A oscuras vale todo

XtremMan

Virgen
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Jul 15, 2024
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Si no se vé, cuenta?



Con mi esposa Jesi, invitamos a Romi, su amiga y su marido Ivan, a casa. Como solemos hacer cada tanto, comemos, charlamos, vemos alguna película, jugamos algún juego de mesa o hasta hacemos karaoke.

Como no podía faltar, aparte de las pizzas había cerveza, Fernet, Campari e incluso para preparar algún daiquiri. En fin, para todos los gustos, así que comenzamos tomando desde temprano y sin darnos cuenta con el estomago vacio.

Las mujeres tomaban daiquiri de frutilla o durazno que les preparé (bastante fuerte ya que con el azúcar no se siente el alcohol). Para cuando terminamos de comer, ya estábamos a puras risas, divirtiéndonos, haciendo bromas e incluso algún que otro chiste con doble sentido y esas cosas que uno suele hacer cuando está un poco pasado de copas.

Era una noche calurosa de verano, por lo cual, los hombres estábamos con pantalón corto y musculosa. Mi esposa tenía un vestido largo y su amiga tenía una calza corta y una remera escotada.

Mientras poníamos música y tomábamos algo, pasé por detrás de mi mujer, que justo se inclinó para levantar algunos platos de la mesa y como juego le toco la cola al pasar (algo que suelo hacer cuando estamos solos, no con invitados). Lejos de molestarse, cuando volvió de la cocina rozó mi entrepierna con su cola, y por si eso no fuera poco, me apretó el pene por sobre el pantalón. Eso me calentó bastante y más aún al levantar la mirada me di cuenta que su amiga nos vió y se sonrió.

Yo soy muy calentón y esa situación me había provocado una erección que no podía evitar que se note, ya que estaba con un short, cosa que Romi se dió cuenta ya que mientras bailaba me miraba directo el bulto y se reía. Como habíamos usado el horno para las pizzas, ya se sentía bastante calor en la sala, entonces como ya habíamos terminado de cenar, decidimos ir a la habitación a ver una película. Ahí tenemos aire acondicionado y podíamos estar frescos. La habitación es un poco chica y no había lugar para poner sillas y como la tele está al pie de la cama, no quedó otra que acomodarnos como pudimos en la cama, quedando las chicas en el medio y los hombres en los costados. Un poco apretados, pero entramos.

Apagamos la luz y pusimos una peli, que resultó bastante aburrida. Haciamos más comentarios o chistes sobre los actores o la trama un tanto ridícula que prestarle real atención.

Mirando de reojo por sobre Jesi, veo un movimiento raro en la remera de Romi y me doy cuenta que su marido tenía una mano dentro su remera y le estaba tocando los pechos, aunque hacían como que nada pasaba, ya que la poca luz que habia era la que despedia el televisor y mucho no se veía.

Le digo al oído a mi mujer lo que estaba pasando y ella me responde:

- Jaja bueno déjalos debe ser el alcohol.

Y pasando su mano por sobre mi pantalón me dice:

-Vos también estás caliente jaja. (se nota que sin darme cuenta me habia calentado un poco ver esa situación).

Seguimos "mirando" la peli, cuando siento que mi mujer me da un codazo y me hace gestos con su cabeza y sus ojos para que mire a su lado.

Estaba Romi, con una mano dentro del pantalón de Iván, manoseándolo con los ojos cerrados mientras él hacía lo mismo por debajo de su calza!!.

Mi mujer me vuelve a repetir en voz baja:

- Dejalos que se diviertan un poco, no pasa nada jaja.

En ese momento se corta la luz, quedando todo completamente a oscuras. Prendemos los celulares como para ver algo. Romi y su marido al ver que sin luz no habia razón para quedarse, enseguida dicen:

-Uh que mal! Bueno nosotros nos vamos.

A lo que mi mujer les contesta:

- Quédense! Está oscuro, es peligroso. Quizás en un rato vuelva la luz.

- Sigan con lo suyo, hagan de cuenta que no estamos jaja. - Les dijo Jesi. Como haciéndoles saber, que nos dimos cuenta de sus "jueguitos".

La pareja solo atinó a reírse y por los movimientos, roces, besos que se escuchaban y algún que otro leve gemido, nos dimos cuenta que siguieron con "lo suyo".

Le dije a mi mujer que iba a buscar velas, pero ella me dijo que no, que no hacía falta y que deje la habitación cerrada para no perder el aire fresco que aún se conservaba.

