Capítulo VIII
Camino De Regreso
Desperté y ella continuaba dormida, decidí dejarla dormir un poco más, mientras ordenaba comida a domicilio, y me vestí, revisaba las grabaciones hechas, al ver otra vez las escenas de la los gritos por su primer orgasmo, la corrida en su boca y de cuando rompí su himen, otra vez mi pene tomó vida propia, así que lo dejé de inmediato.
Llegó la comida, fui a recibirla, recogí su ropa y la llevé, ella estaba despierta ya.
-Hora de cenar, espero que te guste.
Huele bien, podemos ver la tele mientras cenamos,
Claro, le di el control remoto, sintonizó uno de los canales de Disney pasaban una de las comedias juveniles, miraba con atención mientras comía y soltaba espontaneas risas con cada chiste, parecía totalmente adaptada a su desnudez, también cenaba a su lado, aproveché el intermedio
entre dos programas para preguntarle
-¿Cuándo tuviste tu periodo?
¿Por qué me lo preguntas? (lo dijo un poco apenada)
-Es importante, ¿no desearas quedar embarazada a tu edad?
El miércoles terminé, pero es recién la segunda vez que lo tengo.
-Está bien entonces, no habrá problemas.
Otra vez acerté, mis cálculos habían acertado, tenía la duda de un par de días.
¿En serio?, pero si acabaste dentro de mí y varias veces, no había pensado en eso, (dijo algo preocupada)
-Si, según el ritmo hoy no eres fértil, ya te lo explicaré, es hora de volver, vístete.
¿No me baño primero?
-no, quiero que te quedes así hasta mañana, no estas sucia.
Pero me escurre tu cosa mira (mostrándome su vagina).
-Sí, no hay problema, ya te dije, además quiero que lo dejes, es lo normal, solo limpiaremos por afuera.
No replicó más, y cogió su uniforme,
¿Dónde está mi ropa interior?
-Es un recuerdo que guardaré, llévate la nueva que te di, no creo que tengas problemas, además creo que te quedan muy bien.
-Si me gustan.
Cuando termino de vestirse, enrumbamos a su casa, eran como 25 minutos de viaje, necesitaba un modo de que no reconociera el camino, al menos no lo suficiente como para poder ubicarse, aunque creo que con eso estaba pasándome un poco de paranoico, pero no puedo dejar detalles sueltos, siempre he actuado así, a eso atribuyo el éxito de mis planes, no pensaba empezar a ser descuidado hoy, había pensado llevarla de regreso en el baúl pero cambié de opinión, al entrar en la carretera, una vía con pocas curvas y a esta hora casi vacía le dije:
-¿Quieres hacer algo emocionante?
¿Qué cosa?
-Mira acá, aún tengo ganas (señalando el bulto en mis pantalones)
¿Qué quieres que haga?
Me detuve un momento y me desabotone los pantalones, saqué mi miembro que estaba a media erección, acomodé un poco el asiento, desabroché su cinturón de seguridad y aflojé un poco el mío.
-Ven agáchate.
Aquí nos pueden ver.
Nadie nos verá, tu estarás oculta, si pasa algo te avisaré.
Se agacho y comenzó lamiendo luego se lo trago y jugaba con el dentro de su boca, apenas si tenía espacio para mover la lengua, su mejora era increíble, solo un par de veces sentí sus dientes, hacia pausas para respirar, ya había arrancado el auto, estaba yendo a velocidad moderada, en segunda velocidad, no podía hacer muchos cambios, pero avanzaba sin problemas, por la posición se le dificultaba mover la cabeza de arriba hacia abajo, así que le dije
-Usa tu mano derecha
¿Cómo?
La instruí para que mamara el glande, mientras me pajeaba con su mano, cada vez que podía, estiraba mi mano para acariciar su culito o sus senos, pero no me entretenía mucho en ellos, debía concentrarme más en el camino. A punto de salir de la carretera bajé la velocidad poco a poco hasta detenerme a un costado, sujeté su cabeza nuevamente, le llené de semen la boca, la descarga fue esta vez moderada, ella pudo contenerla sin problemas, la dejé levantarse y me miró, abrió su boca mostrándome toda mi descarga en ella luego se la tragó disforzada menté intentando no hacer gestos, y bajo nuevamente para terminar de limpiarme con lamidas, no era mucho lo que quedaba, así que se incorporó rápidamente.
¿Lo hice bien?
-De maravilla, eres muy buena.
Sonrió y nos besamos, cruzamos lenguas, entonces caí en cuenta de que estaba saboreando mi propio semen, no me importó, hasta algo de risa me causó, (no hay problema mientras sea mío pensé)
-Ahora no debemos dejar que te vean, ocúltate.
¿Dónde?
-En el baúl, solo será cinco minutos, mientras llegamos, después te daré instrucciones por teléfono, no lo cierres del todo si lo deseas, además quitare el seguro para que no se cierre automáticamente.
Está bien.
