Pues bien, el inicio de la relacion incestuosa con mi hija tuvo un efecto rebote en mi mente, la liberó del tabu que me habia impedido intentar nada con mi madre en su momento y creó en mi, no solo una predisposicion a satisfacer ese deseo reprimido, sino una verdadera necesidad de verlo satisfecho.
Esto que ahora lo veo tan claro, no fue algo tan evidente en su momento, pero las cosas ocurrieron así...
Como ya he comentado, anteriormente, yo visitaba a mi madre, normalmente, un par de veces al mes.
La tarde que iba a ir a verla, la llamaba por la mañana por teléfono y se lo decia, para que lo supiera.
Pues bien, la primera vez que la visité despues de haber follado con mi hija, sentí una sensacion extraña...
Evidentemente, yo no necesitaba tener sexo con nadie mas, ya que tenia el sexo normal con mi mujer y ahora además el maravilloso sexo con mi hija, que siendo como era reciente, era muy intenso y satisfactorio.
Pero, está claro, que en este terreno la logica no funciona, que son sentimientos incontrolables los que gobiernan nuestras mentes y que nos dejamos llevar por ellos, sin pararnos a pensar, ni por un momento, en las consecuencias...
Todo esto, lógicamente, lo he pensado despues, porque en aquel momento lo unico que noté es que vi a mi madre de una forma diferente a como la llevaba viendo desde hacia años, puesto que la atraccion que sentí por ella en mi juventud, habia "desaparecido" a partir del momento en que empecé a tener sexo con mi novia primero y con mi mujer despues.
Eso era lo que yo creia... Que habia desaparecido, pero resultó que no era así, que en realidad seguia allí, aletargada en un rinconcito de mi mente y la relacion incestuosa con mi hija, la habia activado, sin ser yo consciente aun de ello.
Se supone que algo en mi mente pensó, ¿Si te has follado a tu hija, porque no follarte tambien a tu madre?
Pues bien, como iba diciendo, esa tarde se despertó de repente en mi, el deseo reprimido por mi madre y empecé a verla como la mujer atractiva que siempre había sido y que aun seguia siendo.
Y lo mas curioso y desconcertante para mi, fue que noté tambien un cambio en ella... Estuvo mas amable y cariñosa conmigo que de costumbre...
En principio pense que era producto de mi imaginación, que quería creer que ella estaba sintiendo lo mismo que yo, pero la evidencia se impuso y finalmente concluí que no era mi imaginación... Mi madre habia estado coqueteando conmigo...
Cuando me despedí de ella, el abrazo y beso de despedida fueron mucho mas intensos que otras veces... Esos segundos de mas, que marcan la diferencia entre una despedida protocolaria y algo mas agradable.
El caso es que yo, a partir de ese dia, empecé a darle vueltas a la cabecita y todo me conducia a que, en mi madre también se habia activado el deseo contenido que yo entonces, solo suponia que podia haber tenido por mi...
(Luego supe que realmente habia sido así)
Y como ya he comentado antes, se despertó en mi, no solo una predisposicion a satisfacer ese deseo reprimido, sino una verdadera necesidad de verlo satisfecho cuanto antes.
Tanto es así, que no esperé a que pasaran los 15 dias que normalmente pasaban entre una visita y la siguiente a mi madre.
Solo habian pasado cinco dias desde mi última visita y un dia despues del segundo encuentro sexual con mi hija (Lo que demuestra que no era porque necesitara tener sexo) la llamé, como hacia siempre y la dije que iria esa tarde a verla.
El que ella no se mostrará extrañada por una visita tan seguida de la última, lo considerara como algo normal, cuando no lo era y no me hiciera ninguna pregunta al respecto, ya me indicó que ella ya presentia a lo que iba.
Cuando llegué y me abrió la puerta, todas mi elucubraciones se confirmaron...
Ella siempre me recibe con su ropa normal de estar por casa y ese dia me recibió en albornoz y con el pelo aun un poco humedo, señal inequívoca de que acababa de salir de la ducha hacia muy poco tiempo.
Inmediatamente llegué a dos conclusiones...
La primera, que me habia recibido así intencionadamente, (A pesar que se disculpó, diciendome que pensaba que llegaría mas tarde y que por eso la pillaba así, cuando ella nunca se ducha por las tardes).
Y la segunda y mas importante, que no llevaba nada debajo del albornoz.
Se supone que si fuera verdad que la habia pillado asi involuntariamente, se hubiera ido a cambiar inmediatamente, pero no lo hizo, sino que pasamos tal y como estaba, al salón y nos sentamos los dos juntos en el sofa, como haciamos siempre, con lo cual era evidente que ella queria estar asi intencionadamente.
La tele estaba puesta y sirvió para que los dos la prestaramos atencion, disimulando así la tension que claramente habia en el ambiente.
El albornoz que llevaba puesto la llegaba unos centímetros por encima de la rodilla y lo llevaba sujeto por el cinturon, con lo que al sentarse se le abrió un poco, dejando al descubierto la pierna que tenia a mi lado, como hasta medio muslo.
A mi se me fueron los ojos, sin pensarlo y ella se dio perfectamente cuenta, pero no solo no hizo nada para taparse, sino que abrió un poco mas sus piernas, con lo que descubrió su muslo unos centímetros mas.
Yo ya, teniendo perfectamente claro lo que estaba pasando, decidí dar un primer paso a ver que pasaba.
Puse una de mis manos sobre la rodilla de la pierna que tenia descubierta y la dije mirandola a la cara:
- Tienes unas piernas preciosas mamá.
