En mi relato Laura os conté que mi papá me desvirgo a mis 8 años y también me entere que follaba con mi amiga Aminta desde que ella tenía 7 años.
Como por instinto de venganza ó celos infantiles, al saber que mi papi follaba con Aminta, me vestí provocativa y busque a don Eladio y cuando lo encontré iba en un campero a llevar sal para el ganado a unos potreros muy lejanos, Lola iba con él.
– ¿Para donde vas pequeña?
– Voy a su casa a hablar con usted.
– Si tienes tiempo vamos a llevar este encargo a la caseta del Chircal y por el camino me cuentas.
– Vamos, pero avísele a mi papi que me fui con usted y con Lola.
Hizo pasar a Lola al asiento de atrás y me subí.
Para llegar allá era una carretera llena de baches, como yo iba sentada en posición de loto frente a él, mi faldita se me fue subiendo dejando ver mis calzoncito rosa casi transparentes con florcitas bordadas que me había puesto, me miró y la cara se le puso roja, casi no podía conducir por mirarme mi calzoncito, me rasque con cara de inocencia le creció el bulto entre las piernas para emocionarlo más le dije:
– Don Eladio me enseña a conducir.
– Claro muñeca, siéntate en mis piernas para que pueda ver el camino, me acomodé sobre su pene y me entregó el volante, el metía el coche por los huecos para que saltara y su pene se resfregara en mi colita no aguanto más y me atrajo hacia el corriendo mi calzoncito con sus dedos y poniendo su pene en mi vaginita pegándome un calentón que me hacia gemir al sentirlo en mi cosita.
Lola dijo que ella también quería aprender
Don Eladio paro el coche nos acomodamos Lolita encima de mí con las piernitas abiertas y le entregue el volante y observe que no tenía su calzoncito lo que me puso más caliente porque Lolita desde siempre me había gustado.
Don Eladio la acaricio y le metió un dedo a su nena allí abajo ¡Asíii papi máaaas dijo Lola toda emocionada¡ mientras yo la agarraba de sus pechitos y le daba besos tras las orejas.
Cuando su papi la soltó para arrancar el coche y seguir camino empecé yo a sobarle y hacerle cositas en el coñito hasta que llegamos a la caseta del Chircal.
Cuando don Eladio descargó los bultos nos sentamos horqueteados frente a frente en una banca larga de madera a tomarnos un refresco y a conversar.
–Preciosa se que tu papi te coge, lo harías conmigo, dijo mirándome la entrepierna con ganas.
– A eso he venido, quiero que me lo meta como mi papá se lo mete a Aminta, le dije subiéndome la falda para que viera mis calzoncito casi transparentes; ¿pero y Lola?
El la cargo acariciándole el coñito y le preguntó: ¿Cierto Lolita que usted no se enoja si le hago cositas a Laura?
– No papi pero a mi también.
– Pero mi amor a Laura se lo voy a meter todo y tu tienes 6 añitos, bebe.
– Bueno papi pues si no me cabe me lo metes un poquito como las otras veces y me das la lechita en la boca, decía infantilmente.
Yo excitada por la conversación me quite mi calzoncito y me recosté en la banca con una pierna para cada lado dejando mi vaginita al aire a disposición.
Don Eladio se desvistió, se acercó y me saco mi remerita y empezó por mamarme mis pechitos.
– Laurita ¿Cómo es posible que las tengas tan grandes a tu edad?
– Será porque me las han chupado desde pequeña.
– ¿Cuántas veces has follado con tu papi princesa?
– Solo 5 veces, pero hágame pues que tengo muchas ganas.
Eladio paso su lengua áspera por mi rajita, me hizo muy rico en mi cosita, se me montó, empezó a metérmelo y Lolita me mamaba mi pezoncito y yo le acaricie el coñito, me follo un buen rato haciéndome venir con su verga dentro mio y en mi éxtasis le dije:
– Eladiooooo desvirguemos a Lolitaaaaaaaaaaaa.
Siiiiiiiiii princesaaaa.. y se vino dentro mio, me inundó con su semen mi vaginita, y yo sentí un orgasmo delicioso con el morbo de pensar que le estaba siendo infiel a mi papá en desquite por follar con Aminta.
Después acomodó a Lola en la banca, le comió el coñito; yo la besaba en sus pechitos, le acariciaba la cara y le apretaba los pezoncitos.
– Relájate amor para que no te duela.
Don Eladio le untó un aceite que ya llevaba preparado, le puso el pene en la rajita y la punteo, se ve que ya se lo había hecho varias veces porque la cabeza le entro fácil, empujó lentamente, Lolita me abrazó pujando yo veía como le iba entrando y al momento en que la desfloro Lola lanzó un aaaaaaaaaayyyy papiiiiiii….
