Desde que desarrollé y empecé a sacar curvas, mi tío empezó a acosarme, muy sutilmente, a preguntarme cosas, que me ponían nerviosa y me hacía sentir cosquillas en el estómago, ya me había besado con un par de chicos, mi maestro de inglés me había arrimado su cosa en una apretazón en un bus, y se la sentí bien parada, lo que me puso a pensar mucho en el sexo, finalmente, unas amigas tenían unos videos pornos, y el morbo se me empezaba a despertar. Aunque dije que esas cosas no me gustaban.
Yo viajaba una vez por año a casa de la abuela y mi tío aprovechaba para decirme cosas, como que me habían crecido los pechos, que si estaba muy guapa, que si tenia un cuerpo muy bonito, ese año me preguntó si tenía muchos pelitos en mi cosita y la verdad, había fantaseado con el muchas veces, lo que me puso muy cachonda, y le dije, no se si mucho o poco, y me baje un poco el pantalón y lo deje ver, me acarició y me dijo, están muy finitos. Poco a poco fuimos jugando un poco más.
Le pregunté si los hombres tenían pelo y me preguntó si quería ver, le dije que si y se bajo el pantalón, la tenía parada y me preguntó si alguna vez había tocado alguna verga y le dije que no, me tomo la mano y se rio algo sarcástico y me dijo no le digas a nadie esto, me tomó la mano y con su mano encima, se la masturbó y luego de unos minutos, vi como le salió el semen. Me pidió que se lo chupara y le dije que no. Solo me quedó la leche en la mano y me salpico en el cuerpo y cara.
Empecé a buscar como quedar a solas con él, cada vez que podía me pedía que me bajara el pantalón y se la mostrara o me la mostraba, cuando podía se la jalaba enfrente de mi o me pedía que se lo hiciera y yo lo hacía, muy sumisa.
El siguiente año, cuando baje al pueblo, ya estaba mas grande y más desarrollada y me dijo al llegar, que ricas caderas tienes, ya te la metieron? y aunque la pregunta era muy incómoda, le respondí que no.
Empezamos de nuevo el juego, de mostrarnos, pero esta vez las cosas cambiaron, un día que estábamos solitos, me pidió que se la mostrara, yo me baje el short y entonces me empezó a acariciar, se sentía tan rico, lo deje hacer y luego me dijo que si quería más me la metiera en la boca, no respondí, me sentó en el sillón, subió una pierna y luego me la puso en la boca y me acarició los labios con su cosa, vaya que la tiene bien rica, se la agarré para no metérmela en la boca, me daba asco, pero él puso la punta en mi boca, yo saque mi lengua y se la empecé a lamer, despacito, casi con asco, pero él empezó a empujar y a duras penas me cabía en la boca, pero se movía mientras sostenía mi cabeza y me hacia tragar, me daba nausea, esta grande y sentía que no podía respirar, me decía, que rico metértela en la boca, me haces gozar y finalmente se vino en mi boca y como no la sacaba, me lo tuve que tragar, se rio y me dijo no le digas a nadie, gracias por comerme la verga, se subió el pantalón y se fue al baño.
Cuando salió me abrió y me la chupó, primero me lamió, luego me la chupó y me metió la lengua en el hoyito y estaba bien rico, pero oímos ruido y el se fue al baño y yo me subí la ropa y seguí viendo tv. El cuando podía me miraba y se reía. Me preguntaba si me había gustado.
Así pasamos todas mis vacaciones y la verdad un hombre guapo, como él se antojaba siempre, pero no intentó cogerme y yo no se lo pedí, tenía miedo, quería ser penetrada pero me detenida, durante los primeros meses, al regresar, me le insinué a mi maestro de inglés y empezó a manosearme, lo deje, la verdad ya quería hacerme mujer, pero no quiso, solo me sentaba en sus piernas y me manoseaba y me hacía tocársela, así que estaba loca por que pasara.
Cumplí 16 y tuvimos que viajar de emergencia por que mi abuela tuvo un accidente, hubo mucho alboroto y todo mundo viajó a la capital y nos quedamos solos mi tío y yo, me sentía nerviosa, sabía que por fin me iba a hacer su mujer.
Esa misma noche, luego de cenar, se tomó unos tragos, el tenía 25, como no hacía nada, solo me decía cosas que me ponían nerviosa, me le senté en las piernas y lo besé, el empezó a besarme el cuello, luego me mordió despacio las tetas, sonó el teléfono y me dijo que iba a salir, se fue y me fui a bañar, saliendo del baño, en toalla, regresó, me llevó a su cuarto, me quito la toalla, se sentó en la cama, me puso frente a él, me beso el cuello, los hombros y bajo por las tetas, me las lamió primero, luego me dio una buena chupada en los pezones.
Se levantó y se bajó el pantalón, se lo quitó y luego la camisa y quedó desnudo, se sentó y se la agarré, la tenía dura, se la acaricié y luego me la metí en la boca hasta donde aguante y se la chupe, mientras le tocaba el resto con las manos hacía abajo.
Me acostó en la cama y empezó a lamerme, me preguntó si me gustaba, le dije que si, siguió y luego de un rato me dijo que sentía y le dije que muchas cosquillas ricas y me dijo que quería metérmela, me recosté en las almohadas y me empezó a pasar la verga por el cuerpo, luego me la pasó por mi cuquita abierta, me la acarició, luego se rio y me dijo, voy a hacer que tu cosita sienta que va a partirse en dos.
Yo estaba asustada, pero a la vez muy deseosa y muy caliente, estaba bien mojada y el con una cara desencajada y con una sonrisa sarcástica, me la puso en el la orilla del hoyo y empezó a empujar muy despacio su verga, me salieron unas lágrimas, miraba el techo, tirada en la cama con aquel hombre encima de mi, no podía ni gritar, gemía de dolor, pero el creyó que de placer y se reía y me decía cosas, como que era muy complaciente, que le daba mucho placer, que el me iba a enseñar a hacerlo bien rico.
Me decía que yo iba a hacer su mujer y que lo íbamos a hacer siempre, aunque estuviéramos casados, que el siempre me iba a coger, que me iba a abrir, para que los que me cogieran supieran que el era el primero y era mi hombre, mientras me la empujaba bien despacio y apretado, tenía su peso sobre mi y me asfixiaba, no hacía nada solo estaba bien abierta recibiendo ese dolor, de ser penetrada y abierta por un pene de ese tamaño, lo tiene grande, venudo y estaba rompiéndome por dentro, sentí que era una eternidad, finalmente terminó de meterla toda y se reía, me dijo que rica y cerradita estas, estas bien caliente, se ve que te gusta que te den verga, me resultaste bien puta. Me sentí muy incómoda, pero me sentí super sucia y me gustaba la sensación, me daba placer lo que me decía y como me trataba.
Se quedó allí un rato y luego la sacó muy despacio, sentía caliente, como raspaba y quemaba mi cosita, cuando salió, me mostró que tenía sangre, no era mucha, eran gotitas y entonces me puso con los talones en la orilla de la cama y se hincó, entonces me la chupo, lo que alivió el dolor que tenía, se levantó de nuevo, con la cosota bien parada y me la metió otra vez, me dolió de nuevo pero menos, la metió un poco más rápido, cuando topó, la sacó despacio pero no como antes y volvió a meterla, más rápido, me la sacó y sentí dolor, no dejaba de meterla y sacarla. Creí que eso era todo.
Pero me dijo que quería enseñarme a jugar algo, se acostó y me sentó encima, tenía la punta en la entrada de mi hoyito y yo me iba a sentar en ella muy despacio y me dijo aprende a montar caballito y se rio, pero cuando iba a empezar a tragármela, me dio un solo golpe hacía abajo y grite, quise levantarme pero me tenía agarrada de las caderas y empezó a empujármela y yo le dije que me dolía que no quería mas y me dijo mentira, te gusta, estas bien puta y caliente, eso querías ahora goza mamita, sufrí de comerte una verga entera, me empujaba yo intentaba quitarme pero me tenía bien agarrada de las caderas, gemía, sentía dolor, pero también placer, entre tanta cabalgata, empecé a sentir mas rico y a gemir de placer y se reía y me decía ves que te gusta que te den verga, macho querías, ahora voy a darte toda la que querrás, empecé a montármelo bien y rico, y me dijo que me levantara, que iba a terminar, pero sentía tan rico que le dije que no, y me lo cabalgue mas suave, para adelante y para atrás, me ardía, me dolía pero tenía cosquillas ricas. El me decía, que rica estas, que bien lo haces, así me cogen las putas en la calle, lo haces bien rico, me tienes bien parado el palo, con la concha tan caliente y húmeda.
Empecé a sentir bien calientito, sentí como le salió toda la leche, me decía que rica estas mamacita, que rico preñarte, yo no terminé, pero estaba muy satisfecha, se le fue aguadando, cuando salió de mi, sentí aguita caliente que bajaba por mi cosita y me levanté, me dio miedo de que me embarazara y me fui a bañar, el se quedó en la cama y lo encontré bien dormido.
