Me llamo Irene y estoy felizmente casada con mi marido Toni ambos tenemos 42 años y vivimos a las afueras de una cuidad costera de España.
El resto de mi familia lo forman mis dos hijos Juan y Marta de 17 y 18 años respectivamente, lo que voy a contarles pasó hace 2 años a mediados del mes de Abril, por aquel entonces mis suegros José y Eva vivían en nuestra casa ya que la suya estaría siendo reparada durante un mes y medio aproximadamente.
La relación de toda la familia es muy buena mis suegros pasan mucho tiempo con los niños desde siempre debido a que por motivos de trabajo ni mi marido ni yo comemos en casa.
Llevaba una semana llegando a casa y encontrándome pelos de mujer ya sea mi cuarto de baño o en mi cama, el corazón me dio un vuelco y por dentro algo me decía que era imposible que mi marido me pusiera los cuernos y menos en nuestra propia casa.
Para sacarme de toda duda decidí llamar a una amiga que tiene una empresa de seguridad y muy amablemente me conecto un par de cámaras por la casa escondidas en diversos objetos, una en mi cuarto otra en el cuarto de baño y una tercera en el salón, solo tenía que ponerlas a grabar antes de irme y para ver lo que sucedía solo tenía que usar el ordenador.
Una vez llegue al trabajo decidí conectar las cámaras pero como tenía muchas cosas que hacer no pude prestarle mucha atención, una vez vine del almuerzo recordé lo de las cámaras asique me puse a vigilar un rato.
Cuando puse las tres cámaras vi que mis suegros estaban en el salón viendo la televisión, muy tranquilos sentados sin hacer nada, al poco rato aparecieron mi hijos que venían de la universidad venían los dos juntos ya que el mayor pasa a buscar al pequeño.
Se fueron imagino a comer debido a la hora que era asique yo seguí trabajando apague la pantalla pero puse audio por si acaso sucedía algo.
Pasarían entorno de media hora cuando un descomunal gemido llamo mi atención, vaya susto que me pego, baje las persianas de mi despacho cerré la puerta con llave y me puse los cascos para escuchar.
Cuando encendí la pantalla me quede helada apoyados en mi cama estaban mi suegro y mi hijo sentados besándose mientras mi suegra les comía las pollas a los dos, la escena me quedo perpleja cabreada, excitada y a la vez aliviada al ver que mi marido no estaba.
Mi coño se empezó a encender sin querer al ver aquella imagen como mis suegros se follaban a mi hijo, durante varios minutos estuvieron así hasta que mi hijo se levanto y tumbo a su abuela para lamerla el coño, mi suegra estaba desbocada tenía una cara satisfacción que no podía con ella y de vez en cuando soltaba un !!!! NO PARES NIÑO!!!!!!
Mi suegro se puso de pies en la cama para dejar sus huevos y su polla a la altura de su mujer que se los chupaba y mordía entre gemido y gemido.
Mi mano bajo a mi pantalón desabroche los botones y metí la mano en mi coño, necesitaba terminar esto porque estaba demasiado caliente.
Según me tocaba y con la excitación que tenia no me di cuenta que en todo esto faltaba mi hija donde estaría la pequeña de la familia que no la veía.
Como si alguien me ollera pronto oí como su abuelo la llamaba y como si fuera un rayo allí apareció mi hija con un diminuto tanga y un sujetador que le hacía unos pechos gigantes.
Una vez que la vieron mi suegro se levanto y con mucha ternura la empezó a besar y no tardando mucho la quito la poca ropa que llevaba, mi hija se agacho y le empezó a comer la polla a su abuelo, estaba claro que no era la primera vez que lo hacían parecía ya actos automatizados que hacían con relativa frecuencia.
Yo estaba ya apuntito de correrme me estaba haciendo un dedo antológico en mi despacho algo que jamás pensé que haría pero así se dio la situación.
Una vez que mi hija le chupo bien la polla a su abuelo esta se apoyo en la pared y él se la empezó a meter despacito pero sin pausa, mientras mi hijo hacia los mismo con su abuela, cuando vi eso ya fue lo que falto para correrme y soltando gemidos sordos llegue al final de mi orgasmo.
Mientras me limpiaba con pañuelos mi mojado coño seguía mirando la follada que se estaban dado no paraban, cambiaron un par de veces de posición pero sin descanso alguno, en una de esas envestidas mi hijo aviso de que se iba a correr, y sin tardar su hermana saco la polla de su abuelo y se puso a los pies de su hermano junto a su abuela.
Mi hijo empezó a soltar leche cayendo en la boca y nariz de su hermana pero con s mano limpio el semen y se lo dio a probar a la abuela que hizo su cata respectiva. Una vez el chaval término se tumbo en la cama mientras mi suegro se la metí a Eva y mi hija dejaba el coño cerca de su abuela para que se lo lamiera.
Entre unas cosas y otras se dio la hora de irme asique tuve que dejarlo así, pero bueno por lo menos descubrí la verdad de lo que sucedía.
