Madre Voyerista

heranlu

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Las cosas en mi casa eran normales hasta que mi padre murió en un accidente cuando yo tenía 13 años. Mi madre tuvo una depresión que le duro 3 años, pues fueron una pareja muy compenetrada y para ella el golpe fue muy fuerte. No digo que para mi no lo hubiese sido, pero tal vez por la edad, lo supere más rápido. Lo bueno que mi padre era un hombre de orden y nos dejo protegidos, aparte de que mi madre es ginecóloga con una buena clientela, por lo que no sufrimos económicamente, lo que en México ya es mucho. Mi padre choco en carretera contra un camión materialista, lo que le causo una muerte instantánea, como fue culpa del camión, aparte de los seguros de mi padre, recibimos una buena cantidad de dinero, aunque nada nos pagaría la ausencia de un ser tan bueno y cariñoso como lo fue mi padre.

Durante 3 años mi madre casi no salía de la casa y era rara la vez que sonreía, por lo que se gano una reputación de mujer digna y estricta, aunque conmigo siempre fue una amiga pues yo era todo para ella.

El primer signo de que superaba su depresión fue cuando me compro una computadora y se intereso mucho en ella, a tal grado que poco después introdujo una más en su consultorio y automatizo lo más que pudo su consulta. También se instalo una en su recamara y cuando descubrió el Internet se aficiono mas aun.

La casa en que vivimos es una casa que pertenece a la familia desde el siglo XVIII en la ciudad de Querétaro, consta de muchas habitaciones y algo de jardín, aunque con el tiempo quedo ubicada céntricamente. La habitamos mi madre, yo y Juanita una chica de campo que es nuestra sirvienta. Las habitaciones son amplias y los baños grandes, por lo que vivimos muy cómodos.

Tengo mezcla de sangre europea y mexicana, tanto por mi padre como por mi madre, por lo que a los 17 años era un joven atlético de 1:85 centímetros de altura, pelo muy negro y 74 Kg. de peso. Mi madre, de 35 años, también es alta para ser mujer, de tez blanca y lo que México les decimos güeras o sea, pelo rubio.

Me encontraba en el último semestre de prepa disponiéndome a entrar a la universidad para estudiar Ingeniería Mecánica, a pesar de tener muchas oportunidades era casto aun.

La primera ves que me fije en mi madre como mujer seria como dijo el chapulín colorado "sin querer queriendo" me encontraba tomando un café frente a la plaza de armas con dos amigos que acababa de conocer y no conocían a mi madre, cuando ella paso frente a nosotros.

-Pá su madre Jorge, ya viste que viejorron va ahí.

-¿Dónde Miguel, donde?

-Ahí, esa de rojo, vaya tetas y nalgas que se carga y aunque esta madurita yo si me la tiraba.

Al voltear a verla me di cuenta que era mi madre y aunque no iba vestida provocativamente, no podía esconder el cuerpazo que se carga. Estuve a punto de contestarle una grosería a mi amigo, pero me di cuenta que no tenia la culpa.

-¡Cajumm!..... Es mi mamá.

Los dos abrieron unos ojos como de plato y solo alcanzaron a balbucear.

-Perdónanos Jorge…..no sabíamos

-No se preocupen, pero ni crean que alguna ves los voy a invitar a mi casa, y ni se les ocurra irme a buscar ¿estamos?

-Estamos Jorge, no te preocupes y perdónanos de nuevo, no volverá a ocurrir.

-OK ahí muere pues.

La cosa se quedo en anécdota y no paso a mayores, pero eso me hizo entender porque muchos amigos míos al primer pretexto querían ir a mi casa, por lo que de ahí en adelante decidí ser mas discreto y no llevar a nadie; no es que desconfiara de mi madre, pero mejor no llevar la tentación.

Se acercaba la fecha en que salía de campamento por lo que un día me pregunto mi madre.

-Gorgi, ¿vas a ir este año de campamento?

-No se má, aun no lo decido.

-Ase un año tardaste casi una semana.

-Si, al regresar ya tenías tu computadora y estabas loca por el Internet.

-Bueno, es que como ya la había puesto en le consultorio también quise tener una aquí

-Y me parece muy bien pero dime ¿Cuáles son tus páginas preferidas?

-Las……de medicina……ahí hay mucha información ¿Y las tuyas?

-¿Yo? Me meto a todo, pero sobre todo a las deportivas.

-¿Y las porno?

-Bueno, no te digo que nunca he entrado, aunque no soy muy asiduo.

-¿Te puedo preguntar algo?

-Desembucha mami, creo que ya se por donde vas.

-¿Ya has tenido relaciones sexuales?