Luego de que mi tío me desvirgara, a la mañana siguiente, se levantó, desayuno y se fue a la calle, sin decirme nada, yo no sabía que hacer, regresó en la noche, borracho, no para caerse, pero si se sentía olor a alcohol.
Se fue a bañar, mientras yo miraba televisión, no me dijo nada y ni yo a él, salió del baño en calzoncillos, se sentó frente a mi y yo hice como que no le ponía atención, empezó a acariciarse los huevos y a mi me empezaron a dar ganitas, pero hacía como que no lo miraba.
Me dijo, mírame mamita, quiero que mires como me acaricio la verga, antes de metértela, le dije que no quería hacerlo y me respondió que a el no le importaba, que había dejado de coger con una puta que se le estaba entregando bien fácil, para guardarme toda la leche y tenerme gozando toda la noche. Eso despertó mi libido.
No le hice caso, así que se levantó, se quitó el calzoncillo y me la puso enfrente y me dijo chúpamela y me agarro del pelo y me la empujó en la boca y no tuve mas que chupársela, igual estábamos solos, que iba a hacer? si ya era su mujer y también quería hacerlo, solo me quedaba mamar como el quería. Luego de cogerme la boca, me la sacó y me dijo que fuera al cuarto, yo obedecí, fui al cuarto, lo esperé sentada en su cama y al llegar me haló de los tobillos hacía el, me quitó el pantalón corto y me sentó de un jalón, me quitó la blusa.
Te quiero en cuatro patas, voy a enseñarte a complacerme y a aguantar verga, a que no digas que no, cuando yo quiero siempre me vas a obedecer, me puse en cuatro y me dijo no estas mojada, puso la verga en el hoyo, la jugo un poco y me la aventó de un solo golpe y grite y me dijo aprende que cuando yo quiera cogerte puta, tienes que estar lista, dispuesta, me voy a quitar las ganas contigo, ahora estas para complacerme, mientras me lo decía, me penetraba con fuerza y rápido, yo gemía de dolor, me estaba pegando hasta los huevos.
Entre tanto dolor, empezaron las cosquillas. Me agarro del pelo y me dijo las putas siempre se abren a su macho. Empezó a embestirme, con mucha fuerza, paro y me jaló hacia atrás, me levantó hasta su cuerpo, grite de dolor, luego me pego su pecho en la espalda y me dijo al oído, te duele?, le respondí que si, me dijo mucho? le dije si y me dijo, esta es tu primera violación, me entraron unas cosquillas en la cosita, me moje mucho y me agacho toda con la frente sobre la cama y empecé a mojar mucho y el a empujar, a reírse, me tenia de las caderas bombeándome y yo no pude más y sentí algo raro, como si fuera a orinar, y luego se acabó muy rápido.
El seguía bombeando, le dije que no y entonces me tomo de las tetas y empezó a jalarme hacia él, con fuerza, me dolía, las tetas y la cuca, ya no era placentero, pero el estaba bien duro y me lastimaba, me seguía jalando y paró, con toda la verga dentro y jalándome hacia el, dijo aaaaaahhhhhhhhhh que rico cogerme tu concha puta de mierda, no aprendes que las perras están para complacer a su macho. Sentí su leche, me soltó y la sacó, se la limpió entre mis nalgas y yo caí casi desmayada, me quedé así y me dormi.
Me dejó dormir, me despertó con un beso y empezó a besarme el cuello los hombros las tetas, la pancita, las caderas las piernas, medio vuelta y me beso las piernas, las nalgas, la espalda y al llegar al cuello me dijo al oído, tengo ganas de cogerte, queres verga? le respondí que si.
Para este punto ya me había puesto cachonda, me empezó a mamar el culito y se sentía bien rico, me dio vuelta y se puso encima de mi cuello y me acerco la verga y me la metió en la boca, se le puso dura y entonces me pego con la verga en la cara y lo sentí tan excitante, me dijo saca la lengua y me pego en la lengua, luego me pego en las tetas, bajo y me abrió toda y separó mis labios con una mano y la otra me pego en el clítoris, me dijo, que sucia, como te gusta abrirte de fácil, a las vergas, que puta, te hubiera cogido antes, para quitarte la calentura.
se puso de rodillas en la cama, me levantó las caderas y me la fue metiendo despacio, hasta que estaba totalmente adentro, empezó a moverse en ruedita con toda la verga dentro y me dijo decime que sentís y si te gusta y aunque me daba vergüenza, le dije que la tenía muy grande, que me raspaba toda, que me sentía toda invadida y bien abierta, que me gustaba mucho, que me hacía cosquillas y que no quería que me las sacara nunca, que me gustaba como cogía, que era un macho muy rico y grandote y me hacía sentir mujer, que quería estar abierta para el y que iba a hacerlo como le gustara, que iba a complacerlo, aunque me doliera, jadeaba y se reía, así me tuvo un rato y luego me empezó a acariciar el clítoris y yo a moverme muy fuerte en rueditas y el entonces empezó a meter y sacar y yo movía mis caderas para sentirla entera, aun me dolía, pero esa sensación de dolor y placer me estaba encantando, no quería que parara, el me decía a cada rato que rico violarte putita.
En un momento, empecé a sentir como el placer se hacía agudo, la misma sensación de querer ir a hacer pipi, yo gemía y le decía, así, hazme tu mujer, quiero dártelo todo y el se reía y me dijo apúrate que ya voy a terminar, yo seguí moviéndome y el metiendo y sacando, se me hizo mas fuerte la sensación y de repente, sentí como tenía mi primer orgasmo, era riquísimo, sentía como si quisiera hacer pipi, se me empezó a contraer y expandir la concha, paré, el metía y sacaba, como podía, por que se la tenía apretada, yo le decía asi papito, que rico coger, el me dijo, mamita que placer siento, como te estoy gozando, quiero preñarte perra, dejarte toda la leche adentro, y mientras se me contraía e iba bajando la sensación, muy rica con esa verga dentro, sentí como se vino, mi vagina se la estaba comiendo toda, se chupaba la leche y no me importaba si quedaba preñada, solo me importaba seguir sintiendo esa cosa caliente y dura adentro, terminé, el bombeo unas cuantas veces mas y la saco aguada, se acostó a la par mía, me manoseo con sus dedos, me dijo gracias por darme placer y quitarme las ganas, quiero que siempre te abras, para que gocemos rico
Luego que mi tío me violara mi culito, no volví a verlo como en cuatro meses, mami viajó a ver a la abuela y el sabiéndolo, dijo que iba a otro pueblo, pero vino a la capital, vino el viernes temprano, sabiendo que mi madre no regresaría, no me dejó ir al colegio.
Salimos a dar una vuelta, comimos en la calle, me abrazó todo el tiempo, me sentía tan mujer, con un hombre tan guapo y rico abrazándome, me sentía su mujer, fuimos al cine, me acarició en la oscuridad mi cosita, me dio un par de besos bien dados, regresamos y me fui a bañar, había conseguido unas anticonceptivas y me tomé dos, por si acaso, luego que salí del baño, se fue a bañar, lo esperaba en la cama, viendo tv, llegó desnudo y secándose, se miraba tan guapo, no estaba enamorada de él, me gustaba su cuerpo bien cuadradito y rico, tenia ganas de hombre y el estaba dispuesto a hacerme suya, con su verga grande, venuda, peluda y con unos huevotes grandes, rápido me excitaba.
Me levantó de la cama y empezó a besarme, me quitó la camisa que tenía y quedé desnuda, estaba con las rodillas dobladas, pues mido 1.60 y el 1.90, se empezó a restregar en mi, mientras me acariciaba las caderas y la espalda y me besaba la boca, empezó a crecerle y me preguntó quieres mamarmela para que me crezca mas. Le dije que si, me puse de rodillas y el me agarró de la cabeza y me la metió en la boca, yo tenia una mano en su cosota rica, que estaba dura, la otra en los huevos y el me movía la cabeza para metérmela y sacarla. Que rico cogerte esa boquita rica, mamas bien rico, ya te voy a dar una buena mamada en la concha, para devolverte el favor.
Por un rato, solo jadeaba, me miraba y yo a él, mientras le comía el rabo, me sentía tan deseada y eso me ponía caliente, apretaba mucho y succionaba mientras me la metía, me dijo levántate y me puso en cuatro con las rodillas en la orilla de la cama, empezó a chuparme el culo, a acariciarme mi conchita y se restregó la verga sin penetrarme, sentía muy rico, me levantó y quitó la ropa de la cama, me acostó y el a la par mía, nos tapó y me dijo, somos una pareja, yo soy tu marido y tu eres mi hembra, así te quiero coger, como mi mujer.
