Mi hija es mi amante 2

Rabimbon

Virgen
Registrado
Dic 18, 2013
Mensajes
9
Likes Recibidos
0
Puntos
0
Continúo con esta segunda parte….
Al día siguiente mi hija fue al instituto, yo estuve todo el día con el pensamiento de ella en la mente, por más que quería sacar esos pensamientos de mi mente, estos más persistentes se hacían, lo cual me provocaban que cada poco tuviese una erección. Hasta preparando la comida estaba absorto en lo que había sucedido. Por fin a las 3 de la tarde mi hija entró por la puerta, no hizo más que tirar su mochila encima de la cama y fue como una energúmena a la cocina a abrazarme y a besarme.

  • Hoy no me pude concentrar en todo el día, no pude sacar de mi pensamiento lo que hicimos y llevo todo el día excitado.
  • A mí me ha pasado lo mismo hija,
El solo hecho de haberse acercado mi hija a mí me produjo una fuerte erección y por su cara creo que ella estaba totalmente excitada.

  • Hija creo que debemos separarnos, no me beses o sino no comeremos.
Ella toco mi entrepierna
-Veo que te alegras de verme- Me dijo entre risas.
Nos pusimos a comer sin dejar de mirarnos y sonreírnos

  • Me has hecho la mujer más feliz del mundo, papá. ¿Sabes que desde hace años me masturbaba pensando en ti?
También yo llevaba unos años, con la misma situación. Cuando acabamos de comer y recoger mi hija me dijo que no estaba concentrada para hacer las tareas del instituto, yo tenía miedo que esta nueva situación la distrajese de sus estudios, los cuales siempre había llevado muy bien. Los cursos los aprobaba con las notas más altas y para ella un aprobado era casi una derrota, ella solo se conformaba con notables o sobresalientes. Esa tarde salimos a dar un paseo y airearnos, estuvimos en el bar en el que yo hable con mis amigos y ella se juntó con los suyos. A la hora de cenar nos dirigimos de nuevo a casa y entre ambos preparamos la cena, después nos pusimos a ver la televisión.

  • ¿Por qué no pones una película porno, papá?
  • Hija, creo que nos tenemos que tomar las cosas con más calma, yo ya no soy un niño.
  • ¿Qué te parece si este fin de semana, nos encerramos en casa y no estamos para nadie?, solo nosotros dos haciendo locuras…
Ese plan me excitó y comenzamos a hablar y a hablar sobre lo que podíamos hacer, asique a la mañana siguiente viernes mi hija se fue al instituto, yo me fui a la tienda de juguetes para adultos donde compré 4 películas porno de diferente temática, un par de lubricantes de sabores y retardantes, también me dio el dependiente unas pastillas que decía para estar más rato empalmado. Al llegar a casa llamé a todos los familiares y amigos que ese fin de semana no íbamos a estar en casa (para que no molestaran). Fui a recoger a mi hija al instituto y juntos nos fuimos a un supermercado a comprar comida y caprichos para el fin de semana. A mi hija se le ocurrió comprar nata en espray, fresas, chocolate y de todo tipo de chucherías, así como pizzas, hamburguesas, coca cola y bebidas energéticas. Al llegar a casa metimos directamente el coche en la cochera y subimos a casa por la puerta interior. Bajamos las persianas y trancamos todo a cal y canto. El resto del viernes lo pasamos preparando la comida y viendo la tele excitados ambos pero sin querer comenzar la fiesta. Cenamos y ya después de recoger mi hija, se fue a su cuarto y al poco vino vestida con un picardías que dejaba ver todo, verla vestida de forma tan sexi me puso a cien y me iba hacia ella cuando me paro.

  • No papá todavía no, pongamos una peli porno y después ya veremos.
Estuvimos viendo la película, con la cual mi hija ni pestañeaba, quería ver todo sin perder detalle. Al rato se levantó y regreso con su consolador y su lubricante, se tumbó en el sillón y sin previo aviso se puso a masajearse el clítoris. Yo me desnude en un segundo, le comencé a magrear las tetas y a besárselas, cogí el consolador y se lo metí en su húmedo coñito. Eche lubricante de sabor en mi pene y se lo di a chupar, por un par de veces le tuve que decir que no apretase tanto los labios que me hacía daño. Ella me chupaba con delicadeza mientras a la vez me la meneaba y yo le metía aquel consolador hasta el fondo. Cuando estuve a punto de correrme quise sacarla de su boca pero ella no me dejo, por lo que me corrí llenándole la boca con mi corrida, ella se la tragó.