-Bueno…..pues….no, en realidad no, solo uno que otro faje con algunas amigas, algunas caricias, pero hasta ahí.

-Pues ya es tiempo de que empieces mi vida, pero ten mucho cuidado, ya ves como son las cosas ahora y hasta el amor es peligroso.

-No te preocupes mami, tendré cuidado.

La plática no pasó a más y continuamos nuestras vidas muy normales, como a las dos semanas mi madre tenia que ir a un congreso medico a exponer en Guadalajara y me invito a ir con ella.

-No mami, no, prefiero quedarme pues tengo muchas tareas que terminar, además me aburro en tus congresos con tantos médicos hablando de cosas sin sentidos para mi.

-OK entonces me voy sola, pero pórtate bien, ¡Estamos!

-Si mami, estamos.

Ella se fue un lunes y yo me quede con Juanita, la cual cada ves me gustaba más, pues a sus 18 años era una morenita con unos ojazos negros y un pelo largo hermoso, menudita, vivaracha y muy simpática, pero yo casi la veía como de la familia, pues tenia 3 años trabajando con nosotros y siempre había sido muy cumplida y respetuosa. El lunes sin darme cuenta entre en la recamara de mi madre buscando unas tijeras y como no las vi a la mano empecé a buscar en sus cajones. De pronto vi al fondo de uno de ellos un paquete como si estuviera escondido y me llamo la atención; lo saque del cajón y lo abrí, eran unas películas de DVD y un consolador como de 20 pulgadas. En un principio me dio risa y se me hizo natural que mi madre recurriera a los "trabajos manuales" puesto que yo mismo recurría a ellos constantemente, pero la curiosidad me gano y me dispuse a ver las películas.

Brincando escenas vi tres de ellas, me di cuenta que las tres trataban el tema del incesto entre madre e hijo, no le tome interés y luego vi unos CDS que quise ver en la computadora, pero como no tenia la clave me los lleve a mi recamara, donde los puse en la mía. Al principio mostraban acercamientos de vergas y parecía siempre la misma, pero después de fijarme bien reconocí un lunar que tengo en el huevo izquierdo, pensé que era casualidad pero en las siguientes fotos era yo claramente haciéndome la puñeta en el baño y mi recamara. MI MADRE ME FOTOGRAFIABA sin que yo mediera cuenta.

En un principio me asuste, pues a pesar de casi tener 18 años todavía era bastante inexperto, pero el morbo pudo más y continué viendo las fotos. Encontré unas de ella desnuda y masturbándose con el consolador, vestida con lencería y con una cara de degenerada que invitaba al pecado. No soporte la excitación y me fui al baño a tejerme una puñeta. La primera puñeta a la salud de mi madre.

Como mi madre no regresaría hasta el viernes en la noche me dedique toda la semana a revisar su cuarto y encontré unas películas de ella y mías donde cada quien se masturbaba, las mías no tenían casi sonido pues mis puñetas me las hago en silencio, pero en varias de ella se escuchaba claramente sus palabras.

-¡Si mijito, meteme esa rica verga! ¡Has gozar a tu madre con tu tolete y échale toda tu lechita para que ella la saboree! ¡Rómpeme el culo que solo será para ti! ¡Conviérteme en tu puta y hazme gozar con tu lengua mi amor, soy toda tuya mi vida!

O sea, mi madre quería y deseaba que me la cogiera. ¡Ufff! La locura.

De pronto trace un plan, esperaría que ella regresara y lo pondría en marcha. Primero revise el baño y mi recamara hasta encontrar las cámaras y los micrófonos que estaban muy bien ocultos. Después me entere que cuando me fui de campamento contrato a un profesional con el pretexto que quería vigilar si me drogaba, para instalarlos. Después saque copia a las películas y Cds para seguir puñeteándome a mi gusto y después coloque todo igual a como lo había encontrado, para que no se diera cuenta. Así llego el viernes y mi madre regresó.

-¿Cómo te fue mijito?

-Bien madre ¿Y a ti?

-Ya sabes lo que son estas cosas, soportar horas y horas las ponencias de todos y luego expones la tuya, al final te dan tu diploma y cada quien para su casa.

-¿Y no ligaste a nadie?

-¡Uuuuy! mi amor, casi todos son casados y los que no solo quieren un faje y yo no me presto a eso, cuando lo haga será por amor y seré suya para siempre.

-Afortunado será el que te tenga.

-Y también la que te tenga a ti mi vida.

