DEPRAVACIÓN TOTAL DE MADRE E HIJO (2)
Laura se despertó y se giro, su hijo estaba todavía dormido, se dio cuenta que estaban desnudos, lo observo en silencio un profundo sentimiento la invadió, se sentía sucia, en su mente se reproducía la imagen de la noche anterior, como la follaban y su hijo lo contemplaba sin ningún pudor y cómo ella se dejo llevar corriéndose intensamente, no podía disimular que su coño se había puesto otra vez en funcionamiento y una potente excitación la perturbaba.
Hugo abrió los ojos y se cruzaron la mirada durante unos segundos, él acerco su cara y le dio un tierno beso a su madre en la mejilla, Laura le correspondió con un gesto con su mano en la cara, Hugo la beso en los labios y Laura quedo paralizada por un instante, él aprovecho para volverla a besar y pasarle la lengua por los labios, Laura reacciono y le puso las manos en el pecho apartándolo.
- Soy tu madre - Dijo Laura afligida.
Hugo cogió la mano de su madre y la llevo hasta su erecta polla y empezó a hacer un movimiento conjunto con su mano.
- ¡No podemos hacer esto! - se lamentaba Laura.
Hugo se puso de rodillas delante de la cara de su madre, soltó su mano y la mano de Laura estaba descapullando a su hijo con movimientos lentos.
- ¡A ver cómo tienes el coño! - insinuó Hugo abriendo las piernas de su madre y poniendo sus dedos en medio de aquel matojo de pelos.
- ¡Déjalo por favor! - susurraba Laura
Los dedos de Hugo le abrieron los labios vaginales y le frotó la raja suavemente con sus dedos, Laura se estremeció y soltó un profundo suspiro.
- ¡Tienes el coño muy mojado! - le asintió Hugo
Ella hizo un gesto de negación con la cabeza, pero su mano le apretó con fuerza la polla, Hugo acerco sus caderas y su polla quedo a centímetros de la boca de su madre.
- ¡Chúpala!
- ¡No me pidas eso!
Hugo la abrió los labios del coño, acerco su cabeza y le pasó la lengua por la raja, lo que provoco que Laura soltase unos gritos mezcla de sorpresa y placer, él empezó a pasarle la lengua y comerle el coño.
- ¡No me hagas eso!- Balbuceaba ella con voz pesada retorciéndose.
- ¡No puedo parar! - vociferó Hugo - ¡Me encanta el sabor de tu coño!
Laura enterró la cara en las sabanas, mordiéndolas intentando reprimirse pero empezó a gemir fuertemente agarró la polla de su hijo con las dos manos y se la llevo a la boca, le paso la lengua por encima del glande y a duras penas le cabía en la boca, empezó a chuparla y succionarla lentamente mientras se abría de piernas ofreciendo su coño.
- ¡Quiero follarte! - le dijo Hugo levantándose y poniéndose en medio de las piernas de su madre.
¡Detente…esto no ésta bien!
- ¡Por las noches sueño con el cuerpo de mi madre y en follármela!
- ¡Estoy muy cachonda pero eres mi hijo!
Hugo le subió las caderas y la penetró con fuerza, Laura lanzó un grito desgarrador y Hugo solo la había penetrado con el glande le subió otra vez las caderas al tiempo que le pasaba un pequeño cojín que había encima de la cama y la volvió a penetrar con fuerza, Laura volvió a gritar y sus ojos quedaron abiertos fijamente mientras su boca se quedaba abierta y inhalaba aire con fuerza.
-¡Tienes el coño muy estrecho! - le dijo Hugo - ¡Muerde el cojín, te la voy a clavar!
Laura mordió el cojín y Hugo la penetró con fuerza y le clavo ¾ partes de su polla y empezó a moverse lentamente y a entrar y salir del coño de su madre.
- ¡Despacio tengo el coño muy cerrado! - rogó ella.
- ¡Me gusta abrirte el coño!