Ella hizo un gesto con su cara, mitad sorpresa, mitad satisfaccion y me contestó:
- ¿De verdad te gustan, o lo dices por cumplir?
Yo habia empezado a mover mi mano hacia arriba y hacia la cara interna de su muslo, notando la suavidad de la piel de esa parte tan intima de su cuerpo y sin dejar de avanzar lentamente, viendo que ella no me lo impedia, la contesté:
- Me gustan mucho mamá y además tienes una piel muy suave.
Ella tragó saliva, su cara se puso muy roja y con voz enronquecida me dijo:
- Gracias cariño, me encanta que te gusten...
Yo viendo que ella ya estaba entregada, recreandome en el momento la dije:
- ¿No te importa que te las siga acariciando?
Ella, ya visiblemente nerviosa, me contestó con un hilo de voz:
- No me importa que me las acaricies, al contrario, me gusta que lo hagas...
A todo esto mi mano ya habia llegado al final del muslo y habia tocado pelos...
Tal y como pensaba, no llevaba nada debajo del albornoz...
Mi madre, ya completamente entregada, apoyó su cabeza en mi hombro, dispuesta a dejarme hacer lo que quisiera...
Yo pasé mi otra mano por detras de su espalda, abrazandola hacia mi y con la mano que tenia en su muslo, comence a buscar con mis dedos la entrada de su peludo coño...
Ella abrió sus piernas para facilitarme el acceso y sin ninguna dificultad encontre lo que buscaba... Estaba muy mojada, asi es que no tuve ningun problema para intriducir mis dedos dentro y empezar a acariciarla con ellos...
Mi madre tampoco habia perdido el tiempo... Con una de sus manos habia desabrochado mi pantalón, habia bajado la cremallera y trataba de sacar mi polla fuera de mis calzoncillos...
Finalmente lo consiguió, la cogió con fuerza y comenzó a menearmela de forma rapida y desordenada...
Yo viendo su estado de excitacion, me puse de pie, ante su sorpresa, me deshice de los pantalones y los gayumbos, situé mi polla delante de su cara y ella comprendido lo que pasaba, me la agarró con una mano, la metió en su boca y comenzó a comersela literalmente...
Yo la agarre la cabeza con las dos manos, ella soltó su mano y apretó sus labios al rededor de mi inchada polla, dejandome a mi la iniciativa...
Y la tomé , tome la iniciativa y comence a follarmela por la boca...
Yo hacía movimientos lentos, dejandola que ella controlara la profundidad de las penetraciones, para evitar que la dieran arcadas...
Estaba claro que tenia experiencia, porque a la vez que mi polla entraba y salia de su boca ella movia su lengua, dandome un gusto increible.
Mientras me la estaba chupando, me miraba fijamente, con una mirada mezcla de satisfaccion, deseo, pasion y amor y yo tenia delante de mi la cara de mi madre, la mujer a la que siempre habia tenido respeto, admiracion y cariño, con mi polla metida en su boca... Bufffff...
¡Que morboooo! Y que placer me estaba dando mi queridisima madre...
Cuando me hacia pajas pensando en ella, una de las fantasias que tenía era precisamente lo que me estaba haciendo ahora, que me la chupara, correrme en su boca y con su boca llena con mi leche, besarla y compartir mi corrida con ella...
Y la fantasia estaba a punto de cumplirse, porque empecé a sentir la inminencia de mi orgasmo...
Se lo dije a mi madre...
- Mamá voy a correrme en tu boca...
Ella que sabia como iba a reaccionar yo, cuando empezara a correrme, agarró de nuevo mi polla con una de sus manos, lmpidiendo que se la metiera hasta la garganta, cuando me viniera...
Y lo hizo a tiempo, porque yo, sin ningun tipo de control, apreté su cabeza y trate de meterla la polla hasta donde fuera capaz de entrar, pero gracias a su mano, solo entró en su boca la mitad...
Empecé a lanzar chorros de leche dentro de su boca y ella a tragarlo sin ningun problema, con verdadera maestria...
Cuando disparé el ultimo chorro, la puse en pie y comencé a besarla, metiendo mi lengua en su boca y ella la suya en la mia, compartiendo el semen que aun no se habia tragado...
Nos devoramos mutuamente durante unos minutos, hasta que ella, se separó, se agachó y se volvió a meter mi polla en la boca, chupandola hasta dejarmela brillante...
Yo la agarré de la mano y la llevé al dormitorio...
Ninguno de los dos decíamos nada, porque los dos sabíamos lo que íbamos a hacer, habíamos fantaseado muchas veces con todo ello y ahora solo teniamos que seguir el guion de nuestras fantasias...
Mi madre se quitó el albornoz y efectivamente, no llevaba nada debajo, yo me quite mi camiseta, que era lo unico que aun llevaba puesto y ambos nos quedamos mirandonos por unos segundos, mi madre con su mirada fija en mi polla que habia recobrado la horizontabilidad y apuntaba amenazante hacia ella y yo escaneando todo su cuerpo... ¡Joder!... Lo buena que seguía estando mi madre a pesar de su edad...
Ella siempre habia sido un hembra de rompe y rasga, de las que hacian volver la vista a los hombres, por la calle, cuando salia con unos pantalones vaqueros y una camiseta ajustada, que resaltaban todas sus curvas...
Porque mi madre era una mujer de curvas pronunciadas... Con unas tetas no excesivamente grandes, pero si lo suficiente para llamar la atención, un buen culo, con amplias caderas, que resaltaban mas por su estrecha cintura, un pelo negro a media melena y unos ojos grandes de un color marron verdoso...
