Primer trío. Mi mujer y yo con un viejito
Esta es la historia real de nuestro primer trío completo, con participación plena de la tercera persona. Vamos, que el afortunado participante se folló a Gaby.
Hay quien pudiera pensar que fue un trío con un tío joven con una gran polla, pero no. Lo que me dijo Gaby me descolocó. Me comenta que tiene una fantasía rara. A mí me dejó extrañado y preocupado. Después respiré cuando me dice que le gustaría estar con un señor mayor. A mi, la verdad me sorprendió, y le dije si no prefería alguien mas joven con un buen pollón, vamos, una polla joven. Dijo que no, que era esa la fantasía que quería realizar. Después de lo divertido que fue hacer travesuras, como en la playa, pensé que sería excitante avanzar.
Así que Gaby se puso a buscar un candidato. Lo encontró por uno de estos chats de televisión nocturna en los que ponen películas educativas, je, je. Gaby habló varias veces con él por teléfono, vio que era alguien educado, limpio, sano y respetuoso. Andrés dijo que se llamaba.
Tras decidir ir adelante, ella me comenta que el problema es que él se siente un poco incomodo ya que sería su primera vez de trío, pero que le pareció bien, que le gustaba la idea, pero que le da vergüenza que esté yo. La solución fue sencilla, primero empezarían ellos y cuando él estuviera cachondo me uniría yo. Así sería mas fácil.
También me dice que no tiene sitio y que si podíamos hacerlo en el coche. Yo le dije que sería algo incómodo, pero a ella le pareció morboso. Como era su fantasía le deje tomar el control.
Así pues, el día señalado nos dirigimos a el lugar establecido para quedar. Gaby identificó su coche y se cambió para ir con él indicando el camino. Yo seguí detrás de ellos tal cual lo decidido.
Ese día ella estaba espectacular pues vestía una falda larga que le marca mas su espectacular culazo, un sujetador de estos que levanta las tetas una barbaridad, acompañado de una blusa de gran escote, por lo que las tetas se le veían aún mas grandes, paradas y bellas. Te podías asomar desde arriba y ver su majestuosidad. También llevaba un tanga de hilo de esos que hay que apartar las nalgas para ver el hilo. Según me contó ella cuando subió al coche del viejo, los ojos de éste se clavaron en ese escote. Dice que durante el viaje no apartaba la vista del escote y que le acariciaba los muslos sobre la falda en cada ocasión que podía.
Llegamos a un lugar algo apartado y nocturno de una solitaria playa. No había ni luces, ni gente, ni nada por los alrededores. Yo paré mi coche al lado del suyo, a apenas un metro. Cuando abren las puertas para pasar al asiento de detrás la luz interior me permitió ver al señor. Era un señor mayor de unos 65 a 70 años, aparentemente delgado y algo calvo.
Por suerte había algo de luna y eso me permitió ver mas o menos la cosa. Él comienza a acariciarla sobre la ropa para acto seguido, como intuí, ir lo primero a por sus las tetas, metió la cabeza en ellas y se perdió allí.
Lo primero en salir fue la blusa, ese viejo sobaba y sobaba esas tetas como si la vida le fuera en ello. Luego vi que Gaby se quito la falda y se puso a cuatro de cara a la ventanilla que daba a mi, vi su cara de morbo y placer. Por lo que pude entrever el señor comenzó a chuparle y sobarle las nalgas, se veía como enterraba la cara en su culo. Al poco vi como Gaby se quitaba el sujetador y él se emocionó de nuevo chupando y tocando las tetas. La verdad es que son muy grandes y naturales, por lo que no me extraña que le llamasen la atención. Chupaba y manoseada metiendo la cabeza entre ellas.
En un momento veo como se incorpora Gaby y se pone contra el cristal de la ventana, por lo que se quedaron su tetas pegadas contra el cristal y vi el viejo detrás de ella sobándola sin cesar.
Tras unos minutos Gaby me hace señas para que me pase al otro coche. La verdad es que el viejo estaba un poco cortado al verme a mi. Estaba en calzoncillos y empalmado. Yo le dije “hola, tranquilo, que aquí hemos venido a divertirnos, a que nos chupen la polla y a follar esta hembra”. El dijo tocando las tetas de Gaby, "perfecto porque tu mujer está muy buena", "tiene unas tetas y un culo que da gusto tocar y chupar".
Acto seguido mi pantalón y calzoncillos salieron fuera quedando mi polla dura y tiesa apuntando arriba. Nos quedamos los tres detrás, con ella en medio. Gaby no perdió el tiempo, le sacó la polla del calzoncillo al viejo y comenzó a meneárnoslas mientras decía chupando sus labios, "ummmmm que rico, dos pollas solo para mi". Parecía una escena de película porno. La verdad es que para ser mayor tenia una polla decente, no muy gruesa, pero de tamaño decente.
Gaby se inclino y comenzó a chupársela al viejo. Este se quedo con los ojos en blanco, pues la verdad es que ella sabe chuparla muy bien. Yo mientras tanto ya tenia apartada la tanga y me dediqué a meter un dedo dentro de su coño. Gaby comenzó a gemir y decir, " siiii, clávame ese dedo en mi coño", "ummmmm, que polla mas rica tienes Andrés".
La escena era un poco complicada pues el coche no era muy grande pero la excitación del momento suplió la carencia de espacio. Luego cambio a chupármela a mi para ofrecer su culazo, ya sin tanga al viejo, el cual se lo encontró de frente. Él enterró su cara dentro de aquel culazo y comenzó a chuparle ese coño incesantemente. Luego subía a su culo y así alternando. Cuanto más se lo chupaba a Gaby mas profunda me hacia la mamada. Menos mal que el paraje estaba desierto porque sus gemidos eran fuertes. El viejo se emocionaba chupando y metiendo el dedo en ese jugoso y mojado coño.