- Aparte, está situación, mirá como me puso! - Me dijo al oído mientras me agarra la mano y la lleva bajo su vestido. Noté al instante lo mojada que estaba ya que no tenia bombacha! (no sé en qué momento se la sacó, o nunca la tuvo?).

Comienzo tímida y lentamente a acariciar su entrepierna sintiendo como ella se retorcía de placer e incluso soltaba algún gemido o "respiración fuerte". Era una locura estar haciendo esto frente a nuestros amigos, pero por otro lado, la habitación estaba realmente a oscuras y no se podía ver absolutamente nada. Las gruesas cortinas de la ventana ni siquiera permitían entrar la poca luz de luna.

Continué besando a Jesi y masturbándola, incluso con un par de dedos en su interior que se alternaba entre su calido y humedo sexo y su ardiente "botoncito". Mientras del otro lado se escucha todo tipo de ruidos y gemidos de ambos, aunque solo podíamos imaginar que estaban haciendo.

Ansiaba chuparle las tetas a mi mujer, pero debido a que tenia vestido, no tuve otra opción que sacárselo dejándola completamente desnuda, cosa que no me impidió en lo absoluto sino que incluso me ayudaba subiendo sus brazos para liberar esos hermosos pechos que hoy solo podía admirar con el tacto.

Nuestros amigos estaban a centímetros nuestros y al no tener demasiado lugar las chicas estaban prácticamente pegadas. Aunque el hecho de no poder ver absolutamente nada, nos quitaba un poco la vergüenza, claramente ayudado por la gran cantidad de alcohol que habíamos bebido esa noche. Aunque mi temor era si volvía la luz en cualquier momento, por eso me paré, y como pude, tanteando las paredes y muebles, me dirigí a "apagar" la luz para continuar con lo nuestro a oscuras sin miedo a que vuelva la luz. Aproveché para desvestirme y volver al lado de Jesi. Suponía que no había problema que estemos desnudos, ya que la otra pareja estaba igual que nosotros, por lo que me dió a entender algún que otro roce inevitable entre pieles).

Como pude, a puro tacto, ubiqué los pechos de mi mujer y le dí un suave pellizco en uno de sus pezones , cosa que por lo general le gusta. Cuando siento que mi mujer me agarra la pija y comienza a chupármela. Me doy cuenta que no era el pecho de ella! Y sin pensar digo:

- Uh! Perdón Romi! - Contesté rápidamente apenado.

- Jajaja Me pellizcaste un pezón! (como por si los demás no se hubieran enterado). No pasa nada. - volvió a reirse.

Mi esposa (no sé si por celosa o por continuar el juego e incluso ir más allá), deja de chuparme la pija y con su otra mano se estira buscando tocar la verga de Iván que se encontraba penetrando a su mujer. Y luego de tocarlo dijo:

- Ups jaja me confundí!

La situación se estaba yendo de control, no sé si por la calentura, el alcohol o la mezcla de ambos, pero ninguno se detuvo. Por el contrario, vuelvo a sentir que nuevamente mi mujer se metió hasta el fondo de su boca mi pija, llevandosela 2 o 3 veces al fondo de su garganta asi provocandole una arcada. Cuando se saca mi pija de su boca escucho a Romi decir:

- Ups jaja, me equivoqué!

Era Romi quien esta vez se habia devorado mi pene!! No lo podía creer!

No sé si Ivan se haya dado cuenta, pero obviamente Romi si se enteró, ya que aún tenia su mano en mi pija. No sabía como podía reaccionar mi mujer, que para mi asombro solo soltó una carcajada al unisonó con su amiga.

Me encontraba acostado con mi mujer arrodillada chupándome la pija. Escucho que algo se dicen pero no llego a entender el susurro y noto que nuestros amigos dejaron de coger.

Ahora es Ivan quien dice:

- Ups! yo también me confundí!! Y siento como su pija se rozaba la mía y mi mujer sin problema comenzó a chuparla, alternando entre ambas pijas.

Intuí que a esta altura ya no había limites, y no me equivoqué, al escuchar gemir a Jesi. Su amiga se había ubicado detrás de ella y le estaba chupando la concha!! Mi mujer se retorcía de placer y por momentos dejaba de chupar y pajearnos por el goce que sentía.

Mi mujer me dice:

- Ayy! No doy más, te quiero sentir!!

Sentándose sobre mi pija de un rapido sentón, hasta hacerla desaparecer por completo en su interior y pegando un grito de placer.

