[ho-ha] Es mÃ* necesidad

kakaroto_9158

Virgen
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May 16, 2007
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Debo decir que el relato no es mio es de un tal "Jose", pero me gusto tanto que tenia que compartirlo con ustedes. Para los que quisiera una continuacion pues no hay ya revise y no la encuentro asi que solo queda conformarse con lo que hay

Cabe hacer mención de que el siguiente relato es 100 % rea por lo que tiene un fuerte contenido sexual que puede resultar incluso ofensivo para alguno de los lectores. Solo ha sido ligeramente modificado en cuanto a nombres y edades. Ya saben por los problemas a la hora de publicar. Por otra parte; las fotos solo han sido añadidas con la intención de darle un toque extra al relato asÃ* que no intenten encontrar veracidad en ellas. Bueno, sin más que decir más que decir, los dejo dándoles un cordial saludo y esperando que disfruten del relato:

Hola. Mi nombre es Jacobo y tengo 19 años. Si he de relatar lo acontecido desde antes de que sucedieran los hechos mi relato serÃ*a algo asÃ*:

Mis únicos intereses en la vida son: tener sexo con Karen, tener sexo con Karen y tener sexo con Karen. Como verán Karen en este punto de la vida es mi sueño sexual. Es la mujer a la que siempre he soñado follar. No la definirÃ*a como mi deseo sexual si no más bien mi necesidad sexual. Aunque se que muchos de ustedes se van a espantar, me van a tachar de depravado, de enfermo sexual y de bestia salvaje les cuento que Karen es mi hermana.

Si, asÃ* como lo leyeron. Karen es mi hermana menor. La hermanita de 18 años a la que he visto crecer con un año de diferencia. Esa nena que comenzó su desarrollo a temprana edad arrebatando miles de suspiros dentro de los cuales más del 50 % estoy seguro fueron mÃ*os, robando mil veces mi mirada y motivo de más de mil chaquetas en su honor.

Como verán, a pesar de ser mÃ* hermana, mis sentimientos por Karen no son precisamente los de un hermano mayor. Se que no es precisamente una santa. Ya varias veces mis padres y yo la hemos cachando fajando con novios en casa. Incluso mi madre el otro dÃ*a mientras hacÃ*a la limpieza le encontró viendo pornografÃ*a en la PC. A pesar de todo esto aunque no suene posible sigue siendo virgen.

Yo la deseo con toda el alma. Mi cuerpo necesita el suyo, necesito follármela. Cogerla serÃ*a lo mejor que me puede pasar en la vida. No por el hecho de que es tremenda en la cama o que sea virgen. Más bien dirÃ*a yo que es por el hecho de que esta prohibida para mÃ*. Es un fruto prohibido; es tabú. Cogermela serÃ*a simple y sencillamente asombroso. De eso estoy más que seguro. Añoro sentir su himen desgarrarse y abrir paso a mi pene victorioso.

El problema es que esto no es tan sencillo. Yo he probado el incesto con una de mis primas y creo que desde ese entonces me volvÃ* adicto. Sin embargo no creo que mi hermana acceda tan fácilmente a soltarme sus deliciosas nalgas. No creo que sea igual que con mi prima. Si no ha accedido con sus novios que me harÃ*a pensar que conmigo si? Entre ella y yo hay un lazo de sangre más fuerte que nos une a diferencia de con mi prima que en una borrachera termino soltándome las nalgas. Pero bueno como quien dice una vez empezada la cadena alimenticia con mi prima pues mi deseo es seguir avanzando y esta vez mi hermana esta en mi mira.

Karen pronto de una u otra forma debe convertirse en mi putita. Debo agregarla a mi colección privada de mujeres. A la chingada los que digan que esta prohibido, que es mi hermana y que no se puede.

FÃ*sicamente pues ya se la imaginaran y si no creo que la foto puede servirles de guÃ*a. Tremenda potranca de 18 años. Piel blanca, piernas duras y largas, nalgas de acero, grandes, bien firmes y paraditas como tanto me gustan. Los pechos medianos, parados y bien ricos.
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Como verán su figura de diosa la hacÃ*a ser la candidata número uno para el acostón perfecto. Pero como? Como hacer que me soltara siendo yo su hermano?

