La primera vez de mi hija

Pipsqueak

Virgen
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Han pasado unos días, y es ahora cuando puedo, de alguna forma, escribir lo que me sucedió días atrás. Me llamo Andrés, tengo 54 años y mi mujer 47. Tenemos una hija, Laura, de 18 años., rubia, ojos azules, 1,68 de estatura y creciendo, y con unos pechos aunque no muy grandes, si muy firmes, y unas piernas muy hermosas. A ella siempre la había visto como una hija, y digo había porque la perspectiva ha cambiado, como podrán entender después. Hace como 1 semana, estaba con una falda muy corta, sentada frente a mí. La falda la tenía bien subida y mostraba unas piernas estupendas, me quede mirándolas, Con el paso, y debido a su escasez de tela y a sus movimientos fui observando su braguita, perdón, su tanga, cuando se inclinaba.

Debo decir que era una situación en que no sabía cómo reaccionar, pues no sabía si mirar, mirar el tanga de mi hija, o apartar la vista. Poco a poco le iba viéndole el tanga con más claridad, hasta poder leerle una palabra que llevaba en ingles. Eats, eso le ponía en su tanga y por curiosidad, debido a mi poco conocimiento del inglés, con mi móvil busque su significado. Come, su traducción me salía como come, como lo que no hacia faltar ser un genio como para imaginar lo que quería decir el mismo. Sin duda que mi hija Laura sabia ya también lo que significaba y mi cabeza pensó que cuantos chicos se la habrían visto y cuantos le podría haberle hecho lo que ponía la palabra, cuantos le habrían comido, literalmente toda esa parte, todo ese chochito suyo.

Fue pensarlo, y de forma inconsciente, noté una erección tremenda, aquello que utilice para engendrarla, mi polla, mi rabo, mi pene, aquello bien duro que entro, que penetro a su madre y la regó con buena leche, aquel mismo palo se excitaba con el pensar de que mi hija hubiera saboreado ese mismo placer. Era la primera vez que esto me ocurría, me excitaba de cierta manera mi hija, el pensar que podía hacer, que le podían hacer. Era un momento de duras, me reprochaba que esto me estuviese hubiese pasado y al segundo que no parase la excitación. A raíz de este hecho empecé a verla de otra forma, de imaginar que no era una niña, era una mujercita, una mujer, con deseos propios con deseos sexuales como su madre, como su padre y al imaginar no la veía como a mi hija y eso me hacia sentir deseos por ella.

Al día siguiente antes de irme al trabajo, mi mujer ya había salido, al pasar por su habitación estaba la puerta abierta, me asome y contemple que estaba dormida con un camisón muy corto, mostrando sus preciosas piernas y al tener desabrochada la parte de arriba quedaban a la vista sus hermosos senos, me quedé un instante observando ese maravilloso espectáculo, observando su cuerpo, y notando esa erección de nuevo viniendo sobre mí, y notando las ganas que tenía por salir del pantalón y de no estar aprisionada. No podía dejar de verla, de mirarla mientras mi polla palpitaba en mi entrepierna deseando soltar todo lo que acumulaba. Que hacer, me desabrochaba, e masturbaba viendo a mi hija hasta correrme, o me contenía.

Dude con el que hacer y me aleje intentando alejar esos pensamientos de mi cabeza, de mi mano y de mi polla endurecida por tal visión. Estuve dudando un momento, dos, tres momentos, no sé cuántos momentos la verdad, pero ante mi estado de excitación y nerviosismo por el que hacer entre en su habitación. Me acerque y decidí tocar esos apetitosos pechos, me produjo una excitación tenerlo en mis manos, eran duros, los apreté fuertemente y esto hizo que me hija se despertara, sorprendida me pregunto qué era lo que pasaba, yo, muy nervioso, le conteste,” nada hija, que te vi destapada y entré a taparte, pero no pude evitar quedarme contemplando esos maravillosos pechos que tienes, que te estas convirtiendo en toda una mujer”.

Ella algo confusa, pero noté que con un punto de excitada, me contestó,

.-¿Tú crees?, ¿de verdad piensas eso papa?, y te gustan?

.-Si hija mucho, son hermosos como todo tu cuerpo de mujer. Te estás haciendo una mujer muy guapa Laura. (Y en plan de broma, aunque no lo era le dije), es más Laura, sino fueses mi hija… , (y me eche a reír).

.-¿Qué papa, sino fuese tu hija qué?, “me dijo riéndose también”.

Debo decir que me pillo algo de improviso su respuesta, esperaba una como “ay papa, no digas esas cosas”.

.-Hija es obvio, sino fueras mi hija, y tuviese menos años.

.-¿Qué, que me harías entonces? (me dijo). Me harías el amor. Es eso?

.-Si, (fue un sí rotundo el que le dije), Si Laura, sino fueses mi hija si, eres guapa, atractiva, común
cuerpo precioso, unos pechos, unas piernas, y que sé que eres mi hija, pero que estas muy buena Laura. Y si fuera yo fuera amigo tuyo disfrutaría follándote.