  • Creí que iba a saber peor… no me disgusta, creo que vas a tener que correrte más a menudo en mi boca – Me dijo.
Ella tuvo un orgasmo al momento el cual se alargó pues al tenerlo quiso sacar el consolador de su coño, pero yo no se lo permití, sigue un ratito más con él lo cual le provocó un orgasmo fantástico.
Nos abrazamos, seguimos viendo la película y cuando acabó me dijo.
-Papa, me gustaría hacer el amor con dos hombres.
- ¿Cómo con dos hombres?
- Si contigo y otro, veo en esas pilículas que es muy placentero.
- Para eso tu culito debería estar bien dado- le respondí
- ¿Y a qué esperas para desvirgármelo?
- Te va a hacer daño la primera vez
- Supongo pero siempre tiene que haber una primera vez
El dialogo ya nos había puesto de nuevo en plan asique puse a mi hija a cuatro patas en el suelo, le eché bastante lubricante en su ano y comencé por meterle un dedo, ella se quejaba un poco, cuando ya lo había masajeado un poco le metí dos dedos y sin previo aviso le metí mi polla de una sola embestida, pues estaba bien lubricado. Ella pegó un pequeño chillido de dolor pero yo no paré, al contrario cogí el consolador y le comencé a masajear el clítoris lo cual le provocaba placer y dolor a partes iguales. Me corrí en su culo sin sacarla.
Cuando se la saque ella se dejó caer casi como un consuelo de que hubiese acabado aquel suplicio.

  • ¿Te dolió?
  • Si bastante, y ahora me pica
  • Esto es cuestión de práctica, pronto tendrás orgasmos y te gustará.
Descansamos un rato, comimos algo de lo que habíamos traído para picar, yo me tomé un cubata y ella una coca cola, (nunca le gusto el alcohol, ni fumar), yo me eché un cigarro y vimos un rato la tele estaban dando una película interesante asique la vimos acabar.
Mi hija puso otra peli porno, esta era de zoofilia y como la vez anterior casi ni pestañeaba, se acurrucó junto a mí y me comenzó a manosearme la polla. A mí siempre me gustaron las películas de zoófila y mas desde que vi a una vecina en una ocasión haciéndoselo con un pastor alemán en el monte, por aquel entonces yo tenía 14 años y fue una experiencia que me marcó (este hecho ya hace un tiempo lo conté en otro foro de sexo que ya ni me acuerdo como se llamaba, pero ya puestos lo contaré aquí también, pero más adelante). El solo hecho de ver como un perro se monta a una mujer ya me excita, asique tener la mano de mi hija en mi pene ya me puso a cien. Nos besamos ella se me puso encima y metiendo mi pene en su coño comenzó a moverlas caderas.

  • ¿lo hago bien así papa?
  • Si hija tienes un movimiento de cadera que me está poniendo a cien, ella levantó las rodillas lo cual permitió que mi pene le entrase a tope.
  • Uaaaau… me está entrando a tope, casi hasta me ce daño…. Pero me gusta.
Desde esa postura yo le podía magrear bien sus voluptuosas tetas lo cual la excitaba sobremanera, puse mi mano en su culo y comencé a meterle un dedo por el mismo, al principio note que no le gustaba pero me dejaba hacer, estaba a punto de correrme cuando ella se quitó de encima y metiéndosela en la boca me la masajeó muy rápido corriéndome de nuevo en su boca. A ella no le había llegado el orgasmo asique le metí dos dedos en su coño y comencé a masajearla hasta que noté sus fluidos y los pequeños gritos de placer… Entre unas cosas y otras ya eran las tres de la mañana asique decidimos darnos una ducha y acostarnos. Por supuesto nos bañamos justos y ella intentó hacerme una mamada, pero aquello ya no respondía, por hoy había dado todo de sí. Nos acostamos, comenzamos a acariciarnos y sin darnos cuenta nos quedamos dormidos.
Me desperté pasadas las 11 de la mañana al sentir unas caricias por mi cuello (es la parte más erógena que tengo), me desperté y vi a mi hija con su picardías de pie.

