Llego temprano. Era mi madura que venia por su ración de sexo.
Entro al departamento, cerro la puerta y se puso de rodillas. Como siempre comenzaría con sexo oral, me baja los pantalones, los slips y comienza a chupar mi pene erecto.
Sabe que será la primera eyaculación en días y que la llenare de semen, pero eso es lo que ella espera.
Es una golosa, se toma su tiempo, pasando su lengua por mi pene por arriba y por abajo, me lo levanta y lame mi bolas, se las lleva a la boca, yo veo estrellitas, luego se lo mete en la boca, y comienza a chupar, no me deja que puje, pone su manos en mis nalgas y me las acaricia mientras ella chupa, me conoce, empieza a acariciar mi ano, yo flexiono mis pies voy a eyacular, ella me mete el dedo y no me puedo contener, abre la boca y eyaculo dentro de ella varias veces, si tenia mucho semen, pero ella lo recibe todo, se pasa la lengua por sus labios, por el interior de su boca, saboreando mi semen y luego se lo traga.
Me da un beso en mi vientre y apoya su cara. Saca su dedo de mi trasero y se va al baño.
El departamento no es mío, es de una tía, se lo cuido mientras ella esta en USA, se caso allá y tiene casa en Miami. Es viuda, el gringo tenía su edad, le gustaba el sado y esas cosas, ella pago unos años con su bello cuerpo y luego el viejito tuvo un ataque al corazón y ella se quedo con todo.
Yo había tenido que pagar el arriendo, la tía abusaba de mi desde que tengo memoria, lo malo es que mi madre es su amante y yo soy su juguete sexual .
Estoy cansado de hacerles sexo oral. Después de que masturbe por primera vez, cosa que mi madre estaba esperando, fui seducido por ella, dejo que me masturbará durante un mes, luego comenzó a calentarme, andando sin sostén en la casa, usando medias negras, minifaldas, y en la noche se iba a despedir a mi habitación vistiendo una bata negra no mostraba nada, pero sus pezones se destacaban sobre la seda.
Vestía una pequeña tanga y cuando se daba vuelta veía su bello trasero, ella vive en el gym, para tener cuerpo de diosa y poder cazar otras hembras. Mi padre la deja, mientras sean mujeres, él interviene en los juegos, en distintos roles, de esclavo o de amo. Así logra tener un harem de mujeres para follar.
El sótano esta remodelado para sus juegos, yo he estado con mama y la tía, cuando he sido su esclavo. Parece una sala de TV, con muebles de cuero y metal todo muy moderno que parecen normales, pero se transforman y están llenos de anillas y tubos para sus sesiones de sado-maso.
Yo lo se por que he estado amarrado mientras tengo que lamer a una mientras la otra me pega en el trasero con uno de sus muchos látigos y varas que tienen en los estantes escondidos en la pared, pero como siempre terminan lamiendo mi pene y dejando que las goce por sus hoyitos, saben que siempre les ganare en eso, por mucho que me amarren y me torturen, terminaré penetrando a una haciéndola mi hembra y eyaculando en ellas dejándolas llenas con mi semen, lo que darían por tener un pene, pero ese es privilegio de hombres, tienen por supuesto toda clase de consoladores y arneses, con los cuales violan mi ano mientras me mantienen atado, pero al final mi semen manda y ellas siempre lo quieren en sus caras o en sus hoyitos. En una oportunidad, estaba atado, ya me habían pegado en mis nalgas, ahora venía la penetración de mi ano por una de ellas con arnés y un gran falo. Me pusieron crema en el ano, siempre lo hacían para que sus grandes falos no me causaran daños.
Me pusieron una venda, lo cual era común, hacia no sabia quien me penetraba y a quien lamia, pero era una tontera, como si no reconociera sus coños a la primera lamida, mi madre tenia labias finos pero su clítoris era mas grande, la tía tenia labias mas anchas, les conocía muy bien sus coños.
Pero ahora fue distinto, sentí un pene verdadero en mi ano, sólo podía ser mi padre, él era su esclavo también, seguramente iba a pagar por el coño de una nueva conquista de ellas, me penetro suavemente, luego comenzó a gozar de mi ano, entrando y saliendo, hasta que eyaculo dentro de mi.