Así pasaron varios días sin ninguna novedad hasta que checando la cartelera vi que iban a pasar una película en la tele bastante atrevida, ese día cenamos y después la invite a ver tele como lo hacia seguido, puse el canal donde yo sabia que pasarían la película y empezamos a verla. El tema ni me acuerdo, pero tenia varias escenas mas o menos fuertes lo que me provoco una erección, hice como que me acomodaba para que no se me notara, pero yo sabia que si se notaba y me lo confirmo la mirada de mi madre que no podía apartarla de mi bajo vientre; eso la excito también a ella y después de un tiempo me dijo.

-Me voy a mi recamara mi amor.

-Bueno mami, yo también me voy pronto.

La deje que se fuera posiblemente a masturbarse y calcule el tiempo que tardaría en encender la computadora y entrar a los programas de grabación de escenas, después me dirigí a mi recamara haciendo ruido para que se diera cuenta y al llegar a ella me desnude. Como ya sabia donde estaban la cámara y el micrófono busque la posición más apropiada para que tuviera la mejor toma y me dispuse a darle un espectáculo completo. Empecé a puñetearme lentamente poniéndome en posiciones para que me tomara bien y de pronto empecé a hablar en voz alta.

-¡Haaay mamita como te extrañe estos días que te fuiste! ¡No sabes como te deseo, como deseo meterte mi verga en tu rajita y en tu hermoso culo! ¡Como me gustaría que me la mamaras y venirme en tu boca y te tragaras toda mi leche!¡UFFF! Esta puñeta es a tu salud.

Continué con mi labor hasta llegar al orgasmo diciendo en voz alta.

-Esta leche es para ti mamita, algún día la disfrutaras toda.

Después de esto escuche que mi madre salía apresuradamente al baño donde tardo varios minutos, cuando ella salio me hice el encontradizo y la note alterada, no dije nada y me limpie para después irme a dormir.

Al otro día al levantarme me fui temprano a la escuela y hasta la hora de la comida me encontré con mi madre nuevamente y ¡Oh Dios! Estaba pálida con grandes ojeras y un gesto de tristeza en la cara como no la veía desde la muerte de mi padre, se notaba que tenia cargos de conciencia y en un momento llegue a arrepentirme por lo que había echo.

-¿Te pasa algo mamá?

-No hijo es que no dormí bien anoche.

-¿Te preocupa algo?

-No mi amor solo fue insomnio.

A pesar de mi preocupación no pude resistir la tentación de seguir ofreciéndole el espectáculo a mi madre por lo que en la noche nuevamente me dispuse a dárselo. Cuando ella se fue a acostar me salí de la casa y por el jardín, me trepe al balcón de su recamara y vi que tenia la computadora prendida; alcance a ver en la pantalla una panorámica de mi recamara. Mi madre estaba desnuda y tenía el consolador por un lado dispuesta a usarlo durante la función. Me regrese al interior y haciendo ruido fui al baño y me metí en mi habitación, me hice tonto unos cinco minutos y abrí el computador poniendo el CD donde estaba mi madre masturbándose. Como ella no podía ver la pantalla fingí que era una página porno y empecé a puñetearme.

-¡Haaay putita! ¿Cómo te pareces a mi mami! ¡Tienes unas tetasas como las de ella y un hermoso culito! ¡No, mi mamita esta mejor! ¡Tiene mejor culo que tu y esta hermosa!¡Como me gustaría preñarla y tener hijos con ella! ¡Ohhh, cuanto la amo!

Alcance a oír como mi madre corría al baño posiblemente a limpiarse, así estaría el orgasmo.

Así pasaron 6 o 7 días donde mi madre continuaba con una cara de tristeza y unas ojeras muy grandes, se veía que no se decidía a dar un paso más y la conciencia no la dejaba en paz pero todas las noches el deseo era mayor que el arrepentimiento. Todas las noches me puñeteaba diciendo palabras de amor, deseo y ternura hacia ella lo que posiblemente la alteraban mas.

Al siguiente lunes, cuando llegue de la escuela a comer ella apareció completamente transformada. Traía una cara radiante y una mirada luminosa, con una sonrisa dibujada en el rostro, se veía plena, satisfecha y feliz al grado que Juanita le dijo.

-La veo muy contenta señora.

-Si Juanita, estoy feliz

-Pues que bueno, porque últimamente la veía muy desmejorada.

-Pues ya ves, ahora estoy feliz y pronto sabrás la causa

Esta repuesta me sorprendido pues pensaba que la reacción de mi madre era porque había decidido dar el paso al frente, pero de eso a decírselo a la mucama ya era otra cosa.

-Estoy tan feliz que mira: ¿El viernes es día de los santos inocentes?

-Si señora.

-¿Y en tu rancho lo celebran en grande?

-Pues…si.

-Bueno Juanita, te vas desde el jueves en la mañana y no regresas hasta el lunes, ¿te parece bien?

