Esta es la historia de como llegue a ser tan puta, son la serie de eventos que he pasado y como he llegado a disfrutar tanto del sexo. Espero no aburrirlos y que no sean tan duros conmigo, no soy escritora ni mucho menos.
Todo empezó cuando tenía 9 años, en casa vivíamos mi padre José de 29 años, mi madre Rosa de 26 y mis dos hermanos, Alfonso de 6 y Ernesto de 3. Vivíamos en una vecindad en Iztapalapa, en la ciudad de México. Como se podrán imaginar mis padres eran de recursos muy limitados, por lo que mi papá tomo la decisión de irse a EEUU a trabajar.
Pasado un mes de que mi padre había marchado nos empezó a visitar frecuentemente mi padrino Rafael, amigo de mi papá desde la infancia. Las primeras veces todo muy padre, iba a platicar con mi mamá, conmigo y mis hermanos y jugaba con nosotros, comía y se despedía. Todo muy padre, hasta que después de algunas visitas mi madre nos mandaba al patio de la vecindad a jugar con los vecinos y a mi a cuidar a mis hermanos, con la orden de no entrar a la casa hasta que ella nos llamara. En una de esas ocasiones a mi me empezo a andar mucho del baño, necesitaba orinar urgentemente pero los baños comunes de la vecindad estaban clausurados, asi que decidí ir al baño de mi casa.
Entre y no había nadie, aunque me pareció raro mis ganas por orinar eran mayores, asi que pase rápido al baño y cuando salí paso lo que cambió mi vida para siempre. Escuche gemidos ahogados en la recamará de mi mamá. Con curiosidad, intriga y un poco de temor me acerque al cuarto e hice solo un poco de lado la cortina que hacia de puerta. Lo que ví me dejo impactada. Mi madre estaba desnuda de rodillas mamando la verga de mi padrino quien también estaba desnudo. Eso me impacto mucho, pero tambien senti un vuelco en el estomago que me gusto. Me acomode con la cortina de tal forma que podía verlos sin que ellos me vieran.
Mi padrino tenia a mi madre sujeta de la cabeza y le hubdia su verga en la boca. Era la primera vez que veía una verga de hombre y la veía enorme. Veía a mi mama chuparla, mamarla, lamerla toda, introducirla hasta la garganta y esa imagen se me antojaba, quería probarlo, ser yo la que probara esa barra de carne.
Después de unos minutos mi madre se levanta y le dice a mi padrino, "ya métemela, necesito que te vacies en mi". Mi padrino la acostó en la cama y pude ver como le iba introduciendo la verga a mi madre poco a poco mientras ella gemía bajito y le decía que le encantaba su verga. Mi pantaleta ya estaba mojada, parecía que me había vuelto a orinar pero tenia una sensación muy rica en mi rajita. Instintivamente me lleve la mano a mi entrepierna y me sobaba por encima de mi pantalón. Mi padrino ya estaba penetrando frenéticamente a mi madre mientras le decía cosas como, "¿Te gusta mi verga puta?", "Que rica pucha tienes zorra", "coges delicioso putita" y demás guarradas que cuando las escuchaba me hacian estremecer y mi madre le respondía "si, me encanta tu verga, hazme tu zorra, me gusta ser tu puta, me coges mejor que mi marido"
Mi padrino, después de unos minutos le dijo, "me voy a venir putita, ¿Donde quieres mi leche?" Y mi madre solamente le dijo que quería que la llenara de leche" después de nos movimientos más mi padrino y mi madre gimierón y se quedaron quietos. Yo aproveche para salir despacio y regresar al patio con mis hermanos.
Cuando mi mamá nos llamo para comer y despedirnos de mi padrino no pude verlos con los mismo ojos, en mi mente solo estaban esas imágenes que vi y de las ganas de hacer lo que vi haciendo a mi mamá.
Continuará....
Espero les agrade y dejen sus comentarios con los consejos para hacerles más amenas y excitantes.
Todo empezó cuando tenía 9 años, en casa vivíamos mi padre José de 29 años, mi madre Rosa de 26 y mis dos hermanos, Alfonso de 6 y Ernesto de 3. Vivíamos en una vecindad en Iztapalapa, en la ciudad de México. Como se podrán imaginar mis padres eran de recursos muy limitados, por lo que mi papá tomo la decisión de irse a EEUU a trabajar.
Pasado un mes de que mi padre había marchado nos empezó a visitar frecuentemente mi padrino Rafael, amigo de mi papá desde la infancia. Las primeras veces todo muy padre, iba a platicar con mi mamá, conmigo y mis hermanos y jugaba con nosotros, comía y se despedía. Todo muy padre, hasta que después de algunas visitas mi madre nos mandaba al patio de la vecindad a jugar con los vecinos y a mi a cuidar a mis hermanos, con la orden de no entrar a la casa hasta que ella nos llamara. En una de esas ocasiones a mi me empezo a andar mucho del baño, necesitaba orinar urgentemente pero los baños comunes de la vecindad estaban clausurados, asi que decidí ir al baño de mi casa.
Entre y no había nadie, aunque me pareció raro mis ganas por orinar eran mayores, asi que pase rápido al baño y cuando salí paso lo que cambió mi vida para siempre. Escuche gemidos ahogados en la recamará de mi mamá. Con curiosidad, intriga y un poco de temor me acerque al cuarto e hice solo un poco de lado la cortina que hacia de puerta. Lo que ví me dejo impactada. Mi madre estaba desnuda de rodillas mamando la verga de mi padrino quien también estaba desnudo. Eso me impacto mucho, pero tambien senti un vuelco en el estomago que me gusto. Me acomode con la cortina de tal forma que podía verlos sin que ellos me vieran.
Mi padrino tenia a mi madre sujeta de la cabeza y le hubdia su verga en la boca. Era la primera vez que veía una verga de hombre y la veía enorme. Veía a mi mama chuparla, mamarla, lamerla toda, introducirla hasta la garganta y esa imagen se me antojaba, quería probarlo, ser yo la que probara esa barra de carne.
Después de unos minutos mi madre se levanta y le dice a mi padrino, "ya métemela, necesito que te vacies en mi". Mi padrino la acostó en la cama y pude ver como le iba introduciendo la verga a mi madre poco a poco mientras ella gemía bajito y le decía que le encantaba su verga. Mi pantaleta ya estaba mojada, parecía que me había vuelto a orinar pero tenia una sensación muy rica en mi rajita. Instintivamente me lleve la mano a mi entrepierna y me sobaba por encima de mi pantalón. Mi padrino ya estaba penetrando frenéticamente a mi madre mientras le decía cosas como, "¿Te gusta mi verga puta?", "Que rica pucha tienes zorra", "coges delicioso putita" y demás guarradas que cuando las escuchaba me hacian estremecer y mi madre le respondía "si, me encanta tu verga, hazme tu zorra, me gusta ser tu puta, me coges mejor que mi marido"
Mi padrino, después de unos minutos le dijo, "me voy a venir putita, ¿Donde quieres mi leche?" Y mi madre solamente le dijo que quería que la llenara de leche" después de nos movimientos más mi padrino y mi madre gimierón y se quedaron quietos. Yo aproveche para salir despacio y regresar al patio con mis hermanos.
Cuando mi mamá nos llamo para comer y despedirnos de mi padrino no pude verlos con los mismo ojos, en mi mente solo estaban esas imágenes que vi y de las ganas de hacer lo que vi haciendo a mi mamá.
Continuará....
Espero les agrade y dejen sus comentarios con los consejos para hacerles más amenas y excitantes.