-¡La tienes muy grande! - susurró Laura - ¡Cómo la siento!
Aquella enorme polla le dilataba los labios vaginales y le perforaba la vagina profundamente y Laura se retorció en la cama y Hugo notó que el coño se contraía con fuerza cuando la penetraba y observo cómo la cara de su madre se desfiguraba haciendo muecas extrañas.
-¿Te vas a correr mama?
Laura hizo un gesto afirmativo con la cabeza y se abrazo al cuello de su hijo con fuerza, empezó a temblar y soltó un grito sordo, Su hijo le saco la polla y los fluidos de Laura se desparramaron por los muslos de Laura que empezó a temblar y cuando su hijo le metió dos dedos en el coño y empezó a moverlos y girarlos ella empezó a chillar descontrolada y su hijo tuvo que taparle la boca con el cojín, las piernas y la cadera de Laura empezaron a temblar y un chorro de líquido salió de su coño mientras ella misma se tapaba la boca con las manos y lo observaba asombrada.
-¡Quiero seguir follándote! - le dijo Hugo poniendo a su madre a cuatro patas y penetrándola profundamente, el mojado coño de Laura actuaba como lubricante natural y Hugo la embistió con fuerza, Laura apoyo su cara en las sabanas y comenzó a morderlas mientras gemía y gritaba fuertemente.
- ¡Me vas a volver loca! - gimoteaba escandalosamente.
- ¡Te voy a follar cómo no te ha follado nadie!
Hugo siguió embistiéndola con fuerza, el sonido del chapoteo indicaba que Laura llegaba a un nuevo orgasmo y Hugo también empezó a suspirar con fuerza, Laura llego al nuevo orgasmo casi un momento antes que su hijo que saco su polla y empezó a regar con chorros la espalda de su madre.
Laura se giro y le dio una bofetada y un beso en los labios y se fue duchar, se lavo bien el coño y esta vez salió desnuda sin tapujos delante de su hijo que la observaba con otra potente erección.
- ¡Venga vete a duchar Burro! - le dijo Laura sonriendo y dándole un golpe en la polla.
Hugo se metió en la ducha, mientras Laura se vestía y se ponía las botas, él salió de la ducha y empezó a secarse mientras Laura le dejaba la ropa y salió de la habitación, al salir se topo con el huésped colindante una mujer británica de unos 60 años, le dedico una amable sonrisa, Laura comprendió que la había oído chillar y gemir escandalosamente y tuvo que apartar la mirada avergonzada, se dirigió al hall, en un salón colindante había un gran buffet de frutas y zumos naturales, se sirvió unas buenas raciones acompañadas de un te local y lo devoro ansiosamente, su hijo la siguió con otra bandeja de fruta y un zumo.
Laura salió a la calle y se fumo un cigarro absorta en sus pensamientos, acababa de cometer un acto muy cuestionable, y una sensación de tristeza la invadió, pero se sentía profundamente satisfecha sexualmente.
Aquella mañana cogieron un bus que los llevo hasta la frontera, se subieron a unas canoa y navegaron por el rio Mekong durante un par de horas visitaron un mercado flotante y a la vuelta a medio camino visitaron una plantación de Te.
Aquella noche cenaron en los puestos callejeros en Chiang Rai, dieron una vuelta por el mercado nocturno y tomaron unas cervezas en una terraza con música en vivo, antes de medianoche volvieron al hotel en un rápido y habilidoso tuk tuk, Laura se abrazo a su hijo y le magreo su polla con la mano demostrando sus intenciones.
Llegaron al hotel y subieron a su habitación Laura se desnudo quedándose solo en bragas su hijo la observaba sentado en el sillón de la terraza fumando un cigarro, se dirigió a ella que estaba sentada en la cama y le bajo los pantalones y luego los slips y se metió la polla en la boca brindándole a su hijo una buena mamada sus manos le hacían una paja con una mano mientras con la otra le acariciaban y le estrujaban los testículos con fuerza, él le arañaba la espalda sensualmente y cuando la polla de su hijo estaba totalmente erecta ella se estiro en la cama.
