parejitadedos
Virgen
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- Feb 14, 2025
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Buenas a tod@s, lo que les voy a contar es totalmente real y nos ocurrió en primavera de 2024.
Os pongo en situación, me llamo Hernan, tengo 48 años y mi mujer se llama Sonia y tiene 45 años,
somos un matrimonio normal, con 2 hijos todavía pequeños y en edad escolar.
Yo soy un chico normalillo, ni alto ni bajo, con un cuerpo normalillo sin estar gordo pero con algo de barriguita y un pene
tirando a pequeño, unos 13cm, Sonia es una mujer normal, morena con ojos marrones, tetas normales, tirando a pequeñas y un culo que quita el hipo, además tiene un chochito rasurado muy apetecible.
Llevamos 17 años casados y 8 de novios y la rutina sexual se había instaurado en nuestro matrimonio, sexo un par de veces por semana, sin innovar mucho, postura del misionero, perrito y el día que teníamos mas tiempo usábamos algún juguete sexual para ella.
Mi esposa y yo éramos virgenes cuando nos conocimos y nunca hemos estado con otras parejas que no fuéramos ella y yo, por
lo cual en nuestros juegos sexuales jugábamos a imaginar que ella conocía a un hombre mas dotado que yo y tenia relaciones
con el mientras yo me masturbaba mirando a mi esposa disfrutar de una gran polla para ella sola.
Ella se excitaba muchísimo cuando le contaba lo que podría hacer con una gran polla que no fuera de goma (ya que tenemos un consolador mas grande que mi polla)
En la primavera de 2024, nos dieron unos días de vacaciones, antes del verano ya que somos hosteleros y en verano tenemos mucho trabajo.
Decidimos dejar a los niños con su abuela e irnos a la playa para intentar ponernos un poco morenos, ya que en verano nos es imposible por el trabajo.
Llegamos a una playa de alicante, donde no suele ir mucha gente en esa época y la gente va desnuda para broncearse completamente.
Pusimos las toallas, la sombrilla, sacamos unas cervezas y unos aperitivos y nos sentamos en las sillas a pasar un día relajado.
Sonia decidió quitarse la parte de arriba del bikini, ya que apenas había gente y así se bronceaba las tetas que estaban blancas
como la leche después de un invierno duro. Ella iba con un tanga de hilo y en topless y yo con un bañador tipo slip muy apretado.
Después de tomarnos unas cervezas y hablar un poco de todo, llego un chico de unos 40 años que se dispuso a poner su toalla a unos pocos metros de donde estábamos nosotros, no le dimos importancia. Al poco rato Sonia se quito el tanga y se quedo desnuda mostrando su bonito coñito. En ese momento yo estaba con el móvil y mi mujer me dio dos codazos diciendo "mira eso por dios", gire mi cabeza y vi que el hombre tenia una polla que le colgaba de unos 18cm y no estaba ni erecta.
Sonia clavo sus ojos en ese pedazo de polla anonadada sin poder parar de mirarla, hasta el punto que el chico se dio cuenta y nos lanzo una pequeña sonrisa. Mi mujer no paraba de mirar descaradamente la polla del chico, que a decir verdad era enorme y bastante gorda, con el glande tapado por el prepucio.
A los pocos minutos el chico se levanto y se acerco a nosotros a pedirnos fuego para encender un cigarrillo, dejando su enorme polla a pocos cm de la cara de mi mujer que tenia los ojos abiertos como platos mirándola, al decirle que no fumábamos, se puso de cuclillas y nos dijo "oye me invitáis a una cerveza, que tengo mucho calor y el agua de mi botella se ha calentado bastante ya que no llevo sombrilla".
Le dijimos que si, saque una lata de la nevera y se la ofrecí, el chico se inclino para cogerla rozado con su gran polla el brazo de mi mujer, que se le pusieron los pezones como flechas al tener contacto con semejante aparato. El chico nos dijo que había ido a cuidar a su madre durante unos días y para salir de la rutina decidió ir a la playa a pasar el día y relajarse. A todo eso mi mujer no paraba de mirar la enorme polla del hombre, mientras intentaba hacer poses para que el chico pudiera tener una visión perfecta de su chochito abierto.
Después de un rato hablando de cosas livianas mi mujer me dijo, "me voy a quemar, me pones crema solar?", el chico se apresuro a ofrecerse a embadurnar a mi mujer de crema solar, cosa que ella acepto inmediatamente, unto sus manos y empezó a darle crema por la espalda, bajando hasta casi su culo y rozando con los dedos la parte baja de la espalda y por los laterales de la acariciando la parte externa de sus tetas, poco a poco vimos como se hinchaba su polla y se ponía gorda casi como el bote de cerveza y su capullo empezaba a salirse del prepucio.