Bueno pues de aquÃ* creo que daré un salto y les cuento lo que se me ocurrió después. Hace como 5 meses comenzaron mis insinuaciones. La miraba de otra manera, la abrazaba, a todas horas la intentaba hacer reÃ*r e incluso me metÃ*a en su cama cuando estaba todavÃ*a dormida. Mi hermana creo que nunca se imaginó de mis intenciones. De haberlo hecho seguramente me hubiera mandado a la… pero bueno el chiste es que nunca lo hizo y esto sirvió para que yo me fuera haciendo poco a poco a parte de su hermanito, su amigo intimo.

Ya cuando creÃ* haber ganado su confianza un dÃ*a sin decirle nada la tome de sorpresa y la bese en los labios. Aún recuerdo los ojos que puso mi hermana cuando se sintió aprisionada por mis brazos y mis labios rozando los suyos en busca de su lengua. Como pudo mi hermana me quito de encima y después de abofetearme un par de veces me dijo que estaba loco. Al parecer todo el plan se habÃ*a ido abajo. Pensé en renunciar a mi hermana pero cada vez que lo intentaba era como si adquiriera fuerzas y más motivos para seguir adelante.

Mientras estábamos solos yo le lanzaba indirectas de lo mucho que la necesitaba y que si ella querÃ*a podÃ*amos irnos a la cama el dÃ*a que asÃ* lo deseara. Primero se rehusó de manera amable, intentando crear un canal de conversación en el que solucionáramos el problema de manera inmediata y confidencial pero después de ver que mis intentos por seducirla parecÃ*an no ceder, comenzó a reaccionar de manera más violenta e incluso vulgar lanzándome toda clase de maldiciones. Fue aquÃ* cuando decidÃ* dar una tregua. No querÃ*a que el problema se extendiera hasta llegar a mis padres.

Durante la tregua tenÃ*a todas mis esperanzas desvanecidas. Pensé que tal vez la tregua se prolongarÃ*a a lo largo del tiempo de tal manera que terminarÃ*a cediendo pero no, el milagro se presento una mañana sabatina en la que mis padres y mi hermanita Cindy, la más chica de nosotros (en total éramos 3 hijos), habÃ*an salido y yo estaba viendo televisión en la sala de mi casa. Karen acercándose a mÃ* me dijo:

-Quieres jugar tenis de mesa?

HacÃ*a poco mi padre habÃ*a comprado algo que para ese entonces me habÃ*a parecido un estúpido juego de tenis. Ahora dicho juego parecÃ*a estar bendito. TenÃ*a tiempo que mi hermana no se acercaba a mÃ* de esa forma tan amable. Bendije el juego y a mi padre y sin más acepte dando un brinco para ponerme de pie. Mi hermana me dio una raqueta y nos dirigimos a la mesa para dar inicio al juego. Fue ahÃ* cuando mire a Karen. Me quede como idiota mirando a mi hermana por unos segundos. Su pelo parecÃ*a caer sobre sus hombros en forma de cascada. Se encontraba luciendo un hermoso conjunto. Minifalda que apenas cubrÃ*a sus muslos preciosos y blusa escotada; mi combinación favorita.
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SentÃ* que mi lengua se salÃ*a de mi boca y huÃ*a hacia su cuerpo delicado y suave el cual lamÃ*a centÃ*metro a centÃ*metro.

-Vamos a jugar si o no? – Me volvió a preguntar de manera que tuve que quitar mi cara de bobo de inmediato.

-Claro! Ya es hora de que pruebes lo que es un hombre de verdad.

Mi expresión pareció no agradarle mucho y de primera se llevo sus manos a las caderas. Dios!! Que no darÃ*a por tener mis manos sobre esas caderas!

-En tus sueños idiota- me dijo mi hermana con un tono grosero. Al parecer mi mayor defecto habÃ*a salido a relucir y estaba una vez más pensado en voz alta. Enorme error el mÃ*o. Gracias al maldito defecto que tenÃ*a desde nacimiento mi hermana aventó la raqueta sobre la mesa y se fue molesta.

-Espera Karen! Espera!- Me eche a correr tras de ella.

-Que quieres!!- me dijo volteando hacia donde yo estaba.

-Vamos a jugar tenis. En verdad que lo siento mucho. Fue una broma de mal gusto. No pensé que te fueras a poner asÃ*. En verdad lo siento mucho.

Su mirada pareció cambiar y después de meditarlo un poco me dijo:

-Esta bien pero ya no juegues asÃ*.