-Fabuloso señora.

-Y toma estos dos mil pesos para que les lleves regalos a tu familia.

-Muchas gracias señora es usted muy buena y no sabe cuanto se lo agradezco.

-Tú eres muy fiel Juanita y te lo mereces, ahora me voy a poner cómoda.

Se metió a su recamara y diez minutos después salio con un pantaloncito corto y ajustado y una blusa ombliguera y sin brassier, casi se le salían las tetas y se le veían los pezones pequeños y rosados, como de quinceañera; de inmediato tuve una erección lo que me obligo irme a mi recamara a hacerme una puñeta aunque lógicamente le di tiempo para que ella prendiera la computadora y se diera vuelo también.

Durante esos tres días antes que se fuera Juanita se repitió la actitud de mi madre de llegar y cambiarse quedando ligera de ropa, lo que me provocaba tremendamente, constantemente me volteaba a ver y me sonreía. En algunos momentos teníamos rozamientos o contactos físicos un poco atrevidos y ella solo sonreía. Se veía tan hermosa, tan feliz y contenta que en realidad ya empezaba a dudar que fuera por mí. Yo reflexionaba sobre la situación pues me sentía muy confundido, hasta que de pronto me llego la verdad. Estaba enamorado de mi madre. Enamorado como un loco adolescente que casi lo era, con un amor intenso y pasional que no me cabía en el pecho, que me dolía y no me dejaba pensar en otra cosa que no fuese ella. El miércoles en la noche mí madre se acerco a mí en la sala y me dijo.

-Mi amor, tengo una rozadura debajo de un seno y no la alcanzo a ver ¿Por qué no me dices como esta?

-Como no mami, con mucho gusto.

De pronto se saco una teta y casi me desmayo, ¡Dios! Que blancura y tersura de su piel, que pezoncito mas hermoso, rozadito y pequeño, como a mi me gustan.

-Si….tienes como una marca pero a la mejor es del brassier.

-A ver, checalo.

Y se saco la otra teta.

Ahí estaba yo como un idiota viendo las tetas de mi madre fuera de su blusa sin saber que hacer, con una erección que estaba a punto de reventarme el pantalón, me sobrepuse poco a poco y lleve mi mano a sus tetas para tocar la parte "afectada" ¡Oh que suavidad de piel! De todas las tetas que había tocado ningunas eran tan suaves y delicadas como las de mi madre.

-Si, mira, aquí también esta la marca, vas a tener que cambiar de diseño para que no te lastime.

Levante la mirada a la cara de mi madre y sentí una sensación de alivio en todo el cuerpo ¡Dios que mirada! Cuanto amor se reflejaba en su rostro, cuanta ternura mientras yo le acariciaba las tetas.

-¿Te duele?

-No, pero será mejor que me untes una crema.

-Claro mami, así desaparecen mas rápido.

Mi madre fue a su recamara y trajo un tubo de crema, todo esto con las tetas al aire y yo sin poder dejar de mirarla.

-Anda, úntame.

Me puse un poco de crema en las yemas de mis dedos y empecé a aplicarla en la piel de sus tetas y descaradamente se las agarre todas aplicándole asta en los pezones, ella no dijo nada solo sonrió y al terminar me dio un beso en la boca diciéndome.

-Gracias mi amor, me has hecho mucho bien.

-A la orden mami

Lógicamente que esa noche me recete un puñeton de miedo dándole todo el espectáculo que yo sabia que ella deseaba.

El jueves en la mañana Juanita se fue a su rancho, cuando yo me disponía irme a la escuela apareció mi madre en el desayunador todavía en bata.

-¿Ya te vas?

-Si madre, sino me apuro me dejan afuera.

-¿Y que pasa si hoy no vas a la escuela?

La pregunta me recorrió el cuerpo.

-Nada mami, voy muy bien y no pasa nada.

-¿Por qué no te quedas? mañana es festivo y así regresarías a clases hasta el lunes.

-Bueno…. ¿Porque no?

Mi madre se dispuso a prepararme el desayuno mientras yo la veía por detrás, sus formas me tenían obsesionado y no podía quitarle los ojos de encima, puso dos platos sobre la mesa y desayunamos juntos, después ella se fue a bañar mientras que yo en mi recamara me puse cómodo; yo sabia que hoy seria el día, que hoy conocería la gloria y llegaría al cielo y ella tan bien lo sabia, pero no encontrábamos la manera de iniciar el viaje. A media mañana ella tomo la iniciativa.

-Gorgi.

-Si.

-¿Qué sientes por mi?