No le tomó más de treinta segundos pasar a la parte de atrás y acomodarse dentro del baúl, acto seguido partí rumbo al edificio donde ella vivía, revisé el reloj y como si lo hubiera cronometrado todo llegué justo a las 8:00 pm otra de las horas muertas en cuanto a vigilancia y seguridad en el estacionamiento, planeaba llegar con antelación para esperar esa hora ya que solo eran alrededor de tres minutos los que tenía para entrar sin ser visto, pero al parecer la mamada de la carretera me había hecho demorar lo justo para llegar apenas a tiempo.
Rápidamente saqué mi portátil, estaba a media cuadra del edificio, hasta ahí alcanzaba a captar la señal inalámbrica que meses antes había logrado instalar a través de un terminal de red suelto en el edificio, este me conectaba con todo el sistema de seguridad y de vigilancia, revisé la portería y en efecto nadie había en ella, y ningún vehículo esperando para entrar, raudamente avance hasta la entrada, repetí la operación de la mañana y me estacioné en el mismo lugar, era el lugar correspondiente a un apartamento en venta, una pareja de ancianos que se había mudado tres semanas atrás lo dejaron libre, además no conducían, no era raro que alguien más ocupara el lugar. Ya dentro calmadamente le dije ahora espera un momento no hagas ruido, te llamaré en un rato. Bajé y oculte bajo las fundas la matricula nuevamente, subí a mi piso, y conectándome al sistema de vigilancia revisé que no hubiera quien nos descubriera, la llamé.
Aló
-Bien, ya puedes salir, hazlo con cuidado, asegúrate de no olvidar nada dentro, la puerta trasera está abierta pero una vez que se cierre se pondrá el seguro, te daré más instrucciones luego.
Un minuto después vi como salía y cerraba la puerta, se detuvo con la poca luz que había inspecciono visualmente la camioneta, cuando intentó usar la luz del móvil para revisar mejor, la llamé de nuevo.
Aló
-Ahora está libre el camino al ascensor, ve rápidamente.
Se dirigió al ascensor lo más rápido que pudo, intentó correr pero no podía, su andar era rengo e incómodo, así que se limitó a caminar lo más rápido que pudo, al llegar, antes de que pusiera su dedo en el botón la puerta se abrió, para su sorpresa no había nadie dentro, dejó pasar ese hecho por alto y entró, puso su piso, nadie más subió en el viaje, salió y caminando lentamente se introdujo en su apartamento.
Gracias por su fidelidad como recompensa por la larga espera les tengo una sorpresa especial subire hoy hasta el capitulo 12 ademas pronto abra nuevas incorporaciones a la saga muy interesantes que os haran mas amena la espera
Camino De Regreso
Desperté y ella continuaba dormida, decidí dejarla dormir un poco más, mientras ordenaba comida a domicilio, y me vestí, revisaba las grabaciones hechas, al ver otra vez las escenas de la los gritos por su primer orgasmo, la corrida en su boca y de cuando rompí su himen, otra vez mi pene tomó vida propia, así que lo dejé de inmediato.
Llegó la comida, fui a recibirla, recogí su ropa y la llevé, ella estaba despierta ya.
-Hora de cenar, espero que te guste.
Huele bien, podemos ver la tele mientras cenamos,
Claro, le di el control remoto, sintonizó uno de los canales de Disney pasaban una de las comedias juveniles, miraba con atención mientras comía y soltaba espontaneas risas con cada chiste, parecía totalmente adaptada a su desnudez, también cenaba a su lado, aproveché el intermedio
entre dos programas para preguntarle
-¿Cuándo tuviste tu periodo?
¿Por qué me lo preguntas? (lo dijo un poco apenada)
-Es importante, ¿no desearas quedar embarazada a tu edad?
El miércoles terminé, pero es recién la segunda vez que lo tengo.
-Está bien entonces, no habrá problemas.
Otra vez acerté, mis cálculos habían acertado, tenía la duda de un par de días.
¿En serio?, pero si acabaste dentro de mí y varias veces, no había pensado en eso, (dijo algo preocupada)
-Si, según el ritmo hoy no eres fértil, ya te lo explicaré, es hora de volver, vístete.
¿No me baño primero?
-no, quiero que te quedes así hasta mañana, no estas sucia.
Pero me escurre tu cosa mira (mostrándome su vagina).
-Sí, no hay problema, ya te dije, además quiero que lo dejes, es lo normal, solo limpiaremos por afuera.
No replicó más, y cogió su uniforme,
¿Dónde está mi ropa interior?
-Es un recuerdo que guardaré, llévate la nueva que te di, no creo que tengas problemas, además creo que te quedan muy bien.
-Si me gustan.
Cuando termino de vestirse, enrumbamos a su casa, eran como 25 minutos de viaje, necesitaba un modo de que no reconociera el camino, al menos no lo suficiente como para poder ubicarse, aunque creo que con eso estaba pasándome un poco de paranoico, pero no puedo dejar detalles sueltos, siempre he actuado así, a eso atribuyo el éxito de mis planes, no pensaba empezar a ser descuidado hoy, había pensado llevarla de regreso en el baúl pero cambié de opinión, al entrar en la carretera, una vía con pocas curvas y a esta hora casi vacía le dije:
-¿Quieres hacer algo emocionante?