Yo tenía mi pene al máximo, pues mi tía me estaba lamiendo y chupando al mismo tiempo, de modo que eyacule junto con él. Fue la única y ultima vez que me lo hizo, el pobre sufrió un ataque al corazón y no la conto.
Después de eso, mi madre se caso con otro esclavo mas joven y con mi tía se divertían abusando de él así que a mi me dejaron tranquilo, pero lo bueno es que me recomendaron con sus amigas así que sexo no me faltaba.
Mi actual amiga era mayor que ellas, era viuda, sin hijos, su esposo era su amo y le gustaba ser dominada.
Cuando me la presentaron las malas la tenían amarrada a una silla y se notaba que le habían dado azotes por sus nalgas en rojo.
Era bella, morena de ojos azules con un cuerpo bello para una mujer de su edad, me dijeron si la quería, que era una puta que no se comportaba y que sólo quería pene, pero como condición se lo tenía que hacer anal frente a ellas.
Me puse frente a ella, le bese la cara, los frente, los labios y le dije que si quería ser mi esclava. Me dijo que sí. La bese nuevamente, ella sabía lo que significaba.
Les dije que sí me la llevaba, pero con una condición, no la podían volver a molestar mientras fuera mía.
Las conocía y sabía que eran malas y con un gran poder de convencimiento.
Ambas asistieron, así que saque mi pene y me prepare a penetrarla por el ano.
Agarre un tubo de crema intima, pero me dijeron que no, sin crema.
Ella estaba echada en un sillón bajo que se alargaba dejando las piernas abiertas. Me acerque por detrás, tenía las nalgas en rojo. Me puse de rodillas y comencé a lamer sus labias, abriéndolas y lamiendo su interior, pronto se puso húmeda, que era lo que yo quería, le metí mi pene en su coño, dejando que se cubriera con sus jugos, las malas me dejaban mientras se besaban y se acariciaban, una me guiño un ojo, puse mi pene en su ano, ella estaba en tensión por lo cual el dolería mas, yo tenía experiencia por mis maestras presentes, hay que presionar un poco de frente y luego de lado y los músculos ceden, logrando penetrar el glande inicialmente, poco a poco se lo fui metiendo, estaba rico, comencé a entrar y salir, mi amada poco a poco se relajo empezando a gozar, me recosté sobre ella, tomado sus pechos por debajo, sus pezones estaban duros, ellas querían que fuera un castigo, pero no contaban con que yo no le haría daño y la haría gozar.
Finalmente, no me pude contener, goce su ano como hombre que soy llenándola de semen.
Termine acostado sobre ella, las malas se acercaron y dijeron, puedes llevártela y que no vuelva pidiendo sexo. Ahora es tuya. Desde entonces es mi amada.
La tía me presta su apartamento, pero soy su esclavo toda una noche. Y mi madre tiene su juguete nuevo, la ultima vez que lo vi estaba atado mientras le azotaban el trasero.
Afortunamente tengo a mi madura que es mi esclava, con ellas me vengo de las humillaciones que sufro. Ella nunca se queja. Me lame de rodillas, se traga todo mi semen, usa corsé y medias para mi.
Se pone en cuatro y me deja que la penetre analmente.
Se depila para mi, por que sabe que me gusta lamerle el coño antes de penetrarla.
Se ha tatuado 2 veces para mi, una en su bajo vientre y otro en su espalda antes de las nalgas, en ambos casos fuimos juntos con un tatuador, no iba a dejar que otro le pusiera las manos en esas zonas mientras yo no mirara, ambos dibujos los escogí yo con ayuda del tatuador, el tipo era el mejor así que ambos tatuajes quedaron muy buenos, después se quería tatuar los pechos, pero no la deje.
Si gano ella mucho sexo de mi parte, por que con los tatuajes quedo muy sexi así que tuve varias erecciones de solo verla. Usa collar de perrita y me deja que le ponga tenazas en los pechos y en las labias por un rato, lo cual no es nada para una ex esclava de sexo duro como ella.
También, me acaricia todo el cuerpo con sus grandes pechos y me deja gozarlos como una vagina hasta eyacular en ellos, aunque ella siempre quiere recibir mi semen en su boca.
Las malas como siempre me dicen que la puedo compartir e intercambiar con otros amos, me han invitado a fiestas para que escoja una, como siempre saben mi debilidad: las rubias.
Y hay unas muy bellas para intercambio. En la variedad esta el gusto y me puedo quedar con una bella rubia.