-Bueno……..Te amo madre…..te amo y te necesito como al aire…..sin ti no podría vivir….y te deseo como la mujer hermosa que eres…..nunca había sentido esto por ninguna mujer y desde hace unos días no soporto tanto amor y deseo…..quisiera que fueras mi mujer y tener hijos contigo……te amo con locura.

Al levantar la cara note que estaba llorando con una cara de inmensa felicidad.

-Perdóname madre….no quise ser grosero…..pero…no pude contenerme y abrí mi corazón.

-No mi amor…… no pidas perdón…… al contrario. Gracias por decirme lo que me has dicho…….. Este es el día más feliz de mi vida.

-¡Entonces….no te enojas?

-Pero como me voy a enojar si yo también te amo….también te deseo como hombre….y….. También quisiera tener hijos contigo.

-Mamá, esto es el cielo, es lo mas maravilloso que me puede pasar en la vida, el que tu me correspondas me llena de felicidad y no me cabe el corazón en el pecho de tanto amor.

-Antes quiero decirte algo mi vida.

-No me importa nada mami….no quiero saber nada si tuviste o no….

-Tonto, yo no tuve otro hombre mas que tu padre y lo quise, es mas, aun lo quiero mucho, a veces pienso si no es el que desde donde este nos este atando a los dos.

-Entonces no se diga más.

-Quiero decirte que te he estado espiando durante un año, que instale cámaras y micrófonos en tu baño y tu recamara para espiarte en tu intimidad, que yo nunca pensé que llegaría a eso, pero una noche que entre a tu recamara te vi dormir desnudo y despertaste en mi una conmoción de deseos que me llevaron a eso, que tengo grabaciones donde te estas masturbando y que las uso para masturbarme yo también, en fin que hace tiempo que esperaba este momento y que tampoco aguanto tanta felicidad.

Lógicamente que tuve que poner cara de sorprendido para que no sospechara que yo ya sabia.

-No importa mamita lo que hayas echo, lo que importa es que de aquí en adelante no necesitaras videos ni espiarme, me tendrás para ti sola.

Simplemente la tome de la mano y la conduje a su recamara, cerramos las cortinas anti luz solar y prendimos una lámpara de luz tenue quedando entre sombras, la tome de los brazos y nos vimos a la cara y parecía que brotaba un rayo entre los dos, un rayo de amor, de esperanza, de pasión y ternura. No nos dimos cuenta como nos desnudamos uno al otro casi sin tocarnos pues nuestros ojos no dejaban de mirarse. De pronto nuestros cuerpos hicieron contacto ¡Ohh! Que suavidad de piel, que tersura, que calidez brotaba de cada uno de sus poros. Mi pene quedo casi entre sus piernas cuando nos dimos el primer beso de amor. Suave, delicado, tierno y a la vez apasionado.

La voltee y la abrace por atrás quedando mi verga entre la hendidura de sus nalgas, ella hizo un movimiento de arrimarse mas como invitándome a permanecer ahí pidiéndome mas contacto, mientras la besaba en la nuca le decía.

-Te amo mamita. Te amo con locura y te deseo más.

Deslice mis manos por sus brazos hasta sus caderas, las pase por su bajo vientre y las subí hasta sus tetas que acaricie con mis manos, no cabían en ellas por lo grandes que las tiene, para mi no era una mujer de 35 años sino una quinceañera que tenia entre mis brazos, ella se empino levemente y paso su mano entre sus piernas agarrándome la verga.

-Mi amor, que grandes la tienes, a pesar que la había visto por la computadora en persona es mas grande, cuanto voy a gozar con ella mi vida.

Se volteo de frente a mi y mirándome a los ojos empezó a deslizarse hasta quedar de rodillas frente a mi verga, la tomo en sus manos y empezó a acariciarla diciéndome.

Tu padre fue un gran hombre pero sexualmente no era muy exigente, esto que voy a hacer es la primera ves que lo hago, si te lastimo dime, pues no quiero causarte ningún dolor.

Se la metió en la boca y me la empezó a mamar, yo estaba en la gloria y a punto de vaciarme pero hice un esfuerzo por aguantar la caricia.

-Mamita, esto es un sueño y no quiero despertar, me voy a venir en tu boquita, te la voy a llenar de leche calientita, ¡Ufff! Que rico es esto.

Ella regulo sus movimientos acariciándome los huevos con delicadeza, como era todo en ella, hasta que ya no aguante y descargue todo mi semen en su boca. Se trago la mayor parte, pero no pudo evitar que le escurriera en los labios y la barbilla. La levante con mis brazos y quedamos frente a frente y entonces hice algo que jamás pensé que haría, la bese a pesar que tenia mi semen en la boca, la bese con amor, con pasión y aunque paso algo de mi propio semen a mi boca no me dio asco. Baje mi mano a su rajita y la encontré totalmente mojada, escurriendo sus jugos pues también había tenido un orgasmo. La recosté sobre su cama y lleve mi boca a su raja y empecé a mamársela.