Cuando llegue a casa allí estaba mi marido viendo la tele junto a mi suegra y mis hijos, una vez fui a la cocina y comí un poco fui a mi cuarto estaba todo como lo deje incluso me atrevo a decir que echaron ambientador recordando lo ocurrido me excite asique desde el cuarto de baño llame a mi marido.
Yo le espere en el cuarto de baño desnuda y muy caliente y cuando apareció no le di tiempo ni a responder me tire encima suyo y le empecé a besar mientras buscaba su polla entre sus pantalones, la escena también le debió de excitar a él bastante porque pronto localice su polla dura, me agache y empecé a chuparla igual como antes había visto a mi suegra hacerlo con mi hijo.
Los dos estábamos muy excitados asique fui al grano me puso de rodillas y me empezó a meter su polla, nunca había estado tan excitada y era un torrente de adrenalina, mi marido lo capto y el polvo estaba siendo impresionante, estábamos tan cachondos que no duramos mucho asique una vez me corrí saque la polla de mi coño y se la empecé a pajear hasta que este se corrió en mi boca.
Después de la follada nos duchamos juntos con sus respectivos toqueteos, una vez salimos del cuarto ya cambiado y aliviado, mi suegra pregunto que donde estábamos a lo que mi marido titubeo y yo directamente me partí de risa
Después de la primera entrega en la que descubro como mis hijos y mis suegros tienen relaciones sexuales os contare como siguió la aventura de mi familia.
Durante la siguiente semana se repitió lo que conté en mi anterior relato mis hijos y mis suegros tenía relaciones y mientras yo desde el trabajo veía todo lo que pasaba , cada vez estaba mas enganchada y recordaba mi época de universidad en la que yo experimente muchas cosas relativas al sexo.
Ir a trabajar se había convertido en un disfrute diario y aunque me tenía que quedar más tiempo en el trabajo, la verdad no me importaba.
Habrían pasado cosa de dos semanas desde que había instalado las cámaras, la familia al completo a excepción de mi se encontraba en el salón viendo la tele, estuve mirando un rato pero al ver que simplemente veían la televisión decidí seguir trabajando, cuando de repente el sonido que oí llamo todo mi atención.
Mis suegros y mis hijos se habían puesto delante de la cámara y estaba dejándome un mensaje claramente para mí.
Empezó hablando mi suegro diciendo que se habían dado cuenta de las cámaras hace unos días y me preguntaba que si me gustaba lo que veía.
Después hablo mi suegra diciendo que al haber instalado las cámaras los había ahorrado el trago de tenerme que decir todo lo que hacían juntos.
Y por ultimo hablo mi hijo expresando su felicidad de lo bien que se lo pasaban juntos todos y que esperaban que me gustara lo que veía.
Yo estaba impresionada pero la verdad es que tenía un montón de ganas de estar con ellos, pero dando vueltas a la cabeza me acorde que viendo la televisión estaban todos es decir mi marido también y ahora no estaba.
Estuve mirando las distintas cámaras pero no lo encontraba asique pensé que alomejor se había ido hacer algo.
Después de lo que había escuchado no podía hacer mucho asique pasadas dos horas de ver el video me fui a casa alegando enfermedad.
Iba en el coche nervioso con la situación en casa pero tenía un montón de ganas de estar con ellos y compartir nuestros cuerpos.
Una vez aparque el coche entre en casa y delante del televisor estaban sentados los 4 mis hijos y mis suegros. Mi hija se levanto y me dio un abrazo, estaba muy contenta que por fin hubiese llegado a casa.
Ya saludada mi hija mi suegro me dijo al oído que me pusiera una bata sin ropa interior y que esperara en mi dormitorio a Eva.
Nerviosa me fui a mi dormitorio una vez desnuda y antes de ponerme la bata entre en el baño a duchar mis partes íntimas, estaba casi preparada cuando llamaron a la puerta.
Era mi suegra, venia en mi busca como bien me dijo José, ella también iba en bata y de la mano llevaba una venda, cuando baje la mirada y vi lo que llevaba en la mano ella sonrió y me dijo que era para mí.
Después de atarme la venda me dio un beso en los labios y mi susurro al oído que lo pasaríamos muy bien, a lo que yo nerviosa sonreí tímidamente.
Empezamos a bajar las escaleras íbamos despacio ya que al no ver nada iba con mucho miedo de caerme, cuando ya llegamos me sentaron en un sofá y por la textura estaba segura de que era el salón.
Juan comenzó hablar diciendo que jamás olvidaría este día ,empezó a susurrarme al oído cosas bonitas a la vez que me desabrochaba la bata, ahora me encontraba desnuda ante los miembros de mi familia y lo peor de todo yo no los podía ver.
Una mano comenzó a tocarme el coño con gran maestría algo que hizo que me terminara de calentar lo suficiente para empezar a gemir, una vez denotaron que estaba caliente dos bocas empezaron a chuparme los pechos mientras una tercera me hacia gemir comiéndome el coño.
Pronto empecé a chillar ya ante la inminente llegada al clímax, todas las bocas lamieron con más ansia ante mi reacción, y sin más me corrí, solté un suave ¡mmmmm!