  • Vamos dormilón que ya es hora.
Mi sorpresa fue observar que me traía el desayuno a la cama, en una bandeja, con un café una tostada, zumo de naranja… Nunca había sentido ese placer de que te sirvieran el desayuno y me gustó, mi hija se tumbó a mis pies sin dejar de mirarme

  • ¿Qué miras?
  • Lo guapo que estas así y lo mucho que te quiero, ya no podría vivir sin ti… ¡Soy tan feliz!
Me agradó sobremanera el sentir esas palabras y casi hasta me excito, finalizado el desayuno nos pusimos a hacer limpieza, yo me iba a vestir pero mi hija no me lo permitió, me dio un babi me lo sujetó atrás y se me quedó mirando
-Joder padre, que sexi estás así
-También tú con ese picardías
Después de limpiar hicimos algo rápido de comer y nos pusimos a ver la tele, mi hija comenzó a hacerme cosquillas y yo a ella, así estuvimos un rato riéndonos y corriendo uno detrás de otro por la casa, casi en bolas. Llegamos a su cuarto y la tumbé en la cama haciéndole cosquillas y sin darle tiempo a nada le metí mi polla casi como forzándola lo cual nos excitó a ambos. Pero no nos llegamos a correr, seguimos juagando por la casa y en un momento ella se metió por debajo de mis piernas y comenzó a chupármela. Aquel juego sin llegar al orgasmo nos estaba gustando a ambos, en un momento mi hija corrió detrás de mí y cogiéndome por la polla me la lleno de nata y comenzó a lamerla. ¡Joder, como me estaba poniendo!, asique yo en venganza cogí el lubricante y cuando la alcance por detrás, le cuse lubricante en el culo y de una embestida se la metí a fondo, no parecía gustarle mucho pero se dejaba hacer. Me tumbó encima la cama he hicimos un 69 así nos corrimos ambos.
Yo ya no podía más, me tome una de aquellas pastillas que me había dado el dependiente y al rato comencé a sentir un calos por todo mi cuerpo, la polla se me puso a tope asique me cogí a mi hija y estuvimos un buen rato en la cama cambiando continuamente de postura incluso por el culo ya le comenzaba a gustar. Una vez más me corrí en su boca pero aquello no se bajaba por lo que mi hija continuaba gozando de aquella erecta polla. Tuvo dos orgasmos mas, yo ninguno incluso aquella excitación continua comenzaba a dolerme. Nos fuimos a la ducha y mi hija me hizo la mejor mamada que me había hecho hasta entonces, no solo la metía en la boca sino que me la lamia, me lamia los huevos y el ano, así estuvo un rato hasta que ya no me puede contener mas, y me corrí encima de ella, en su cara, sus tetas, la eyaculación fue de las grandes y a mi hija le encantó la sensación de sentir mi caliente leche en todo su cuerpo. Por fin después de aquella corrida se me bajó. Nos pusimos nuestros albornoces y nos fuimos adormir la siesta, aunque duró más de lo que habíamos previsto, pues cuando yo desperté ya eran las 10 de la noche. Desperté a mi hija dándole besos. Nos levantamos preparamos algo de cenar y de nuevo pusimos otra peli porno, pero era muy lenta y muy aburrida, asique encendí mi ordenador y busque por internet una película encontramos una de cámaras ocultas en las que se veían varias escenas de parejas grabadas sin saberlo y esto nos excitó.
-¿Te imaginas que alguien nos estuviese espiando? – me preguntó mi hija
-Pues podían pasar dos cosas, que a mí me denunciasen, me metiesen en la cárcel y nos tuviésemos que ir de aquí por los comentarios o bien que quien nos estuviese viendo se estuviese matando a pajas.
Este comentario hizo que nos riésemos a carcajada limpia, imaginándonos a alguien matándose a pajas. Vimos parte de la película por que toda no nos dio tiempo, nos pusimos a magrearnos en el sofá. Mi hija de nuevo se puso encima y moviendo sus caderas mientras yo le magreaba las tetas me dijo.
-Por que no me metes el consolador por el culo, para saber cómo se siente teniendo dos pollas dentro.
Dicho y hecho, me incorporé puse bastante lubricante en el consolador, recuperé mi postura anterior y mientras le metía la polla en su coño poco a poco le iba introduciendo el consolador en el culo y por su forma de gemir estaba claro que le gustaba, comencé hacer las embestidas de forma rítmica de forma que cuando le metía la polla sacaba un poco el consolador y viceversa, excepto cuando me corrí que de una embestida le introduje ambos a la vez lo cual le hizo dar un pequeño grito mas de placer que de dolor.