-A ver si no me preñas con la lengua.-alcance a oír.

Continué con mi labor hasta provocarle un orgasmo, quedando los dos relajados y abrazados como lo que ya éramos, dos amantes.

-Cuanto te amo mi amor, cuanto te amo.

-Yo también madre, es maravilloso que esta mujercita que tengo acurrucada junto a mi y con la cual me estoy iniciando sexualmente sea mi propia madre, no entiendo como puedo desearte y amarte tanto.

Mi verga continuaba dura por lo que ella me dijo.

-¿Quieres metérmela?

-Si mamita lo deseo mucho.

Abrió sus piernas enseñándome la entrada a su vagina, yo la acaricie un poco y apunte la cabeza de mi verga empezando a empujar poco a poco, ella la recibió con un poco de resistencia pues tenia más de 5 años sin relaciones pero pronto se relajo y paso sus piernas por detrás de mis caderas para mantener la reunión.

-¿Te gusta mi vida, te gusta entrar a donde saliste? ¿Gozas metiéndome la verga?

-Si mamita, lo gozo inmensamente y disfruto mas saber que eres mi madre,¡Haaay! Cuanto te quiero, cuanto te necesito mi chiquita, mi reinita hermosa.

-¡Si mi bebe, dámela toda, la quiero adentro!

-Te voy a dar mi leche, me voy a venir dentro de ti mamita

-Si mi vida, préñame y hazme un hijo, quiero tener un hijo tuyo, seria como llevarte a ti de nuevo dentro de mi.

-¡Ufff! No aguanto mas mamita me estoy viniendo.

-Yo también mi vida, que delicia, ¡Haaay! Hacia tanto que no disfrutaba esto pero ahora es mejor pues es mi propio hijo quien me hace gozar, te amo bebe, te amo

-Yo tan bien madre, te amo.
Nos quedamos maravillados de lo hermoso que había sido nuestra primera relación sexual, y pensar que teníamos cuatro días para desarrollarla mas me llenaba de felicidad. Mi madre se quedo dormida unos minutos, los que aproveche para mirarla. ¡Dios, que bella es! Si supiera cuanto me gusta, que esto es amor y solo amor. Cuando abrió sus ojos sentí como un rayo de luz, de esperanza, de amor.

-Voy a hacer la comida mi vida.

-Si mamita ahora te alcanzo.

Ella se levanto y se dispuso a ponerse una bata.

-Mami.

-Si mi amor, dime.

-Me gustaría verte desnuda todo el tiempo ahora que no esta Juanita, ¿me lo concedes?

-Como tú quieras mi amor, nada mas vamos a cerrar todas las ventanas, no valla a entrar alguien al jardín y nos vea.

-OK yo las cierro.

-Pero tu también te quedas en pelotas o ¿acaso no me lo merezco?

-Tú te mereces todo mami, te mereces mi vida entera.

-¡Haaay! Mi amor, como te quiero.

-Yo también mamita, te quiero mucho.

Mientras yo cerraba las ventanas y prendía luces tenues por toda la casa, ella solo se puso el delantal para no quemarse con la estufa y me preparo algo ligero. Después nos lo llevamos a la sala y en el suelo nos sentamos a comer desnudos. Nuestras miradas no se separaban la una del otro explorando nuestros cuerpos y disfrutándonos mutuamente. Al terminar de comer dejamos los platos a un lado y ella se sentó de frente sobre mí quedando mi verga cerca de su raja y casi entre sus nalgas.

-Mi amor, tenemos que organizarnos muy bien, si queremos tener hijos deberá ser pronto, pues por mi edad nada mas podré darte uno o dos, por Juanita no te preocupes, yo la controlo, aparte por lo que ella me ha contado tengo un plan para volverla cómplice.

-Será como tú digas mami, ya me anda por verte tu pancita y beber la leche de tus tetas nuevamente como cuando era bebe.

Sellamos nuestros planes con un beso y nos hicimos el amor nuevamente con tanta o mas pasión como la primera vez.

-¡Mi vida, esto es la gloria, me ciento en el cielo! ¡Como disfruto de saber que es mi propio hijo quien me mete su verga y me hace gozar!

Yo con mis manos acariciaba su cuerpo y sin darme cuenta llegue al orificio del culo donde empecé un ligero masaje sin llegar a introducir el dedo, esto la puso más cachonda y le provoque un mega orgasmo

-¡Si mi amor, acaríciame así por el culo! ¡Me estoy viniendo mi vida…ufff…que rico! ¡Prométeme que siempre me la meterás mi vida…Haaagg…..me voy!