Ahora me apetecía a mi jugar asique pedí que me acercaran las pollas mis hombres, dos pollas frente a mi boca yo comía sin cesar una y después otra a la vez que los pajeaba con ganas, después de un par de minutos chupando decidí que quería un coño, hacía tiempo que no comía uno aunque eso no se olvida, jeje.
Los gemidos eran aclaratorios era mi hija sin ninguna duda, como buena madre la senté junto a mí y la abrí de piernas para estar las dos mas cómodas pero yo me puse con el culo en pompa esperando que alguien se aprovechara de mi.
Y no tardo mucho en apenas segundos note como me la metían en mi coño, alternaba mis resoplidos con el coño de mi hija ya que a veces me faltaba el aire.
Después de diez minutos así pedí un cambio de mujer quería chupar el coño a mi suegra, mientras esperaba note como un hombre me levantaba y se ponía debajo mío en el sofá, este empezó a metérmela por el coño mientras note como alguien me untaba lubricante en el culo, sin duda sabían de mis gustos asique no me negué pero ya me fue imposible seguir comiendo el coño a Eva.
Yo estaba agotada el ritmo de las metidas era brutal y yo había perdido ya la cuenta de las veces que me corrió, mi hijo que fue quien estaba en mi culo me pidió poderme correr dentro de el a lo que yo accedí, mientras pedía a mi suegro que se corriera en mi boca.
Una vez que todos habíamos llegados note como ellos dos se sentaban a mi lado mientras yo me quedaba recostada poniendo mi cabeza sobre uno, el cansancio me podía y el no ver me agobiaba asique me quite la venda.
Efectivamente mi suegro y mi hijo estaban a mi lado sudados y cansados por el esfuerzo, la sorpresa vino cuando vi que en el sillón estaba mi marido sentado, llevaba todo el rato observando con su polla dura mientras mi hija se la comía, yo miraba mas no podía hacer me dolía todo, pero después de verlos follar mi cuerpo se empezó animar como el resto de mis compañeros mi hijo y Eva fueron el baño a lavarse mientras yo y José nos tocábamos viendo a los otros dos follar.
Me agache y empecé a comerle la polla a mi suegro, estaba muy caliente, cuando oí a mi marido me, obediente fui y me dijo: toma mi leche, después de darle un beso me agache y me dio un chorretón de semen, después de tragármelo me di cuenta que estábamos en y yo solos, nos abrazamos y nos besábamos como dos jóvenes enamorados, sin duda ahora ya nadie quería que se fueran José y Eva ya eran parte de la casa.
Después de lo ocurrido anteriormente en la que ya todos estábamos compenetrados un día después de que llegara yo del trabajo nos reunimos en el salón para hablar de la situación.
Nadie puso ningún tipo de pega a nuestras relaciones, todos estábamos encantados, ellos porque ya llevaban tiempo y yo porque estaba empezando a disfrutar de otros cuerpos, durante no mucho tiempo hablamos abiertamente poniendo las reglas clara en casa no habría ningún tipo de censura pero fuera de casa nadie podía sospechar lo mas mínimo.
Ese día no paso nada todos aún estábamos cansado del día anterior, al día siguiente ya era viernes asique no nos podíamos ir muy tarde a la cama.
Cuando la mañana siguiente me levante como de costumbre mi marido ya se había ido a currar y mis hijos se irían a sus clase en breve me duche me vestí y me fui a la cocina, allí estaba mi hija con un bol de cereales aún no había empezado a comer estaba levantada cogiendo la leche, lanzándola una sonrisa la pedí que por favor me hiciera un café y mi hija sin ningún tipo de pega me lo hizo.
Mientras el café se hacía estuvimos hablando de temas banales si ningún transcendencia cuando en una ocasión mi mirada perdida va dar a su bol de cereales algo había llamado mi atención, cogí el bol para verlo de cerca y para mi sorpresa lo que había junto a los cereales era semen, mi hija me miro al ver que cogí el bol con cara de sorprendida.
Es de Juan por las mañanas siempre me da un poco dijo mi hija, acto seguido me cogió el bol y se echo la leche y empezó a comer.
Estaba claro que en esta casa sucedían muchas cosas que yo no veía, rápido me tome el café y me fui ya que tenía el tiempo justo la di un beso a mi hija en la mejilla para despedirme pero entonces ella puso cara triste y me dijo –mama así no- cogió mi cabeza y me dio un beso con lengua.
Así si te puedes ir, ambas nos separamos y yo me fui, la mañana en el trabajo fue divertido cada vez que pensaba en mi familia unida y en el giro que había dado mi vida me maravillaba cada vez más.
Fruto de mi poca efectividad los últimos días en el trabajo mi jornada tuvo que se, avise en casa para que no me esperaran para comer.
Cuando no sería más de media tarde y ya quedaba poco para que me fuera recibí un mensaje de mi marido, el mensaje llevaba una dirección y poco más.