  • Me ha encantado.- dijo cuando terminamos
Aquella situación me gustó asique la tumbé en el suelo y seguí metiéndole el consolador por el culo y al rato cambiaba y se lo metía en el coño hasta que tuvo un orgasmo.
Yo ya no podía mas, me dolía la polla y yo creo que hasta la tenía en carne viva. Nos fuimos para la cama y pusimos la tele puesto que no podíamos dormir después de la larga siesta que nos habíamos pegado. Pusimos otra peli en mi tele y bien juntitos y arropados comenzamos a magrearnos y besarnos. A mí la polla ya no se me ponía erecta.

  • Por qué no te tomas otra pastilla.
  • No hija el prospecto dice que no se pueden tomar en menos de 24 horas y así me lo dijo el dependiente de la tienda, puede ser perjudicial.
  • Bueno pues entonces nos conformaremos por hoy
  • Hija tenemos que tomarnos esto con más calma, tú eres joven pero yo ya no tanto, además no me gustaría que te hicieses una adicta al sexo.
  • No creo papa, esto es la novedad, mi sueño hecho realidad, y por lo que dijiste el tuyo también, pero esta ansiedad es seguro que se nos pasará… o eso espero, porque sino no sé qué será de ti….
Ese comentario de mi hija, nos hizo soltar unas buenas carcajadas y sin querer nos quedamos dormidos, yo desperté a las 6 de la mañana y observe que nos habíamos quedado con la tele encendida, pero lo gracioso era que mi hija me tenía sujeta mi polla con su mano, como queriéndola retener a su lado por si se escapaba.
Al día siguiente, domingo también nos despertamos tarde, pero esta vez fui yo quien llevó el desayuno a la cama a mi hija, la cual desperté tocándole las tetas.
Hicimos la comida, recogimos y nos pusimos a ver la tele un rato cada uno en su sillón, mi hija hasta se hecho una pequeña siesta, yo la verdad es que no tenía ganas de sexo, pero sabía que mi hija no tardaría mucho en comenzar a excitarme. Y así fue, se levantó se fue a su habitación dejando la puerta abierta, al poco comente a sentir unos gemidos muy familiares me dirigí a la puerta y allí estaba dándole buen uso a su consolador, yo la observaba y ella a mí, asique saque mi polla y me puse a pajearme, pero sin llegar acorrerme, me introduje en la habitación.
-¿Qué haces?... le pregunté
- Echaba de menos el que me observaras mientras me masturbaba.
Me senté a su vera y comencé a chuparle las tetas mientras ella seguía jugando con el consolador. Me puse encima de ella y puse mi polla entre sus tetas y con fuerza comencé a pasarle la polla hasta que la tocaba con la punta de la lengua, eso le provocó un orgasmo y tan pronto como lo tuvo yo me retiré, no quería correrme o posiblemente esa sería la última vez del día. Me dirigí a la cocina para preparar algo que picar y al momento mi hija vino por detrás me agarro la polla, se puso de rodillas y comenzó a hacerme una mamada, yo no quería correrme pero ella insistía en que me corriese en su boca asique comenzó a masturbarme con fuerza mientras se la metía en su boca y justo cuando me corrí la saco de su boca permitiendo que me corriese en su cara y sus tetas.