Esto me hizo mojarme y lo jale, lo besé, se puso encima de mi con todo su peso, con las cobijas tapándonos, lo abrace fuerte y abrí las piernas, me penetro, sin fuerza, pero sin pausas, la sentí toda adentro y lo abrace con las piernas, el empezó a moverse, a sacarla y me la volvía a empujar, no paraba de penetrarme, me apretaba todo el cuerpo, mi cuerpo estaba bajo esa masculinidad que me hacía sentir tan mujer, me apretaba, me cortaba un poco la respiración, pero era lo más rico que había sentido.
Luego de un rato de bombearme en esa posición, sentí como mi cosita se contraía y terminaba con su verga recta y dura dentro de mi, me dolía aún, podía sentirla, se la apretaba, el intentaba empujar y yo estaba casi muriendo de placer, con un dolor delicioso, dejando que me hiciera gozar, terminé riquísimo y lo solté, caí en la cama desvanecida, aun con su verga dentro, la sacó despacio y volvió a besarme entera, me decía, me encanta tu forma de coger, no quiero dejar de hacerlo, quisiera estar en tu vientre todo el día, complaciéndote, haciéndote mi mujer, que sientas lo mismo una y otra vez, eso me volvió a prender, se acostó, era entendible que quería que jugar al caballito, doblo las rodillas, iba a subirme, pero me dieron ganas de mamársela, ya sentía muy rico y me gustaba mamarle la pija.
Se miraba tan imponente, quite las sabanas, le abrí las piernas, me metí en medio y empecé a lamerle los huevos y luego la verga como quien se lame un helado y después me la metí hasta donde pude, se la chupe, pero me dijo quiero tenerte encima, necesito terminar y quiero preñarte, así que me saque su verga de la boca, bien despacio succionando y cuando salió, asi con las rodillas dobladas, cerró las piernas y yo me monté en mi macho y me deje caer de un solo tirón sobre su falo bien parado y duro, grite y le dije perro, como la tienes de grande y dura, me partes la concha, el se rio y comenzó a hacer lo suyo.
Me agarró de las caderas mientras me lo estaba cabalgando, me lo cogía, era mío, mi hombre, me lo imaginaba con otra y me gustaba, el me miraba con una cara desencajada, yo movía mis caderas en círculos sobre su miembro, sentía su verga caliente, que me lastimaba y me daba placer, luego empecé a hacerme adelante y atrás y el solo me miraba con los ojos vidriosos, llenos de lujuria, cuando me hacía para atrás me levantaba un poco, cuando me hacía adelante me dejaba caer, el me empezó a acariciar las tetas y me hice para atrás, me sentía sexy y rica, me gustaba complacerlo, se lo dije, me encanta complacerte, ser tu hembra, estar dispuesta para que me abras y me claves y que te quites las ganas en mi vagina, me encanta recibirte, tener tu verga abriéndome desgarrándome y metérmela toda, me encanta que me tengas bien clavada.
El cambió el ritmo, empezó a empujar hacía arriba y yo me agarré de sus caderas y empecé a subir y bajar toda con las piernas abiertas, me dolía mucho, estar con las piernas así de abiertas, me dolía, hacía que mi hoyo se cerrara, pero la sentía mas en las paredes de mi vagina, lo que me daba placer y me entraba completita, el empezó a subir más rápido, yo a bajar con mas fuerza, me acarició el clítoris con fuerza, le dije ya no aguanto mas y me dijo espérate, tuve que moverme un poquito para no terminar, entonces me dijo ahora dale mi amor, dale mi mujer, mi perra, mi puta, recibí toda mi leche en tu cuca, volví a donde estaba y me moví para estallar y llenarlo de mis jugos y recibir su leche caliente.
El sacó su leche, la expulsó dentro de mi, sentía como me topaba, como se me metía en las entrañas, el estaba terminando y se quedó quieto, grito, que rica mamita, que rico coges, entonces empecé a sentir las cosquillitas y empecé a acelerar y me vine, mientras se le estaba aguadando, no podía salir por que se me contraía y se la agarraba, terminé y caí sobre su pecho, cuando su verga salió de mi, el semen me escurrió, me quedé así un rato y luego me acosté a par de él, me tomó en su brazo y se fumó un cigarro, yo aún temblaba, era tan rico lo que estaba viviendo con este hombre, hasta cuando me violentaba me gustaba, desde que me había abierto el culo, soñaba con que me violara, ahora que ya sentía menos dolor, quería que me poseyera a la fuerza, como un verdadero macho. Le dije quiero ser violada y el se rio y me dijo, vas a sentir que es ser violada de verdad y dormí abrazada a mi hombre.
Desperté entre los brazos de mi tío luego de una noche maravillosa de placer, me besó, nos levantamos, fui a hacer comida, desnuda, fue a la sala y llamó por teléfono, estaba en calzoncillos y me abrazó, me dijo quiero que comas bien, por que te espera un día muy cansado, sonreí, sabía que quería cogerme de nuevo, luego de comer nos bañamos juntos, nos acariciamos y besamos, se la mame de rodillas mientras me caía el agua por mi cara, me volteó y me penetro la concha muy suavecito, terminó muy rápido, yo me había venido por que me acariciaba el clítoris, era fantástico tener a mi macho así, todo para mi, dentro de mi cuerpo, mi vientre lo recibía gozosa.
Fuimos al supermercado de la mano, como una pareja, compramos mucha cerveza, yo no bebía, así me abrió una cervecita, empecé a tomármela mientras preparaba cebichito, me dijo, quiero bastante, invité a mis mejores amigos a comer, Rubén y Mynor, ya que están en la capital. me pareció bien, íbamos a recibir a sus amigos, a los que conocía de toda la vida. Me dijo que no estaría para mi cumpleaños, así que quería celebrármelo con los amigos y las novias. Me pareció bien, hice el cebiche, tomamos la cerveza, él más que yo. Se sentó a verme cocinar y me pidió que me desnudara para hacerlo, sonreí y me quede desnuda, me sentía mareada, estaba tan feliz.
Cuando ya era la hora, me pidió que me fuera a bañar y me pusiera algo que me había comprado, era un trajecito negro, muy transparente, le dije que no me parecía recibir visitas así, me abrazo por atrás y empezó a acariciar mis pechos, me dijo vamos mi amor, no pasa nada, te verás hermosa, quiero que sepan que eres mi mujer. Aun incomoda fui al baño y lo complací, no sé si por que me gustaba la idea que me vieran así o por que ya estaba ebria, salí del baño con el traje y unas bonitas sandalias, me miro y me dijo, ya te ves como una hembra de verdad.
Se me olvidó y puse todo en orden, para recibir las visitas, sonó el teléfono, fui a contestar y era mi madre, para saber si estaba bien, le comenté que si, que vendrían mis compañeras de estudio a almorzar a la casa, sonó el timbre y él salió, mi madre me dijo que regresaba el lunes, por que mi abuela estaba malita, que no había nadie en casa, que todos eran unos irresponsables, que mi tío había desaparecido, que nunca estaba cuando se necesitaba, le pregunté a donde había ido y me dijo que no sabía, pero que era un irresponsable, solo pude sonreír y pensar que se estaba haciendo responsable de mi y mis necesidades.
Oí voces, le dije a mi mamá que debía cortar, que seguro eran mis amigas, me dijo que la llamara cuando se fueran, asentí y corté, salí y vi que eran los dos amigos de mi tío, pero no vi a las novias, pensé que seguro llegarían al rato.
Me abrazaron diferente, igual eran altos, asi que se agacharon y se pegaron a mi y me abrazaron fuerte, uno de ellos me dijo que bonita estas Silvita, como creciste y luego el otro me abrazó igual y me dio un beso en la mejilla, luego en la otra y me tuvo abrazada un rato.
Mi tío me pidió que les llevara cerveza y abrí para ellos y una para mi, serví cebiche y ellos me alagaban por la comida, hacían chiste y nos divertíamos mucho y seguían diciendo que estaba muy guapa, que ya estaba grande y muy bonita, me hacía sentir importante y grande, me sentía como una mujer que los hombres se fijaran en mi, yo estaba a la par de mi tío y me dio un beso, yo intenté esquivarlo, me dio vergüenza, pero el me sostuvo la cabeza y me besó, me levanté y me fui al cuarto, me siguió, me dijo que les debía dinero, que si podía ser mas amigable, le dije que no entendía, me pidió que me dejara acariciar y besar y le dije noooo, me respondió, si te gusta, juro que no dejaré que te hagan daño, ni que te pase nada, solo tienes que ser amable con ellos y le dije no, me da vergüenza y entonces cambio, me agarró del pelo, me hizo la cabeza para atrás y me dijo, si no haces lo que te digo, voy a decirles que pueden violarte, hacerte lo que les de la gana y va a ser peor.