Quedo desmadejada sobre mi, ensartada en mi verga, su respiración alterada y con un gesto de felicidad indescriptible que solo tienen las mujeres satisfechas, poco a poco recupero la calma y se dio cuenta que yo no había terminado.

-¡Mi vida! No te viniste tú, voy a tener que hacer algo pues no quiero que mi hombre, mi macho y a la vez mi hijo querido se quede a medias.

Se desprendió de la posición y me levanto sentándome en un sillón, después ella se hinco entre mis piernas y se metió mi verga en la boca.

-¡Uuuggg, aaafff! Que rico me la mamas madre, como me gusta que me la mames, pensar que esa hermosa boquita donde me voy a vaciar es la de mi madre y a la vez mi vieja, mi amante y mi dueña…..me voy a venir mamita….disfruta mi leche caliente que solo será para ti mi amor, mi reina, mi dueña.

Descargue una tremenda cantidad de semen en su boca que ella saboreo como si fuera un dulce, la poca que le escurrió por las comisuras con sus propios dedos se la llevo a la boca.

-A partir de ahora cada vez que te vengas en mi boca no voy a desperdiciar nada, me voy a tragar toda tu leche pues dicen que es pura vitamina y nos hace bien para la piel.

-Tu no necesitas nada para tu piel, ya quisieran niñas de 15 años tener una piel como la tuya mami.

Nos levantamos y nos fuimos a la recamar donde dormimos una siesta, a media tarde nos levantamos y nos bañamos juntos por primera vez, sentíamos como un ritual de que aquí en adelante nuestros actos estarían unidos para siempre, de ahora en adelante eran "nuestra recamara, nuestro baño, nuestra cama y serian nuestros hijos" pues los dos estábamos decididos a ser padres. Cenamos temprano, aunque note que ella casi no ceno nada.

¿Te sientes mal?

-No mi vida, es que casi no tengo hambre.

Después de cenar nos fuimos a nuestra recamara a ver televisión y ¡OH sorpresa! Eran mis gloriosas Chivas del Guadalajara dándole un baile al odiado América. Que hermosa escena, mi equipo favorito ganado su partido mientras mi madre me acariciaba la verga, los huevos y me basaba apasionadamente. Lógicamente que yo no tenia quietas las manos y le correspondía a sus caricias, al terminar el partido me dijo.

-¿Sabes una cosa mi amor?

-No mami, dime

-Me gusto mucho que me acariciaras el culo.

-Pues a mi me gusto mas acariciártelo, que estuve a punto de meterte un dedo.

-Me lo hubieras metido

-Lo que quiero meterte es otra cosa.

-Pues pídemelo mi amor, para eso soy tu mujer, para darte gusto en todo.

-Mami, quiero meterte la verga por el culo.

-Pues no se diga más.

Se volteo y se puso en cuatro patas enseñándome el culo descaradamente ¡Ufff! Que espectáculo, parecía un culito de niña, color rosa, pequeño y a la ves calido. No soporte la visión y lleve mi boca a su ano empezando a lamérselo, intente meter algo de mi lengua y solo entraron 3 o 4 centímetros.

-¡Hay mi vida! Como me gusta que me hagas esto, lo vamos a disfrutar mucho mi amor.

Ensalive lo más que pude y apunte mi verga a su culito, poco a poco y aplicando mas saliva sentí como cedió su esfínter, entre lentamente en ella hasta que le entro toda.

-Despacio mi vida, despacio, deja que me acostumbre.

Modere mis embestidas durante unos momentos hasta que ella se relajo completamente y empecé el mete y saca, primero muy lento y poco a poco aumente el ritmo.

¡Ufff, Afff! ¡Que grande la tienes mi vida, me esta atravesando toda! ¿Te gusta romperle el culo a tu madre? ¿Disfrutas dándome por el culo?

-¡Si mamita, lo tienes muy apretadito! ¡Es lo más hermoso que puede pasarme! ¿Te gusta que tu hijo te llene de leche el culo? ¿Me lo vas a dar seguido?

-¡Todos los días mi amor, serás el único dueño de mi culo y de mi! ¡Ho! ¡Cuanto te amo mi vida….me vengo!

Descargue toda mi leche en su anito y después de un rato se lo saque poco a poco como había leído en un libro sobre sexo. Descansamos un tiempo y durante la noche tuvimos varios asaltos sexuales más.