- ¡Fóllame bien follada! - le pidió a su hijo mientras se quitaba las bragas
- ¡Esta noche no quiero que seas mi madre! - le contestó él - ¿quiero que seas muy marrana y follarte como a una puta!
Hugo la embistió con la complicidad de ella, que subió sus caderas y se abrió de piernas ofreciéndole su excitado coño, él la embistió en dos golpes y el coño de Laura empezó a ensancharse con las suaves pero profundas penetraciones.
- ¡Cómo siento tu polla! - le balbuceaba ella entre sus primeros gemidos - ¡Me vas a romper el coño!
-¡Mi padre no te follaba así! - le gimoteó él - ¡No sabía follarte!
- ¡No cariño! - respondía ella -¡Tú la tienes como un burro!
Hugo sentía la excitación y complicidad de su madre que se abría a unas penetraciones más profundas y perversas y la penetraba profundamente y dejaba su polla parada y después la sacaba y la volvía a penetrar con fuerza.
-¡Espera! - bramó Laura compungida - ¿Por qué me haces esto?
- ¡Eres mía y te voy a abrir el coño!
- ¡fóllame despacio! - pedía Laura sollozando - ¡La tienes muy grande y me vas a desgarrar el coño!
Hugo comenzó a penetrarla con un ritmo intenso y los gemidos de Laura junto con los golpes que hacían sus nalgas al recibir las embestidas retumbaban en toda la habitación, empezó a temblar y convulsionarse.
-¡Mi coño no te soporta! - le anuncio ella - ¡Me corro aaaaaah!
Laura se corrió salvajemente y Hugo se sentó en la cama con su espalda pegada a la pared, ella sabía lo que quería y se sentó encima de él, bajando las caderas con fuerza y se clavó la polla de su hijo y agarrándolo por el cuello empezó a cabalgarlo.
- ¡Tú polla me vuelve loca!
- ¡Y a mí me gusta cómo te rebotan las tetas!
Hugo la agarró fuertemente por las caderas y la acompañaba en los movimientos y le daba azotes en las nalgas, Laura soltaba gritos cuando la azotaba y le hacía saber con gestos cómo le gustaba lo que hacía.
- ¡Enséñame la cara de puta que pones cuando te follo!
Laura lo empezó a cabalgar con fuerza mientras lo miraba a los ojos y lo agarraba por la cabeza.
-¿Quieres ver cómo me corro? - le balbuceo ella con palabras ininteligibles - ¿Te gusta hacerme tu putita?
Laura se corrió salvajemente subió las caderas y al sacar la polla de su coño descargó una gran cantidad de fluidos sobre la ingle de Hugo.
- ¡haz que me corra yo! - le dijo empujándola hacía el
Laura le dedico una sonrisa morbosa, se agacho y le dedico una sonrisa morbosa y se metió la polla en la boca dedicándole una suculenta mamada, él le acariciaba la cabeza mientras subía y bajaba, de vez en cuando ella levantaba la cabeza y lo miraba morbosamente hasta que él la obligaba otra vez a agacharse y seguir con la felación.
- ¡Quiero correrme en tu boca!
Ella le hizo un gesto con las manos y siguió con la felación hasta que él empezó a agitarse y a soltar chorros de leche en la boca y la cara de su madre, Laura le apretó la polla con fuerza y le dedico dos succiones profundas en el glande que hicieron que Hugo se estremeciese, luego levanto la cara con esperma corriendo por sus mejillas y le abrió la boca para que viese cómo la tenía llena de leche y ella jugaba con ella, se levanto y se fue al lavabo a lavarse la cara y volvió a la cama, se abrazo con su hijo y se fumaron un cigarro.
Laura se había corrido más en los dos últimos días que en todo el pasado año, se abrazo al torso de su hijo observando cómo su polla volvía a ponerse erecta.
