Xaviertrejogt
Pajillero
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Hace unos años tenía una vecina llamada Karla, ella tiene una linda hija de 8 añitos, la niña se llama "luna", es muy linda y simpática, yo siempre la saludaba o le daba algunos dulces, con permiso de su mamá, claro.
Ella tiene un lindo rostro y un cuerpo muy bien formadito para su edad y condición, un culito muy rico, bien paradito.
Yo me llevaba bien con su mamá, le ayudaba con algunas cosas y hasta le había prestado dinero algunas veces.
Después de invitarle a un cafecito, ella me contó que luna tenía la edad mental de una niña de 4 años, todo agarraba, todo rompia, todo se metía a la boca, hablaba muy poco y no reconocía muchas cosas, me dijo que hasta a ella se le pone brusca y en ocaciones la desconocía, yo le daba animos, ya que era madre soltera, el papá la llega a ver muy pocas veces al mes, ya que él tiene otra familia, pero le manda dinero para la niña.
Un domingo muy temprano, mi vecina, tocó a mi puerta y muy nerviosa me contó que su hermana se sentía mal y como estaba embarazada, tenía que ir a verla, me pidió que si le hacía el favor de cuidar a lunita, yo con gusto le dije que si, que no se preocupará, me la dejó en la puerta, con todas sus cositas y su desayuno y se fué muy apurada, la metí a la casa y efectivamente, ella era como una bebita, con todo jugaba, entraba y salía de los cuartos, y yo, como si no existiera, ella traia un vestidito blanco de una pieza y un suéter rojo, con unos zapatitos de charol negros, se la pasaba gateando intentando agarrar al gato que tengo, su vestidito marcaba bien su culito paradito, se le levantaba mostrándome su calzoncito rosita.
Le puse la televisión y se quedó quietecita en el sillón, yo me sente a su lado y me puso mala cara, sin chistar me comenzó a pegar en el brazo y a preguntar por su mamá, le entendía muy poco a sus palabras, yo la regañe, y le dije: no me pegues luna, tranquilita, y le acaricie su cabesita y su carita, no llores mi niña, se calmó un poco.
Busqué un dulce en mi mochila y se lo dí, ella se puso muy contenta, al parecer se tranquilizó un poco, me volví a sentar junto a ella, y ella solita se pego a mi, me abrazó de repente, y en su lenguaje poco entendible, me decia papá, al parecer me confundía con su papá, la jale hacía mi y ella se me subió como bebé, se me sentó encima, frente a frente, sus piernitas a mi costado y su vaginita sobre mi verga, ella recostó su cabecita en mi hombro y me abrazo, yo también la abracé y sobaba su espaldita , me conmovio mucho que ella me brindara ese cariño, el olor de su pelo me estaba excitando, ella rápidamente se quedó dormida, lo supe porque comenzó a babearme el cuello, lo cual no me importó, yo metí mis manos bajo su vestidito y me concentré en sobar esas ricas nalguitas que tiene lunita.
por fin tenía ese rico culito redondito y paradito en mis manos, las apreté y estrujé todo lo que quise, mi verga ya se estaba a full al estar en contacto con su vaginita.
Moví un poco a lunita pero estaba bien dormida, era un poco pesadita y la llevé a mi cama, la recoste, ella despertó un poco, pero al minuto ya estaba dormida de nuevo en los brazos de morfeo, una extraña sensación recorrió todo mi cuerpo, al estar contemplando a la linda lunita en mi cama, tragué un poco de saliva y en mi mente me dije: de estás oportunidades son muy pocas en la vida, pues a gosarla.
Y me incliné hacía ella, le acaricié su carita, le acomodé su cabello, le hable un poco y la movida pero dormía como una piedra, me dirigí hacia su zona "V" y le sobe su vaginita sobre el vestido, que morbo sentía en ese momento, le fuí alzando un poco su vestidito, y acaricié sus ricas y blanquitas piernas, tan suaves y tersas, con olor a crema humectante, besé y pase mi lengua por sus muslos firmes, al llegar a su cuevita le di besitos sobre su calzoncito rosita, con la mayor destreza y delicadeza que pude, le fuí bajando su calzoncito, poco a poco con una gran emocion, por fin logré contemplar la vaginita más pura y linda que he visto en mi vida, era perfecta, tan bella, sin pelito alguno, suave al tacto y abultadita, con un olor hipnotizante, lo más apetecible en el mundo, mi boca y mi verga babeaban al contemplar aquel manjar de los dioses.