Regresamos a donde la mesa estaba y mientras yo la iba siguiendo disimuladamente le iba viendo el culo mientras pensaba asegurándome que mi boca estuviera bien cerrada: Que nalgas! Que maravilla. Esa ropa hace que te veas tan zorrita que si no fuera porque mis padres no tardan en llegar te aventarÃ*a sobre la mesa de tenis y te follarÃ*a como no imaginas.

De reojo mi hermana me miraba y sabÃ*a perfectamente que yo estaba más que caliente. Aún asÃ* parecÃ*a no importarle traerme con las ganas. De hecho llegue a pensar que el motivo por el cual se habÃ*a vestido de esa forma era ese. Ponerme como un toro en brama. QuerÃ*a mostrarme lo que nunca iba a ser mÃ*o la muy putita. Era como decirme sin abrir la boca: Mira hermanito lo que nunca vas a tener. Nunca conseguirás que abra mis piernas contigo.

La muy maldita querÃ*a ver como sufrÃ*a por ella, querÃ*a verme la cara de ganas que tenÃ*a para ese entonces y lo estaba consiguiendo. Que puta y cabrona era mi hermana. Al llegar a la mesa antes de dar inicio le dije:

-Oye Karen. Que te parece si nos echamos un rapidin antes de que lleguen mis padres aquÃ* encima de la mesa?

-En tus sueños pendejo. Que te dije?

-Tranquila. No se porque te comportas como una mojigata. A estas alturas deberÃ*as estar encerrada en un convento en lugar de estar buscando excusas para no jugar conmigo pues sabes que no eres capaz de ganarme un solo juego.

Al fin habÃ*a dado en el clavo. Le habÃ*a dado en el orgullo a mi hermana.

-Cállate y juega Rubén.

-OK. Prepárate para perder. No cabe duda de que estoy a punto de jugar con la ramera más linda y guapa de todo el mundo.

-Y yo no cabe duda de que estoy apunto de jugar con el gigoló más idiota del universo Rubencito.

Cinco minutos más tarde me encontraba jugando una batalla monumental. El marcador decÃ*a 12-3 y no era en mi favor!

-Jaja con que este era el hombre de verdad- DecÃ*a mi hermana orgullosa de su victoria próxima.

Un movimiento más y mi hermana término dejando el marcador 13-3.

-Perdiste. Ya son 10 puntos de diferencia.

-Si ya se!

-Eres un perdedor! Jaja perdedor!

-Escúchame bien. Creo que perdÃ* pero es algo lógico. No puedo jugar contigo vestida de esa forma tan putita. No puedo concentrarme. En lo único que me concentro es en tu hermosa figura y lo mucho que desearÃ*a arrancarte la ropa y tirarte sobre la mesa para cogerte.

-Escúchame bien tú, bastardo idiota! Hay muchas cosas que tu ni si quiera en tus sueños podrÃ*as hacer. No puedes arrancarme la ropa, no puedes cogerme y mucho menos puedes ganarme. Porque soy mucho, muchÃ*simo mejor que tú! Soy mucha mujer para ti imbecil.

-Por supuesto que no, yo fácilmente podrÃ*a hacer todas esas cosas al mismo tiempo.

-A si?

-Si

-Si estas tan seguro porque no lo pruebas. Vamos a jugar un juego más. Si pierdes dejas de una buena vez por todas de pensar estupideces. No vuelves a insultarme, no vuelves a pensar en mÃ* de la manera que lo haces y nunca jamás me contradices.

-Y si yo gano?

Mi hermana guardo silencio y viéndome fijamente a los ojos dijo las palabras mágicas. Justo lo que yo querÃ*a oÃ*r.

-Lo que estas pensando idiota. Si tu ganas esta y todas las noches que quieras puedes ir a mi cuarto y dormir conmigo. Puedes rasgarme la ropa, puedes cogerme y hacer lo que quieras conmigo. Contento?

Mis rodillas casi se doblaron. Todo mi cuerpo tembló al oÃ*rla decir eso. Mi corazón comenzó a latir más fuerte, sentÃ* frÃ*o y pensé que me desmayaba. La oportunidad de oro, mi única chance para cogermela, Wow! No lo podÃ*a creer. PodÃ*a dormir con ella, podÃ*a follarla y tratarla a mi antojo!

-Escucha bien lo que estas diciendo hermanita porque esto no es cosa de niños. En mi cuarto hay un paquete de 12 condones que tienen tu nombre y en cualquier momento pueden ser usados…

-Aguas porque los condones caducan hermanito. No hay ninguna chance en que un perdedor como tu pueda tener una mujer como yo.