- ¡Fóllame otra vez! - le dijo Laura excitada.
Laura se despertó y se giro, su hijo estaba todavía dormido, se dio cuenta que estaban desnudos, lo observo en silencio un profundo sentimiento la invadió, se sentía sucia, en su mente se reproducía la imagen de la noche anterior, como la follaban y su hijo lo contemplaba sin ningún pudor y cómo ella se dejo llevar corriéndose intensamente, no podía disimular que su coño se había puesto otra vez en funcionamiento y una potente excitación la perturbaba.
Hugo abrió los ojos y se cruzaron la mirada durante unos segundos, él acerco su cara y le dio un tierno beso a su madre en la mejilla, Laura le correspondió con un gesto con su mano en la cara, Hugo la beso en los labios y Laura quedo paralizada por un instante, él aprovecho para volverla a besar y pasarle la lengua por los labios, Laura reacciono y le puso las manos en el pecho apartándolo.
- Soy tu madre - Dijo Laura afligida.
Hugo cogió la mano de su madre y la llevo hasta su erecta polla y empezó a hacer un movimiento conjunto con su mano.
- ¡No podemos hacer esto! - se lamentaba Laura.
Hugo se puso de rodillas delante de la cara de su madre, soltó su mano y la mano de Laura estaba descapullando a su hijo con movimientos lentos.
- ¡A ver cómo tienes el coño! - insinuó Hugo abriendo las piernas de su madre y poniendo sus dedos en medio de aquel matojo de pelos.
- ¡Déjalo por favor! - susurraba Laura
Los dedos de Hugo le abrieron los labios vaginales y le frotó la raja suavemente con sus dedos, Laura se estremeció y soltó un profundo suspiro.
- ¡Tienes el coño muy mojado! - le asintió Hugo
Ella hizo un gesto de negación con la cabeza, pero su mano le apretó con fuerza la polla, Hugo acerco sus caderas y su polla quedo a centímetros de la boca de su madre.
- ¡Chúpala!
- ¡No me pidas eso!
Hugo la abrió los labios del coño, acerco su cabeza y le pasó la lengua por la raja, lo que provoco que Laura soltase unos gritos mezcla de sorpresa y placer, él empezó a pasarle la lengua y comerle el coño.
- ¡No me hagas eso!- Balbuceaba ella con voz pesada retorciéndose.
- ¡No puedo parar! - vociferó Hugo - ¡Me encanta el sabor de tu coño!
Laura enterró la cara en las sabanas, mordiéndolas intentando reprimirse pero empezó a gemir fuertemente agarró la polla de su hijo con las dos manos y se la llevo a la boca, le paso la lengua por encima del glande y a duras penas le cabía en la boca, empezó a chuparla y succionarla lentamente mientras se abría de piernas ofreciendo su coño.
- ¡Quiero follarte! - le dijo Hugo levantándose y poniéndose en medio de las piernas de su madre.
¡Detente…esto no ésta bien!
- ¡Por las noches sueño con el cuerpo de mi madre y en follármela!
- ¡Estoy muy cachonda pero eres mi hijo!
Hugo le subió las caderas y la penetró con fuerza, Laura lanzó un grito desgarrador y Hugo solo la había penetrado con el glande le subió otra vez las caderas al tiempo que le pasaba un pequeño cojín que había encima de la cama y la volvió a penetrar con fuerza, Laura volvió a gritar y sus ojos quedaron abiertos fijamente mientras su boca se quedaba abierta y inhalaba aire con fuerza.
-¡Tienes el coño muy estrecho! - le dijo Hugo - ¡Muerde el cojín, te la voy a clavar!
Laura mordió el cojín y Hugo la penetró con fuerza y le clavo ¾ partes de su polla y empezó a moverse lentamente y a entrar y salir del coño de su madre.
- ¡Despacio tengo el coño muy cerrado! - rogó ella.
- ¡Me gusta abrirte el coño!
-¡La tienes muy grande! - susurró Laura - ¡Cómo la siento!