Los tres días que estuvimos sin Juanita fueron maravillosos, solo nos vestimos una vez para ir a comprar comida y nos dedicamos a entendernos mas como pareja. Descubrimos que a los dos nos gustaban las mismas cosas, que no nos teníamos asco, que muchas veces nuestros orgasmos era sincronizados, sobre todo cuando hacíamos el sesenta y nueve y que nos amábamos cada vez mas, que no podíamos estar separados, en fin, fueron días de gloria y pasión pero sobre todo amor, mucho amor.

El lunes temprano llego Juanita, así que cuando me levante fui a la cocina rápidamente y me fui a la escuela. Mi madre se levanto algo mas tarde y en bata se fue a la cocina.

-¿Qué tal Juanita, como te fue?

-Muy bien señora, gracias a usted

-¿Todos bien por tu casa?

-Si señora, todos bien.

-Dime. ¿Cuánto tiempo tienes con nosotros?

-Un poco más de tres años señora.

-Ahh, ¿y estas contenta?

-Feliz señora, no pude llegar a mejor parte, usted y el joven son muy buenas gentes.

-¿Te gustaría quedarte mucho tiempo?

-Toda la vida señora.

-¿Podrías guardarme un secreto?

-Claro señora, no soy una chismosa.

-Es que es algo muy fuerte, algo que podría ponernos en la cárcel a Jorge y a mí.

-Aunque hallan matado a alguien le juro que yo no diré nada.

-No….no matamos a nadie…pero tal vez te parezca muy degenerado o asqueroso.

-Si no me lo dice.

-Bueno….Jorge y yo…..mi hijo y yo….ahora que te fuiste……nos convertimos en amantes….tenemos relaciones sexuales….y ya somos pareja….dormimos juntos.

Juanita se quedo callada unos momentos, pero muy pocos y luego dijo.

-Mire señora, secreto por secreto, en mi rancho esto es muy normal, en mi propia familia mi hermana mayor de 24 años tiene dos hijos de mi padre, mi hermano de 22 tiene sexo con mi madre y mi hermana de 20 años con la que tiene tres hijos y yo misma he tenido caricias con mi hermano de 16 años.

Mi madre se quedo perpleja, ella con cargos de conciencia y había familias donde era común y corriente el incesto.

-Bueno, entonces ya estas enterada, no te asustes si nos vez desnudos por la casa haciendo el amor o besándonos y acariciándonos delante de ti.

-No se preocupe señora y felicidades por la nueva.

-Tal vez pronto la familia crezca así que tendrás mas trabajo.

-No importa señora, vale más que ustedes sean felices.

-¿Y si tu hermano se viene a trabajar con nosotros? En tu cuarto cabrían muy bien los dos.

-Eso seria maravilloso.

-Ya lo planearemos.

Cuando regrese a la hora de la comida mi madre me esperaba en la cocina, ligera de ropas y me recibió con un beso apasionado delante de Juanita, comprendí que ya habían hablado y que no había problemas, delante ella empezó a acariciarme la verga y me dijo.

-Tengo ganas de mamártela delante de Juanita.

-Por mi no te detengas.

Se hinco lentamente, me saco la verga y se la metió en la boca, Juanita nada mas pelaba los ojos y sonreía.

-¡Que rico me la mamas mami! Me gusta que me la mames delante de Juanita, que ella se entere cuanto nos queremos y nos amamos.

Durante unos minutos me la mamó hasta que ya no soporte más.

-¿Me estoy viniendo mamita! ¡Ufff tomate mi leche calientita como aperitivo!

-Gracias mi vida, disfrute mucho tu leche y ahora vamos a comer para que al rato me des por el culo que te gusta tanto. Suertuda de Juanita que ahora solo arreglara un recamara y un baño.

Así llevamos nuestra vida a partir de entonces, hacíamos el amor en cualquier lugar de la casa sin cuidarnos si Juanita nos veía. A los tres meses ya adelantado el embarazo de mi madre, se llamo al hermano menor de Juanita de nombre filemón que resulto ser un mocetón alto y fuerte que nos ayudo mucho en la casa. Era el jardinero, chofer, pintor y cualquier trabajo que saliera el lo hacia.

………….Han pasado los años, ahora yo tengo cuarenta y mi madre cincuenta y ocho. Nuestra hija de veinte y dos años ya tiene tres de casada y tenemos dos nietos. Cuando cumplió 17 años le dijimos la verdad y nos acepto como éramos, para ella solo habíamos tenido amor y nos correspondía igual, ahora se explicaba porque siempre yo dormía con nuestra madre; según mi madre se casó porque estaba enamorada de mí, pero yo no lo creo. Juanita tiene tres hijos, dos niñas y un niño, con su hermano y aunque se han podido independizar no lo han querido pues son felices en nuestra casa​
 
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