.- Ay papa que bruto eres con eso de follarme, si se enterase mama de lo que me dices se enfadaría mucho.

De nuevo no sabía cómo reaccionar, si su madre se enterase de esta conversación, de estos comentarios igual, seguramente se podría enfadar.

.-Laura, esto no hay que contárselo a tu madre, es una conversación entre padre e hija.

.-Si, tranquilo papa, esto es entre tú y yo.

Y esa frase suya no me gusto del todo, sobre todo por el tono en que lo dijo, tras la cual empezamos a conversar de nuevo


.-De verdad papa piensas que soy guapa, que le gusto a los chicos.

.-Claro, que si, habría que ser muy tonto para que no le gustases a algún chico, pero que no me entere yo que haces cosas con ellos, diciéndole esto último entre risas.

.-Te cuento algo papa.


.-Lo que quieras hija.

.-Todavía soy virgen, así que tranquilo.


.-Como, virgen dices, no has hecho nada con ningún chico, yo podía pensar que si, aunque no me hiciera gracia, como a cualquier padre.

.-Si papa, no he hecho nada con ningún chico.

.-Como, ningún chico te ha dado un beso ni te ha tocado ni una teta.

.-Bueno, unos besos sí, pero nada más, no te han metido mano si es lo que pensabas, solo yo me he acariciado.

.-Ay hija, no sé qué decirte, me dejas sin palabras. Por tu edad podía pensar que habías tonteado algo, aunque no me gustase como tu padre que soy. No sé si preguntarte porque no.

.-papa, he visto alguna porno, alguna amiga ya se ha acostado, ha follado como tu decías antes, pero me da algo de miedo. No sé si lo sabría hacer bien.

.-cariño, nadie sabe hacerlo la primera vez, ni yo lo sabía hacer, sabes ,tu madre fue la primera con la que lo hice y tenía 17 años. Tienes miedo pero también ganas por saber que se siente. Cuando te veas preparada veras que bien.

.-De verdad papa, con mama fue tu primera vez, y con más edad que yo. Y te gusto, le gusto a mama.

.-Sí, me gustó mucho y a tu madre también, y repetimos muchas veces después, y te digo una cosa, pero no se la digas a tu madre, te gusta tanto que repites aunque no sea con ella, ya me entiendes.

.-Que engañaste a mama. Ay papa que malo eres.

.-No Laura, no la engañe porque no salíamos, éramos amigos que como te puede pasar a ti, te acuestas con un chico e igual a los días o semanas te acuestas con otro.

.-Ahhh vale entiendo.

.-Ya verás hija que cuando estés preparada para esa primera vez no tendrás tanto miedo por el cómo ira y que pasara.

.-Gracias papa por la explicación, me dejaste más tranquila.

Uf menuda conversación que había, que estaba teniendo con mi hija, y lo que ella no sabía es qué mi polla estaba bien dura tras la charla con ella, bien mojada y con deseos de hacerla mía.

.-Venga hija, que te tienes que arreglar para el instituto no sea que se nos vaya a echar el tiempo encima, sique arréglate, vístete y a desayunar.

.-Si papa, ahora me visto, “y diciendo esto y conmigo delante se desnudó completamente”.

.-Pero Laura, que estoy aquí delante y uno no es de piedra, (le dije entre risas).

Mi hija me miro y entre risas dijo: “seguro que se te pone bien dura viendo a tu hija desnuda”.
La verdad era que sí, bien dura y bien mojada, y no solo porque estuviera desnuda sino por la conversación de antes.

.-Tu imagínate que sí, que haríamos, que pasaría, te parecería norma, o medio normal.

.-Mmmm, pues sí, me parecería normal que se te pusiera dura si como has dicho antes te parezco atractiva. Dime papa se te puso dura.

.-Ay hija, no digas eso que soy tu padre, pero como quieres saberlo te diré que sí, que te he dicho que uno no es de piedra.

No podría mas, llegados a ese punto era o todo o nada.

.-mira, la ves, ves como esta, te das cuenta de que puedes excitar a cualquier chico. (Y mientras le decía eso libere mi polla del pantalón).

.-Ay papa, sí que la tienes dura y mojada, y eso te lo hice yo. Puedo tocártela.

No podía dar crédito lo que oía. Mi hija desnuda quería tocarme la polla.

.-si quieres, si quieres tocarla adelante.

.-uffff papa esta dura y mojada pero se agarra bien.

.-si quieres la puedes mover, ¿sabes cómo?, no.

.-Claro lo he visto en las porno, ¿lo hago bien así?,

MMMM ya lo creo que lo hacía bien, menuda masturbada que me estaba haciendo mi hija para ser la primera vez que tenía una polla entre sus manos sabía cómo tocarla.

-Si Laura, si hija mía, lo haces bien, te gusta, y si quieres puedes chuparla, comértela como en esa porno que hayas visto.