Tan pronto como pude salí del trabajo y encendí el GPS y puse la dirección, no estaba a mas de 50 minutos era un pueblo del que rara vez había oído hablar de él, sin más tardar me puse en marcha el viaje se hizo corto en parte al buen estado de la carretera y a mi imaginación que pensaba mil cosas distintas que podían pasar allí.
Una vez llegue allí me costo encontrar la casa tuve que preguntar porque el GPS no lo encontraba, pero bueno algo mas tarde y después de unos minutos de estrés lo encontré era una casita apartado un poco del pueblo arriba de una montaña solo había dos casas más por ahí a varios metros sin duda era allí el coche de mi marido y el de mi suegro estaban aparcados no había duda.
Toque el claxon y salió mi suegro José, su sonrisa denotaba felicidad, yo me baje devolviéndole la sonrisa me dio un abrazo y entramos para la casa.
No era una casa muy grande tenía un salón cocina y tres habitaciones y un cuarto de baño, lo que no entendía es como una parcela relativamente grande podía tener una casa tan pequeña, pero enseguida lo entendí.
Cuando salimos al jardín todo encajo la zona verde era tres veces más grande que la casa aparte de una piscina muy bonita con escaleras de obra tenía una zona de tumbonas y hasta una pequeña zona de bar con dos mesas.
Mis ojos abierto como platos era muy bonito todo y mientras mi suegro me contaba me surgió la duda de porque habíamos venido aquí, y claro no dude en preguntarle.
Mi suegro me conto que él y Eva pertenecer a un club de intercambio de parejas en total 5 que se reúnen aquí de vez en cuando entre todos compraron la casa y la reformaron y que suelen venir . También puedes reservarla como hice yo sin dar explicaciones de quien viene eso si hay que dejar todo como estaba.
La verdad que le idea es muy buena y me sorprendió que mis suegros se lo montaran tan bien, me tenían muy engañada. José y yo nos acercamos a la zona del bar, estaba muy bien todo en madera con frigorífico vasos platos y un pequeño friegaplatos.
Mientras observaba el bar oí bullicio sin duda era el resto de la tropa venían todos muy de deporte se habían ido los cuatro a andar y venían más que sudados, todos me saludaron y hablamos de la sorpresa que me habían dado, pasaron unos diez minutos y mi suegra hablo para manifestar que se tenían que duchar mi hija resoplo y aclaro que ahora con un solo cuarto de baño tardarían un montón.
Mi suegra salió corriendo para casa y volvió en un suspiro traía champús y varias toallas dejo todo a lado de dos duchas que había en la piscina y se empezó a desvestirse todos la mirábamos después de los de estos últimos días yo a mi suegra la miraba con admiración y cada idea suya estaba llena de ingenio, mi marido y después mis hijos se empezaron a desvestir y por tandas su metieron en las duchas.
Cuando les vi duchando recordé que yo no me duchaba desde anoche y dije que con las prisas no había podido coger nada de ropa, mi suegra me respondió y me dijo que ella me había traído alguna cosa, entre en casa y entre en una habitación en la que vi mi maleta, mi suegra me había traído ropa para un par de días asique pintaba a que no lo pasaríamos bien.
Mientras sacaba la ropa y la metía en el armario en una de esas veces cuando me di la vuelta vi que mi suegro estaba en la puerta apoyado con un tono cocoso me dijo mira por la ventana, cuando mire mi hijo estaba besándose con su hermana mientras Eva le comía la polla a mi marido, una excitación recorrió mi cuerpo y mi suegro se dio cuenta cuando me di la vuelta para decirle lo que había él ya estaba sentado en un sillón desnudo tocándose la polla con una mano mientras con la otra se tocaba los huevos.
Debido a mi excitación no dude en desnudarme frente al según me iba agachando le iba pasando las tetas por su cara por su barraba y finalmente por su polla, me senté en el suelo y empecé a jugar con su polla primera la moví un par de veces hasta que la vi bien crecida y luego me la metí en la boca el soltaba gemidos de mucho placer a la vez que lo acompañaba de un chupa cuñada o chupa zorra de mi hijo.
Los dos estábamos muy calientes y llego un momento que me levanto y me tiro en la cama, me empezó a comer el coño moviendo su lengua con gran maestría sin duda era muy bueno de lo mejorcito que había probado.
Una vez que yo me había corrido el empezó a comerme el culo a mojarlo y lubricarlo sin duda quería metérmela por detrás estaba claro, estaba tan caliente que ni me importo pero le pedí que lo lubricara más, se levanto y en la mesilla de noche había lubricante, puso bien por mi culo y me la metió, fue doloroso al entrar pero después ya fue todo disfrute las envestidas eran endemoniadas y mi suegro pronto me dio el aviso de que se correría, yo le dije que se corriera en mi culo quería sentirla calentita.
