Me gustaría de puntualizar sobre este hilo, no se trata de contar nuestra cruda realidad, está la vivimos día a día, ¡¡se trata de soñar!! ¡¡de imaginar!! ¡¡de ilusionarnos!! Dejemos que nuestras circunstancias hagan su trabajo diario, pero no le ayudemos. Saquemos nuestra fantasía y contemos lo que no vivimos y si nos gustaría, esto es virtual, SOÑEMOS.
Hoy es lunes, son las 9 de la mañana, mal día para los que tengáis que currar, así que no espero que vengáis muchos por la cafetería, si lo hacéis sera de pasada.
Yo lo del trabajo lo llevo opcional, casi siempre elijo de no dar un palo al agua, bastante trabaje ya ¡¡Lo siento por los que aún tengáis que hacerlo!! Aún así salí al campo, es algo que me da una sensación de libertad, el día está fresco, hace algo de viento, no mucho, el cielo está casi nublado, pero abriendo claros, por los cuales salen rayos de sol, estos dan en los cristales de mi coche, yo estoy escribiendo dentro de él, estoy a gusto, calentito.
Miro los árboles, aquí hay muchos, es una zona de frutales, parte de la riqueza de mi pueblo. Estos árboles son de hojas caducas, ya están cambiando de color, hacen un contraste maravilloso, las hay verdes todavía, otras anaranjadas, también las hay amarillas, rojas, otras han caído ya al suelo, los árboles las va desprendiendo, espera librarse de ellas para comenzar su letargo invernal.
Os cuento esto para transmitiros como a veces paso mi tiempo, no hacen falta lujos ni situaciones extremas para alcanzar un grado de bienestar, tan solo interactuando con la naturaleza, conviviendo con ella, comprendiendola, amándola, se consigue tener horas de paz.