A todo eso, yo ahora podia añadir... una abundante mata de vello negro cubriendo totalmente su pubis, unas tetas ligeramente caidas, pero firmes aun, con unas areolas grandes de color marron oscuro y unos pezones, que en ese momento, tenia totalmente parados, de un tamaño como la punta de mi dedo meñique, de un color rosa oscuro...
Su pelo negro aun algo humedo y sus grandes ojos bailando entre mi polla y mi cara...
Me situé detras de ella, mi polla quedó encajada entre el final de su espalda y su culo... con mis dos manos cogí sus dos tetas y comencé a pellizcar suavemente sus pezones que estaban duros y erectos...
Ella empezó a emitir unos gemidos de aprobación y placer...
A la vez empecé a besar y chupetear su cuello y los lóbulos de sus orejas y la dije susurrando en su oido:
- Mamá... Me voy a comer estas tetas otra vez, despues de tantos años que mamé de ellas...
Los jadeos y gemidos de mi madre se aceleraron al escuchar esto y me respondió con voz temblorosa:
- Si mi vida, estoy deseando que vuelvas a mamar de ellas... Siempre han sido tuyas...
Sin dejar de besar su cuello y siguiendo sobando sus tetas con una mano, bajé la otra hasta su coño, metí mis dedos dentro de el (Lo tenia chorreando) y la susurré al oido mi fantasia preferida...
- Luego voy a volver a entrar en tu cuerpo por donde salí, voy a llenar tu utero con mi semen y te voy a preñar...
Mi madre en ese momento, entre mis besos en su cuello, el sobo de sus tetas y mis dedos en su chorreante coño, al escuchar esto, estalló en un orgasmo incontrolado...
Yo la solté, me di la vuelta (Estábamos al lado de la cama) la empujé suavemente y quedó sentada en el borde de la cama, sin saber muy bien qué pasaba y en medio del orgasmo que estaba teniendo...
Metí mis brazos por debajo de sus piernas y ella cayó de espaldas sobre la cama, con sus piernas abiertas apoyadas en mis brazos...
Agarré con mis manos sus caderas, mientras que con mi tiesa polla buscaba la entrada de su coño...
La encontré fácilmente, porque estaba justo a su altura y además lo tenía chorreando, así es que en cuanto lo tuve enfilado, di un empujón y se la metí hasta dentro de un solo viaje...
Mi madre lanzó un grito, supongo que más de sorpresa que de otra cosa, porque la maniobra había sido rápida y perfecta, como si la hubieramos tenido ensayada y ella, hasta que no sintió mi polla invadir su intimidad, no sabía muy bien lo que yo pretendia hacer y además con el descontrol propio del orgasmo que estaba teniendo, mientras pasaba todo esto...
Cuando metí mi polla dentro de ella, enseguida empecé a sentir las fuertes contracciones de su vagina, como consecuencia de su orgasmo y ello me proporcionaba un placer añadido...
En esa posición, comencé a follarmela como loco, con unas penetraciones fuertes, rápidas y profundas...
Ella no paraba de gritar y decirme todo tipo de cosas algunas ininteligibles...
- Siiiiiii.... Mi vida... Siiii... Ahahah.. Follame asiiiii... Fuerte... Dame fuerte... Me gusta... Me encantaaaaaaa.... Ahahah.
Yo me fui calmando y comence a bajar el ritmo de las penetraciones, no quería correrme enseguida, quería disfrutar de ese momento único en la vida de un hombre...
Era la primera vez que volvía a meterme dentro del cuerpo de mi madre, por donde ella me parió... Bufff
Es una experiencia única, difícil de describir... Hay que vivirlo para apreciarlo en toda su magnitud y yo lo estaba disfrutando en ese momento...
Miré la cara de mi madre, con la boca abierta jadeando y gritando de placer y sentí, además del placer físico que me estaba proporcionando con su vagina, un placer mental, producido por el morbo de saber que aquella cara desencajada por el placer que yo la estaba dando, era la cara de... ¡Mi Madre!
Que tenía mi polla metida dentro del coño de.. ¡Mi Madre!
Que me estaba follando a... ¡Mi Madre!
En aquel momento, evidentemente no pensé , en lo que estaría pasando por su mente, pero ahora, cuando estoy escribiendo esto y tratando de reflejar lo que yo sentí, no puedo por menos que preguntarme que sería lo que sentía ella...
Creo que para una madre, tener la polla de su hijo introduciéndose dentro de ella por el mismo sitio que lo parió, debe ser algo realmente único y cuando se corra dentro de ella y sienta el calor de su semen inundando la parte de su cuerpo donde lo tuvo durante nueve meses, creo que ya debe ser el no va más...
Yo, a pesar de haber bajado el ritmo y de que me habia corrido hacia tan solo unos minutos, no pude aguantar mas y sin poder contenerme, comencé la lanzar mis chorros de semen descafeinado dentro del utero de mi madre, ese sitio donde ella me habia tenido durante nueve meses... Ahora algo de mi volvia allí de nuevo...
Mi madre que llevaba todo el tiempo jadeando, gimiendo y gritando, por el placer que le estaba dando su hijo, al sentir el calor de mi corrida en sus entrañas, tuvo otro orgasmo, mas escandaloso aun que el anterior, aunque en realidad, yo creo que empalmó el uno con el otro y acordandose de lo que la habia dicho al oído, comenzó a gritar...
- Siiiiiii... Ahahahah... Preñameeee... Siiiiii... Ohoho... Dios miooooooo... Como lo siento dentro de miiiiiiiiii... Que calienteeeeee...