-Te sientes muy segura no es asÃ*?

-Jaja con decirte que tu no podrÃ*as derrotar ni siquiera a la abuela. Estoy tan segura de mi victoria que de tu ganar, los condones pueden ser tirados a la basura pues noche tras noche te permitirÃ*a que me vaciaras el semen adentro…

-Entonces este es el trato. Si yo gano duermo contigo y me vengo adentro cuantas veces quiera?

-AsÃ* es hermanito vaya me sorprendes, eres un perdedor pero aún tienes memoria!

No habÃ*a más que pensar, ya podÃ*a sentir su aroma, su piel, su cuerpo saltando sobre mi pene. Era ganar o morir.

-Listo? O vas a esperar a que mis padres lleguen para que sean los jueces?

-Eres mÃ*a preciosa! El que llegue a los 15 gana. Vamos a jugar!

Mi hermanita puso en juego la bola, después de contestar un par conecte con tremenda fuerza haciendo que mi hermana se quedara inmóvil sin reacción alguna.

-1-0!!! Grite con todas mis fuerzas!

El juego siguió y con el mis anotaciones.

-2-0,-3-0,4-0… 12-0!! Ya puedes sentir mi semen en tu interior amor?

Estaba seguro de que serÃ*a mÃ*a. Tan seguro estaba que la confianza jugo su papel y justo cuando el marcador decÃ*a 13-0 la calentura hizo lo suyo y deje de pensar con la cabeza de arriba para pensar con la de abajo…

-13-1,13-2…13-12!!

Mi hermana se estaba acercando a pasos agigantados ante una reacción que cada vez me ponÃ*a más nervioso y torpe. Esos 15 minutos habÃ*an sido los más intensos de nuestras vidas. Ambos nos insultábamos, nos finteábamos, nos maldecÃ*amos y sudábamos frÃ*o a chorros. El marcador estaba empatada 14-14. Estaba tan cerca y a la vez tan lejos del triunfo… Los pechos de mi hermana se movÃ*an al ritmo de sus contestaciones mientras mi cuerpo de manera automática se movÃ*a para contestar la bola. No se ni como lo hacÃ*a, mis ojos estaban clavados en sus senos. Mi hermana podÃ*a ver como yo tenÃ*a la vista clavada en sus tetas y ya ni siquiera veÃ*a la bola.

-Si tantos las deseas tendrás que ganarlas imbecil!- Me decÃ*a mientras con una mano me señalaba las tetas de manera rápida sin dejar de golpear la bola de tenis.

-Las voy a ganar hoy y serán mÃ*as de por vida!

-Asno retrasado!- Me decÃ*a mientras contestaba una bola con toda su fuerza.

Pensé que no la alcanzarÃ*a. Los ojos de mi hermana veÃ*an el futuro victorioso al ver mi enorme esfuerzo. Fue como si hubiera sido en cámara lenta. Con un brazo estirado al máximo y mi cuerpo echado hacia la bola logre conectar mandando la bola hacia su lado. De manera sorpresiva la bola dio un bote extraño sobre la mesa de lado suyo y cambio su destino sorprendiendo con ella a mi hermana que veÃ*a pasar la bola a un lado suyo sin poder tener respuesta…

-Nooooooo!!!! –Grito con todas sus fuerzas cubriendo con ambas manos su rostro al ver como me adjudicaba la victoria con esa anotación. Era la victoria del siglo. La victoria que marcaba el curso de las siguientes generaciones…

Camine victorioso hacia ella mientras posando mis manos sobre sus hombros le hacÃ*a levantar su rostro aún cubierto por sus dos bellas manos. Lentamente las aparte de su rostro y le dije: UTERO DERROTADO!

No hay palabras para describir la mirada de sus ojos en esos momentos.

-Toma lo que desees…- me dijo entre ligeras lágrimas y chillidos.

El sonido de sus chillidos me hizo tener una erección al instante. Rodeado de la victoria y orgulloso de mi mismo empuje mis labios hacia los de ella y la bese. Su boca tÃ*mida se abrió un poco para dar paso a mi lengua que de inmediato busco la suya fundiéndonos en nuestro primer beso. Mis manos se pasaron hasta sus caderas y comencé a medir con ellas su cuerpo perfecto.

Al fin tenÃ*a al amor de mi vida! En ese momento sentÃ* que ella era la mujer indicada. SentÃ* que ella era la mujer de mi futuro, la dueña de mi vida entera.