¿Qué cosa?
-Mira acá, aún tengo ganas (señalando el bulto en mis pantalones)
¿Qué quieres que haga?
Me detuve un momento y me desabotone los pantalones, saqué mi miembro que estaba a media erección, acomodé un poco el asiento, desabroché su cinturón de seguridad y aflojé un poco el mío.
-Ven agáchate.
Aquí nos pueden ver.
Nadie nos verá, tu estarás oculta, si pasa algo te avisaré.
Se agacho y comenzó lamiendo luego se lo trago y jugaba con el dentro de su boca, apenas si tenía espacio para mover la lengua, su mejora era increíble, solo un par de veces sentí sus dientes, hacia pausas para respirar, ya había arrancado el auto, estaba yendo a velocidad moderada, en segunda velocidad, no podía hacer muchos cambios, pero avanzaba sin problemas, por la posición se le dificultaba mover la cabeza de arriba hacia abajo, así que le dije
-Usa tu mano derecha
¿Cómo?
La instruí para que mamara el glande, mientras me pajeaba con su mano, cada vez que podía, estiraba mi mano para acariciar su culito o sus senos, pero no me entretenía mucho en ellos, debía concentrarme más en el camino. A punto de salir de la carretera bajé la velocidad poco a poco hasta detenerme a un costado, sujeté su cabeza nuevamente, le llené de semen la boca, la descarga fue esta vez moderada, ella pudo contenerla sin problemas, la dejé levantarse y me miró, abrió su boca mostrándome toda mi descarga en ella luego se la tragó disforzada menté intentando no hacer gestos, y bajo nuevamente para terminar de limpiarme con lamidas, no era mucho lo que quedaba, así que se incorporó rápidamente.
¿Lo hice bien?
-De maravilla, eres muy buena.
Sonrió y nos besamos, cruzamos lenguas, entonces caí en cuenta de que estaba saboreando mi propio semen, no me importó, hasta algo de risa me causó, (no hay problema mientras sea mío pensé)
-Ahora no debemos dejar que te vean, ocúltate.
¿Dónde?
-En el baúl, solo será cinco minutos, mientras llegamos, después te daré instrucciones por teléfono, no lo cierres del todo si lo deseas, además quitare el seguro para que no se cierre automáticamente.
Está bien.
No le tomó más de treinta segundos pasar a la parte de atrás y acomodarse dentro del baúl, acto seguido partí rumbo al edificio donde ella vivía, revisé el reloj y como si lo hubiera cronometrado todo llegué justo a las 8:00 pm otra de las horas muertas en cuanto a vigilancia y seguridad en el estacionamiento, planeaba llegar con antelación para esperar esa hora ya que solo eran alrededor de tres minutos los que tenía para entrar sin ser visto, pero al parecer la mamada de la carretera me había hecho demorar lo justo para llegar apenas a tiempo.
Rápidamente saqué mi portátil, estaba a media cuadra del edificio, hasta ahí alcanzaba a captar la señal inalámbrica que meses antes había logrado instalar a través de un terminal de red suelto en el edificio, este me conectaba con todo el sistema de seguridad y de vigilancia, revisé la portería y en efecto nadie había en ella, y ningún vehículo esperando para entrar, raudamente avance hasta la entrada, repetí la operación de la mañana y me estacioné en el mismo lugar, era el lugar correspondiente a un apartamento en venta, una pareja de ancianos que se había mudado tres semanas atrás lo dejaron libre, además no conducían, no era raro que alguien más ocupara el lugar. Ya dentro calmadamente le dije ahora espera un momento no hagas ruido, te llamaré en un rato. Bajé y oculte bajo las fundas la matricula nuevamente, subí a mi piso, y conectándome al sistema de vigilancia revisé que no hubiera quien nos descubriera, la llamé.
Aló
-Bien, ya puedes salir, hazlo con cuidado, asegúrate de no olvidar nada dentro, la puerta trasera está abierta pero una vez que se cierre se pondrá el seguro, te daré más instrucciones luego.
Un minuto después vi como salía y cerraba la puerta, se detuvo con la poca luz que había inspecciono visualmente la camioneta, cuando intentó usar la luz del móvil para revisar mejor, la llamé de nuevo.
Aló
-Ahora está libre el camino al ascensor, ve rápidamente.
Se dirigió al ascensor lo más rápido que pudo, intentó correr pero no podía, su andar era rengo e incómodo, así que se limitó a caminar lo más rápido que pudo, al llegar, antes de que pusiera su dedo en el botón la puerta se abrió, para su sorpresa no había nadie dentro, dejó pasar ese hecho por alto y entró, puso su piso, nadie más subió en el viaje, salió y caminando lentamente se introdujo en su apartamento.
Gracias por su fidelidad como recompensa por la larga espera les tengo una sorpresa especial subire hoy hasta el capitulo 12 ademas pronto abra nuevas incorporaciones a la saga muy interesantes que os haran mas amena la espera