completamente translucida dejando pasar todo el dibujo de mi areola y mis pezones los cuales rápidamente habían reaccionado al cambio brusco de temperatura, yo de inmediato y de manera instintiva me lleve mis manos al pecho para tratar de cubrirme tratando al mismo tiempo de buscar la cara de mi marido para ver su reacción ante tal accidente, pero cual fue mi sorpresa que el ya me estaba esperando con una mirada y una mueca de desaprobación por el hecho de estarme cubriendo el cual entendí de inmediato, y con un leve movimiento de su cara me incitó a descubrirme y dejar mis pechos al descubierto, eso me puso nuevamente dentro del juego en el cual habíamos quedado mi marido y yo, por lo que de inmediato me comporte de una manera normal y seguí recogiendo la cocina solo riendo por el incidente al igual que mi marido, mis sobrinos estaban como en shock no supieron como reaccionar porque no se atrevían a verme descaradamente por el hecho de estar David presente , pero aun así sus miradas los traicionaban, con eternos segundos fijos en el dibujo de mis senos con esa piel bronceada que los cubre. Los pobres estaban muy estresados, me imagino como se han de haber sentido. Así terminamos de limpiar y entonces dije voy a cambiarme chicos gracias por su ayuda, son muy lindos, y cuando me disponía a retirarme exclama mi marido ¡ya sé porque no mejor nos preparamos para darnos un chapuzón en la piscina! ¿Que les parece? Yo aguarde en silencio, ellos como que no se emocionaron demasiado, pero tampoco se negaron, solo respondí ahorita vemos eso y me retire.

Yo me sentía que esto se estaba poniendo algo fuerte, sentía que a causa de la excitación que nos causaba algo podría salir mal, pero la verdad es que lo estaba disfrutando horrores, se me venía a la mente las miradas de mis sobrinos llenas de inocencia con una mezcla de lujuria y maravilla, me hacían sentir la mujer más hermosa del mundo, absorta yo en mis pensamientos entra mi esposo a la recámara y me dice que esto del juego esta increíble, que es lo mejor que nos ha pasado en ya muchísimo tiempo, que estaba sintiendo la misma excitación que sentía cuando estaba descubriendo sus primeras aproximaciones con las chicas, que era algo muy difícil de explicar, Me confesó que una de sus fantasías era verme excitar o seducir a otra persona presenciando él los acontecimientos, pero que era algo que sus celos y temores siempre se lo impedían y que ahora se estaba haciendo realidad, aunque esas personas fueran unos chicos. Al enterarme de esto mis dudas se fueron haciendo minúsculas y me sentía mas segura de continuar con el plan.

Mi marido me dijo que lo de la alberca era muy buena idea, que podría tener muchas situaciones potenciales además de que era hora de ver que tan osados eran los chicos y hasta donde estaban dispuestos a llegar, pero me dijo creo que lo más conveniente es que yo no este presente en el patio ya que note como que yo los inhibo demasiado, pero le dije que estar sola no me sentía muy cómoda, me contesto que no me preocupara ya que el iba estar viendo todo desde dentro de la casa por medio del ventanal que esta en la sala mientras hacia que trabajaba en la lap top, además de que como el vidrio era ahumado no se apreciaba tan claramente el interior de la casa. Eso me pareció muy buena opción y accedí.