Siiiii.. Siiiiii... Preñame mi vidaaaaaa...
Yo no decia nada, solo estaba mirando su cara con su boca abierta diciéndome todas esas cosas y mirandome con una mirada de satisfaccion, entrega y amor...
Creo que nunca me habia amado tanto mi madre como en ese momento... Ni yo a ella...
Su cara era la de una mujer completamente entregada al hombre que la estaba proporcionando tanto placer, con la particularidad de que ese hombre era... ¡Su Hijo!...
Y ella, esa mujer dentro de la que yo estaba vaciando mis testiculos era nada mas y nada menos que... ¡Mi queridisima Madre!...
Cuando me corrí por primera vez dentro del pequeño y precioso cuerpo de mi hija, sentí una sensacion de amor infinito por ella, viendo reflejado el placer que ella sentia, en su angelical carita...
Pero al ver ahora la cara de mi madre en la misma situacion, creo que la unión de un hijo con su madre es algo mucho mas profundo, mucho mas morboso, mucho mas intenso... Porque estas follandote a la mujer que te parió, te estas corriendo dentro de ella, llenando con tu semen su utero, el mismo utero en el que ella te tuvo durante nueve meses y... lo que a mi particularmente me vuelve loco... Pensar que... ¡La estoy preñando!... Buffffff..
Eso para mi es lo mas de lo mas y creo que por la reaccion de mi madre cuando se lo susurré al oido, para ella tambien lo es...
Cuando termine de correme, segui follandomela unos minutos mas, hasta que vi que ella relajaba sus musculos..
Empuje su cuerpo hacia arriba, me salí de ella y me tumbé a su lado, tratando de recuperar el aliento...
Mi madre se volvió hacia mi, nos abrazamos y empezamos a besarnos apasionadamente...
Luego empezamos a hablar...
Ella me dijo que en mi anterior visita habia notado algo distinto en mi trato... Mas cercania... Mas cariño... Y que la habia gustado mucho las sensaciones que la transmití...
Que cuando la llamé para decirla que iria a verla solo cinco dias despues, tuvo un presentimiento y en su mente se despertó el deseo que siempre habia tenido por mi, desde que me vio haciendome la "famosa" paja y la dije que lo hacia pensando en ella... (O sea, que yo estaba en lo cierto, ella tambien habia fantaseado conmigo)..
Y que, dejandose llevar por sus deseos, decidió recibirme como me habia recibido, para comprobar si lo que habia pensado era real, o solo era producto de su imaginación...
Yo la dije que a mi me habia pasado lo mismo y que por eso decidí volverla a ver, para comprobar tambien si estaba en lo cierto o estaba equivocado...
Que parecia cosa de telepatía, porque los dos pensamos lo mismo al mismo tiempo....
Que estaba claro que los dos nos habíamos deseado durante años y que por lo que fuera (Yo sabia muy bien porque habia sido) ese dia, nuestros adormecidos deseos se habian despertado simultáneamente...
Pasamos asi hablando, acariciandonos y besandonos como media hora...
Yo iba notando que mi madre cada vez se iba poniendo mas efusiva... Habia agarrado con una de sus manos mi polla que estaba morcillona y alternaba entre la polla y los testiculos...
De pronto se lanzó a por mi y comenzó a besarme apasionadamente, yo la correspondi y comenzamos a comernos nuestras lenguas durante un par de minutos, luego ella se separó, con su cara roja y sus ojos brillantes y me dijo...
- Hijo... Estoy muy caliente... Necesito que me folles otra vez... Follame por favor... Follame... Lo necesito...
Yo la agarré, la puse a cuatro, me situé de rodillas detras de ella, enfilé mi polla, que todavia no estaba completamente dura y se la volví a meter hasta dentro, sin ningun problema, dado como tenia ella su coño rebosando leche de mi anterior corrida...
Y comencé a follarmela otra vez poniendo en ello toda mi pasion...
Mi madre volvió a gritar como una loca..
- Siiiiiii... Asiiiiii mi amorrrrr... Asiiii... Fuerte... Dame fuerte... Meteme tu polla hasta dentroooooo... Joder... Joderrrrr... Con los años que llevo deseando esto...
Ahahah... Me corrooooo.. Me corrroooo.
Y asi me la estuve follando hasta que ya medio muerto conseguí correrme...
Mi madre yo creo que se estuvo corriendo todo el tiempo, pero al sentir de nuevo el calor de mi leche en su cuerpo, volvió a gritar lo que a los dos no produce tento morbo...
- Ahahahhh... Diios mioooo siento en calor de tu corrida otra vez dentro de miiiii... Siiiii... Me quemaaaaa.... Ahhhhh... Me estas preñandooooo... Mi hijo me está preñandoooooo... Hahhhhh... Madre miaaaa... Me muero de gustoooooo...
Finalmente los dos nos desplomamos sobre la cama totalmente agotados...
No voy a seguir con mas detalles que considero innecesarios...
Solo decir que desde ese dia, ademas de follar con mi mujer y con mi hija, empecé también a follar regularmente con mi madre...
Cada 15 dias la visito y la hecho un par de polvos y a mi madre si me la he cogido por el culo... La encanta... La vuelve loca... Bueno, en realidad la gusta todo lo que la hago... Siente por mi una pasion desenfrenada...
Si los sumo los polvos que hecho a mi madre a los de mi mujer y mi hija, puedo decir sin lugar a dudas que estoy plenamente satisfecho sexualmente...