Mi mujer me miro con cara de viciosa y me susurro, madre mía, eso debe medir 25cm. El chico al parecer escucho el comentario y se rio, me miro y dijo, "parece que a tu mujer le ha gustado el tamaño de mi polla", ella inmediatamente dijo " tu crees?, con semejante polla es inevitable no fijarse". El chico soltó una carcajada y se giro hacia mi y dijo "si a tu marido no le importa puedes tocarla y sales de dudas de su tamaño en plena ereccion".
Mi mujer se giro, me miro buscando mi aprobación, le hice un gesto de asentimiento con la cabeza, y no dudo ni un segundo en coger la polla semi-erecta del chico.
Mi mujer dijo "vamos a un sitio con menos gente". Cogimos las toallas y nos fuimos a unos metros de la arena donde había una zona de arboles y arbustos para que la gente de la playa no se alborotara con el espectáculo. Acomodamos las toallas y el chico se tumbo mientras mi mujer se ponía a cuatro patas con el chocho casi en su cara para que lo viera en primera fila y poder tocarle la polla cómodamente.
Comenzó a masturbarlo poco a poco subiendo y bajando su prepucio y dejando salir un capullo gordo y rosado, disfrutando de tener en sus manos semejante polla. Subía y bajaba el prepucio con una mano mientras que con la otra acariciaba sus grandes huevos. Mientras tanto yo le acariciaba las tetas y el clitoris lentamente para que se fuera mojando cada vez mas. El chico después de un rato de que mi mujer lo pajeara lentamente y a conciencia, le susurro "si quieres verla crecer mas puedes chuparla para que se ponga a tono del todo".
Mi mujer no lo dudo ni un momento, bajo su prepucio y empezó a chupar su capullo lentamente, subiendo y bajando el prepucio dentro de su boca mientras notaba con la polla crecía mas a lo ancho y largo. Poco a poco se fue introduciendo mas la polla del chico en la boca, pero era tan grande que apenas le cabía un trozo.
Mientras tanto yo me masturbaba viendo la escena tan excitante que tenia delante, mi mujer estaba cumpliendo su fantasía y lo estaba disfrutando. De vez en cuando mi mujer me miraba con cara de excitación, se sacaba la polla de la boca y me decía "gracias por dejarme cumplir mi fantasía".
El chico empezó a apretar las tetas y los pezones de mi mujer, su polla cada vez crecía mas y mas en la boca de mi esposa, que no paraba de chupar y masturbar al mismo tiempo. El chico se inclino y comenzó a comerle el coño a mi mujer, que gemia con la enorme polla en la boca y apretaba sus huevos con ansia.
Después de casi 10 minutos de mamada y comida de coño mi mujer tuvo un orgasmo intenso con un gemido fuerte que le convulsiono la pelvis como nunca antes había visto.
El chico se incorporo un poco y dijo "si quieres que te la meta solo tienes que pedírmelo", mi mujer entre gemidos dijo "si por favor, métemela, quiero notar ese pedazo de rabo abriendo mi chocho".
El chico abrió las piernas de mi mujer y le fue metiendo primero lentamente el capullo, gordo y con forma de champiñón. estuvo así unos minutos metiéndolo y sacándolo hasta que de un empujón le metió toda la polla en su coño mojado, mi mujer lanzo un grito de placer como nunca antes había oído. El chico empezó a bombear dentro de su coño mientras mi mujer me apretaba con fuerza la pierna e intentaba cogerme la polla, gimiendo y gritando de placer, me decia "menudo pollon me esta follando cariño, me encante" hasta que se corrio con un enorme grito de "ohhhh siii menuda pollaaaaa".
El chico siguió metiendo y sacando su enorme polla del coño de mi mujer que se retorcía de placer hasta que se corrio de nuevo, el chico empezó a empujar con mas fuerza y se corrio llenando de leche el coño de mi mujer que chorreaba semen por todas partes.
Después mi mujer se metió en el agua para limpiarse, el chico se fue y desde entonces cada vez que estamos en la cama mi mujer chorrea pensando en el día que se follo
una verga enorme, no para de decirme que quiere repetir la experiencia en cuanto se pueda de nuevo.