José grito y yo sentí su leche en mi los dos nos desplomamos sudados debido al calor, cuando saco su polla de mi culo me pude levantar y vi que teníamos invitados los cuatro que faltaban estaban mirando desde la puerta y una vez que terminamos aplaudieron, José saludo como si de un campeón se tratara y se fue a la piscina, yo me quede tumbada desfallecida por las envestidas, mi suegra se acerco a mí y cogiéndome de la mano me llevo a la ducha
El resto de mi familia lo forman mis dos hijos Juan y Marta de 17 y 18 años respectivamente, lo que voy a contarles pasó hace 2 años a mediados del mes de Abril, por aquel entonces mis suegros José y Eva vivían en nuestra casa ya que la suya estaría siendo reparada durante un mes y medio aproximadamente.
La relación de toda la familia es muy buena mis suegros pasan mucho tiempo con los niños desde siempre debido a que por motivos de trabajo ni mi marido ni yo comemos en casa.
Llevaba una semana llegando a casa y encontrándome pelos de mujer ya sea mi cuarto de baño o en mi cama, el corazón me dio un vuelco y por dentro algo me decía que era imposible que mi marido me pusiera los cuernos y menos en nuestra propia casa.
Para sacarme de toda duda decidí llamar a una amiga que tiene una empresa de seguridad y muy amablemente me conecto un par de cámaras por la casa escondidas en diversos objetos, una en mi cuarto otra en el cuarto de baño y una tercera en el salón, solo tenía que ponerlas a grabar antes de irme y para ver lo que sucedía solo tenía que usar el ordenador.
Una vez llegue al trabajo decidí conectar las cámaras pero como tenía muchas cosas que hacer no pude prestarle mucha atención, una vez vine del almuerzo recordé lo de las cámaras asique me puse a vigilar un rato.
Cuando puse las tres cámaras vi que mis suegros estaban en el salón viendo la televisión, muy tranquilos sentados sin hacer nada, al poco rato aparecieron mi hijos que venían de la universidad venían los dos juntos ya que el mayor pasa a buscar al pequeño.
Se fueron imagino a comer debido a la hora que era asique yo seguí trabajando apague la pantalla pero puse audio por si acaso sucedía algo.
Pasarían entorno de media hora cuando un descomunal gemido llamo mi atención, vaya susto que me pego, baje las persianas de mi despacho cerré la puerta con llave y me puse los cascos para escuchar.
Cuando encendí la pantalla me quede helada apoyados en mi cama estaban mi suegro y mi hijo sentados besándose mientras mi suegra les comía las pollas a los dos, la escena me quedo perpleja cabreada, excitada y a la vez aliviada al ver que mi marido no estaba.
Mi coño se empezó a encender sin querer al ver aquella imagen como mis suegros se follaban a mi hijo, durante varios minutos estuvieron así hasta que mi hijo se levanto y tumbo a su abuela para lamerla el coño, mi suegra estaba desbocada tenía una cara satisfacción que no podía con ella y de vez en cuando soltaba un !!!! NO PARES NIÑO!!!!!!
Mi suegro se puso de pies en la cama para dejar sus huevos y su polla a la altura de su mujer que se los chupaba y mordía entre gemido y gemido.
Mi mano bajo a mi pantalón desabroche los botones y metí la mano en mi coño, necesitaba terminar esto porque estaba demasiado caliente.
Según me tocaba y con la excitación que tenia no me di cuenta que en todo esto faltaba mi hija donde estaría la pequeña de la familia que no la veía.
Como si alguien me ollera pronto oí como su abuelo la llamaba y como si fuera un rayo allí apareció mi hija con un diminuto tanga y un sujetador que le hacía unos pechos gigantes.
Una vez que la vieron mi suegro se levanto y con mucha ternura la empezó a besar y no tardando mucho la quito la poca ropa que llevaba, mi hija se agacho y le empezó a comer la polla a su abuelo, estaba claro que no era la primera vez que lo hacían parecía ya actos automatizados que hacían con relativa frecuencia.
Yo estaba ya apuntito de correrme me estaba haciendo un dedo antológico en mi despacho algo que jamás pensé que haría pero así se dio la situación.
Una vez que mi hija le chupo bien la polla a su abuelo esta se apoyo en la pared y él se la empezó a meter despacito pero sin pausa, mientras mi hijo hacia los mismo con su abuela, cuando vi eso ya fue lo que falto para correrme y soltando gemidos sordos llegue al final de mi orgasmo.
Mientras me limpiaba con pañuelos mi mojado coño seguía mirando la follada que se estaban dado no paraban, cambiaron un par de veces de posición pero sin descanso alguno, en una de esas envestidas mi hijo aviso de que se iba a correr, y sin tardar su hermana saco la polla de su abuelo y se puso a los pies de su hermano junto a su abuela.
Mi hijo empezó a soltar leche cayendo en la boca y nariz de su hermana pero con s mano limpio el semen y se lo dio a probar a la abuela que hizo su cata respectiva. Una vez el chaval término se tumbo en la cama mientras mi suegro se la metí a Eva y mi hija dejaba el coño cerca de su abuela para que se lo lamiera.
Entre unas cosas y otras se dio la hora de irme asique tuve que dejarlo así, pero bueno por lo menos descubrí la verdad de lo que sucedía.