Lista a llevar a cabo la siguiente etapa del plan, me empecé a preparar, saque mis bañadores para decidir cual iba a usar, el me sugirió uno que fuera de dos piezas, además de ser pequeño en la parte de arriba, y con el bikini en tanga, pareciéndome buena la idea seleccione uno que me había comprado por medio de una pagina de Internet el cual me encanta, es de color blanco, dejaba gran parte de mis pechos visibles además de que la tanga era con un corte muy pequeño, me sentía muy sexy, David me dijo que solo bajara y al pasar con los chicos les dijera que si no gustaban de meterse a la alberca ya que el calor era muy fuerte y podrían pasar un buen rato, yo conteste que eso haría y al disponerme a salir me dijo que me colocara un pareo de color jaspiado entre blanco y gris el cual era muy ligero y largo pero de tela muy traslucida y me lo retirara hasta estar frente a la alberca. Y eso hice con un caminar muy cadencioso y con todo el contoneo debido, me acerque a ellos y los invite muy ligeramente y sin esperar respuesta di media vuelta y me salí a la parte trasera de la casa y acomode los camastros y arrime el bronceador saque una limonada del refrigerador y me dispuse a recostarme a tomar un poco de sol, retirándome el pareo y mostrando a todo esplendor mi traje de baño y mi cuerpo. Casi estaba segura que los chicos estaban viendo por dentro de la casa por medio del ventanal el espectáculo, pues no pasaron ni tres minutos desde que me había retirado el pareo cuando estaban todos saliendo de la casa todos con su ropa de alberca y empezando el chapoteo, yo con una mirada fija y coqueta volteo con chicos y les digo: ¡Que bueno que decidieron venir a hacerme compañía ya que me estaba sintiendo Solita! A lo que cuestionaron: ¿Y mi Tío... no va a venir? Y contesto que: no porque tiene trabajo atrasado de la compañía y tiene que adelantarlo; así que ustedes tienen que entretenerme y atenderme, a lo que de inmediato cambio el semblante de ellos, se noto una relajación y alegría en sus caras, eran unos Frescos esos chicos!

De inmediato me invitaron al agua estaban muy animados y muy insistentes, como que lo que querían era verme de pie y metiéndome a la alberca a lo que me hice del rogar, para cerciorarme de que David ya estaba en su posición de espectador y vigilante, tal vez para darme seguridad ó para empezar con nuestra cachondería, porque no quería que se perdiera de nada, de pronto alcanzo a ver una silueta que se acomoda en el interior de la casa, dándome la luz verde que esperaba.

Esta bien chicos ya me convencieron, espero que no este muy fría el agua, les dije desde luego que mis sobrinos quedaron boquiabiertos cuando admiraron en vivo y a todo color muy atuendo y como se acomodaba en las curvas de mi cuerpo, casi ni parpadearon, creo que nunca se imaginaron que yo utilizaba ese tipo de trajes ya que solo los tenia para los chapuzones en mi casa y en la privacidad con mi marido ó en vacaciones con él. Poco a poco baje las escaleras de la piscina muy cadenciosamente, como toda una modelo, estaba disfrutando toda esa atención. Incluso Jaen al cual no había notado ningún comportamiento extraño exclamo: Que linda estas tía, a lo cual me sonroje y solo agradecí el cumplido, de inmediato los otros afirmaron que sí en realidad estaba muy bonita y que me veía muy bien, claro que su tono de voz no sonaba tan inocente como el de Jaen. Pero cual fue la sorpresa de ellos que cuando el agua toco la escasa tela de mi traje comenzó ha dilucidarse un poco mis mi piel sobretodo las partes de mi cuerpo mas morenas como mis areolas y pezones además de una leve y delgada sobra de mi escaso vello púbico. Así empezó el rato, nadando tranquilamente de repente yo jugando a pararme de manos bajo el agua para quedar con las nalgas y piernas para arriba, sabía que eso les encantaba, porque me lo pedían una y otra vez, es más hasta me retaron ha hacerlo como ellos y los muy listos lo hacían, pero separando mucho las piernas (Que predecibles ¿no?) seguramente al hacerlo quedaba completamente a su vista muy abultamiento originado por mis labios a demás de apreciar mis piernas y muslos, eso me subió aun más la temperatura por lo que decidí atreverme a jugar más en serio, les dije que si lo intentaría pero que ellos me ayudaran porque podría perder el equilibrio, les dije: Ustedes me sujetan las piernas y me ayudan a alcanzar la posición, rápidamente se alistaron y tome mucho aire mientras ellos contaban hasta 3, iniciando la inmersión de inmediato sentí todas esas manitas recorriendo mis piernas y muslos las mas fuertes (por la forma de presionar lo note) se colocaron por dentro de mis muslos y muy cerca de mi entre pierna y no se hizo esperar la presión ejercida por la parte interna de mis piernas forzando la separación de ellas, a la cual fui cediendo pero la verdad es que esos chicos parecía que no les importaba el limite de mi flexibilidad, no se que planeaban porque empecé a sentir que la tensión de mis músculos obturadores de tan abierta que me estaban poniendo las piernas, pero era una tensión que me estaba dando un tinte excitante ya que era el resultado de la calentura de estos pequeños ya que al parecer querían resaltar lo más posible el bulto de mi vulva ó incluso el inicio de mi culito, que seguro ya estaban viéndome el cambio de coloración normal del ano.