Le bajé todo el calzoncito, se lo saqué de las piernas, y me lo lleve a la nariz, oliendo aquel néctar, era morbosamente adictivo, como si fuera un drogadicto inhalando algún solvente.
Después me senté a su lado en la orilla de la cama y liberé mi verga que ya quería participar, tomé su manita y la acerqué a mi verga, le fuí cerrando sus deditos, para que me apretara bien la verga, me comenzó a masturbar con esa linda manita, bien rico se sentía, ella entre sueños me daba unos buenos apretones que me estremecian, yo ya estaba al borde de la locura, dejé su manita en paz, y un deseo de frotar mi pene en su vaginita llegó a mi mente, busque un poco de cremita, la calente un poco en la mano y se la fuí poniendo en su vaginita, también me puse en mi pene, le cerré sus piernitas y me subí con cuidado en la cama, le fuí metiendo mi pene con mucho cuidado, se sentía de maravilla, sus piernitas y vaginita apretaban deliciosos, mi verga y mi mente volaban de placer, ya no me importaba nada más, mis caderas se movían solas y le daba unas buenas clavadas de verga, me descontrolé y comenze a jadear de placer y a decirle cosas, como lo rica que estaba mi lunita, también que era una putita muy linda y no recuerdo que otras cosas más.
Mientas seguía disfrutando, me fuí cansando de brazos y piernas y caí encima de ella, ella despertó de sorpresa y con cara de espantada, empezó a gritar y a pegarme, yo detuve sus manos y le grite , "tanquila mi niña soy tu papá, quieta, obedeceme" shu shu, tranquila, y se quedó quietecita, como que se quedó en shock con mis gritos, yo me seguí repegando, dándole sus tallones de verga mientas ella solo me miraba con su carita, como queriendo llorar, pero no lloró, no pude más y eyacule de forma deliciosa y mientras le soltaba mis chorros de semen ella me miraba y abría unos ojotes de sorpresa, terminé vaciandome sobre su vaginita y piernitas, me quedé unos segundos más sobre mi linda lunita recuperandome, ella se quedó mirándome extrañada, yo le decía a la cara que era toda una putita, que estaba bien sabrosa y que la había disfrutado muy rico, ella solo me miraba y volteaba hacía los lados, me baje de ella, por suerte tenía una caja de pañuelos, la limpie muy bien, la había dejado bien embarrada, se veía muy linda su vaginita llena de mi semen, ella muy quietecita se dejaba, le volví a poner su calzoncito, le acomodé su vestidito y me acoste a su lado, le daba unos besitos en sus mejillas y después le di uno en la frente, me animé y le di uno en los labios, ella reaccionó y me miró, me abrazó la cabeza, la verdad se me rompió el corazón con ese abrazo, el que quedó en shock fuí yo, le di otro besito en los labios, le acaricié la carita y le dije que fuéramos a desayunar, ella entendió y solita se paró, y me jalo del brazo, ella muy contenta, lo cual me calmo mucho, demasiadas emociones pensé, le saqué sus sandwiches y la fruta que le había puesto su mamá, yo me preparé un plato de cereal, ella no dejaba de ver mi cereal y le servi un plato, pero no, terca quería el mío, le di mi plato y ella muy contenta, terminamos de desayunar y la senté a ver la tele porque estaba muy inquieta.
Yo felíz y contento de haber vaciado mis testículos me puse a hacer mis quehaceres de domingo, tenía muchas cosa que lavar, como a la 1 pm me llamó la mamá de lunita, que llegaría como a las 3 de la tarde, me preguntó que sí se había portado bien, le dije que muy bien, recordando el sabor de su vaginita, en fin le colgué y me apuré en mis quehaceres, para pasar mas rato con lunita, yo aún me sentía culpable por lo que le había hecho, así que le fuí a compar una paleta de helado y se la di, ella se puso muy contenta, la ví comerse su paleta y me excitó bastante pero ya no le hice nada más, inclusive, me jalo para que la llevará al baño sobándose su vaginita, la ví orinar, al parecer no le importaba que la mirara, le seque su vaginita y volvimos a ver la tele, esperamos a su mamá.
Mi vecina llegó un poco antes, le entregué a lunita, ella se despidió y me dió un beso en la mejilla, a mi vecina le sorprendió, ya que lunita no es muy cariñosa con nadie, le dije que se había portado muy bien conmigo, me dió las gracias por cuidarla, y me comentó que su hermana ya estaba mejor, que solo fue un susto, pero que ya le faltaba poco para dar a luz, yo fuí por su tooper y se lo entregué, las despedí en la puerta y me quedé feiliz viéndolas entrar a su casa.