Lo estoy pensando...
Entro al departamento, cerro la puerta y se puso de rodillas. Como siempre comenzaría con sexo oral, me baja los pantalones, los slips y comienza a chupar mi pene erecto.
Sabe que será la primera eyaculación en días y que la llenare de semen, pero eso es lo que ella espera.
Es una golosa, se toma su tiempo, pasando su lengua por mi pene por arriba y por abajo, me lo levanta y lame mi bolas, se las lleva a la boca, yo veo estrellitas, luego se lo mete en la boca, y comienza a chupar, no me deja que puje, pone su manos en mis nalgas y me las acaricia mientras ella chupa, me conoce, empieza a acariciar mi ano, yo flexiono mis pies voy a eyacular, ella me mete el dedo y no me puedo contener, abre la boca y eyaculo dentro de ella varias veces, si tenia mucho semen, pero ella lo recibe todo, se pasa la lengua por sus labios, por el interior de su boca, saboreando mi semen y luego se lo traga.
Me da un beso en mi vientre y apoya su cara. Saca su dedo de mi trasero y se va al baño.
El departamento no es mío, es de una tía, se lo cuido mientras ella esta en USA, se caso allá y tiene casa en Miami. Es viuda, el gringo tenía su edad, le gustaba el sado y esas cosas, ella pago unos años con su bello cuerpo y luego el viejito tuvo un ataque al corazón y ella se quedo con todo.
Yo había tenido que pagar el arriendo, la tía abusaba de mi desde que tengo memoria, lo malo es que mi madre es su amante y yo soy su juguete sexual .
Estoy cansado de hacerles sexo oral. Después de que masturbe por primera vez, cosa que mi madre estaba esperando, fui seducido por ella, dejo que me masturbará durante un mes, luego comenzó a calentarme, andando sin sostén en la casa, usando medias negras, minifaldas, y en la noche se iba a despedir a mi habitación vistiendo una bata negra no mostraba nada, pero sus pezones se destacaban sobre la seda.
Vestía una pequeña tanga y cuando se daba vuelta veía su bello trasero, ella vive en el gym, para tener cuerpo de diosa y poder cazar otras hembras. Mi padre la deja, mientras sean mujeres, él interviene en los juegos, en distintos roles, de esclavo o de amo. Así logra tener un harem de mujeres para follar.
El sótano esta remodelado para sus juegos, yo he estado con mama y la tía, cuando he sido su esclavo. Parece una sala de TV, con muebles de cuero y metal todo muy moderno que parecen normales, pero se transforman y están llenos de anillas y tubos para sus sesiones de sado-maso.
Yo lo se por que he estado amarrado mientras tengo que lamer a una mientras la otra me pega en el trasero con uno de sus muchos látigos y varas que tienen en los estantes escondidos en la pared, pero como siempre terminan lamiendo mi pene y dejando que las goce por sus hoyitos, saben que siempre les ganare en eso, por mucho que me amarren y me torturen, terminaré penetrando a una haciéndola mi hembra y eyaculando en ellas dejándolas llenas con mi semen, lo que darían por tener un pene, pero ese es privilegio de hombres, tienen por supuesto toda clase de consoladores y arneses, con los cuales violan mi ano mientras me mantienen atado, pero al final mi semen manda y ellas siempre lo quieren en sus caras o en sus hoyitos. En una oportunidad, estaba atado, ya me habían pegado en mis nalgas, ahora venía la penetración de mi ano por una de ellas con arnés y un gran falo. Me pusieron crema en el ano, siempre lo hacían para que sus grandes falos no me causaran daños.
Me pusieron una venda, lo cual era común, hacia no sabia quien me penetraba y a quien lamia, pero era una tontera, como si no reconociera sus coños a la primera lamida, mi madre tenia labias finos pero su clítoris era mas grande, la tía tenia labias mas anchas, les conocía muy bien sus coños.
Pero ahora fue distinto, sentí un pene verdadero en mi ano, sólo podía ser mi padre, él era su esclavo también, seguramente iba a pagar por el coño de una nueva conquista de ellas, me penetro suavemente, luego comenzó a gozar de mi ano, entrando y saliendo, hasta que eyaculo dentro de mi.
Yo tenía mi pene al máximo, pues mi tía me estaba lamiendo y chupando al mismo tiempo, de modo que eyacule junto con él. Fue la única y ultima vez que me lo hizo, el pobre sufrió un ataque al corazón y no la conto.