Bueno, solo añadir que tanto con mi madre, cuando va a comer a casa los domingos, como con mi hija cuando no está su madre trabajando, tambien hago alguna cosilla... No por necesidad, evidentemente, sino por el morbo que me producen esas situaciones del peligro a que nos pille mi mujer...
Esto que ahora lo veo tan claro, no fue algo tan evidente en su momento, pero las cosas ocurrieron así...
Como ya he comentado, anteriormente, yo visitaba a mi madre, normalmente, un par de veces al mes.
La tarde que iba a ir a verla, la llamaba por la mañana por teléfono y se lo decia, para que lo supiera.
Pues bien, la primera vez que la visité despues de haber follado con mi hija, sentí una sensacion extraña...
Evidentemente, yo no necesitaba tener sexo con nadie mas, ya que tenia el sexo normal con mi mujer y ahora además el maravilloso sexo con mi hija, que siendo como era reciente, era muy intenso y satisfactorio.
Pero, está claro, que en este terreno la logica no funciona, que son sentimientos incontrolables los que gobiernan nuestras mentes y que nos dejamos llevar por ellos, sin pararnos a pensar, ni por un momento, en las consecuencias...
Todo esto, lógicamente, lo he pensado despues, porque en aquel momento lo unico que noté es que vi a mi madre de una forma diferente a como la llevaba viendo desde hacia años, puesto que la atraccion que sentí por ella en mi juventud, habia "desaparecido" a partir del momento en que empecé a tener sexo con mi novia primero y con mi mujer despues.
Eso era lo que yo creia... Que habia desaparecido, pero resultó que no era así, que en realidad seguia allí, aletargada en un rinconcito de mi mente y la relacion incestuosa con mi hija, la habia activado, sin ser yo consciente aun de ello.
Se supone que algo en mi mente pensó, ¿Si te has follado a tu hija, porque no follarte tambien a tu madre?
Pues bien, como iba diciendo, esa tarde se despertó de repente en mi, el deseo reprimido por mi madre y empecé a verla como la mujer atractiva que siempre había sido y que aun seguia siendo.
Y lo mas curioso y desconcertante para mi, fue que noté tambien un cambio en ella... Estuvo mas amable y cariñosa conmigo que de costumbre...
En principio pense que era producto de mi imaginación, que quería creer que ella estaba sintiendo lo mismo que yo, pero la evidencia se impuso y finalmente concluí que no era mi imaginación... Mi madre habia estado coqueteando conmigo...
Cuando me despedí de ella, el abrazo y beso de despedida fueron mucho mas intensos que otras veces... Esos segundos de mas, que marcan la diferencia entre una despedida protocolaria y algo mas agradable.
El caso es que yo, a partir de ese dia, empecé a darle vueltas a la cabecita y todo me conducia a que, en mi madre también se habia activado el deseo contenido que yo entonces, solo suponia que podia haber tenido por mi...
(Luego supe que realmente habia sido así)
Y como ya he comentado antes, se despertó en mi, no solo una predisposicion a satisfacer ese deseo reprimido, sino una verdadera necesidad de verlo satisfecho cuanto antes.
Tanto es así, que no esperé a que pasaran los 15 dias que normalmente pasaban entre una visita y la siguiente a mi madre.
Solo habian pasado cinco dias desde mi última visita y un dia despues del segundo encuentro sexual con mi hija (Lo que demuestra que no era porque necesitara tener sexo) la llamé, como hacia siempre y la dije que iria esa tarde a verla.
El que ella no se mostrará extrañada por una visita tan seguida de la última, lo considerara como algo normal, cuando no lo era y no me hiciera ninguna pregunta al respecto, ya me indicó que ella ya presentia a lo que iba.
Cuando llegué y me abrió la puerta, todas mi elucubraciones se confirmaron...
Ella siempre me recibe con su ropa normal de estar por casa y ese dia me recibió en albornoz y con el pelo aun un poco humedo, señal inequívoca de que acababa de salir de la ducha hacia muy poco tiempo.
Inmediatamente llegué a dos conclusiones...
La primera, que me habia recibido así intencionadamente, (A pesar que se disculpó, diciendome que pensaba que llegaría mas tarde y que por eso la pillaba así, cuando ella nunca se ducha por las tardes).
Y la segunda y mas importante, que no llevaba nada debajo del albornoz.
Se supone que si fuera verdad que la habia pillado asi involuntariamente, se hubiera ido a cambiar inmediatamente, pero no lo hizo, sino que pasamos tal y como estaba, al salón y nos sentamos los dos juntos en el sofa, como haciamos siempre, con lo cual era evidente que ella queria estar asi intencionadamente.
La tele estaba puesta y sirvió para que los dos la prestaramos atencion, disimulando así la tension que claramente habia en el ambiente.
El albornoz que llevaba puesto la llegaba unos centímetros por encima de la rodilla y lo llevaba sujeto por el cinturon, con lo que al sentarse se le abrió un poco, dejando al descubierto la pierna que tenia a mi lado, como hasta medio muslo.
A mi se me fueron los ojos, sin pensarlo y ella se dio perfectamente cuenta, pero no solo no hizo nada para taparse, sino que abrió un poco mas sus piernas, con lo que descubrió su muslo unos centímetros mas.
Yo ya, teniendo perfectamente claro lo que estaba pasando, decidí dar un primer paso a ver que pasaba.
Puse una de mis manos sobre la rodilla de la pierna que tenia descubierta y la dije mirandola a la cara:
- Tienes unas piernas preciosas mamá.
Ella hizo un gesto con su cara, mitad sorpresa, mitad satisfaccion y me contestó:
- ¿De verdad te gustan, o lo dices por cumplir?