Desde ese dia compramos un consolador enorme el cual disfruta cada vez que puede recordando ese excitante dia de playa.
Os pongo en situación, me llamo Hernan, tengo 48 años y mi mujer se llama Sonia y tiene 45 años,
somos un matrimonio normal, con 2 hijos todavía pequeños y en edad escolar.
Yo soy un chico normalillo, ni alto ni bajo, con un cuerpo normalillo sin estar gordo pero con algo de barriguita y un pene
tirando a pequeño, unos 13cm, Sonia es una mujer normal, morena con ojos marrones, tetas normales, tirando a pequeñas y un culo que quita el hipo, además tiene un chochito rasurado muy apetecible.
Llevamos 17 años casados y 8 de novios y la rutina sexual se había instaurado en nuestro matrimonio, sexo un par de veces por semana, sin innovar mucho, postura del misionero, perrito y el día que teníamos mas tiempo usábamos algún juguete sexual para ella.
Mi esposa y yo éramos virgenes cuando nos conocimos y nunca hemos estado con otras parejas que no fuéramos ella y yo, por
lo cual en nuestros juegos sexuales jugábamos a imaginar que ella conocía a un hombre mas dotado que yo y tenia relaciones
con el mientras yo me masturbaba mirando a mi esposa disfrutar de una gran polla para ella sola.
Ella se excitaba muchísimo cuando le contaba lo que podría hacer con una gran polla que no fuera de goma (ya que tenemos un consolador mas grande que mi polla)
En la primavera de 2024, nos dieron unos días de vacaciones, antes del verano ya que somos hosteleros y en verano tenemos mucho trabajo.
Decidimos dejar a los niños con su abuela e irnos a la playa para intentar ponernos un poco morenos, ya que en verano nos es imposible por el trabajo.
Llegamos a una playa de alicante, donde no suele ir mucha gente en esa época y la gente va desnuda para broncearse completamente.
Pusimos las toallas, la sombrilla, sacamos unas cervezas y unos aperitivos y nos sentamos en las sillas a pasar un día relajado.
Sonia decidió quitarse la parte de arriba del bikini, ya que apenas había gente y así se bronceaba las tetas que estaban blancas
como la leche después de un invierno duro. Ella iba con un tanga de hilo y en topless y yo con un bañador tipo slip muy apretado.
Después de tomarnos unas cervezas y hablar un poco de todo, llego un chico de unos 40 años que se dispuso a poner su toalla a unos pocos metros de donde estábamos nosotros, no le dimos importancia. Al poco rato Sonia se quito el tanga y se quedo desnuda mostrando su bonito coñito. En ese momento yo estaba con el móvil y mi mujer me dio dos codazos diciendo "mira eso por dios", gire mi cabeza y vi que el hombre tenia una polla que le colgaba de unos 18cm y no estaba ni erecta.
Sonia clavo sus ojos en ese pedazo de polla anonadada sin poder parar de mirarla, hasta el punto que el chico se dio cuenta y nos lanzo una pequeña sonrisa. Mi mujer no paraba de mirar descaradamente la polla del chico, que a decir verdad era enorme y bastante gorda, con el glande tapado por el prepucio.
A los pocos minutos el chico se levanto y se acerco a nosotros a pedirnos fuego para encender un cigarrillo, dejando su enorme polla a pocos cm de la cara de mi mujer que tenia los ojos abiertos como platos mirándola, al decirle que no fumábamos, se puso de cuclillas y nos dijo "oye me invitáis a una cerveza, que tengo mucho calor y el agua de mi botella se ha calentado bastante ya que no llevo sombrilla".
Le dijimos que si, saque una lata de la nevera y se la ofrecí, el chico se inclino para cogerla rozado con su gran polla el brazo de mi mujer, que se le pusieron los pezones como flechas al tener contacto con semejante aparato. El chico nos dijo que había ido a cuidar a su madre durante unos días y para salir de la rutina decidió ir a la playa a pasar el día y relajarse. A todo eso mi mujer no paraba de mirar la enorme polla del hombre, mientras intentaba hacer poses para que el chico pudiera tener una visión perfecta de su chochito abierto.
Después de un rato hablando de cosas livianas mi mujer me dijo, "me voy a quemar, me pones crema solar?", el chico se apresuro a ofrecerse a embadurnar a mi mujer de crema solar, cosa que ella acepto inmediatamente, unto sus manos y empezó a darle crema por la espalda, bajando hasta casi su culo y rozando con los dedos la parte baja de la espalda y por los laterales de la acariciando la parte externa de sus tetas, poco a poco vimos como se hinchaba su polla y se ponía gorda casi como el bote de cerveza y su capullo empezaba a salirse del prepucio.