Después de eso, mi madre se caso con otro esclavo mas joven y con mi tía se divertían abusando de él así que a mi me dejaron tranquilo, pero lo bueno es que me recomendaron con sus amigas así que sexo no me faltaba.
Mi actual amiga era mayor que ellas, era viuda, sin hijos, su esposo era su amo y le gustaba ser dominada.
Cuando me la presentaron las malas la tenían amarrada a una silla y se notaba que le habían dado azotes por sus nalgas en rojo.
Era bella, morena de ojos azules con un cuerpo bello para una mujer de su edad, me dijeron si la quería, que era una puta que no se comportaba y que sólo quería pene, pero como condición se lo tenía que hacer anal frente a ellas.
Me puse frente a ella, le bese la cara, los frente, los labios y le dije que si quería ser mi esclava. Me dijo que sí. La bese nuevamente, ella sabía lo que significaba.
Les dije que sí me la llevaba, pero con una condición, no la podían volver a molestar mientras fuera mía.
Las conocía y sabía que eran malas y con un gran poder de convencimiento.
Ambas asistieron, así que saque mi pene y me prepare a penetrarla por el ano.
Agarre un tubo de crema intima, pero me dijeron que no, sin crema.
Ella estaba echada en un sillón bajo que se alargaba dejando las piernas abiertas. Me acerque por detrás, tenía las nalgas en rojo. Me puse de rodillas y comencé a lamer sus labias, abriéndolas y lamiendo su interior, pronto se puso húmeda, que era lo que yo quería, le metí mi pene en su coño, dejando que se cubriera con sus jugos, las malas me dejaban mientras se besaban y se acariciaban, una me guiño un ojo, puse mi pene en su ano, ella estaba en tensión por lo cual el dolería mas, yo tenía experiencia por mis maestras presentes, hay que presionar un poco de frente y luego de lado y los músculos ceden, logrando penetrar el glande inicialmente, poco a poco se lo fui metiendo, estaba rico, comencé a entrar y salir, mi amada poco a poco se relajo empezando a gozar, me recosté sobre ella, tomado sus pechos por debajo, sus pezones estaban duros, ellas querían que fuera un castigo, pero no contaban con que yo no le haría daño y la haría gozar.
Finalmente, no me pude contener, goce su ano como hombre que soy llenándola de semen.
Termine acostado sobre ella, las malas se acercaron y dijeron, puedes llevártela y que no vuelva pidiendo sexo. Ahora es tuya. Desde entonces es mi amada.
La tía me presta su apartamento, pero soy su esclavo toda una noche. Y mi madre tiene su juguete nuevo, la ultima vez que lo vi estaba atado mientras le azotaban el trasero.
Afortunamente tengo a mi madura que es mi esclava, con ellas me vengo de las humillaciones que sufro. Ella nunca se queja. Me lame de rodillas, se traga todo mi semen, usa corsé y medias para mi.
Se pone en cuatro y me deja que la penetre analmente.
Se depila para mi, por que sabe que me gusta lamerle el coño antes de penetrarla.
Se ha tatuado 2 veces para mi, una en su bajo vientre y otro en su espalda antes de las nalgas, en ambos casos fuimos juntos con un tatuador, no iba a dejar que otro le pusiera las manos en esas zonas mientras yo no mirara, ambos dibujos los escogí yo con ayuda del tatuador, el tipo era el mejor así que ambos tatuajes quedaron muy buenos, después se quería tatuar los pechos, pero no la deje.
Si gano ella mucho sexo de mi parte, por que con los tatuajes quedo muy sexi así que tuve varias erecciones de solo verla. Usa collar de perrita y me deja que le ponga tenazas en los pechos y en las labias por un rato, lo cual no es nada para una ex esclava de sexo duro como ella.
También, me acaricia todo el cuerpo con sus grandes pechos y me deja gozarlos como una vagina hasta eyacular en ellos, aunque ella siempre quiere recibir mi semen en su boca.
Las malas como siempre me dicen que la puedo compartir e intercambiar con otros amos, me han invitado a fiestas para que escoja una, como siempre saben mi debilidad: las rubias.
Y hay unas muy bellas para intercambio. En la variedad esta el gusto y me puedo quedar con una bella rubia.
Lo estoy pensando...