Y Dicho y hecho, mi hija empezó a moverla, despacito, con esa inexperiencia de su primera vez, pero sin parar, mejorando con cada pasada haciéndome gozar de lo lindo con su boca y con sus manos.

.-Te gusta Laura, te gusta el sabor de una polla en tu boca.

.-Si papa, me gusta el sabor de tu polla en mi boca, mm me encanta.

Y así estuvo mi hija haciéndome un oral de lo lindo, manteniendo mi polla dura, excitada hasta no poder más y llevarla hasta que reventase de gusto.

.-Laura, no puedo más, no puedo más, tu boca es un vicio, me voy a correr, me voy acorrer en tu boca, no te asustes, vas a tener la leche de papi.

.-Si papa córrete en mi boca, deja que pruebe tu leche deja que compruebe a que sabe, dámela toda.

uffff,,, sus palabras no hacían más que excitarme aún más hasta no poder aguantarme más e inundar toda su boca con mi leche. He de reconocer que no me había excitado tanto, no había gozado tanto con una corrida como cuando inunde, cuando le inunde a mi hija su boca y garganta. Mmm, sus arcadas con tanta leche eran un deleite para mi vista y los ojos que tenían decían lo que estaba gozando.

.-Toda tuya hija, la leche de papi para ti sola, te gusta, le decía entre un dolor placentero de huevos.

.-Si papa, me gusta, mmmm cuanta leche, que caliente. Me gusta mucho tu leche, "me decía mientras al hablar se le iba saliendo una poca por sus comisuras y me chorreaban hacia sus pechos".

Estaba demasiado caliente como para parar, mi polla necesitaba un respiro, pero mis manos y demás partes de mí no lo necesitaban así que le dije, "Laura, relájate déjale hacer a tu padre ahora, disfruta del momento". Mis manos empezaron a acariciarla, a esparcir esa leche que había caído en sus pechos por todo el cuerpo posible, a notar por primera vez como su chochito, como su rajita estaba bien húmeda y chorreante. MMMmmmm sabía lo que iba a pasar, iba a comerme el cuerpo de mi hija, y a follarla.

Y ya sin ningún temor empecé a acariciarlos y besarlos, bajé mi lengua por todo su cuerpo hasta llegar al fruto apetecido, mi hija, no decía nada, pero jadeaba, estaba disfrutando de la comida, de los lametones que le estaba dando a su coñito, después , los dos completamente desnudos nos revolcábamos en la cama. No podía esperar más. La abrí de piernas, le acerque mi polla a su coñito, y lentamente se la fui introduciendo entre los gritos de placer de mi nena, me decía, “papa, me duele”, yo le contestaba, “espera hija, poco a poco te desaparecerá el dolor y tendrás mucho placer”. Ya le tenía bastante introducida mi polla, y seguía empujando, hasta que de golpe se la introduje toda, gritaba…..….. Poco a poco esos gritos se fueron transformando en jadeos de placer, me decía, “si papá, mas, mas, que bien, que gusto me das, no pares fóllame, sigue follándome papi hazme tuya”.

No podía sino más que hacerle caso y seguir follándola, seguir metiéndole mi polla hasta el fondo de su chochito, desvirgarla del todo, la estaba desvirgando, la estaba haciendo mujer, era mi hija, me daba igual, era una mujer, deseable, deseosa, con ganas de ser follada y era yo quien lo hacía.
“No pares papa, me gusta, me gusta, fóllame, fóllame termina de desvirgarme, lléname de tu leche calentita, mmmmm no pares”. Uff, sus palabras entre jadeos constantes y las convulsiones de su joven chochito, me volvían loco placer, empujando con más ganas mi polla dentro de su tierno conejito mojado, excitado, irritado y dilatado.

.-Laura, estoy a punto de explotar, estoy a punto de correrme.

.-Si papi, córrete en mi coño, córrete en el coño de tu hija relléname con tu leche, con tu semen caliente hazlo ya papi.

Al oírle esto me excitó de tal manera que derrame toda mi leche en su coñito, la regué de nuevo con mi leche, esta vez en su chochito antes virgen y ahora inundado por la lujuriosa leche de su padre. Quedamos rendidos, estuvimos un rato abrazados, me levanté, me duche y me fui a la oficina mientras mi hija se preparaba para ir al instituto, no como una niña, sino ya como toda una mujer.
 
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rafvallone

Estrella Porno
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Impresionante,me calentó sobremanera.
 

veronicca

Virgen
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Como dices tú........., en cuantas casas se habrá producido esa escena, un padre excitado ante la desnudez de su hija, de pronto, pletórica y atrayente para cualquier hombre, hasta para su padre....., y cuantos de ellos no habrán dado el siguiente paso, acariciar esos pechos, esas piernas, el lugar donde se juntan...... y cuantos habrán hecho finálmente lo que cuentas en el relato, aunque eso mejor que lo cuenten ellos, los que lo hayan hecho.....
Muy bueno.
 

Sexolo.

Virgen
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Barcelona
estoy deacuerdo muy bueno l relato y muy excitante.... pero estoy seguro q debe continuar
 
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