Ella tiene un lindo rostro y un cuerpo muy bien formadito para su edad y condición, un culito muy rico, bien paradito.
Yo me llevaba bien con su mamá, le ayudaba con algunas cosas y hasta le había prestado dinero algunas veces.
Después de invitarle a un cafecito, ella me contó que luna tenía la edad mental de una niña de 4 años, todo agarraba, todo rompia, todo se metía a la boca, hablaba muy poco y no reconocía muchas cosas, me dijo que hasta a ella se le pone brusca y en ocaciones la desconocía, yo le daba animos, ya que era madre soltera, el papá la llega a ver muy pocas veces al mes, ya que él tiene otra familia, pero le manda dinero para la niña.
Un domingo muy temprano, mi vecina, tocó a mi puerta y muy nerviosa me contó que su hermana se sentía mal y como estaba embarazada, tenía que ir a verla, me pidió que si le hacía el favor de cuidar a lunita, yo con gusto le dije que si, que no se preocupará, me la dejó en la puerta, con todas sus cositas y su desayuno y se fué muy apurada, la metí a la casa y efectivamente, ella era como una bebita, con todo jugaba, entraba y salía de los cuartos, y yo, como si no existiera, ella traia un vestidito blanco de una pieza y un suéter rojo, con unos zapatitos de charol negros, se la pasaba gateando intentando agarrar al gato que tengo, su vestidito marcaba bien su culito paradito, se le levantaba mostrándome su calzoncito rosita.
Le puse la televisión y se quedó quietecita en el sillón, yo me sente a su lado y me puso mala cara, sin chistar me comenzó a pegar en el brazo y a preguntar por su mamá, le entendía muy poco a sus palabras, yo la regañe, y le dije: no me pegues luna, tranquilita, y le acaricie su cabesita y su carita, no llores mi niña, se calmó un poco.
Busqué un dulce en mi mochila y se lo dí, ella se puso muy contenta, al parecer se tranquilizó un poco, me volví a sentar junto a ella, y ella solita se pego a mi, me abrazó de repente, y en su lenguaje poco entendible, me decia papá, al parecer me confundía con su papá, la jale hacía mi y ella se me subió como bebé, se me sentó encima, frente a frente, sus piernitas a mi costado y su vaginita sobre mi verga, ella recostó su cabecita en mi hombro y me abrazo, yo también la abracé y sobaba su espaldita , me conmovio mucho que ella me brindara ese cariño, el olor de su pelo me estaba excitando, ella rápidamente se quedó dormida, lo supe porque comenzó a babearme el cuello, lo cual no me importó, yo metí mis manos bajo su vestidito y me concentré en sobar esas ricas nalguitas que tiene lunita.
por fin tenía ese rico culito redondito y paradito en mis manos, las apreté y estrujé todo lo que quise, mi verga ya se estaba a full al estar en contacto con su vaginita.
Moví un poco a lunita pero estaba bien dormida, era un poco pesadita y la llevé a mi cama, la recoste, ella despertó un poco, pero al minuto ya estaba dormida de nuevo en los brazos de morfeo, una extraña sensación recorrió todo mi cuerpo, al estar contemplando a la linda lunita en mi cama, tragué un poco de saliva y en mi mente me dije: de estás oportunidades son muy pocas en la vida, pues a gosarla.
Y me incliné hacía ella, le acaricié su carita, le acomodé su cabello, le hable un poco y la movida pero dormía como una piedra, me dirigí hacia su zona "V" y le sobe su vaginita sobre el vestido, que morbo sentía en ese momento, le fuí alzando un poco su vestidito, y acaricié sus ricas y blanquitas piernas, tan suaves y tersas, con olor a crema humectante, besé y pase mi lengua por sus muslos firmes, al llegar a su cuevita le di besitos sobre su calzoncito rosita, con la mayor destreza y delicadeza que pude, le fuí bajando su calzoncito, poco a poco con una gran emocion, por fin logré contemplar la vaginita más pura y linda que he visto en mi vida, era perfecta, tan bella, sin pelito alguno, suave al tacto y abultadita, con un olor hipnotizante, lo más apetecible en el mundo, mi boca y mi verga babeaban al contemplar aquel manjar de los dioses.
Le bajé todo el calzoncito, se lo saqué de las piernas, y me lo lleve a la nariz, oliendo aquel néctar, era morbosamente adictivo, como si fuera un drogadicto inhalando algún solvente.