Trate de aguantar los más que pude, pero la sensación de falta de aire comenzó a hacer estragos en mi y cuando me disponía a salir de la posición, algo me tomo por sorpresa; La sensación de una mano completa, me estaba ejerciendo una presión sobre la vulva, originando una rápida incorporación, de una manera descompuesta, por lo que di algunos manotazos y con un contacto accidental sentí unas delgadas piernas que terminaban con un delgado miembro erecto y duro. Ellos se asustaron un poco porque trague un poco de agua, pero ese tiempo lo tome para recuperar la calma y el control por lo que solté una risa algo falseada y les dije que me metió agua en la nariz, que no se asustaran, pero Carlos tenia una actitud de culpa, por lo que supuse que había sido él el que se había atrevido a tocarme en mi parte, por lo que les dije que me permitieran recuperarme un poco, mientras ellos continuaran divirtiéndose, yo por el momento estaba recordando la sensación de sus manos recorriendo mis muslos y la sensación que me originaba en mi el paso de la brisa por en medio de mis nalgas y sobre mi vulva, además de que el atrevimiento del chico me calentó aun más. Aunado al descubrimiento de ese incipiente pene erecto el cual me confirmaba que esos chicos estaban muy calientes conmigo y se me ocurrió tomar los visores que estaban sobre un borde de la escalera para echar una mirada por debajo del agua para identificar de quien era ese pene erecto, pero cual fue la sorpresa que al sumergirme me di cuenta de que estaba asechada por miembros erectos pertenecientes a mis sobrinos, parecía que el único que no estaba conciente del cachondeo era mi hijo, pero Miguel, Carlos e incluso Jaen estaban bien calientes. Eso tuvo un efecto exponencial en mi excitación al descubrir que se estaban caldeando conmigo y además de que estaban alcanzando un grado de calentura en el cual no les importaba descararse ya que me habían tocado sin pensar en nada más.

En ese momento decidí echar toda la carne al asador, muy firme me aproximo al extremo de un lado de la alberca en el cual quedaba más cerca de los chicos para salir por ahí sabiendo que al salir tendría que esforzarme para lograrlo lo cual acentuaría mis nalgas y dejaría al descubierto mi entrepiernas, culito y mi bulto, ellos de inmediato quedaron boquiabiertos y mudos solo siguiéndome con su mirada, yo continué hasta llegar al camastro y recostándome en él, colocándome mis lentes de sol, me tiendo de espaldas en él y volviéndome así ellos de una manera coqueta le digo: Jaen me puedes hacer el favor de colocarme el bronceador en la espalda, terminando con una leve sonrisa pícara, respondiendo tímidamente: ..... Yo?, Sí! Tu, les dije que ustedes tendrían que ayudarme ó no quieres? Claro que si tía, el pobre salió de los más incomodo con ese pedacito de pene erecto no encontraba con que cubrirse ni como caminar para disimular un poco, Apúrate Jaen(le dije) mientras los otros dos mostraban una cara de envidia y de suspenso, atentos tratando de imaginarse que se sentiría estar en el lugar del chico, Yo tome mi posición con las piernas ligeramente abiertas y con mis nalguitas paradas para resaltarlas un poco más de la cuenta.