Eladio se quedo quieto, lo saco y se limpió la sangre, se untó crema de nuevo y la penetró de nuevo a su nena en un mete y saca cada ves más profundo, hasta que Lolita gimiendo se hisi pipi, al igual que yo cuando mi papi empezaba a metérmelo en mi cosita, y le dijo que se quería tomar la lechita él lo sacó y se lo puso en la boquita a lolita, ella se lo mamaba con mucha práctica, con ansias recibió el semen saboreándolo como si no fuera la primera vez.
Esa experiencia la llevo grabada en mis recuerdos.
Mi hermano Rafael terminó sus estudios secundarios a los y regreso a casa por un tiempo, mi papá preparo una fiesta donde contrato músicos hubo baile y mucho licor para todos los trabajadores y sus familias y nos divertíamos mucho.
En medio de la fiesta noté cuando Rafael disimuladamente salió de la fiesta con Lola, inmediatamente me entro una sospecha y los seguí, se ocultaron en el granero y cerraron la puerta pero yo conocía una entrada por la parte de atrás, subí una escalera y me puse a espiarlos, estaban desnudos, Rafa la besó largamente mientras Lolita le acariciaba el miembro, me causo impresión ver a mi hermano tan grande con Lolita de apenas 7 años entre los brazos.
Se acariciaron un buen rato haciéndose de todo, luego Rafael la sentó en unos bultos de maíz con las piernas abiertas, le puso su enorme pene en la rajita, al principio no lo podía meter pero luego con un poco de esfuerzo la fue penetrando entre quejiditos de Lola, quejiditos que se convirtieron en gemidos cuando la penetro del todo, ya llevaba como media hora follándola y se había descargado 3 veces dentro de ella, ella todo el tiempo parecía que estaba en un solo orgasmo, con su cabello rubio despeinado, su cuerpecito sudoroso y su entrepierna mojada por el abundante semen que brotaba de su vaginita.
– Rafa no me haga más que ya me está doliendo, dijo casi sin fuerzas y además tengo que asearme porque su papá Julio me dijo que me esperaba después de la fiesta en su alcoba.
Descansaron un rato después de semejante follada, y la música de la fiesta los volvió a la realidad, entraron al baño del granero y se asearon.
Y yo me fui a mi alcoba a cambiarme el calzoncito que me había dejado mami porque las tenía empapadas de mis fluidos, producto de orgasmos que me daba cuando mi papi me tocaba mi vaginita.
[FONT="]Continuara…[/FONT]
Como por instinto de venganza ó celos infantiles, al saber que mi papi follaba con Aminta, me vestí provocativa y busque a don Eladio y cuando lo encontré iba en un campero a llevar sal para el ganado a unos potreros muy lejanos, Lola iba con él.
– ¿Para donde vas pequeña?
– Voy a su casa a hablar con usted.
– Si tienes tiempo vamos a llevar este encargo a la caseta del Chircal y por el camino me cuentas.
– Vamos, pero avísele a mi papi que me fui con usted y con Lola.
Hizo pasar a Lola al asiento de atrás y me subí.
Para llegar allá era una carretera llena de baches, como yo iba sentada en posición de loto frente a él, mi faldita se me fue subiendo dejando ver mis calzoncito rosa casi transparentes con florcitas bordadas que me había puesto, me miró y la cara se le puso roja, casi no podía conducir por mirarme mi calzoncito, me rasque con cara de inocencia le creció el bulto entre las piernas para emocionarlo más le dije:
– Don Eladio me enseña a conducir.
– Claro muñeca, siéntate en mis piernas para que pueda ver el camino, me acomodé sobre su pene y me entregó el volante, el metía el coche por los huecos para que saltara y su pene se resfregara en mi colita no aguanto más y me atrajo hacia el corriendo mi calzoncito con sus dedos y poniendo su pene en mi vaginita pegándome un calentón que me hacia gemir al sentirlo en mi cosita.
Lola dijo que ella también quería aprender
Don Eladio paro el coche nos acomodamos Lolita encima de mí con las piernitas abiertas y le entregue el volante y observe que no tenía su calzoncito lo que me puso más caliente porque Lolita desde siempre me había gustado.
Don Eladio la acaricio y le metió un dedo a su nena allí abajo ¡Asíii papi máaaas dijo Lola toda emocionada¡ mientras yo la agarraba de sus pechitos y le daba besos tras las orejas.
Cuando su papi la soltó para arrancar el coche y seguir camino empecé yo a sobarle y hacerle cositas en el coñito hasta que llegamos a la caseta del Chircal.
Cuando don Eladio descargó los bultos nos sentamos horqueteados frente a frente en una banca larga de madera a tomarnos un refresco y a conversar.
–Preciosa se que tu papi te coge, lo harías conmigo, dijo mirándome la entrepierna con ganas.
