El que busca encuentra

roman74

Pajillero
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HacÃ*a dÃ*as q mi culito reclamaba verga, asÃ* que después de mucho pensarlo decidÃ* salir al parque q estaba atrás de mi casa.
Según tenia entendido allÃ* se podÃ*a conseguir todo lo q estuvieras buscando, y más si son las 21 hs. de la noche.
Me puse mi pollerita blanca transparente que dejaba ver la minúscula tanguita q traÃ*a debajo y una camisa celeste.
SentÃ*a la adrenalina correr por mi cuerpo, y por q no? ,las ganas de tener una verga en mi culito también.
SalÃ* de mi casa apresuradamente y cuando llegué a mi destino pude apreciar a varias personas q de seguro buscaban lo mismo q yo.
Me adentré al lugar lentamente y moviendo las caderas dando a entender cual era mi objetivo.
SentÃ* las miradas posándose en mi y eso me puso a mil.
De pronto una idea me surgió, me acerqué hasta un árbol; el mas apartado de todos y me quedé ahÃ* quieta, dándole la espalda a todos y a todo.
Estaba realmente sacada, no sabÃ*a lo q me pasaba pero tampoco me importaba, por lo menos no en ese momento.
Mi cuerpo dio un respingo cuando la mano de un desconocido se posó en mi parte trasera, e hice ademán de darme vuelta, pero no me lo permitió y me lo dejo muy claro cuando me apoyo completamente en el árbol.
SentÃ* como esa mano se colaba por debajo de la falda y me estrujaba las nalgas.
-me gusta tu culo- me dijo sin dejar de apretarme
-Haceme lo q que quieras papi, que para eso estoy- le conteste.
Al parecer se lo tomo muy enserio, por que al minuto siguiente me vendó los ojos con algo y me pidió q no me asustara.
Yo ya estaba completamente entregada y por supuesto que accedÃ* a seguir con ese jueguito.
Me hizo poner en 4 con el culo bien en pompa y las piernas bien separadas, por lo que tuve q recostar la parte superior en el pasto.
AhÃ* estaba yo, ofreciéndole mi culo a un completo desconocido; con el culo tan solo protegido por la minúscula tanguita que pronto fue echa a un lado.
El tipo apoyó la punta de su verga en el orificio q se estremeció de solo pensar en lo q vendrÃ*a, no me dio mucho tiempo de pensar ya que al haber entrado la cabeza me tomó de las caderas para enterrármela de una; sentÃ* el dolor mezclado con el placer de aquella embestida brutal. No paso mucho para que comenzara a moverse como una bestia, entrando y saliendo con una fuerza descomunal.
Mi orto estaba siendo abierto de una forma atroz….y yo querÃ*a q me lo metiera más fuerte y más adentro, y asÃ* se lo hice saber.
-mmm, putita que rico culito que tienes….te voy a llenar ese lindo culito de leche!!!
Yo ya no podÃ*a más, ese tipo me estaba dando muy fuerte y mis piernas comenzaban a flaquear por lo q terminé tirada en el piso ensartada por esa verga que sin importarle mi estado fÃ*sico seguÃ*a moviéndose con frenesÃ*; hasta que con una última arremetida como queriéndomela encajar bien al fondo se corrió dentro.
-toma…toma puta..!!!- me decÃ*a mientras daba pequeñas embestidas.
Yo sentÃ*a todo ese lÃ*quido invadiéndome las entrañas y sin ser conciente comencé a apretar la gran verga q aun se encontraba dentro.
Me la dejo un rato más antes de sacármela completamente, cosa q me provocó un vacÃ*o intenso.
Me incorporé poniéndome en 4 de nuevo, sabÃ*a q todavÃ*a se encontraba ahÃ* y querÃ*a ofrecerle el espectáculo de observar mi orto bien abierto desbordante del semen q no pudo quedar dentro.
SentÃ* como las manos volvÃ*an a agarrarme de las caderas y como sus piernas me obligaban a abrir las mÃ*as. Y yo, ni lenta ni perezosa me agaché bien y le volvÃ* a ofrecer mi culo q todavÃ*a se encontraba abierto.
Cuando apoyo la cabeza de su verga pude notar algo q me hizo estremecer.
Aquél q se encontraba atrás mÃ*o no era el mismo de antes, este poseÃ*a una verga muchÃ*simo más grande…o por lo menos la cabeza era monstruosamente enorme.
-No te preocupes putita, querÃ*as verga no?, pues hay una fila esperando por este lindo culito- me dijo el tipo y a continuación me la clavó de una.
Esta vez si q necesite agarrarme de algo, me sentÃ* partida al medio, ese tipo la tenia enorme. Por si fuera poco enseguida comenzó a moverse como un animal, me agarraba de las tetas y me la metÃ*a hasta el fondo; me la metÃ*a de tal manera que podÃ*a sentir sus huevos chocar contra mis nalgas.
-pero q puta q sos….tremendo culo tenes!- me decÃ*a mientras me la encajaba mas y mas; en un momento se levanto y me cabalgó como si fuera un jinete.
Unos minutos después se corrió desplomándose sobre mi y dejándome su verga ensartada.
Quise sacarlo de encima pero era muy pesado para mi, y en un momento pude sentir un ligero ‘’plop’’.
-mira como tu orto se traga mi verga puta….-me dijo y después me la sacó sin ningún tipo de cuidado.
AhÃ* estaba yo, con mi culo destrozado y ya sabÃ*a yo lo que seguÃ*a por lo que decidÃ* poner mi culo en pompa y abrirme las nalgas incitando a que pasara el q seguÃ*a. Cuanto más rápido mejor…
El que seguÃ*a era un viejo, su manera de hablar fue lo q me hizo darme cuenta.
Reconoceré que me dio asco, pero no me quedó otra q resignarme asÃ* que lo dejé seguir.
Se abrió la bragueta, sacó su verga y me la puso en el orto metiéndomela y comenzando a moverse al instante.
-mmm, que gusto….que puta q eres, puedes creer que un viejo te la esta metiendo?- me decÃ*a.
Por suerte se corrió rápido, pero al igual que los otros me la dejo dentro un rato mientras me agarraba las tetas y se seguÃ*a moviendo.
Al ratito salió y yo en la misma posición esperé paciente y adolorida lo que seguÃ*a.
AsÃ* pasaron las horas, por mi culo pasaron toda clase de vergas y muchas.
PodrÃ*a decirse que ese dÃ*a me follaron más de 30 personas.
Cuando ya no quedaba nadie me saqué la venda de los ojos, y cuando me levanté me dolÃ*a terriblemente el culo… y como no iba a dolerme si lo tenia destrozado.
Agarré la tanguita que estaba en el pasto y me la puse para salir de allÃ* lo más rápido posible, aunque tuve que ir lento por q el hilito de la tanguita me rozaba el orto y me provocaba un malestar.
Llegué a casa y me paré frente al espejo, me saqué la tanguita para dejar al descubierto mis nalgas que estaban un poco coloradas.
Me agaché la imagen de mi orto destrozado se reflejara en el espejo, y asÃ* fue, el espejo me mostró la imagen de mi orto completamente abierto, corado y con los restos de espermas mezclados que comenzaban a deslizarse fuera.
Al ver eso mi mente comenzó a procesar la información de los momentos antes vividos…me habÃ*a comportado como toda una puta; lo que al principio empezó con uno terminaron siendo más de 30 personas las que me la clavaron.
Pero una cosa era segura me habÃ*an dejado bien abierta, y todavÃ*a tenÃ*a ganas de más…
Sin duda tenÃ*a que repetirlo.
 
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