Después me senté a su lado en la orilla de la cama y liberé mi verga que ya quería participar, tomé su manita y la acerqué a mi verga, le fuí cerrando sus deditos, para que me apretara bien la verga, me comenzó a masturbar con esa linda manita, bien rico se sentía, ella entre sueños me daba unos buenos apretones que me estremecian, yo ya estaba al borde de la locura, dejé su manita en paz, y un deseo de frotar mi pene en su vaginita llegó a mi mente, busque un poco de cremita, la calente un poco en la mano y se la fuí poniendo en su vaginita, también me puse en mi pene, le cerré sus piernitas y me subí con cuidado en la cama, le fuí metiendo mi pene con mucho cuidado, se sentía de maravilla, sus piernitas y vaginita apretaban deliciosos, mi verga y mi mente volaban de placer, ya no me importaba nada más, mis caderas se movían solas y le daba unas buenas clavadas de verga, me descontrolé y comenze a jadear de placer y a decirle cosas, como lo rica que estaba mi lunita, también que era una putita muy linda y no recuerdo que otras cosas más.
Mientas seguía disfrutando, me fuí cansando de brazos y piernas y caí encima de ella, ella despertó de sorpresa y con cara de espantada, empezó a gritar y a pegarme, yo detuve sus manos y le grite , "tanquila mi niña soy tu papá, quieta, obedeceme" shu shu, tranquila, y se quedó quietecita, como que se quedó en shock con mis gritos, yo me seguí repegando, dándole sus tallones de verga mientas ella solo me miraba con su carita, como queriendo llorar, pero no lloró, no pude más y eyacule de forma deliciosa y mientras le soltaba mis chorros de semen ella me miraba y abría unos ojotes de sorpresa, terminé vaciandome sobre su vaginita y piernitas, me quedé unos segundos más sobre mi linda lunita recuperandome, ella se quedó mirándome extrañada, yo le decía a la cara que era toda una putita, que estaba bien sabrosa y que la había disfrutado muy rico, ella solo me miraba y volteaba hacía los lados, me baje de ella, por suerte tenía una caja de pañuelos, la limpie muy bien, la había dejado bien embarrada, se veía muy linda su vaginita llena de mi semen, ella muy quietecita se dejaba, le volví a poner su calzoncito, le acomodé su vestidito y me acoste a su lado, le daba unos besitos en sus mejillas y después le di uno en la frente, me animé y le di uno en los labios, ella reaccionó y me miró, me abrazó la cabeza, la verdad se me rompió el corazón con ese abrazo, el que quedó en shock fuí yo, le di otro besito en los labios, le acaricié la carita y le dije que fuéramos a desayunar, ella entendió y solita se paró, y me jalo del brazo, ella muy contenta, lo cual me calmo mucho, demasiadas emociones pensé, le saqué sus sandwiches y la fruta que le había puesto su mamá, yo me preparé un plato de cereal, ella no dejaba de ver mi cereal y le servi un plato, pero no, terca quería el mío, le di mi plato y ella muy contenta, terminamos de desayunar y la senté a ver la tele porque estaba muy inquieta.
Yo felíz y contento de haber vaciado mis testículos me puse a hacer mis quehaceres de domingo, tenía muchas cosa que lavar, como a la 1 pm me llamó la mamá de lunita, que llegaría como a las 3 de la tarde, me preguntó que sí se había portado bien, le dije que muy bien, recordando el sabor de su vaginita, en fin le colgué y me apuré en mis quehaceres, para pasar mas rato con lunita, yo aún me sentía culpable por lo que le había hecho, así que le fuí a compar una paleta de helado y se la di, ella se puso muy contenta, la ví comerse su paleta y me excitó bastante pero ya no le hice nada más, inclusive, me jalo para que la llevará al baño sobándose su vaginita, la ví orinar, al parecer no le importaba que la mirara, le seque su vaginita y volvimos a ver la tele, esperamos a su mamá.
Mi vecina llegó un poco antes, le entregué a lunita, ella se despidió y me dió un beso en la mejilla, a mi vecina le sorprendió, ya que lunita no es muy cariñosa con nadie, le dije que se había portado muy bien conmigo, me dió las gracias por cuidarla, y me comentó que su hermana ya estaba mejor, que solo fue un susto, pero que ya le faltaba poco para dar a luz, yo fuí por su tooper y se lo entregué, las despedí en la puerta y me quedé feiliz viéndolas entrar a su casa.