Mi mujer me miro con cara de viciosa y me susurro, madre mía, eso debe medir 25cm. El chico al parecer escucho el comentario y se rio, me miro y dijo, "parece que a tu mujer le ha gustado el tamaño de mi polla", ella inmediatamente dijo " tu crees?, con semejante polla es inevitable no fijarse". El chico soltó una carcajada y se giro hacia mi y dijo "si a tu marido no le importa puedes tocarla y sales de dudas de su tamaño en plena ereccion".
Mi mujer se giro, me miro buscando mi aprobación, le hice un gesto de asentimiento con la cabeza, y no dudo ni un segundo en coger la polla semi-erecta del chico.
Mi mujer dijo "vamos a un sitio con menos gente". Cogimos las toallas y nos fuimos a unos metros de la arena donde había una zona de arboles y arbustos para que la gente de la playa no se alborotara con el espectáculo. Acomodamos las toallas y el chico se tumbo mientras mi mujer se ponía a cuatro patas con el chocho casi en su cara para que lo viera en primera fila y poder tocarle la polla cómodamente.
Comenzó a masturbarlo poco a poco subiendo y bajando su prepucio y dejando salir un capullo gordo y rosado, disfrutando de tener en sus manos semejante polla. Subía y bajaba el prepucio con una mano mientras que con la otra acariciaba sus grandes huevos. Mientras tanto yo le acariciaba las tetas y el clitoris lentamente para que se fuera mojando cada vez mas. El chico después de un rato de que mi mujer lo pajeara lentamente y a conciencia, le susurro "si quieres verla crecer mas puedes chuparla para que se ponga a tono del todo".
Mi mujer no lo dudo ni un momento, bajo su prepucio y empezó a chupar su capullo lentamente, subiendo y bajando el prepucio dentro de su boca mientras notaba con la polla crecía mas a lo ancho y largo. Poco a poco se fue introduciendo mas la polla del chico en la boca, pero era tan grande que apenas le cabía un trozo.
Mientras tanto yo me masturbaba viendo la escena tan excitante que tenia delante, mi mujer estaba cumpliendo su fantasía y lo estaba disfrutando. De vez en cuando mi mujer me miraba con cara de excitación, se sacaba la polla de la boca y me decía "gracias por dejarme cumplir mi fantasía".
El chico empezó a apretar las tetas y los pezones de mi mujer, su polla cada vez crecía mas y mas en la boca de mi esposa, que no paraba de chupar y masturbar al mismo tiempo. El chico se inclino y comenzó a comerle el coño a mi mujer, que gemia con la enorme polla en la boca y apretaba sus huevos con ansia.
Después de casi 10 minutos de mamada y comida de coño mi mujer tuvo un orgasmo intenso con un gemido fuerte que le convulsiono la pelvis como nunca antes había visto.
El chico se incorporo un poco y dijo "si quieres que te la meta solo tienes que pedírmelo", mi mujer entre gemidos dijo "si por favor, métemela, quiero notar ese pedazo de rabo abriendo mi chocho".
El chico abrió las piernas de mi mujer y le fue metiendo primero lentamente el capullo, gordo y con forma de champiñón. estuvo así unos minutos metiéndolo y sacándolo hasta que de un empujón le metió toda la polla en su coño mojado, mi mujer lanzo un grito de placer como nunca antes había oído. El chico empezó a bombear dentro de su coño mientras mi mujer me apretaba con fuerza la pierna e intentaba cogerme la polla, gimiendo y gritando de placer, me decia "menudo pollon me esta follando cariño, me encante" hasta que se corrio con un enorme grito de "ohhhh siii menuda pollaaaaa".
El chico siguió metiendo y sacando su enorme polla del coño de mi mujer que se retorcía de placer hasta que se corrio de nuevo, el chico empezó a empujar con mas fuerza y se corrio llenando de leche el coño de mi mujer que chorreaba semen por todas partes.
Después mi mujer se metió en el agua para limpiarse, el chico se fue y desde entonces cada vez que estamos en la cama mi mujer chorrea pensando en el día que se follo
una verga enorme, no para de decirme que quiere repetir la experiencia en cuanto se pueda de nuevo.
Desde ese dia compramos un consolador enorme el cual disfruta cada vez que puede recordando ese excitante dia de playa.