Yo habia empezado a mover mi mano hacia arriba y hacia la cara interna de su muslo, notando la suavidad de la piel de esa parte tan intima de su cuerpo y sin dejar de avanzar lentamente, viendo que ella no me lo impedia, la contesté:
- Me gustan mucho mamá y además tienes una piel muy suave.
Ella tragó saliva, su cara se puso muy roja y con voz enronquecida me dijo:
- Gracias cariño, me encanta que te gusten...
Yo viendo que ella ya estaba entregada, recreandome en el momento la dije:
- ¿No te importa que te las siga acariciando?
Ella, ya visiblemente nerviosa, me contestó con un hilo de voz:
- No me importa que me las acaricies, al contrario, me gusta que lo hagas...
A todo esto mi mano ya habia llegado al final del muslo y habia tocado pelos...
Tal y como pensaba, no llevaba nada debajo del albornoz...
Mi madre, ya completamente entregada, apoyó su cabeza en mi hombro, dispuesta a dejarme hacer lo que quisiera...
Yo pasé mi otra mano por detras de su espalda, abrazandola hacia mi y con la mano que tenia en su muslo, comence a buscar con mis dedos la entrada de su peludo coño...
Ella abrió sus piernas para facilitarme el acceso y sin ninguna dificultad encontre lo que buscaba... Estaba muy mojada, asi es que no tuve ningun problema para intriducir mis dedos dentro y empezar a acariciarla con ellos...
Mi madre tampoco habia perdido el tiempo... Con una de sus manos habia desabrochado mi pantalón, habia bajado la cremallera y trataba de sacar mi polla fuera de mis calzoncillos...
Finalmente lo consiguió, la cogió con fuerza y comenzó a menearmela de forma rapida y desordenada...
Yo viendo su estado de excitacion, me puse de pie, ante su sorpresa, me deshice de los pantalones y los gayumbos, situé mi polla delante de su cara y ella comprendido lo que pasaba, me la agarró con una mano, la metió en su boca y comenzó a comersela literalmente...
Yo la agarre la cabeza con las dos manos, ella soltó su mano y apretó sus labios al rededor de mi inchada polla, dejandome a mi la iniciativa...
Y la tomé , tome la iniciativa y comence a follarmela por la boca...
Yo hacía movimientos lentos, dejandola que ella controlara la profundidad de las penetraciones, para evitar que la dieran arcadas...
Estaba claro que tenia experiencia, porque a la vez que mi polla entraba y salia de su boca ella movia su lengua, dandome un gusto increible.
Mientras me la estaba chupando, me miraba fijamente, con una mirada mezcla de satisfaccion, deseo, pasion y amor y yo tenia delante de mi la cara de mi madre, la mujer a la que siempre habia tenido respeto, admiracion y cariño, con mi polla metida en su boca... Bufffff...
¡Que morboooo! Y que placer me estaba dando mi queridisima madre...
Cuando me hacia pajas pensando en ella, una de las fantasias que tenía era precisamente lo que me estaba haciendo ahora, que me la chupara, correrme en su boca y con su boca llena con mi leche, besarla y compartir mi corrida con ella...
Y la fantasia estaba a punto de cumplirse, porque empecé a sentir la inminencia de mi orgasmo...
Se lo dije a mi madre...
- Mamá voy a correrme en tu boca...
Ella que sabia como iba a reaccionar yo, cuando empezara a correrme, agarró de nuevo mi polla con una de sus manos, lmpidiendo que se la metiera hasta la garganta, cuando me viniera...
Y lo hizo a tiempo, porque yo, sin ningun tipo de control, apreté su cabeza y trate de meterla la polla hasta donde fuera capaz de entrar, pero gracias a su mano, solo entró en su boca la mitad...
Empecé a lanzar chorros de leche dentro de su boca y ella a tragarlo sin ningun problema, con verdadera maestria...
Cuando disparé el ultimo chorro, la puse en pie y comencé a besarla, metiendo mi lengua en su boca y ella la suya en la mia, compartiendo el semen que aun no se habia tragado...
Nos devoramos mutuamente durante unos minutos, hasta que ella, se separó, se agachó y se volvió a meter mi polla en la boca, chupandola hasta dejarmela brillante...
Yo la agarré de la mano y la llevé al dormitorio...
Ninguno de los dos decíamos nada, porque los dos sabíamos lo que íbamos a hacer, habíamos fantaseado muchas veces con todo ello y ahora solo teniamos que seguir el guion de nuestras fantasias...
Mi madre se quitó el albornoz y efectivamente, no llevaba nada debajo, yo me quite mi camiseta, que era lo unico que aun llevaba puesto y ambos nos quedamos mirandonos por unos segundos, mi madre con su mirada fija en mi polla que habia recobrado la horizontabilidad y apuntaba amenazante hacia ella y yo escaneando todo su cuerpo... ¡Joder!... Lo buena que seguía estando mi madre a pesar de su edad...
Ella siempre habia sido un hembra de rompe y rasga, de las que hacian volver la vista a los hombres, por la calle, cuando salia con unos pantalones vaqueros y una camiseta ajustada, que resaltaban todas sus curvas...
Porque mi madre era una mujer de curvas pronunciadas... Con unas tetas no excesivamente grandes, pero si lo suficiente para llamar la atención, un buen culo, con amplias caderas, que resaltaban mas por su estrecha cintura, un pelo negro a media melena y unos ojos grandes de un color marron verdoso...