No dije nada y regresé avergonzada a la sala, ellos estaban ya entradillos en las cervezas, me senté y uno de ellos se sentó a la par mía y me dijo dame un besito, mi tío estaba en la puerta, le dije no y me dijo vamos, un besito nada mas no pasa nada, me sentía súper incómoda, pero se me acercó y me topo los labios, me abrazó y me siguió besando suavecito hasta que me metió su lengua y me dio un beso, que me pareció muy rico y se lo respondí, mientras miraba a los ojos a mi tío, que se reía y se estaba apretando la verga.
Me soltó y entonces el otro me dijo que fuera donde él, que también quería su besito y me acerque, me sentó en sus piernas y me dio un beso, mientras me acariciaba las piernas, mi tío se acercó me levanto un poco el trajecito y me acaricio mis nalgas mientras el amigo me besaba, yo me sentía muy mareada, me levantó del pelo y se sentó y me sentó en sus piernas, me dio un poco mas de cerveza y me la tomé un poco de un solo trago y me cayo por el torso. Le cayó en la camisa.
Se quitó la camisa y se desabrocho el pantalón, su amigo Rubén me jaló y me sentó en sus piernas y empezó a manosearme las tetas y me decía esta mojado por que no te quitas esto y le dije que no, intenté detenerlo pero me quitó la pitita que lo sostenía, me lo detuve con las manos en mis pechos pero el hizo fuerza y me las separó y el sostén cayó, tenía los pezones duros, pero no de ganas, estaba muy asustada, no sabía que me iba a pasar, no podía creer que estos tipos que conocía de siempre me vieran desnuda y estuvieran tocándome y diciéndome lo rica que estaba, la cosa de Rubén había crecido, la tenía en mi raya, eso me calentó pero no quería estar con tres hombres a la vez.
Mynor me levantó y me agarró las manos con fuerza por atrás y me tenia pegada a su verga, sentí como le crecía, y entonces Rubén me dejó desnuda, volteé a ver a mi tío que tomaba una cerveza y se acariciaba la verga sobre el calzoncillo, le dije no seas así y me dijo te prometí que no pasaría nada, que no te guste hacer y yo empecé a llorar, ellos se reían, Mynor había quitado todo de la mesa de centro y Rubén que me agarraba de las muñecas, me acostó yo gritaba no, no, por favor no y ellos se reían de mi, me decían, no seas así, solo queremos jugar un ratito que nos divirtamos los cuatro, queremos hacerte pasar un buen rato, como regalo de cumpleaños.
Me pusieron sobre la mesa y Mynor me tomaba ahora. Rubén me abrió y yo me movía lo empujaba, el se reía, vamos déjate, solo un ratito y yo desesperaba pedía que no, estaba tan asustada y llorando, mi tío seguía riéndose y tocándose la verga, ahora con la mano entre el calzoncillo. Que puta salió mi sobrinita.
Rubén se quitó el pantalón y me dejo ver una verga no tan grande, ni tan gruesa, más chica que la de mi tío, pero se miraba muy guapo, la tenía bien parada, yo se la miraba y él se la acariciaba, entonces mi tío le dijo dale y creí que me penetraría, cerré las piernas, pero el me las abrió y yo me retorcía, me puso la punta en el clítoris, se acostó encima de mi y empezó a sobármela en la cuca, se estaba restregando en mi y me apretaba, yo me movía y el no dejaba de deslizarse sobre mi y gemía, decía que puta como se mueve, parece que tuviera hormigas en el culo, mi tío me decía que puta a cualquiera te le abres, toda la cuca la tienes abierta para que te cojan y los tres rieron, luego de un rato, de jadear sin verme a la cara miraba a un lado hacía el piso, se levantó con la pija dura y le dijo a Mynor que tomara su lugar, el otro hizo lo mismo, empezó a masajeársela en medio de mi cuquita, pero mas rápido y mas duro y yo lloraba, el otro me dijo que se la mamara y mi tío me dijo cómesela o le digo que te viole.
Empecé a comérsela, se movía con fuerza y me tenía la cabeza agarrada y yo tenia mis manos cruzadas sobre mis pechos, con toda la verga dentro de la boca, mientras el otro se rosaba en mi cuca y mi tío me decía, perra asquerosa, puta perdida, puta de mierda, te gusta coger, igual que perra en celo, a todos le abre la pusa, cerré los ojos para no ver lo que me hacían y finalmente, Rubén se vino en mi boca y me tuve que tragar toda su leche, no fue mucha, se la sacudió en mi cara y se sentó a ver como me magreaba el otro y tomar otra cerveza, luego de un rato Mynor me dijo, que rica estas Silvita, siempre te lleve ganas, menos mal se me hizo tenerte así toda rica y desnuda para mi, iba tan rápido que su punta toco mi hoyo y me apretó bien, me penetro y siguió bombeando, solo unas cuantas embestidas, se levantó asustado y con cuidado para que mi tío no viera que me había violado, con su verga dentro sentí riquísimo, pero la sacó me la metió en la boca, era muy corta, pero gruesa, me la pude tragar toda, aunque me apretaba toda la boca y finalmente me tuve que tragar la leche de el, me había dejado caliente, así que se la mame mejor que al otro.
Me levanté y mi tío me dijo, no vas a ningún lado quédate en el sillón ábrete y tócate el cuturris, yo no sabía que hacer, miraba al techo sentada frente a ellos desnuda con las piernas abiertas y enseñándoles mi cuca, comencé dedeándome, viendo al techo y ellos me aplaudían y me gritaban así mamita, vamos nena, más, queremos ver más, esto empezó a excitarme y me dije a mi misma, si me van a violar, mínimo lo voy a disfrutar y me los voy a comer a los tres, les voy a dar el mejor sexo de su vida, así que me acomodé mejor y me moví el clítoris en ruedita y me metí un dedo, pronto Mynor vino a mi y empezó a mamarme, cerré los ojos y empecé a jadear, estaba muy rico, me metía la lengua y me succionaba el hoyo, me entregue a su mamada, hasta que terminé en su boca.
El otro se levantó y se la masajeo en mis tetas y luego me la metió en la boca, toda, yo dejé que me cogiera la boca la tenia delgada y chica, me la podía tragar, le acaricie los huevos y jadeaba me tenía pegada al sillón con la verga dentro, ay Silvita que rico mamas, que rica estas y se descargo dentro de mi boca muy rápido, me la volví a tragar.
Mi tío se levantó al baño, el otro me pidió que lo dejara cogerme la boca y la de él me gustaba mas y se la mame despacio también, me preguntó si podía sobársela en mi cuquita y le dije que si, le pidió al otro que entretuviera a mi tío, que solo iba a masajeársela, el otro le dijo que si se daba cuenta lo iba a matar y le dijo que solo se la iba a masajear.
Rubén salió, yo estaba caliente, el me la puso encima y se masajeo, pero yo quería tenerlo dentro, lo paré, lo despegué, se la agarré, estábamos sudando, la puse en la punta de mi hoyo y el me la metió, sentí muy rico, empezó a bombearme, miraba para afuera nervioso, que mi tío no llegara y yo me apresuré a colocarme para sentirlo bien, no me lastimaba, me rosaba muy rico y me gustaba mas su cogida, los otros se quedaron hablando fuera, él empezó a bombear, me decía que rica estas nena, estas muy rica mamita, me encanta como estas de apretadita, se vino dentro de mi muy rápido, agarró una servilleta y me la paso por mi cosita, me metió el dedo con la servilleta para quitarme el semen, oímos pasos y Rubén habló fuerte, yo me acomodé en el sillón, acostada y el se sentó con su cerveza enfrente.
Rodrigo preguntó si querían que se las mamara y ambos dijeron que ya no podían más, que era suficiente, yo estaba muy caliente, él se empezó a tocar la verga y me dijo a ver perra, ahora si vas a sentir que es bueno, me puso en cuatro en la mesa y delante de ellos me penetro de un solo golpe, grite y empezó a bombearme, donde había tenido a Mynor antes, volteé a verlo, tenía una sonrisa, sabía que el había estado dentro de mi y yo me sonreí cómplice con el y le guiñe un ojo, mientras mi tío me penetraba con fuerza, me decía que era un castigo por puta, yo miraba al otro como me miraba, me tomo de las tetas y me jalaba hacia él con tal fuerza que sentía que me partía por dentro no podía dejar de verlos, mientras recibía tremendo castigo de mi tío, finalmente me hizó terminar, el la tenía dura y me hizo comérsela y tragarme el semen, mientras miraba a Mynor con cara de lujuria, se la comí enterita.
Al fin se fueron, mi tío me dijo que me había portado muy bien, que si me había gustado y yo le dije que no, en la mente revivía como había sentido de rico a Mynor dentro mi vientre, me sentía mal, ya no solo era mi tío y las manoseadas de mi maestro de inglés, ahora era la violación que me había dado su amigo, como no terminé con él, por lo rápido para que mi tío no viera que me había penetrado, se me antojaba estar sola con él, me acosté muy molesta y el se quedó viendo tv.