El tímido chico se acerca casi con miedo en sus ojos, (Casi me sentí malvada) Le digo pon un poco de la crema en tus manitas por favor y me la aplicas sobre la espalda hasta que desaparezca en mi piel, como si me dieras un masaje; el pobre casi temblando, comienza a realizar mis instrucciones y lentamente empieza a mover sus manitas sobre mi espalda, con un mínimo contacto, como evitándolo lo más posible, por lo que lo corregí; Jaen por favor aplícala bien no tengas miedo de tocarme no muerdo ni pico; Corrigiendo sus movimientos poco a poco tomando mas confianza, aplícala en toda la espalda, es más por favor desata el moño de la parte de arriba del bikini para que no me queden marcas, Con voz entre cortada me dice: ¿Este tía? sintiendo un leve jaloncito, sí ese conteste. Y levantando un poco mi torso del camastro, para retirármelo completamente, dejando aprecia el perfil de mis senos, al acomodarme otra vez mis senos se desbordaban por los lados de mi talle por la presión de mi propio peso ejercida sobre ellos. El pequeño casi pasmado esparce la crema por la parte alta de la espalda, y le digo que también en los lados, pasando sus pequeños dedos por el margen de mis senos casi estaba muerto de miedo y los otros chicos muertos de la envidia, no perdían detalle del engrasado, por lo que dije: A ver Jaen se me hace que ya te cansaste, Carlos ayúdale por fa, y de inmediato cambio su cara de descontento y se apuro en salir (Este chico si era más atrevido) Ve a jugar con tu primito Jaen, le dije, retirándose lentamente, Sentándose a mi lado Carlos El cual me recorría con su mirada desde la punta de los pies hasta lo poco que se apreciaban mis senos. A ver pasa un poco más de crema en la espalda y comenzó, de inmediato note que este chico no se andaba con rodeos, sentí su fuerza al recorrer mi espalda y como bajaba tanto que movía el elástico de la parte superior de mi tanga con el paso de sus dedos, además de que al recorrer mi talle presionaba la parte lateral de mis senos como queriendo tocarlos completamente, al estar en la parte baja de mi espalda, yo movía la cola de tal manera que se levantará más para demostrarle que sus masajes me estaban poniendo cachonda, en eso le digo Carlos por favor aplica en mis piernas también, por lo que de inmediato se pasa al extremo inferior del camastro para tener una perspectiva de mí que le permitiera ver todo lo largo de mis pernas así como el comienzo de mi bulto donde solo se apreciaba como emergía de entre mis nalgas el fino hilo blanco de mi tanga que cubría mi vagina.

Iniciando desde mis tobillos realmente este chico me estaba poniendo a mil, era muy bueno para dar masajes ó tal vez era mi calentura la que hacia que fuera el mejor, el chico a dos manos esparcía en ambas pantorrillas la crema blanca, que se desvanecía al repasar sus manos sobre mi piel dejando solo un hermoso brillo en ella, de pronto noto que sus manos chocan en la parte interna de mis piernas por lo que le pregunto que si así estoy bien o me muevo Respondiendo el muy cachondo que separe un poco mas las piernas, a lo cual accedo haciéndolo un poco mas de la cuenta, por lo que ahora estaba ante sus ojos toda mi vulva solo cubierta por un pequeño pedazo de tela blanca la cual aun estaba mojada, dibujando de una manera de más marcada mis labios, con mi culo ante sus ojos mostrando mi cambio de coloración y las pequeñas rayas donde denotaban la situación de mi hoyito. El chico estaba completamente entregado y disfrutando de su trabajo, al llegar a mis muslos los tocaba y apretaba como queriendo abrirlos con fuerza y separarlos para ponerlos en posición de follarme, como lo había hecho mi esposo la noche anterior, sus dedos los acercaba tanto a mi entre pierna que llegue a sentir como la punta de sus dedos toqueteaba mis labios, el muy descarado lo hacia como si no me fuera a dar cuenta, estaba fuera de sí el chico ya casi se había olvidado del resto de mis muslos, yo solo se limitaba a la parte interna de ellos. Entonces interrumpo su estado afanoso diciendo: Carlos... ¿Te molestas si te pido que me apliques también en las pompis? Porque creo que es el único lugar que falta y si no me voy a tostar de más.