A todo eso, yo ahora podia añadir... una abundante mata de vello negro cubriendo totalmente su pubis, unas tetas ligeramente caidas, pero firmes aun, con unas areolas grandes de color marron oscuro y unos pezones, que en ese momento, tenia totalmente parados, de un tamaño como la punta de mi dedo meñique, de un color rosa oscuro...
Su pelo negro aun algo humedo y sus grandes ojos bailando entre mi polla y mi cara...
Me situé detras de ella, mi polla quedó encajada entre el final de su espalda y su culo... con mis dos manos cogí sus dos tetas y comencé a pellizcar suavemente sus pezones que estaban duros y erectos...
Ella empezó a emitir unos gemidos de aprobación y placer...
A la vez empecé a besar y chupetear su cuello y los lóbulos de sus orejas y la dije susurrando en su oido:
- Mamá... Me voy a comer estas tetas otra vez, despues de tantos años que mamé de ellas...
Los jadeos y gemidos de mi madre se aceleraron al escuchar esto y me respondió con voz temblorosa:
- Si mi vida, estoy deseando que vuelvas a mamar de ellas... Siempre han sido tuyas...
Sin dejar de besar su cuello y siguiendo sobando sus tetas con una mano, bajé la otra hasta su coño, metí mis dedos dentro de el (Lo tenia chorreando) y la susurré al oido mi fantasia preferida...
- Luego voy a volver a entrar en tu cuerpo por donde salí, voy a llenar tu utero con mi semen y te voy a preñar...
Mi madre en ese momento, entre mis besos en su cuello, el sobo de sus tetas y mis dedos en su chorreante coño, al escuchar esto, estalló en un orgasmo incontrolado...
Yo la solté, me di la vuelta (Estábamos al lado de la cama) la empujé suavemente y quedó sentada en el borde de la cama, sin saber muy bien qué pasaba y en medio del orgasmo que estaba teniendo...
Metí mis brazos por debajo de sus piernas y ella cayó de espaldas sobre la cama, con sus piernas abiertas apoyadas en mis brazos...
Agarré con mis manos sus caderas, mientras que con mi tiesa polla buscaba la entrada de su coño...
La encontré fácilmente, porque estaba justo a su altura y además lo tenía chorreando, así es que en cuanto lo tuve enfilado, di un empujón y se la metí hasta dentro de un solo viaje...
Mi madre lanzó un grito, supongo que más de sorpresa que de otra cosa, porque la maniobra había sido rápida y perfecta, como si la hubieramos tenido ensayada y ella, hasta que no sintió mi polla invadir su intimidad, no sabía muy bien lo que yo pretendia hacer y además con el descontrol propio del orgasmo que estaba teniendo, mientras pasaba todo esto...
Cuando metí mi polla dentro de ella, enseguida empecé a sentir las fuertes contracciones de su vagina, como consecuencia de su orgasmo y ello me proporcionaba un placer añadido...
En esa posición, comencé a follarmela como loco, con unas penetraciones fuertes, rápidas y profundas...
Ella no paraba de gritar y decirme todo tipo de cosas algunas ininteligibles...
- Siiiiiii.... Mi vida... Siiii... Ahahah.. Follame asiiiii... Fuerte... Dame fuerte... Me gusta... Me encantaaaaaaa.... Ahahah.
Yo me fui calmando y comence a bajar el ritmo de las penetraciones, no quería correrme enseguida, quería disfrutar de ese momento único en la vida de un hombre...
Era la primera vez que volvía a meterme dentro del cuerpo de mi madre, por donde ella me parió... Bufff
Es una experiencia única, difícil de describir... Hay que vivirlo para apreciarlo en toda su magnitud y yo lo estaba disfrutando en ese momento...
Miré la cara de mi madre, con la boca abierta jadeando y gritando de placer y sentí, además del placer físico que me estaba proporcionando con su vagina, un placer mental, producido por el morbo de saber que aquella cara desencajada por el placer que yo la estaba dando, era la cara de... ¡Mi Madre!
Que tenía mi polla metida dentro del coño de.. ¡Mi Madre!
Que me estaba follando a... ¡Mi Madre!
En aquel momento, evidentemente no pensé , en lo que estaría pasando por su mente, pero ahora, cuando estoy escribiendo esto y tratando de reflejar lo que yo sentí, no puedo por menos que preguntarme que sería lo que sentía ella...
Creo que para una madre, tener la polla de su hijo introduciéndose dentro de ella por el mismo sitio que lo parió, debe ser algo realmente único y cuando se corra dentro de ella y sienta el calor de su semen inundando la parte de su cuerpo donde lo tuvo durante nueve meses, creo que ya debe ser el no va más...
Yo, a pesar de haber bajado el ritmo y de que me habia corrido hacia tan solo unos minutos, no pude aguantar mas y sin poder contenerme, comencé la lanzar mis chorros de semen descafeinado dentro del utero de mi madre, ese sitio donde ella me habia tenido durante nueve meses... Ahora algo de mi volvia allí de nuevo...
Mi madre que llevaba todo el tiempo jadeando, gimiendo y gritando, por el placer que le estaba dando su hijo, al sentir el calor de mi corrida en sus entrañas, tuvo otro orgasmo, mas escandaloso aun que el anterior, aunque en realidad, yo creo que empalmó el uno con el otro y acordandose de lo que la habia dicho al oído, comenzó a gritar...
- Siiiiiii... Ahahahah... Preñameeee... Siiiiii... Ohoho... Dios miooooooo... Como lo siento dentro de miiiiiiiiii... Que calienteeeeee...
Siiiii.. Siiiiii... Preñame mi vidaaaaaa...
Yo no decia nada, solo estaba mirando su cara con su boca abierta diciéndome todas esas cosas y mirandome con una mirada de satisfaccion, entrega y amor...