Después de un rato, me dijo, que puta estuviste, nos diste a todos mucho placer, me gustó mucho verte como si te cogieran otros, aunque no te penetraran, fue casi una violación y yo me reí y me dije a mi misma, casi? tu amigo me violó tan delicioso que quiero mas.
Yo viajaba una vez por año a casa de la abuela y mi tío aprovechaba para decirme cosas, como que me habían crecido los pechos, que si estaba muy guapa, que si tenia un cuerpo muy bonito, ese año me preguntó si tenía muchos pelitos en mi cosita y la verdad, había fantaseado con el muchas veces, lo que me puso muy cachonda, y le dije, no se si mucho o poco, y me baje un poco el pantalón y lo deje ver, me acarició y me dijo, están muy finitos. Poco a poco fuimos jugando un poco más.
Le pregunté si los hombres tenían pelo y me preguntó si quería ver, le dije que si y se bajo el pantalón, la tenía parada y me preguntó si alguna vez había tocado alguna verga y le dije que no, me tomo la mano y se rio algo sarcástico y me dijo no le digas a nadie esto, me tomó la mano y con su mano encima, se la masturbó y luego de unos minutos, vi como le salió el semen. Me pidió que se lo chupara y le dije que no. Solo me quedó la leche en la mano y me salpico en el cuerpo y cara.
Empecé a buscar como quedar a solas con él, cada vez que podía me pedía que me bajara el pantalón y se la mostrara o me la mostraba, cuando podía se la jalaba enfrente de mi o me pedía que se lo hiciera y yo lo hacía, muy sumisa.
El siguiente año, cuando baje al pueblo, ya estaba mas grande y más desarrollada y me dijo al llegar, que ricas caderas tienes, ya te la metieron? y aunque la pregunta era muy incómoda, le respondí que no.
Empezamos de nuevo el juego, de mostrarnos, pero esta vez las cosas cambiaron, un día que estábamos solitos, me pidió que se la mostrara, yo me baje el short y entonces me empezó a acariciar, se sentía tan rico, lo deje hacer y luego me dijo que si quería más me la metiera en la boca, no respondí, me sentó en el sillón, subió una pierna y luego me la puso en la boca y me acarició los labios con su cosa, vaya que la tiene bien rica, se la agarré para no metérmela en la boca, me daba asco, pero él puso la punta en mi boca, yo saque mi lengua y se la empecé a lamer, despacito, casi con asco, pero él empezó a empujar y a duras penas me cabía en la boca, pero se movía mientras sostenía mi cabeza y me hacia tragar, me daba nausea, esta grande y sentía que no podía respirar, me decía, que rico metértela en la boca, me haces gozar y finalmente se vino en mi boca y como no la sacaba, me lo tuve que tragar, se rio y me dijo no le digas a nadie, gracias por comerme la verga, se subió el pantalón y se fue al baño.
Cuando salió me abrió y me la chupó, primero me lamió, luego me la chupó y me metió la lengua en el hoyito y estaba bien rico, pero oímos ruido y el se fue al baño y yo me subí la ropa y seguí viendo tv. El cuando podía me miraba y se reía. Me preguntaba si me había gustado.
Así pasamos todas mis vacaciones y la verdad un hombre guapo, como él se antojaba siempre, pero no intentó cogerme y yo no se lo pedí, tenía miedo, quería ser penetrada pero me detenida, durante los primeros meses, al regresar, me le insinué a mi maestro de inglés y empezó a manosearme, lo deje, la verdad ya quería hacerme mujer, pero no quiso, solo me sentaba en sus piernas y me manoseaba y me hacía tocársela, así que estaba loca por que pasara.
Cumplí 16 y tuvimos que viajar de emergencia por que mi abuela tuvo un accidente, hubo mucho alboroto y todo mundo viajó a la capital y nos quedamos solos mi tío y yo, me sentía nerviosa, sabía que por fin me iba a hacer su mujer.
Esa misma noche, luego de cenar, se tomó unos tragos, el tenía 25, como no hacía nada, solo me decía cosas que me ponían nerviosa, me le senté en las piernas y lo besé, el empezó a besarme el cuello, luego me mordió despacio las tetas, sonó el teléfono y me dijo que iba a salir, se fue y me fui a bañar, saliendo del baño, en toalla, regresó, me llevó a su cuarto, me quito la toalla, se sentó en la cama, me puso frente a él, me beso el cuello, los hombros y bajo por las tetas, me las lamió primero, luego me dio una buena chupada en los pezones.
Se levantó y se bajó el pantalón, se lo quitó y luego la camisa y quedó desnudo, se sentó y se la agarré, la tenía dura, se la acaricié y luego me la metí en la boca hasta donde aguante y se la chupe, mientras le tocaba el resto con las manos hacía abajo.
Me acostó en la cama y empezó a lamerme, me preguntó si me gustaba, le dije que si, siguió y luego de un rato me dijo que sentía y le dije que muchas cosquillas ricas y me dijo que quería metérmela, me recosté en las almohadas y me empezó a pasar la verga por el cuerpo, luego me la pasó por mi cuquita abierta, me la acarició, luego se rio y me dijo, voy a hacer que tu cosita sienta que va a partirse en dos.
Yo estaba asustada, pero a la vez muy deseosa y muy caliente, estaba bien mojada y el con una cara desencajada y con una sonrisa sarcástica, me la puso en el la orilla del hoyo y empezó a empujar muy despacio su verga, me salieron unas lágrimas, miraba el techo, tirada en la cama con aquel hombre encima de mi, no podía ni gritar, gemía de dolor, pero el creyó que de placer y se reía y me decía cosas, como que era muy complaciente, que le daba mucho placer, que el me iba a enseñar a hacerlo bien rico.
Me decía que yo iba a hacer su mujer y que lo íbamos a hacer siempre, aunque estuviéramos casados, que el siempre me iba a coger, que me iba a abrir, para que los que me cogieran supieran que el era el primero y era mi hombre, mientras me la empujaba bien despacio y apretado, tenía su peso sobre mi y me asfixiaba, no hacía nada solo estaba bien abierta recibiendo ese dolor, de ser penetrada y abierta por un pene de ese tamaño, lo tiene grande, venudo y estaba rompiéndome por dentro, sentí que era una eternidad, finalmente terminó de meterla toda y se reía, me dijo que rica y cerradita estas, estas bien caliente, se ve que te gusta que te den verga, me resultaste bien puta. Me sentí muy incómoda, pero me sentí super sucia y me gustaba la sensación, me daba placer lo que me decía y como me trataba.
Se quedó allí un rato y luego la sacó muy despacio, sentía caliente, como raspaba y quemaba mi cosita, cuando salió, me mostró que tenía sangre, no era mucha, eran gotitas y entonces me puso con los talones en la orilla de la cama y se hincó, entonces me la chupo, lo que alivió el dolor que tenía, se levantó de nuevo, con la cosota bien parada y me la metió otra vez, me dolió de nuevo pero menos, la metió un poco más rápido, cuando topó, la sacó despacio pero no como antes y volvió a meterla, más rápido, me la sacó y sentí dolor, no dejaba de meterla y sacarla. Creí que eso era todo.
Pero me dijo que quería enseñarme a jugar algo, se acostó y me sentó encima, tenía la punta en la entrada de mi hoyito y yo me iba a sentar en ella muy despacio y me dijo aprende a montar caballito y se rio, pero cuando iba a empezar a tragármela, me dio un solo golpe hacía abajo y grite, quise levantarme pero me tenía agarrada de las caderas y empezó a empujármela y yo le dije que me dolía que no quería mas y me dijo mentira, te gusta, estas bien puta y caliente, eso querías ahora goza mamita, sufrí de comerte una verga entera, me empujaba yo intentaba quitarme pero me tenía bien agarrada de las caderas, gemía, sentía dolor, pero también placer, entre tanta cabalgata, empecé a sentir mas rico y a gemir de placer y se reía y me decía ves que te gusta que te den verga, macho querías, ahora voy a darte toda la que querrás, empecé a montármelo bien y rico, y me dijo que me levantara, que iba a terminar, pero sentía tan rico que le dije que no, y me lo cabalgue mas suave, para adelante y para atrás, me ardía, me dolía pero tenía cosquillas ricas. El me decía, que rica estas, que bien lo haces, así me cogen las putas en la calle, lo haces bien rico, me tienes bien parado el palo, con la concha tan caliente y húmeda.
Empecé a sentir bien calientito, sentí como le salió toda la leche, me decía que rica estas mamacita, que rico preñarte, yo no terminé, pero estaba muy satisfecha, se le fue aguadando, cuando salió de mi, sentí aguita caliente que bajaba por mi cosita y me levanté, me dio miedo de que me embarazara y me fui a bañar, el se quedó en la cama y lo encontré bien dormido.