Aquella enorme polla le dilataba los labios vaginales y le perforaba la vagina profundamente y Laura se retorció en la cama y Hugo notó que el coño se contraía con fuerza cuando la penetraba y observo cómo la cara de su madre se desfiguraba haciendo muecas extrañas.
-¿Te vas a correr mama?
Laura hizo un gesto afirmativo con la cabeza y se abrazo al cuello de su hijo con fuerza, empezó a temblar y soltó un grito sordo, Su hijo le saco la polla y los fluidos de Laura se desparramaron por los muslos de Laura que empezó a temblar y cuando su hijo le metió dos dedos en el coño y empezó a moverlos y girarlos ella empezó a chillar descontrolada y su hijo tuvo que taparle la boca con el cojín, las piernas y la cadera de Laura empezaron a temblar y un chorro de líquido salió de su coño mientras ella misma se tapaba la boca con las manos y lo observaba asombrada.
-¡Quiero seguir follándote! - le dijo Hugo poniendo a su madre a cuatro patas y penetrándola profundamente, el mojado coño de Laura actuaba como lubricante natural y Hugo la embistió con fuerza, Laura apoyo su cara en las sabanas y comenzó a morderlas mientras gemía y gritaba fuertemente.
- ¡Me vas a volver loca! - gimoteaba escandalosamente.
- ¡Te voy a follar cómo no te ha follado nadie!
Hugo siguió embistiéndola con fuerza, el sonido del chapoteo indicaba que Laura llegaba a un nuevo orgasmo y Hugo también empezó a suspirar con fuerza, Laura llego al nuevo orgasmo casi un momento antes que su hijo que saco su polla y empezó a regar con chorros la espalda de su madre.
Laura se giro y le dio una bofetada y un beso en los labios y se fue duchar, se lavo bien el coño y esta vez salió desnuda sin tapujos delante de su hijo que la observaba con otra potente erección.
- ¡Venga vete a duchar Burro! - le dijo Laura sonriendo y dándole un golpe en la polla.
Hugo se metió en la ducha, mientras Laura se vestía y se ponía las botas, él salió de la ducha y empezó a secarse mientras Laura le dejaba la ropa y salió de la habitación, al salir se topo con el huésped colindante una mujer británica de unos 60 años, le dedico una amable sonrisa, Laura comprendió que la había oído chillar y gemir escandalosamente y tuvo que apartar la mirada avergonzada, se dirigió al hall, en un salón colindante había un gran buffet de frutas y zumos naturales, se sirvió unas buenas raciones acompañadas de un te local y lo devoro ansiosamente, su hijo la siguió con otra bandeja de fruta y un zumo.
Laura salió a la calle y se fumo un cigarro absorta en sus pensamientos, acababa de cometer un acto muy cuestionable, y una sensación de tristeza la invadió, pero se sentía profundamente satisfecha sexualmente.
Aquella mañana cogieron un bus que los llevo hasta la frontera, se subieron a unas canoa y navegaron por el rio Mekong durante un par de horas visitaron un mercado flotante y a la vuelta a medio camino visitaron una plantación de Te.
Aquella noche cenaron en los puestos callejeros en Chiang Rai, dieron una vuelta por el mercado nocturno y tomaron unas cervezas en una terraza con música en vivo, antes de medianoche volvieron al hotel en un rápido y habilidoso tuk tuk, Laura se abrazo a su hijo y le magreo su polla con la mano demostrando sus intenciones.
Llegaron al hotel y subieron a su habitación Laura se desnudo quedándose solo en bragas su hijo la observaba sentado en el sillón de la terraza fumando un cigarro, se dirigió a ella que estaba sentada en la cama y le bajo los pantalones y luego los slips y se metió la polla en la boca brindándole a su hijo una buena mamada sus manos le hacían una paja con una mano mientras con la otra le acariciaban y le estrujaban los testículos con fuerza, él le arañaba la espalda sensualmente y cuando la polla de su hijo estaba totalmente erecta ella se estiro en la cama.