El pobre no podía creer lo que estaba escuchando y creo que hasta paso saliva, y me dijo de manera insegura ¿Estas segura tía? A lo que respondí Claro que si, no te preocupes es como ponerle aceite a un bebe. (Que estúpida comparación, verdad? Pero al parecer para el chico fue suficiente, y preparo mas crema en sus manos y comenzó a esparcirla por mis nalguitas, con movimientos suaves y circulares, los cuales se fueron haciendo mas bruscos al ir perdiendo el nerviosismo del chico y subiendo su calentura, lo máximo fue cuando hacia sus movimientos hacia fuera, separándome mis nalguitas originando que mi culito quedará expuesto, solo sentía como el hilo de mi tanga se metía completamente y como rozaba con mi ano a cada masaje que daba el pequeño. Yo sentía unas ganas enormes salir corriendo a la recamara de mi esposo y terminar con esta excitación con un orgasmo increíble, pero a la vez algo me impulsaba a seguir calentándome más, fue algo muy extraño, por lo que le di las gracias a Carlos y me dispuse a llamar a Miguel, el más grande de todos y el que había originado toda esta locura, yo sabía que el era el más atrevido además de ya estar muy caliente por todo el espectáculo que presenció, por lo que actué con más cautela, me di la vuelta en el camastro cubriéndome mis pechos solo con las manos y le dije a Mike me puedes tu poner crema en mis piernas por favor? A lo que el chico no dijo nada y solo se acerco, no mostró nada de pena ni duda, aun a pesar de acercarse asía mi con su pene erecto, tomo el frasco de la crema en sus manos y lo aplasto sobre mis piernas dibujando una línea con ella, la cual fue esparciendo lentamente; esté chico si me puso de nervios sentía en su mirada la decisión de llegar hasta los limites y sobre pasarlos.

Pronto llego con sus masajes y caricias hasta la parte alta de mis piernas donde al frotar cerca de mi ingle no perdió la oportunidad de rozar mis labios con sus dedos y de inmediato volteándome a ver a los ojos (gracias a dios que traía unos lentes de sol) como buscando alguna respuesta a su osadía, sin encontrar nada en mi cara, pero la verdad es que mi respiración algo agitada me delataba, gracias a que era un pequeño e inexperto no reconoció ese signo de excitación. Solo interrumpí el silencio para decirle que me pusiera en el estomago, a lo que tampoco respondió nada, solo accionó a mis peticiones, se entretuvo mucho con mi ombligo como jugando con él, semejando a que era mi vagina ó culito, al menos así lo entendí.

El tomo la iniciativa y subió sus manos hasta hacer contacto con las mías, que estaban ocupadas cubriendo mis senos, como pidiendo autorización para masajearlos, buscando mi consentimiento, a lo cual cedí un poco de terreno al subir un poco el nivel de mis manos escapando ya parte de mis pechos a sus manos y vista, la cual no tardo en masajear, sentí como sus caricias hacían estragos en mis pezones, esas típicas cosquillas en la punta que solo originan comezón y ganas de calmar con caricias en ellos, pero al mismo tiempo esas cosquillas bajaban por todo el centro de mi vientre hasta hacer blanco en mi hinchado clítoris, eso casi me hace tener un orgasmo además de unas tremendas ganas de saciar esa comezón por lo que de buenas a primeras retire mis manos hacia los costados de mi cuerpo dejando totalmente descubiertos mis pechos los cuales estaban coronados en la punta por un par de pezones muy parados los que de inmediato se vieron cubiertos por la crema blanca del bronceador y recibieron las manos fuertes de miguel que de inmediato masajeo para esparcir la crema, pero a la vez frotar mis pezones los que al parecer no tenían llene y cada vez era más el cosquilleo en mi clítoris.

Mis pechos estaban relucientes, brillaban intensamente por el sol en verdad era muy excitante la postal, cuando de repente miguel para y aprieta solo mis pechos con sus manos que no alcanzaban a cubrirlos completamente y pone una cara como de tensión y termina con un suspiro, el pobre se había venido solo, así de simple. Eso fue el acabose, que me hizo reaccionar, simplemente les dije ahorita regreso y salí corriendo en busca de mi marido para que se encargara de mi; él cual lo encontré con su verga lista para reventar dentro de mi. He de decir que hasta ahora es una de las cogidas más memorables que he tenido, hasta me desvirgino por el culito. Y desde entonces yo soy la tía más consentida de mis sobrinos, y ellos de nosotros.​
 
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