Luego de que mi tío me desvirgara, a la mañana siguiente, se levantó, desayuno y se fue a la calle, sin decirme nada, yo no sabía que hacer, regresó en la noche, borracho, no para caerse, pero si se sentía olor a alcohol.
Se fue a bañar, mientras yo miraba televisión, no me dijo nada y ni yo a él, salió del baño en calzoncillos, se sentó frente a mi y yo hice como que no le ponía atención, empezó a acariciarse los huevos y a mi me empezaron a dar ganitas, pero hacía como que no lo miraba.
Me dijo, mírame mamita, quiero que mires como me acaricio la verga, antes de metértela, le dije que no quería hacerlo y me respondió que a el no le importaba, que había dejado de coger con una puta que se le estaba entregando bien fácil, para guardarme toda la leche y tenerme gozando toda la noche. Eso despertó mi libido.
No le hice caso, así que se levantó, se quitó el calzoncillo y me la puso enfrente y me dijo chúpamela y me agarro del pelo y me la empujó en la boca y no tuve mas que chupársela, igual estábamos solos, que iba a hacer? si ya era su mujer y también quería hacerlo, solo me quedaba mamar como el quería. Luego de cogerme la boca, me la sacó y me dijo que fuera al cuarto, yo obedecí, fui al cuarto, lo esperé sentada en su cama y al llegar me haló de los tobillos hacía el, me quitó el pantalón corto y me sentó de un jalón, me quitó la blusa.
Te quiero en cuatro patas, voy a enseñarte a complacerme y a aguantar verga, a que no digas que no, cuando yo quiero siempre me vas a obedecer, me puse en cuatro y me dijo no estas mojada, puso la verga en el hoyo, la jugo un poco y me la aventó de un solo golpe y grite y me dijo aprende que cuando yo quiera cogerte puta, tienes que estar lista, dispuesta, me voy a quitar las ganas contigo, ahora estas para complacerme, mientras me lo decía, me penetraba con fuerza y rápido, yo gemía de dolor, me estaba pegando hasta los huevos.
Entre tanto dolor, empezaron las cosquillas. Me agarro del pelo y me dijo las putas siempre se abren a su macho. Empezó a embestirme, con mucha fuerza, paro y me jaló hacia atrás, me levantó hasta su cuerpo, grite de dolor, luego me pego su pecho en la espalda y me dijo al oído, te duele?, le respondí que si, me dijo mucho? le dije si y me dijo, esta es tu primera violación, me entraron unas cosquillas en la cosita, me moje mucho y me agacho toda con la frente sobre la cama y empecé a mojar mucho y el a empujar, a reírse, me tenia de las caderas bombeándome y yo no pude más y sentí algo raro, como si fuera a orinar, y luego se acabó muy rápido.
El seguía bombeando, le dije que no y entonces me tomo de las tetas y empezó a jalarme hacia él, con fuerza, me dolía, las tetas y la cuca, ya no era placentero, pero el estaba bien duro y me lastimaba, me seguía jalando y paró, con toda la verga dentro y jalándome hacia el, dijo aaaaaahhhhhhhhhh que rico cogerme tu concha puta de mierda, no aprendes que las perras están para complacer a su macho. Sentí su leche, me soltó y la sacó, se la limpió entre mis nalgas y yo caí casi desmayada, me quedé así y me dormi.
Me dejó dormir, me despertó con un beso y empezó a besarme el cuello los hombros las tetas, la pancita, las caderas las piernas, medio vuelta y me beso las piernas, las nalgas, la espalda y al llegar al cuello me dijo al oído, tengo ganas de cogerte, queres verga? le respondí que si.
Para este punto ya me había puesto cachonda, me empezó a mamar el culito y se sentía bien rico, me dio vuelta y se puso encima de mi cuello y me acerco la verga y me la metió en la boca, se le puso dura y entonces me pego con la verga en la cara y lo sentí tan excitante, me dijo saca la lengua y me pego en la lengua, luego me pego en las tetas, bajo y me abrió toda y separó mis labios con una mano y la otra me pego en el clítoris, me dijo, que sucia, como te gusta abrirte de fácil, a las vergas, que puta, te hubiera cogido antes, para quitarte la calentura.
se puso de rodillas en la cama, me levantó las caderas y me la fue metiendo despacio, hasta que estaba totalmente adentro, empezó a moverse en ruedita con toda la verga dentro y me dijo decime que sentís y si te gusta y aunque me daba vergüenza, le dije que la tenía muy grande, que me raspaba toda, que me sentía toda invadida y bien abierta, que me gustaba mucho, que me hacía cosquillas y que no quería que me las sacara nunca, que me gustaba como cogía, que era un macho muy rico y grandote y me hacía sentir mujer, que quería estar abierta para el y que iba a hacerlo como le gustara, que iba a complacerlo, aunque me doliera, jadeaba y se reía, así me tuvo un rato y luego me empezó a acariciar el clítoris y yo a moverme muy fuerte en rueditas y el entonces empezó a meter y sacar y yo movía mis caderas para sentirla entera, aun me dolía, pero esa sensación de dolor y placer me estaba encantando, no quería que parara, el me decía a cada rato que rico violarte putita.
En un momento, empecé a sentir como el placer se hacía agudo, la misma sensación de querer ir a hacer pipi, yo gemía y le decía, así, hazme tu mujer, quiero dártelo todo y el se reía y me dijo apúrate que ya voy a terminar, yo seguí moviéndome y el metiendo y sacando, se me hizo mas fuerte la sensación y de repente, sentí como tenía mi primer orgasmo, era riquísimo, sentía como si quisiera hacer pipi, se me empezó a contraer y expandir la concha, paré, el metía y sacaba, como podía, por que se la tenía apretada, yo le decía asi papito, que rico coger, el me dijo, mamita que placer siento, como te estoy gozando, quiero preñarte perra, dejarte toda la leche adentro, y mientras se me contraía e iba bajando la sensación, muy rica con esa verga dentro, sentí como se vino, mi vagina se la estaba comiendo toda, se chupaba la leche y no me importaba si quedaba preñada, solo me importaba seguir sintiendo esa cosa caliente y dura adentro, terminé, el bombeo unas cuantas veces mas y la saco aguada, se acostó a la par mía, me manoseo con sus dedos, me dijo gracias por darme placer y quitarme las ganas, quiero que siempre te abras, para que gocemos rico
Luego que mi tío me violara mi culito, no volví a verlo como en cuatro meses, mami viajó a ver a la abuela y el sabiéndolo, dijo que iba a otro pueblo, pero vino a la capital, vino el viernes temprano, sabiendo que mi madre no regresaría, no me dejó ir al colegio.
Salimos a dar una vuelta, comimos en la calle, me abrazó todo el tiempo, me sentía tan mujer, con un hombre tan guapo y rico abrazándome, me sentía su mujer, fuimos al cine, me acarició en la oscuridad mi cosita, me dio un par de besos bien dados, regresamos y me fui a bañar, había conseguido unas anticonceptivas y me tomé dos, por si acaso, luego que salí del baño, se fue a bañar, lo esperaba en la cama, viendo tv, llegó desnudo y secándose, se miraba tan guapo, no estaba enamorada de él, me gustaba su cuerpo bien cuadradito y rico, tenia ganas de hombre y el estaba dispuesto a hacerme suya, con su verga grande, venuda, peluda y con unos huevotes grandes, rápido me excitaba.
Me levantó de la cama y empezó a besarme, me quitó la camisa que tenía y quedé desnuda, estaba con las rodillas dobladas, pues mido 1.60 y el 1.90, se empezó a restregar en mi, mientras me acariciaba las caderas y la espalda y me besaba la boca, empezó a crecerle y me preguntó quieres mamarmela para que me crezca mas. Le dije que si, me puse de rodillas y el me agarró de la cabeza y me la metió en la boca, yo tenia una mano en su cosota rica, que estaba dura, la otra en los huevos y el me movía la cabeza para metérmela y sacarla. Que rico cogerte esa boquita rica, mamas bien rico, ya te voy a dar una buena mamada en la concha, para devolverte el favor.
Por un rato, solo jadeaba, me miraba y yo a él, mientras le comía el rabo, me sentía tan deseada y eso me ponía caliente, apretaba mucho y succionaba mientras me la metía, me dijo levántate y me puso en cuatro con las rodillas en la orilla de la cama, empezó a chuparme el culo, a acariciarme mi conchita y se restregó la verga sin penetrarme, sentía muy rico, me levantó y quitó la ropa de la cama, me acostó y el a la par mía, nos tapó y me dijo, somos una pareja, yo soy tu marido y tu eres mi hembra, así te quiero coger, como mi mujer.
Esto me hizo mojarme y lo jale, lo besé, se puso encima de mi con todo su peso, con las cobijas tapándonos, lo abrace fuerte y abrí las piernas, me penetro, sin fuerza, pero sin pausas, la sentí toda adentro y lo abrace con las piernas, el empezó a moverse, a sacarla y me la volvía a empujar, no paraba de penetrarme, me apretaba todo el cuerpo, mi cuerpo estaba bajo esa masculinidad que me hacía sentir tan mujer, me apretaba, me cortaba un poco la respiración, pero era lo más rico que había sentido.