Luego Gaby se volvió a sentar en medio y abrió las piernas poniéndolas sobre las nuestras y comenzó a tocarse el coño y abrírselo con sus dedos mientras se masturbaba para nosotros. Se frotaba fuertemente el clítoris y con la otra mano se acercaba el pecho a la boca para chuparse el pezón, " ummmmmm, tengo el coño empapado". “Mirar como me late”.
Entonces se mete un dedo de cada mano en el coño, los saca mojados y nos los da para probar de su rico fluido. En eso nos dice, “¿quien quiere ser el primero en follarme?”, para después seguir masturbándose y gimiendo. Yo le digo que empiece Andrés. Él pregunta “¿con o sin condón?”. A lo que mi mujer se lo dijo claro, “CON”.
Gaby le puso un condón y se quedo a cuatro con su cabeza sobre mi polla chupando sin cesar mientras yo le acariciaba las tetas. El viejo se puso detrás de ese tremendo culazo y poco a poco comenzó a meterla. Yo creo, por la cara suya, que nunca se había follado un coño como el de mi mujer. Empujaba y empujaba mientras le sobaba el culo y decía cosas como “que rica estás”, “que culazo”... La escena era totalmente morbosa, mi mujer a cuatro chupándome la polla y el otro por detrás follándosela. Gaby gemía le decía, " empuja, empuja, clávame esa polla", "Raúl, mira como me follan, mira lo dura que la tienes", “Como me gusta”, ”que cachonda estoy”.
Yo estaba en la gloria, mi mujer me estaba dando la mejor de las mamadas mientras me miraba a los ojos con cara de vicio. A ratos le decía “empuja, empuja, fóllate ese coño”. Al oír eso el viejito empujaba mas fuerte y mas se enterraba mi polla en la garganta de mi mujer.
Al poco el viejo comenzó a gemir y se corrió dentro del condón, cayendo rendido en el asiento con el condón lleno de leche sobre su menguante polla. En eso mi mujer se gira ofreciéndome su coño y abriéndolo con los dedos. Yo me puse detrás y empecé a follarla con fuerza mientras ella miraba al viejo y acariciándole la polla le decía, “mira como me la están metiendo” , “ponte debajo y mira mi coño abierto por la polla de mi marido”. El viejo se metió como pudo debajo dejando la cabeza por debajo de ella y disfrutando con el espectáculo de ver el coño de Gaby abierto por mi polla y haciendo un buen ruido por los flujos y el frenesí de la follada. Los flujos del coño de Gaby caían sobre su boca y él los bebía con gusto.
Gaby tomó su polla y comenzó a pajearlo de nuevo. A momentos parábamos la follada, le sacaba la polla y ella inclinaba el coño para que se lo chupara el viejo diciendo, "bebe, bebe, cómeme el coño, bebe mi flujo" y luego yo volvía a meterla dentro. Ese viejo se bebía todo lo que salia de su coño, no le importó que mi polla hubiera estado dentro de ese coño. Había momentos en que Gaby le tapaba toda la cara refregando su coño por toda ella, pero él disfrutaba con eso, tanto que se le puso dura de nuevo. Luego inclinaba las caderas para arriba y me volvía a ofrecer su coño para follarlo de nuevo. Yo tenia tal excitación que con los empujones que le daba hacia moverse hasta el coche, como si fuera una feria, mientras le decía, "goza perra, goza y gime que estás cumpliendo tu fantasía".
Luego yo me puse boca arriba como pude y ella se montó en mi polla para cabalgarme quedando de cara al viejo que seguía disfrutando de esas tetas. Las tocaba y chupaba sin cesar mientras ella le daba alegría a su polla con la mano y le decía, "para tener vergüenza como tenías bien dura que se te pone", "chupa esas tetas viejo salido",.
Después de un rato de mete y saca ella se corrió, se sacó mi polla y le puso el coño en la boca al viejo para que bebiera todos los flujos que le salían. A él le encantó ese regalo pues le dejo el coño bien limpio. Acto seguido volví a llenarlo yo con mi polla.
En eso que ella le pregunta al viejo “¿Donde quieres que me tire la leche mi marido?”. Él responde “En la cara y las tetas”. Entonces Gaby me la saca y comienza a chupar con fuerza. Cuando note la inminente corrida, apunté bien y le llene las tetas y la cara con mi leche.
Gaby miro al viejo mientras se relamía la boca con el semen y refregaba sus tetas con mi jugo diciendo, "no hay que desperdiciar esta leche, me la voy a tragar toda". Así estuvo jugando con ella un rato.
El coche entero olía a sexo y los cristales estaban totalmente empañados. La verdad es que fue un buen polvo. El viejo decía que muchas gracias, que había disfrutado mucho y le encantaría repetir. Yo le dije, "desde luego que te encantaría repetir, con lo bien que te lo has pasado follando y chupando a Gaby ...", " Te ha encantado el coño de Gaby, ehh?".
Así pues nos limpiamos y ya él se fue con su coche y nosotros con el nuestro. La verdad es que no hemos repetido trío en coche, pues se hace un poco incomodo, pero como fantasía estuvo bien.
Cuando yo le pregunté que le pareció ella me dijo que como experiencia morbosa había estado muy bien, pero que el viejo con la edad que tenia no daba gran cosa. Aún así me dijo que se divirtió mucho y que valió la pena, que había gozado como una perra.
Esperamos os haya gustado tanto o mas que a nosotros.
Besos y abrazos.