- ¡Fóllame bien follada! - le pidió a su hijo mientras se quitaba las bragas
- ¡Esta noche no quiero que seas mi madre! - le contestó él - ¿quiero que seas muy marrana y follarte como a una puta!
Hugo la embistió con la complicidad de ella, que subió sus caderas y se abrió de piernas ofreciéndole su excitado coño, él la embistió en dos golpes y el coño de Laura empezó a ensancharse con las suaves pero profundas penetraciones.
- ¡Cómo siento tu polla! - le balbuceaba ella entre sus primeros gemidos - ¡Me vas a romper el coño!
-¡Mi padre no te follaba así! - le gimoteó él - ¡No sabía follarte!
- ¡No cariño! - respondía ella -¡Tú la tienes como un burro!
Hugo sentía la excitación y complicidad de su madre que se abría a unas penetraciones más profundas y perversas y la penetraba profundamente y dejaba su polla parada y después la sacaba y la volvía a penetrar con fuerza.
-¡Espera! - bramó Laura compungida - ¿Por qué me haces esto?
- ¡Eres mía y te voy a abrir el coño!
- ¡fóllame despacio! - pedía Laura sollozando - ¡La tienes muy grande y me vas a desgarrar el coño!
Hugo comenzó a penetrarla con un ritmo intenso y los gemidos de Laura junto con los golpes que hacían sus nalgas al recibir las embestidas retumbaban en toda la habitación, empezó a temblar y convulsionarse.
-¡Mi coño no te soporta! - le anuncio ella - ¡Me corro aaaaaah!
Laura se corrió salvajemente y Hugo se sentó en la cama con su espalda pegada a la pared, ella sabía lo que quería y se sentó encima de él, bajando las caderas con fuerza y se clavó la polla de su hijo y agarrándolo por el cuello empezó a cabalgarlo.
- ¡Tú polla me vuelve loca!
- ¡Y a mí me gusta cómo te rebotan las tetas!
Hugo la agarró fuertemente por las caderas y la acompañaba en los movimientos y le daba azotes en las nalgas, Laura soltaba gritos cuando la azotaba y le hacía saber con gestos cómo le gustaba lo que hacía.
- ¡Enséñame la cara de puta que pones cuando te follo!
Laura lo empezó a cabalgar con fuerza mientras lo miraba a los ojos y lo agarraba por la cabeza.
-¿Quieres ver cómo me corro? - le balbuceo ella con palabras ininteligibles - ¿Te gusta hacerme tu putita?
Laura se corrió salvajemente subió las caderas y al sacar la polla de su coño descargó una gran cantidad de fluidos sobre la ingle de Hugo.
- ¡haz que me corra yo! - le dijo empujándola hacía el
Laura le dedico una sonrisa morbosa, se agacho y le dedico una sonrisa morbosa y se metió la polla en la boca dedicándole una suculenta mamada, él le acariciaba la cabeza mientras subía y bajaba, de vez en cuando ella levantaba la cabeza y lo miraba morbosamente hasta que él la obligaba otra vez a agacharse y seguir con la felación.
- ¡Quiero correrme en tu boca!
Ella le hizo un gesto con las manos y siguió con la felación hasta que él empezó a agitarse y a soltar chorros de leche en la boca y la cara de su madre, Laura le apretó la polla con fuerza y le dedico dos succiones profundas en el glande que hicieron que Hugo se estremeciese, luego levanto la cara con esperma corriendo por sus mejillas y le abrió la boca para que viese cómo la tenía llena de leche y ella jugaba con ella, se levanto y se fue al lavabo a lavarse la cara y volvió a la cama, se abrazo con su hijo y se fumaron un cigarro.
Laura se había corrido más en los dos últimos días que en todo el pasado año, se abrazo al torso de su hijo observando cómo su polla volvía a ponerse erecta.
- ¡Fóllame otra vez! - le dijo Laura excitada.