Cuando llegue a casa allí estaba mi marido viendo la tele junto a mi suegra y mis hijos, una vez fui a la cocina y comí un poco fui a mi cuarto estaba todo como lo deje incluso me atrevo a decir que echaron ambientador recordando lo ocurrido me excite asique desde el cuarto de baño llame a mi marido.
Yo le espere en el cuarto de baño desnuda y muy caliente y cuando apareció no le di tiempo ni a responder me tire encima suyo y le empecé a besar mientras buscaba su polla entre sus pantalones, la escena también le debió de excitar a él bastante porque pronto localice su polla dura, me agache y empecé a chuparla igual como antes había visto a mi suegra hacerlo con mi hijo.
Los dos estábamos muy excitados asique fui al grano me puso de rodillas y me empezó a meter su polla, nunca había estado tan excitada y era un torrente de adrenalina, mi marido lo capto y el polvo estaba siendo impresionante, estábamos tan cachondos que no duramos mucho asique una vez me corrí saque la polla de mi coño y se la empecé a pajear hasta que este se corrió en mi boca.
Después de la follada nos duchamos juntos con sus respectivos toqueteos, una vez salimos del cuarto ya cambiado y aliviado, mi suegra pregunto que donde estábamos a lo que mi marido titubeo y yo directamente me partí de risa
Después de la primera entrega en la que descubro como mis hijos y mis suegros tienen relaciones sexuales os contare como siguió la aventura de mi familia.
Durante la siguiente semana se repitió lo que conté en mi anterior relato mis hijos y mis suegros tenía relaciones y mientras yo desde el trabajo veía todo lo que pasaba , cada vez estaba mas enganchada y recordaba mi época de universidad en la que yo experimente muchas cosas relativas al sexo.
Ir a trabajar se había convertido en un disfrute diario y aunque me tenía que quedar más tiempo en el trabajo, la verdad no me importaba.
Habrían pasado cosa de dos semanas desde que había instalado las cámaras, la familia al completo a excepción de mi se encontraba en el salón viendo la tele, estuve mirando un rato pero al ver que simplemente veían la televisión decidí seguir trabajando, cuando de repente el sonido que oí llamo todo mi atención.
Mis suegros y mis hijos se habían puesto delante de la cámara y estaba dejándome un mensaje claramente para mí.
Empezó hablando mi suegro diciendo que se habían dado cuenta de las cámaras hace unos días y me preguntaba que si me gustaba lo que veía.
Después hablo mi suegra diciendo que al haber instalado las cámaras los había ahorrado el trago de tenerme que decir todo lo que hacían juntos.
Y por ultimo hablo mi hijo expresando su felicidad de lo bien que se lo pasaban juntos todos y que esperaban que me gustara lo que veía.
Yo estaba impresionada pero la verdad es que tenía un montón de ganas de estar con ellos, pero dando vueltas a la cabeza me acorde que viendo la televisión estaban todos es decir mi marido también y ahora no estaba.
Estuve mirando las distintas cámaras pero no lo encontraba asique pensé que alomejor se había ido hacer algo.
Después de lo que había escuchado no podía hacer mucho asique pasadas dos horas de ver el video me fui a casa alegando enfermedad.
Iba en el coche nervioso con la situación en casa pero tenía un montón de ganas de estar con ellos y compartir nuestros cuerpos.
Una vez aparque el coche entre en casa y delante del televisor estaban sentados los 4 mis hijos y mis suegros. Mi hija se levanto y me dio un abrazo, estaba muy contenta que por fin hubiese llegado a casa.
Ya saludada mi hija mi suegro me dijo al oído que me pusiera una bata sin ropa interior y que esperara en mi dormitorio a Eva.
Nerviosa me fui a mi dormitorio una vez desnuda y antes de ponerme la bata entre en el baño a duchar mis partes íntimas, estaba casi preparada cuando llamaron a la puerta.
Era mi suegra, venia en mi busca como bien me dijo José, ella también iba en bata y de la mano llevaba una venda, cuando baje la mirada y vi lo que llevaba en la mano ella sonrió y me dijo que era para mí.
Después de atarme la venda me dio un beso en los labios y mi susurro al oído que lo pasaríamos muy bien, a lo que yo nerviosa sonreí tímidamente.
Empezamos a bajar las escaleras íbamos despacio ya que al no ver nada iba con mucho miedo de caerme, cuando ya llegamos me sentaron en un sofá y por la textura estaba segura de que era el salón.
Juan comenzó hablar diciendo que jamás olvidaría este día ,empezó a susurrarme al oído cosas bonitas a la vez que me desabrochaba la bata, ahora me encontraba desnuda ante los miembros de mi familia y lo peor de todo yo no los podía ver.
Una mano comenzó a tocarme el coño con gran maestría algo que hizo que me terminara de calentar lo suficiente para empezar a gemir, una vez denotaron que estaba caliente dos bocas empezaron a chuparme los pechos mientras una tercera me hacia gemir comiéndome el coño.
Pronto empecé a chillar ya ante la inminente llegada al clímax, todas las bocas lamieron con más ansia ante mi reacción, y sin más me corrí, solté un suave ¡mmmmm!