La cargue como bebe en mis brazos y asÃ* cargada la lleve hasta mi recamara. Ella permaneció callada. Ni una sola palabra salÃ*a de sus labios. Entre en la habitación y tras cerrar con llave la lancé sobre mi cama y comencé a sacarme toda la ropa. Mi pene erecto se liberó. En ese momento no habÃ*a más limitaciones para el. PodÃ*a ver la mirada de la derrota en los ojos hermosos de mi hermanita mientras me veÃ*a quitarme cada una de mis prendas. HabÃ*a ganado y con ello me habÃ*a llevado el premio mayor… ELLA!!

-Esto va ser el cielo para mÃ* aunque para ti tal vez sea el infierno hermanita…

Baje a la altura de su ombligo y mi lengua comenzó a recorrer cada centÃ*metro de su carne expuesta. Mis manos la despojaron de su blusa y sentÃ* como su cuerpo lleno de miedo se arqueaba. Me subÃ* sobre ella para continuar besándola y llevo sus manos hasta mis hombros haciéndome sentir ligeros empujones llenos de debilidad que pedÃ*an a gritos la dejara en paz.

Finalmente mis manos terminaron por sacar su brassier y sus senos botaron libremente ante mis ojos. Mi cabeza se enterró en sus senos y después de saborearlos con mi lengua comencé a morder sus pezones arrancándole ligeros grititos de dolor. Mi pene desnudo se frotaba contra sus muslos. Succionaba sus pezones, sus pechos estaban llenos de saliva y mi lengua paseaba por su ombligo y abdomen de vez en cuando. Estaba disfrutando al máximo su cuerpo al fin.

-Ahora si vas a ser mi putita!-le dije mientras jalaba con fuerza despojándole de su falda revelando sus calzoncitos blancos.

Su cuerpo se estremeció lleno de pavor debajo de mÃ*. Estaba apunto de conquistar el cuerpo de mi hermana. Iba a bañarla de semen con toda la intención de preñarla. QuerÃ*a ver su cara cuando mi semen entrara en ella sellando su destino. Perrita inocente. Por eso no es bueno andar de habladora. Pensé en mi mente.

RemovÃ* sus calzoncitos y vi su conejito. Era la vagina más hermosa que habÃ*a visto en mi vida. Las de mis ex novias, la de mi prima eran cosa del pasado. HabÃ*an sido opacadas por la belleza de la vagina de mi hermanita. Su vagina estrecha, seca y de labios gorditos hizo que mi pene soltara sus primeros lÃ*quidos de la excitación.

-Abre tus piernas amor…-de ese momento en adelante estaba decidido a llamarla de esa manera; AMOR.

Me obedeció separando sus piernas lo más que pudo para mÃ*. Pose mis manos en sus caderas y mi cuerpo se sacudió de la excitación.

-Al fin mÃ*a, mi putita amada.

Colocándome en posición coloque mi masculinidad empapada del lÃ*quido pre seminal en su conchita y comencé a entrar victorioso en ella. Su himen se rasgo y mi hermana dio un grito enorme. Efectivamente era virgen! Ahora mismo lo podÃ*a comprobar. Estaba tomando la virginidad de mi hermana! Era yo, su hermano, quien al fin la hacÃ*a mujer. Mis sueños se hacÃ*an realidad. Su himen desapareció al entrar mi pene por completo en ella. Grito del dolor mientras su conchita seca y apretada aprisionaba mi miembro. La bombee como si no hubiera mañana. Como si fuera la última mujer del planeta.

-Me duele, me duele. Para por favor, para Rubén aaauuuughhh!!! Augh!

Solamente abrÃ* mi boca para bufar del placer: OOHHHHH!!!

Mis empujes comenzaron a ser más fácil cuando de su vagina comenzaron a emanar una gran cantidad de jugos. El teléfono sonó varias veces. Seguramente serÃ*an mis padres pero aún asÃ* no pare de bombear a mi hermana. En esos momentos solo existÃ*amos ella y yo. Mis labios hallaron los suyos y mi lengua comenzó a jugar con la suya.

-AAAAHHHH OHHHH Es delicioso!! -Le gritaba en la cara mientras la cogÃ*a.

-Aahhhh hermanita!! Quiero oÃ*rte decir mi nombre!!

Ninguna palabra salÃ*a de su boca.

-Aahhh hmm quiere oÃ*rte decirlo preciosa. Anda amor dilo. Como me llamo? hmm

Al no obtener contestación suya comencé a empujar mi pene con todas mis fuerzas. En ese momento al fin obtuve una respuesta.