Creo que nunca me habia amado tanto mi madre como en ese momento... Ni yo a ella...
Su cara era la de una mujer completamente entregada al hombre que la estaba proporcionando tanto placer, con la particularidad de que ese hombre era... ¡Su Hijo!...
Y ella, esa mujer dentro de la que yo estaba vaciando mis testiculos era nada mas y nada menos que... ¡Mi queridisima Madre!...
Cuando me corrí por primera vez dentro del pequeño y precioso cuerpo de mi hija, sentí una sensacion de amor infinito por ella, viendo reflejado el placer que ella sentia, en su angelical carita...
Pero al ver ahora la cara de mi madre en la misma situacion, creo que la unión de un hijo con su madre es algo mucho mas profundo, mucho mas morboso, mucho mas intenso... Porque estas follandote a la mujer que te parió, te estas corriendo dentro de ella, llenando con tu semen su utero, el mismo utero en el que ella te tuvo durante nueve meses y... lo que a mi particularmente me vuelve loco... Pensar que... ¡La estoy preñando!... Buffffff..
Eso para mi es lo mas de lo mas y creo que por la reaccion de mi madre cuando se lo susurré al oido, para ella tambien lo es...
Cuando termine de correme, segui follandomela unos minutos mas, hasta que vi que ella relajaba sus musculos..
Empuje su cuerpo hacia arriba, me salí de ella y me tumbé a su lado, tratando de recuperar el aliento...
Mi madre se volvió hacia mi, nos abrazamos y empezamos a besarnos apasionadamente...
Luego empezamos a hablar...
Ella me dijo que en mi anterior visita habia notado algo distinto en mi trato... Mas cercania... Mas cariño... Y que la habia gustado mucho las sensaciones que la transmití...
Que cuando la llamé para decirla que iria a verla solo cinco dias despues, tuvo un presentimiento y en su mente se despertó el deseo que siempre habia tenido por mi, desde que me vio haciendome la "famosa" paja y la dije que lo hacia pensando en ella... (O sea, que yo estaba en lo cierto, ella tambien habia fantaseado conmigo)..
Y que, dejandose llevar por sus deseos, decidió recibirme como me habia recibido, para comprobar si lo que habia pensado era real, o solo era producto de su imaginación...
Yo la dije que a mi me habia pasado lo mismo y que por eso decidí volverla a ver, para comprobar tambien si estaba en lo cierto o estaba equivocado...
Que parecia cosa de telepatía, porque los dos pensamos lo mismo al mismo tiempo....
Que estaba claro que los dos nos habíamos deseado durante años y que por lo que fuera (Yo sabia muy bien porque habia sido) ese dia, nuestros adormecidos deseos se habian despertado simultáneamente...
Pasamos asi hablando, acariciandonos y besandonos como media hora...
Yo iba notando que mi madre cada vez se iba poniendo mas efusiva... Habia agarrado con una de sus manos mi polla que estaba morcillona y alternaba entre la polla y los testiculos...
De pronto se lanzó a por mi y comenzó a besarme apasionadamente, yo la correspondi y comenzamos a comernos nuestras lenguas durante un par de minutos, luego ella se separó, con su cara roja y sus ojos brillantes y me dijo...
- Hijo... Estoy muy caliente... Necesito que me folles otra vez... Follame por favor... Follame... Lo necesito...
Yo la agarré, la puse a cuatro, me situé de rodillas detras de ella, enfilé mi polla, que todavia no estaba completamente dura y se la volví a meter hasta dentro, sin ningun problema, dado como tenia ella su coño rebosando leche de mi anterior corrida...
Y comencé a follarmela otra vez poniendo en ello toda mi pasion...
Mi madre volvió a gritar como una loca..
- Siiiiiii... Asiiiiii mi amorrrrr... Asiiii... Fuerte... Dame fuerte... Meteme tu polla hasta dentroooooo... Joder... Joderrrrr... Con los años que llevo deseando esto...
Ahahah... Me corrooooo.. Me corrroooo.
Y asi me la estuve follando hasta que ya medio muerto conseguí correrme...
Mi madre yo creo que se estuvo corriendo todo el tiempo, pero al sentir de nuevo el calor de mi leche en su cuerpo, volvió a gritar lo que a los dos no produce tento morbo...
- Ahahahhh... Diios mioooo siento en calor de tu corrida otra vez dentro de miiiii... Siiiii... Me quemaaaaa.... Ahhhhh... Me estas preñandooooo... Mi hijo me está preñandoooooo... Hahhhhh... Madre miaaaa... Me muero de gustoooooo...
Finalmente los dos nos desplomamos sobre la cama totalmente agotados...
No voy a seguir con mas detalles que considero innecesarios...
Solo decir que desde ese dia, ademas de follar con mi mujer y con mi hija, empecé también a follar regularmente con mi madre...
Cada 15 dias la visito y la hecho un par de polvos y a mi madre si me la he cogido por el culo... La encanta... La vuelve loca... Bueno, en realidad la gusta todo lo que la hago... Siente por mi una pasion desenfrenada...
Si los sumo los polvos que hecho a mi madre a los de mi mujer y mi hija, puedo decir sin lugar a dudas que estoy plenamente satisfecho sexualmente...
Bueno, solo añadir que tanto con mi madre, cuando va a comer a casa los domingos, como con mi hija cuando no está su madre trabajando, tambien hago alguna cosilla... No por necesidad, evidentemente, sino por el morbo que me producen esas situaciones del peligro a que nos pille mi mujer...