Ahora me apetecía a mi jugar asique pedí que me acercaran las pollas mis hombres, dos pollas frente a mi boca yo comía sin cesar una y después otra a la vez que los pajeaba con ganas, después de un par de minutos chupando decidí que quería un coño, hacía tiempo que no comía uno aunque eso no se olvida, jeje.
Los gemidos eran aclaratorios era mi hija sin ninguna duda, como buena madre la senté junto a mí y la abrí de piernas para estar las dos mas cómodas pero yo me puse con el culo en pompa esperando que alguien se aprovechara de mi.
Y no tardo mucho en apenas segundos note como me la metían en mi coño, alternaba mis resoplidos con el coño de mi hija ya que a veces me faltaba el aire.
Después de diez minutos así pedí un cambio de mujer quería chupar el coño a mi suegra, mientras esperaba note como un hombre me levantaba y se ponía debajo mío en el sofá, este empezó a metérmela por el coño mientras note como alguien me untaba lubricante en el culo, sin duda sabían de mis gustos asique no me negué pero ya me fue imposible seguir comiendo el coño a Eva.
Yo estaba agotada el ritmo de las metidas era brutal y yo había perdido ya la cuenta de las veces que me corrió, mi hijo que fue quien estaba en mi culo me pidió poderme correr dentro de el a lo que yo accedí, mientras pedía a mi suegro que se corriera en mi boca.
Una vez que todos habíamos llegados note como ellos dos se sentaban a mi lado mientras yo me quedaba recostada poniendo mi cabeza sobre uno, el cansancio me podía y el no ver me agobiaba asique me quite la venda.
Efectivamente mi suegro y mi hijo estaban a mi lado sudados y cansados por el esfuerzo, la sorpresa vino cuando vi que en el sillón estaba mi marido sentado, llevaba todo el rato observando con su polla dura mientras mi hija se la comía, yo miraba mas no podía hacer me dolía todo, pero después de verlos follar mi cuerpo se empezó animar como el resto de mis compañeros mi hijo y Eva fueron el baño a lavarse mientras yo y José nos tocábamos viendo a los otros dos follar.
Me agache y empecé a comerle la polla a mi suegro, estaba muy caliente, cuando oí a mi marido me, obediente fui y me dijo: toma mi leche, después de darle un beso me agache y me dio un chorretón de semen, después de tragármelo me di cuenta que estábamos en y yo solos, nos abrazamos y nos besábamos como dos jóvenes enamorados, sin duda ahora ya nadie quería que se fueran José y Eva ya eran parte de la casa.
Después de lo ocurrido anteriormente en la que ya todos estábamos compenetrados un día después de que llegara yo del trabajo nos reunimos en el salón para hablar de la situación.
Nadie puso ningún tipo de pega a nuestras relaciones, todos estábamos encantados, ellos porque ya llevaban tiempo y yo porque estaba empezando a disfrutar de otros cuerpos, durante no mucho tiempo hablamos abiertamente poniendo las reglas clara en casa no habría ningún tipo de censura pero fuera de casa nadie podía sospechar lo mas mínimo.
Ese día no paso nada todos aún estábamos cansado del día anterior, al día siguiente ya era viernes asique no nos podíamos ir muy tarde a la cama.
Cuando la mañana siguiente me levante como de costumbre mi marido ya se había ido a currar y mis hijos se irían a sus clase en breve me duche me vestí y me fui a la cocina, allí estaba mi hija con un bol de cereales aún no había empezado a comer estaba levantada cogiendo la leche, lanzándola una sonrisa la pedí que por favor me hiciera un café y mi hija sin ningún tipo de pega me lo hizo.
Mientras el café se hacía estuvimos hablando de temas banales si ningún transcendencia cuando en una ocasión mi mirada perdida va dar a su bol de cereales algo había llamado mi atención, cogí el bol para verlo de cerca y para mi sorpresa lo que había junto a los cereales era semen, mi hija me miro al ver que cogí el bol con cara de sorprendida.
Es de Juan por las mañanas siempre me da un poco dijo mi hija, acto seguido me cogió el bol y se echo la leche y empezó a comer.
Estaba claro que en esta casa sucedían muchas cosas que yo no veía, rápido me tome el café y me fui ya que tenía el tiempo justo la di un beso a mi hija en la mejilla para despedirme pero entonces ella puso cara triste y me dijo –mama así no- cogió mi cabeza y me dio un beso con lengua.
Así si te puedes ir, ambas nos separamos y yo me fui, la mañana en el trabajo fue divertido cada vez que pensaba en mi familia unida y en el giro que había dado mi vida me maravillaba cada vez más.
Fruto de mi poca efectividad los últimos días en el trabajo mi jornada tuvo que se, avise en casa para que no me esperaran para comer.
Cuando no sería más de media tarde y ya quedaba poco para que me fuera recibí un mensaje de mi marido, el mensaje llevaba una dirección y poco más.
Tan pronto como pude salí del trabajo y encendí el GPS y puse la dirección, no estaba a mas de 50 minutos era un pueblo del que rara vez había oído hablar de él, sin más tardar me puse en marcha el viaje se hizo corto en parte al buen estado de la carretera y a mi imaginación que pensaba mil cosas distintas que podían pasar allí.