– A eso he venido, quiero que me lo meta como mi papá se lo mete a Aminta, le dije subiéndome la falda para que viera mis calzoncito casi transparentes; ¿pero y Lola?
El la cargo acariciándole el coñito y le preguntó: ¿Cierto Lolita que usted no se enoja si le hago cositas a Laura?
– No papi pero a mi también.
– Pero mi amor a Laura se lo voy a meter todo y tu tienes 6 añitos, bebe.
– Bueno papi pues si no me cabe me lo metes un poquito como las otras veces y me das la lechita en la boca, decía infantilmente.
Yo excitada por la conversación me quite mi calzoncito y me recosté en la banca con una pierna para cada lado dejando mi vaginita al aire a disposición.
Don Eladio se desvistió, se acercó y me saco mi remerita y empezó por mamarme mis pechitos.
– Laurita ¿Cómo es posible que las tengas tan grandes a tu edad?
– Será porque me las han chupado desde pequeña.
– ¿Cuántas veces has follado con tu papi princesa?
– Solo 5 veces, pero hágame pues que tengo muchas ganas.
Eladio paso su lengua áspera por mi rajita, me hizo muy rico en mi cosita, se me montó, empezó a metérmelo y Lolita me mamaba mi pezoncito y yo le acaricie el coñito, me follo un buen rato haciéndome venir con su verga dentro mio y en mi éxtasis le dije:
– Eladiooooo desvirguemos a Lolitaaaaaaaaaaaa.
Siiiiiiiiii princesaaaa.. y se vino dentro mio, me inundó con su semen mi vaginita, y yo sentí un orgasmo delicioso con el morbo de pensar que le estaba siendo infiel a mi papá en desquite por follar con Aminta.
Después acomodó a Lola en la banca, le comió el coñito; yo la besaba en sus pechitos, le acariciaba la cara y le apretaba los pezoncitos.
– Relájate amor para que no te duela.
Don Eladio le untó un aceite que ya llevaba preparado, le puso el pene en la rajita y la punteo, se ve que ya se lo había hecho varias veces porque la cabeza le entro fácil, empujó lentamente, Lolita me abrazó pujando yo veía como le iba entrando y al momento en que la desfloro Lola lanzó un aaaaaaaaaayyyy papiiiiiii….
Eladio se quedo quieto, lo saco y se limpió la sangre, se untó crema de nuevo y la penetró de nuevo a su nena en un mete y saca cada ves más profundo, hasta que Lolita gimiendo se hisi pipi, al igual que yo cuando mi papi empezaba a metérmelo en mi cosita, y le dijo que se quería tomar la lechita él lo sacó y se lo puso en la boquita a lolita, ella se lo mamaba con mucha práctica, con ansias recibió el semen saboreándolo como si no fuera la primera vez.
Esa experiencia la llevo grabada en mis recuerdos.
Mi hermano Rafael terminó sus estudios secundarios a los y regreso a casa por un tiempo, mi papá preparo una fiesta donde contrato músicos hubo baile y mucho licor para todos los trabajadores y sus familias y nos divertíamos mucho.
En medio de la fiesta noté cuando Rafael disimuladamente salió de la fiesta con Lola, inmediatamente me entro una sospecha y los seguí, se ocultaron en el granero y cerraron la puerta pero yo conocía una entrada por la parte de atrás, subí una escalera y me puse a espiarlos, estaban desnudos, Rafa la besó largamente mientras Lolita le acariciaba el miembro, me causo impresión ver a mi hermano tan grande con Lolita de apenas 7 años entre los brazos.
Se acariciaron un buen rato haciéndose de todo, luego Rafael la sentó en unos bultos de maíz con las piernas abiertas, le puso su enorme pene en la rajita, al principio no lo podía meter pero luego con un poco de esfuerzo la fue penetrando entre quejiditos de Lola, quejiditos que se convirtieron en gemidos cuando la penetro del todo, ya llevaba como media hora follándola y se había descargado 3 veces dentro de ella, ella todo el tiempo parecía que estaba en un solo orgasmo, con su cabello rubio despeinado, su cuerpecito sudoroso y su entrepierna mojada por el abundante semen que brotaba de su vaginita.
– Rafa no me haga más que ya me está doliendo, dijo casi sin fuerzas y además tengo que asearme porque su papá Julio me dijo que me esperaba después de la fiesta en su alcoba.
Descansaron un rato después de semejante follada, y la música de la fiesta los volvió a la realidad, entraron al baño del granero y se asearon.
Y yo me fui a mi alcoba a cambiarme el calzoncito que me había dejado mami porque las tenía empapadas de mis fluidos, producto de orgasmos que me daba cuando mi papi me tocaba mi vaginita.
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