-Aaahhhh Rubén!!, Rubén!, Rubén! Aahhhh

-hmm Quien es el hombre de esta casa? Aahhh

-Tu eres…auuuugghhh tu eres el hombre de esta casa aahhhh

Su conchita era increÃ*blemente caliente. Su cuerpo se sacudÃ*a ante mis embestidas. Comencé a mover mi pene frenéticamente y al fin di con su punto G. Fue demasiado para ella al sentir mi pene tocar su punto y su cuerpo de manera increÃ*ble se arqueo y comenzó a agitarse de manera descomunal.

-Hmmmm Rubén! Hmmmm ooohhh

Tuve que morderse los labios para no emitir más gemidos. Besándola, la forcé a abrirlos y sus gemidos volvieron a resonar en la habitación.

-Hmmm aahhhhh Rubén hmm

-AsÃ*iii te quiero oÃ*r como putita… hmm

-Aahhh hmm

Di una y otra y otra vez en su punto hasta llevarla al orgasmo.

-Aahhhhhhhh hmmmmmmm Rubeeennnn- Su cuerpo comenzó a convulsionarse mientras el mÃ*o se movÃ*a como nunca hubiera imaginado. Llegó al clÃ*max al mismo tiempo en que yo comenzaba a vaciar toda mi leche dentro de ella.

-Aahhhhh hermanita amor mÃ*o!! OOOHHH

-Aahhh Rubén! Hmm

Mi pene exploto violentamente disparando chorros y chorros de semen. Sus senos se hicieron pesados haciéndola caer de espaldas y grito como nunca.

-AAAHHHHHH HMMM

Mi pene seguÃ*a moviéndose frenéticamente quitándome el aliento. Mis sueños se habÃ*an vuelto realidad. Le habÃ*a vaciado la leche a mi hermana y su cuerpo habÃ*a respondido perfectamente a mi leche. Tire los últimos chorros dentro y embestÃ* unas cuantas veces más para asegurarme de que toda la leche cayera en su interior. La querÃ*a marcar. QuerÃ*a asegurarla. Para estos momentos ya mi esperma corrÃ*a en su interior. SentÃ* riquÃ*simo. Finalmente me salÃ* de su interior cayendo a un lado suyo rendido. El cuarto olÃ*a a mi esperma, olÃ*a a sexo devastador. Las sábanas mostraban sangre y pequeños restos de semen que le escurrÃ*an de su entre pierna.

Karen se aproximó a mÃ* y recargo su cabeza en mi pecho. Su orgullo habÃ*a desaparecido. Con el su virginidad se habÃ*a ido de ella. Su virginidad ahora tenÃ*a dueño y yo era el dueño. Las lágrimas comenzaron a caer de su rostro.

-Relájate amor… eres mucho mejor que todas las mujeres con las que he estado. Incluso mejor que Tatiana…-le dije mientras acariciaba su pelo.

-Estuviste con nuestra prima?- pregunto sorprendida aún con lágrimas en su bello rostro.

-Pues no le di por la vagina pero si meterle el pene bien dentro del culo cuenta se podrÃ*a decir que si estuve con ella…

-Eres un depravado. Es que no tienes llevadera?

-Jaja bueno hermanita uno cuando inicia con la cadena alimenticia para demostrar que es el rey hay que pasar por todas no crees? De hecho creo que mi siguiente vÃ*ctima podrÃ*a ser Cindy…

-Nooo por favor nooo, a ella no le hagas nada!

-Porque?

-Por favor no le hagas nada a ella… por favor.

-Pero que haré yo cuando este caliente? Necesito coger sabes…

-Ya te dije que yo soy tuya… cogeme a mÃ* cuantas veces se te plazca. Pero a ella no la toques…

-Digamos que se me antoja venirme en ella también…

-Vente en mi cuantas veces quieras Rubén… yo soy tu esclava… seré lo que tu quieras… Nunca necesitaras usar condones conmigo… yo soy tuya cuando quieras y en donde quieras. Pero promete que no harás nada con Cindy…

-Te lo prometo…- en esos momentos mis dedos estaban cruzados…
 

RSP00

Virgen
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Re: [ho-ha] Es m�* necesidad

muy buen relato, felicidades!
 

lau2007

Virgen
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Re: [ho-ha] Es m�* necesidad

como te hizo sufrir la muy muy.al final: ¡¡victoria!!
 
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