  • Me encanta sentir la leche tan calentita en mi cuerpo.- Me dijo
Se ducho para quitarse todo aquello de encima y nos acurrucamos en el sillón mientras picábamos patatas fritas, aceitunas y otras cosas, yo me bebía un cubata y ella una bebida energética.
Al rato me dijo que le chupara las tetas y yo me puse a ello así estuvimos un rato acariciándonos y magreándonos. Me levanté tome una pastilla y ella me propuso el atarme a la cama, yo me dejé hacer, me ató las manos a la cabecera y las piernas bien abiertas en la parte de abajo del somier y se fue, al momento vino con la nata y fresas y comenzó untándome nata en el pecho mientras la recogía con una fresa y se la comía, pero de una forma tan sensual que se me puso el pene a cien. Poco a poco iba bajando con la nata hasta que llegando a mi polla la cual ocultó totalmente de nata, comenzó a lamber la nata por mi prepucio, por mis huevos y en el ano, aquello me excitaba por momentos, se la metió en la boca totalmente y le vino una arcada al querer tragársela hasta el fondo, pero lejos de dejarlo lo intentó otra vez y otra más hasta que ya no había arcadas… Madre de Dios yo no podía resistir el ver esa escena, pero cuando notaba que me iba a correr ella se retiraba y me dejaba con las ganas, así repitió la escena por tres veces hasta que yo ya no podía aguantar más.

  • No me hagas eso o me vas a matar, tengo unas ganas locas de correrme
  • Ya lo sé por eso lo hago, es que me he dado cuenta que cuanto más tardas en correrte mas grande es la corrida y lo que quiero es que me llenes de semen, además si te corres pronto igual ya no se te vuelve aponer de pie.
Por otra vez se metió mi polla hasta el fondo de su garganta y allí la mantuvo un instante yo veía que se ponía roja por no poder respirar pues mi polla le tapaba la traquea y la sacaba dejando caer sus babas sobre mi. Por fin en la siguiente comenzó a lamérmela y a chupármela más rápido y cuando observo que me iba a correr la agarró con fuerzo y no la dejó salir de su boca yo le pegue un par de embestidas y la corrida fue espectacular, no pudo tragársela toda y vi como de su boca dejaba caer una parte sobre mi polla, la cual siguió chupando después de correrme, pero aquello no se bajaba al igual que había sucedido el día anterior, asique se montó sobre ella y comenzó a cabalgar moviendo sus caderas, Tuvo un orgasmo y se quitó de encima. Me desato y puesto que mi polla seguía erecta nos fuimos a ducharnos, al igual que el día siguiente me hizo una mamada mientras nos corría el agua por encima y por fin me corrí en su cara y sus tetas.
Ese fue la apoteosis de ese fin de semana, para enmarcar. Tuvimos mas fines de semana en casas rurales, en una caravana y en hoteles, pero ya ninguno tan intenso como ese. A partir de aquí nuestra vida sexual ya fue más calmada, aunque no falta de capítulos que nos permitieron tener una vida sexual plana. Imaginaros de todo excepto el sado masoquismo.

 

elvergador

Pajillero
Registrado
Ene 15, 2007
Mensajes
4,926
Likes Recibidos
18
Puntos
48
 
estupendo amigo deberia poner una foto de esa nena linda
 

Rabimbon

Virgen
Registrado
Dic 18, 2013
Mensajes
9
Likes Recibidos
0
Puntos
0
jajaja... no, lo siento te podía poner otra cualquiera pero seria engañarte, de todas formas te puedo decir que hoy que tiene 30 años está como cuando tenia 18, no tiene vicios ahora que si en algo gasta el dinero es en el cuidado personal en ropa y zapatos (sobre todo zapatos) y en hacer deporte que una de las habitaciones es un gimnasio tiene todos los aparatos que puede haber en un gimnasio y los usa todos los días.
 

epale62

Virgen
Registrado
Abr 2, 2014
Mensajes
1,033
Likes Recibidos
3
Puntos
0
Bien de verdad la estas gozando. bueno por aqui tambien con la imaginación. jajaja
 
Arriba Pie