Luego de un rato de bombearme en esa posición, sentí como mi cosita se contraía y terminaba con su verga recta y dura dentro de mi, me dolía aún, podía sentirla, se la apretaba, el intentaba empujar y yo estaba casi muriendo de placer, con un dolor delicioso, dejando que me hiciera gozar, terminé riquísimo y lo solté, caí en la cama desvanecida, aun con su verga dentro, la sacó despacio y volvió a besarme entera, me decía, me encanta tu forma de coger, no quiero dejar de hacerlo, quisiera estar en tu vientre todo el día, complaciéndote, haciéndote mi mujer, que sientas lo mismo una y otra vez, eso me volvió a prender, se acostó, era entendible que quería que jugar al caballito, doblo las rodillas, iba a subirme, pero me dieron ganas de mamársela, ya sentía muy rico y me gustaba mamarle la pija.
Se miraba tan imponente, quite las sabanas, le abrí las piernas, me metí en medio y empecé a lamerle los huevos y luego la verga como quien se lame un helado y después me la metí hasta donde pude, se la chupe, pero me dijo quiero tenerte encima, necesito terminar y quiero preñarte, así que me saque su verga de la boca, bien despacio succionando y cuando salió, asi con las rodillas dobladas, cerró las piernas y yo me monté en mi macho y me deje caer de un solo tirón sobre su falo bien parado y duro, grite y le dije perro, como la tienes de grande y dura, me partes la concha, el se rio y comenzó a hacer lo suyo.
Me agarró de las caderas mientras me lo estaba cabalgando, me lo cogía, era mío, mi hombre, me lo imaginaba con otra y me gustaba, el me miraba con una cara desencajada, yo movía mis caderas en círculos sobre su miembro, sentía su verga caliente, que me lastimaba y me daba placer, luego empecé a hacerme adelante y atrás y el solo me miraba con los ojos vidriosos, llenos de lujuria, cuando me hacía para atrás me levantaba un poco, cuando me hacía adelante me dejaba caer, el me empezó a acariciar las tetas y me hice para atrás, me sentía sexy y rica, me gustaba complacerlo, se lo dije, me encanta complacerte, ser tu hembra, estar dispuesta para que me abras y me claves y que te quites las ganas en mi vagina, me encanta recibirte, tener tu verga abriéndome desgarrándome y metérmela toda, me encanta que me tengas bien clavada.
El cambió el ritmo, empezó a empujar hacía arriba y yo me agarré de sus caderas y empecé a subir y bajar toda con las piernas abiertas, me dolía mucho, estar con las piernas así de abiertas, me dolía, hacía que mi hoyo se cerrara, pero la sentía mas en las paredes de mi vagina, lo que me daba placer y me entraba completita, el empezó a subir más rápido, yo a bajar con mas fuerza, me acarició el clítoris con fuerza, le dije ya no aguanto mas y me dijo espérate, tuve que moverme un poquito para no terminar, entonces me dijo ahora dale mi amor, dale mi mujer, mi perra, mi puta, recibí toda mi leche en tu cuca, volví a donde estaba y me moví para estallar y llenarlo de mis jugos y recibir su leche caliente.
El sacó su leche, la expulsó dentro de mi, sentía como me topaba, como se me metía en las entrañas, el estaba terminando y se quedó quieto, grito, que rica mamita, que rico coges, entonces empecé a sentir las cosquillitas y empecé a acelerar y me vine, mientras se le estaba aguadando, no podía salir por que se me contraía y se la agarraba, terminé y caí sobre su pecho, cuando su verga salió de mi, el semen me escurrió, me quedé así un rato y luego me acosté a par de él, me tomó en su brazo y se fumó un cigarro, yo aún temblaba, era tan rico lo que estaba viviendo con este hombre, hasta cuando me violentaba me gustaba, desde que me había abierto el culo, soñaba con que me violara, ahora que ya sentía menos dolor, quería que me poseyera a la fuerza, como un verdadero macho. Le dije quiero ser violada y el se rio y me dijo, vas a sentir que es ser violada de verdad y dormí abrazada a mi hombre.
Desperté entre los brazos de mi tío luego de una noche maravillosa de placer, me besó, nos levantamos, fui a hacer comida, desnuda, fue a la sala y llamó por teléfono, estaba en calzoncillos y me abrazó, me dijo quiero que comas bien, por que te espera un día muy cansado, sonreí, sabía que quería cogerme de nuevo, luego de comer nos bañamos juntos, nos acariciamos y besamos, se la mame de rodillas mientras me caía el agua por mi cara, me volteó y me penetro la concha muy suavecito, terminó muy rápido, yo me había venido por que me acariciaba el clítoris, era fantástico tener a mi macho así, todo para mi, dentro de mi cuerpo, mi vientre lo recibía gozosa.
Fuimos al supermercado de la mano, como una pareja, compramos mucha cerveza, yo no bebía, así me abrió una cervecita, empecé a tomármela mientras preparaba cebichito, me dijo, quiero bastante, invité a mis mejores amigos a comer, Rubén y Mynor, ya que están en la capital. me pareció bien, íbamos a recibir a sus amigos, a los que conocía de toda la vida. Me dijo que no estaría para mi cumpleaños, así que quería celebrármelo con los amigos y las novias. Me pareció bien, hice el cebiche, tomamos la cerveza, él más que yo. Se sentó a verme cocinar y me pidió que me desnudara para hacerlo, sonreí y me quede desnuda, me sentía mareada, estaba tan feliz.
Cuando ya era la hora, me pidió que me fuera a bañar y me pusiera algo que me había comprado, era un trajecito negro, muy transparente, le dije que no me parecía recibir visitas así, me abrazo por atrás y empezó a acariciar mis pechos, me dijo vamos mi amor, no pasa nada, te verás hermosa, quiero que sepan que eres mi mujer. Aun incomoda fui al baño y lo complací, no sé si por que me gustaba la idea que me vieran así o por que ya estaba ebria, salí del baño con el traje y unas bonitas sandalias, me miro y me dijo, ya te ves como una hembra de verdad.
Se me olvidó y puse todo en orden, para recibir las visitas, sonó el teléfono, fui a contestar y era mi madre, para saber si estaba bien, le comenté que si, que vendrían mis compañeras de estudio a almorzar a la casa, sonó el timbre y él salió, mi madre me dijo que regresaba el lunes, por que mi abuela estaba malita, que no había nadie en casa, que todos eran unos irresponsables, que mi tío había desaparecido, que nunca estaba cuando se necesitaba, le pregunté a donde había ido y me dijo que no sabía, pero que era un irresponsable, solo pude sonreír y pensar que se estaba haciendo responsable de mi y mis necesidades.
Oí voces, le dije a mi mamá que debía cortar, que seguro eran mis amigas, me dijo que la llamara cuando se fueran, asentí y corté, salí y vi que eran los dos amigos de mi tío, pero no vi a las novias, pensé que seguro llegarían al rato.
Me abrazaron diferente, igual eran altos, asi que se agacharon y se pegaron a mi y me abrazaron fuerte, uno de ellos me dijo que bonita estas Silvita, como creciste y luego el otro me abrazó igual y me dio un beso en la mejilla, luego en la otra y me tuvo abrazada un rato.
Mi tío me pidió que les llevara cerveza y abrí para ellos y una para mi, serví cebiche y ellos me alagaban por la comida, hacían chiste y nos divertíamos mucho y seguían diciendo que estaba muy guapa, que ya estaba grande y muy bonita, me hacía sentir importante y grande, me sentía como una mujer que los hombres se fijaran en mi, yo estaba a la par de mi tío y me dio un beso, yo intenté esquivarlo, me dio vergüenza, pero el me sostuvo la cabeza y me besó, me levanté y me fui al cuarto, me siguió, me dijo que les debía dinero, que si podía ser mas amigable, le dije que no entendía, me pidió que me dejara acariciar y besar y le dije noooo, me respondió, si te gusta, juro que no dejaré que te hagan daño, ni que te pase nada, solo tienes que ser amable con ellos y le dije no, me da vergüenza y entonces cambio, me agarró del pelo, me hizo la cabeza para atrás y me dijo, si no haces lo que te digo, voy a decirles que pueden violarte, hacerte lo que les de la gana y va a ser peor.
No dije nada y regresé avergonzada a la sala, ellos estaban ya entradillos en las cervezas, me senté y uno de ellos se sentó a la par mía y me dijo dame un besito, mi tío estaba en la puerta, le dije no y me dijo vamos, un besito nada mas no pasa nada, me sentía súper incómoda, pero se me acercó y me topo los labios, me abrazó y me siguió besando suavecito hasta que me metió su lengua y me dio un beso, que me pareció muy rico y se lo respondí, mientras miraba a los ojos a mi tío, que se reía y se estaba apretando la verga.