Una vez llegue allí me costo encontrar la casa tuve que preguntar porque el GPS no lo encontraba, pero bueno algo mas tarde y después de unos minutos de estrés lo encontré era una casita apartado un poco del pueblo arriba de una montaña solo había dos casas más por ahí a varios metros sin duda era allí el coche de mi marido y el de mi suegro estaban aparcados no había duda.
Toque el claxon y salió mi suegro José, su sonrisa denotaba felicidad, yo me baje devolviéndole la sonrisa me dio un abrazo y entramos para la casa.
No era una casa muy grande tenía un salón cocina y tres habitaciones y un cuarto de baño, lo que no entendía es como una parcela relativamente grande podía tener una casa tan pequeña, pero enseguida lo entendí.
Cuando salimos al jardín todo encajo la zona verde era tres veces más grande que la casa aparte de una piscina muy bonita con escaleras de obra tenía una zona de tumbonas y hasta una pequeña zona de bar con dos mesas.
Mis ojos abierto como platos era muy bonito todo y mientras mi suegro me contaba me surgió la duda de porque habíamos venido aquí, y claro no dude en preguntarle.
Mi suegro me conto que él y Eva pertenecer a un club de intercambio de parejas en total 5 que se reúnen aquí de vez en cuando entre todos compraron la casa y la reformaron y que suelen venir . También puedes reservarla como hice yo sin dar explicaciones de quien viene eso si hay que dejar todo como estaba.
La verdad que le idea es muy buena y me sorprendió que mis suegros se lo montaran tan bien, me tenían muy engañada. José y yo nos acercamos a la zona del bar, estaba muy bien todo en madera con frigorífico vasos platos y un pequeño friegaplatos.
Mientras observaba el bar oí bullicio sin duda era el resto de la tropa venían todos muy de deporte se habían ido los cuatro a andar y venían más que sudados, todos me saludaron y hablamos de la sorpresa que me habían dado, pasaron unos diez minutos y mi suegra hablo para manifestar que se tenían que duchar mi hija resoplo y aclaro que ahora con un solo cuarto de baño tardarían un montón.
Mi suegra salió corriendo para casa y volvió en un suspiro traía champús y varias toallas dejo todo a lado de dos duchas que había en la piscina y se empezó a desvestirse todos la mirábamos después de los de estos últimos días yo a mi suegra la miraba con admiración y cada idea suya estaba llena de ingenio, mi marido y después mis hijos se empezaron a desvestir y por tandas su metieron en las duchas.
Cuando les vi duchando recordé que yo no me duchaba desde anoche y dije que con las prisas no había podido coger nada de ropa, mi suegra me respondió y me dijo que ella me había traído alguna cosa, entre en casa y entre en una habitación en la que vi mi maleta, mi suegra me había traído ropa para un par de días asique pintaba a que no lo pasaríamos bien.
Mientras sacaba la ropa y la metía en el armario en una de esas veces cuando me di la vuelta vi que mi suegro estaba en la puerta apoyado con un tono cocoso me dijo mira por la ventana, cuando mire mi hijo estaba besándose con su hermana mientras Eva le comía la polla a mi marido, una excitación recorrió mi cuerpo y mi suegro se dio cuenta cuando me di la vuelta para decirle lo que había él ya estaba sentado en un sillón desnudo tocándose la polla con una mano mientras con la otra se tocaba los huevos.
Debido a mi excitación no dude en desnudarme frente al según me iba agachando le iba pasando las tetas por su cara por su barraba y finalmente por su polla, me senté en el suelo y empecé a jugar con su polla primera la moví un par de veces hasta que la vi bien crecida y luego me la metí en la boca el soltaba gemidos de mucho placer a la vez que lo acompañaba de un chupa cuñada o chupa zorra de mi hijo.
Los dos estábamos muy calientes y llego un momento que me levanto y me tiro en la cama, me empezó a comer el coño moviendo su lengua con gran maestría sin duda era muy bueno de lo mejorcito que había probado.
Una vez que yo me había corrido el empezó a comerme el culo a mojarlo y lubricarlo sin duda quería metérmela por detrás estaba claro, estaba tan caliente que ni me importo pero le pedí que lo lubricara más, se levanto y en la mesilla de noche había lubricante, puso bien por mi culo y me la metió, fue doloroso al entrar pero después ya fue todo disfrute las envestidas eran endemoniadas y mi suegro pronto me dio el aviso de que se correría, yo le dije que se corriera en mi culo quería sentirla calentita.
José grito y yo sentí su leche en mi los dos nos desplomamos sudados debido al calor, cuando saco su polla de mi culo me pude levantar y vi que teníamos invitados los cuatro que faltaban estaban mirando desde la puerta y una vez que terminamos aplaudieron, José saludo como si de un campeón se tratara y se fue a la piscina, yo me quede tumbada desfallecida por las envestidas, mi suegra se acerco a mí y cogiéndome de la mano me llevo a la ducha