Me soltó y entonces el otro me dijo que fuera donde él, que también quería su besito y me acerque, me sentó en sus piernas y me dio un beso, mientras me acariciaba las piernas, mi tío se acercó me levanto un poco el trajecito y me acaricio mis nalgas mientras el amigo me besaba, yo me sentía muy mareada, me levantó del pelo y se sentó y me sentó en sus piernas, me dio un poco mas de cerveza y me la tomé un poco de un solo trago y me cayo por el torso. Le cayó en la camisa.
Se quitó la camisa y se desabrocho el pantalón, su amigo Rubén me jaló y me sentó en sus piernas y empezó a manosearme las tetas y me decía esta mojado por que no te quitas esto y le dije que no, intenté detenerlo pero me quitó la pitita que lo sostenía, me lo detuve con las manos en mis pechos pero el hizo fuerza y me las separó y el sostén cayó, tenía los pezones duros, pero no de ganas, estaba muy asustada, no sabía que me iba a pasar, no podía creer que estos tipos que conocía de siempre me vieran desnuda y estuvieran tocándome y diciéndome lo rica que estaba, la cosa de Rubén había crecido, la tenía en mi raya, eso me calentó pero no quería estar con tres hombres a la vez.
Mynor me levantó y me agarró las manos con fuerza por atrás y me tenia pegada a su verga, sentí como le crecía, y entonces Rubén me dejó desnuda, volteé a ver a mi tío que tomaba una cerveza y se acariciaba la verga sobre el calzoncillo, le dije no seas así y me dijo te prometí que no pasaría nada, que no te guste hacer y yo empecé a llorar, ellos se reían, Mynor había quitado todo de la mesa de centro y Rubén que me agarraba de las muñecas, me acostó yo gritaba no, no, por favor no y ellos se reían de mi, me decían, no seas así, solo queremos jugar un ratito que nos divirtamos los cuatro, queremos hacerte pasar un buen rato, como regalo de cumpleaños.
Me pusieron sobre la mesa y Mynor me tomaba ahora. Rubén me abrió y yo me movía lo empujaba, el se reía, vamos déjate, solo un ratito y yo desesperaba pedía que no, estaba tan asustada y llorando, mi tío seguía riéndose y tocándose la verga, ahora con la mano entre el calzoncillo. Que puta salió mi sobrinita.
Rubén se quitó el pantalón y me dejo ver una verga no tan grande, ni tan gruesa, más chica que la de mi tío, pero se miraba muy guapo, la tenía bien parada, yo se la miraba y él se la acariciaba, entonces mi tío le dijo dale y creí que me penetraría, cerré las piernas, pero el me las abrió y yo me retorcía, me puso la punta en el clítoris, se acostó encima de mi y empezó a sobármela en la cuca, se estaba restregando en mi y me apretaba, yo me movía y el no dejaba de deslizarse sobre mi y gemía, decía que puta como se mueve, parece que tuviera hormigas en el culo, mi tío me decía que puta a cualquiera te le abres, toda la cuca la tienes abierta para que te cojan y los tres rieron, luego de un rato, de jadear sin verme a la cara miraba a un lado hacía el piso, se levantó con la pija dura y le dijo a Mynor que tomara su lugar, el otro hizo lo mismo, empezó a masajeársela en medio de mi cuquita, pero mas rápido y mas duro y yo lloraba, el otro me dijo que se la mamara y mi tío me dijo cómesela o le digo que te viole.
Empecé a comérsela, se movía con fuerza y me tenía la cabeza agarrada y yo tenia mis manos cruzadas sobre mis pechos, con toda la verga dentro de la boca, mientras el otro se rosaba en mi cuca y mi tío me decía, perra asquerosa, puta perdida, puta de mierda, te gusta coger, igual que perra en celo, a todos le abre la pusa, cerré los ojos para no ver lo que me hacían y finalmente, Rubén se vino en mi boca y me tuve que tragar toda su leche, no fue mucha, se la sacudió en mi cara y se sentó a ver como me magreaba el otro y tomar otra cerveza, luego de un rato Mynor me dijo, que rica estas Silvita, siempre te lleve ganas, menos mal se me hizo tenerte así toda rica y desnuda para mi, iba tan rápido que su punta toco mi hoyo y me apretó bien, me penetro y siguió bombeando, solo unas cuantas embestidas, se levantó asustado y con cuidado para que mi tío no viera que me había violado, con su verga dentro sentí riquísimo, pero la sacó me la metió en la boca, era muy corta, pero gruesa, me la pude tragar toda, aunque me apretaba toda la boca y finalmente me tuve que tragar la leche de el, me había dejado caliente, así que se la mame mejor que al otro.
Me levanté y mi tío me dijo, no vas a ningún lado quédate en el sillón ábrete y tócate el cuturris, yo no sabía que hacer, miraba al techo sentada frente a ellos desnuda con las piernas abiertas y enseñándoles mi cuca, comencé dedeándome, viendo al techo y ellos me aplaudían y me gritaban así mamita, vamos nena, más, queremos ver más, esto empezó a excitarme y me dije a mi misma, si me van a violar, mínimo lo voy a disfrutar y me los voy a comer a los tres, les voy a dar el mejor sexo de su vida, así que me acomodé mejor y me moví el clítoris en ruedita y me metí un dedo, pronto Mynor vino a mi y empezó a mamarme, cerré los ojos y empecé a jadear, estaba muy rico, me metía la lengua y me succionaba el hoyo, me entregue a su mamada, hasta que terminé en su boca.
El otro se levantó y se la masajeo en mis tetas y luego me la metió en la boca, toda, yo dejé que me cogiera la boca la tenia delgada y chica, me la podía tragar, le acaricie los huevos y jadeaba me tenía pegada al sillón con la verga dentro, ay Silvita que rico mamas, que rica estas y se descargo dentro de mi boca muy rápido, me la volví a tragar.
Mi tío se levantó al baño, el otro me pidió que lo dejara cogerme la boca y la de él me gustaba mas y se la mame despacio también, me preguntó si podía sobársela en mi cuquita y le dije que si, le pidió al otro que entretuviera a mi tío, que solo iba a masajeársela, el otro le dijo que si se daba cuenta lo iba a matar y le dijo que solo se la iba a masajear.
Rubén salió, yo estaba caliente, el me la puso encima y se masajeo, pero yo quería tenerlo dentro, lo paré, lo despegué, se la agarré, estábamos sudando, la puse en la punta de mi hoyo y el me la metió, sentí muy rico, empezó a bombearme, miraba para afuera nervioso, que mi tío no llegara y yo me apresuré a colocarme para sentirlo bien, no me lastimaba, me rosaba muy rico y me gustaba mas su cogida, los otros se quedaron hablando fuera, él empezó a bombear, me decía que rica estas nena, estas muy rica mamita, me encanta como estas de apretadita, se vino dentro de mi muy rápido, agarró una servilleta y me la paso por mi cosita, me metió el dedo con la servilleta para quitarme el semen, oímos pasos y Rubén habló fuerte, yo me acomodé en el sillón, acostada y el se sentó con su cerveza enfrente.
Rodrigo preguntó si querían que se las mamara y ambos dijeron que ya no podían más, que era suficiente, yo estaba muy caliente, él se empezó a tocar la verga y me dijo a ver perra, ahora si vas a sentir que es bueno, me puso en cuatro en la mesa y delante de ellos me penetro de un solo golpe, grite y empezó a bombearme, donde había tenido a Mynor antes, volteé a verlo, tenía una sonrisa, sabía que el había estado dentro de mi y yo me sonreí cómplice con el y le guiñe un ojo, mientras mi tío me penetraba con fuerza, me decía que era un castigo por puta, yo miraba al otro como me miraba, me tomo de las tetas y me jalaba hacia él con tal fuerza que sentía que me partía por dentro no podía dejar de verlos, mientras recibía tremendo castigo de mi tío, finalmente me hizó terminar, el la tenía dura y me hizo comérsela y tragarme el semen, mientras miraba a Mynor con cara de lujuria, se la comí enterita.
Al fin se fueron, mi tío me dijo que me había portado muy bien, que si me había gustado y yo le dije que no, en la mente revivía como había sentido de rico a Mynor dentro mi vientre, me sentía mal, ya no solo era mi tío y las manoseadas de mi maestro de inglés, ahora era la violación que me había dado su amigo, como no terminé con él, por lo rápido para que mi tío no viera que me había penetrado, se me antojaba estar sola con él, me acosté muy molesta y el se quedó viendo tv.
Después de un rato, me dijo, que puta estuviste, nos diste a todos mucho placer, me gustó mucho verte como si te cogieran otros, aunque no te penetraran, fue casi una violación y yo me reí y me dije a mi misma, casi? tu amigo me violó tan delicioso que quiero mas.