Su amiga comienza a masajear y chuparle las tetas, e incluso por los ruidos y gemidos acallados creo que se estaban besando. Mientras con la otra mano le masajeaba el clítoris. Mi mujer estaba enloquecida de placer, moviéndose como nunca. Tal es así, que solo podía pensar en su placer y soltó la verga de Iván, quien aprovechó para tomar un vaso de cerveza.

Cuando volvió a la cama, siento como Iván apoya su verga en mi cara diciendo de antemano:

- Uh perdón! Me equivoqué! Riéndose.

Pero la deja ahí, al ver que yo no reaccioné. Las chicas supongo que no se enteraron de nada y yo me dije a mi mismo, porque no probar? Y pensé: somos amigos y aparte ni nos vemos, nuestras esposas ni se enteran. Y si quisiera podría negarlo que nadie sabría la verdad, así que abrí tímidamente la boca y sacando la lengua toqué lentamente la pija de Iván la cual aparte se sentirse caliente y húmeda podía sentirse el olor particular del pene mezclado con los jugos de su mujer.

Era la primera vez que probaba una verga, y la verdad no sé si fué por la situación, la calentura o el alcohol, pero no me disgustaba, sino hasta lo contrario. Iván se dió cuenta que no saqué mi cara ni me ofendí. El movía su verga erecta y dura por sobre mis labios y toda mi cara. Yo abro mi boca y él al darse cuenta comienza a meter un poco su miembro para luego sacarlo y volver a introducirlo lentamente como cogiendo mi boca.

En ese momento mi mujer que seguía cabalgándome, se inclina para besarme, cuando se encuentra con la verga de Iván en mi boca. Pensé que se iba a molestar, pero por el contrario, enseguida comenzó a lamer y chupar la verga junto conmigo, como compartiendo un helado de cucurucho.

- Mmm que rico, como me calienta esto! - Y agarrando la pija de Iván y con su otra mano mi nuca me obligaba a tragarme un poco más ese trozo de carne. Iván dice en voz alta:

- Uff! no doy más! cuidado que voy a acabar! avisando a tiempo e intentando retirar su verga, lo cual mi mujer sin soltársela, no lo deja irse y lo comienza a masturbar con más rapidez.

- Voy a hacer que acaben juntos! Y comienza a mover su culo, cogiéndome con fuerza y clavándose mi pija lo mas que puede y acelerando el ritmo. Iván sin poder resistir un segundo más:

- Ahhh me corro! alcanza a decir, en lo que mi mujer agarrándome otra vez de la nuca hace que me meta la verga de nuestro amigo en la boca, quien comienza a retorcerse de placer y siento como empiezan a golpear contra mi paladar y garganta, espesos y calientes chorros de semen, algunos tragando sin poder evitarlo y otros cayendo sobre mis labios y mi cara al mismo tiempo que acabo, llenando de leche la concha de mi mujer.

Mi mujer me besa apasionadamente, probando también la leche de nuestro amigo que ella misma ordeñó! Y continuamos jugando con nuestras lenguas en un largo beso.

Yo no podía creer lo que había sucedido, era algo impensado. Por más que no pudiéramos vernos, todos sabíamos lo que había pasado.

Ambos hombres quedamos cansados de momento por haber acabado de forma simultánea. Yo me levanté para orinar y lavarme un poco la cara, mientras Iván fue a agarrar otra cerveza, dejando solas en la cama a las chicas....



Continua....



La luz aún no había vuelto, volvimos a la habitación con Iván y escuchamos la respiración fuerte de nuestras parejas. Pero no sabíamos que estaban haciendo, así que a puro tacto comenzamos a tantear y tocar por todos lados, para descubrir en que andaban. Cuando me pude dar cuenta que Romi estaba acostada y Jesi estaba al borde de la cama hundida entre sus piernas, chupando y comiendo la concha de su amiga y haciéndola gemir cada vez más fuerte.(Parece que no soy el único en experimentar cosas nuevas). Yo aprovecho la posición y apoyo mi verga sobre los labios de Romi que enseguida al darse cuenta comienza a chuparme la pija como si se tratara de el dulce más delicioso.

En ese momento no sé qué pasó por mi mente y acercándome al oído de mi esposa le dije:

- Amor...Iván te quiere coger.

Quería ver su reacción, se bien en parte me calentaba la posibilidad de que eso pase, se lo comenté como jugando, pensando que se iba a negar sorprendida. Ella en cambio, hizo un silencio de unos segundos y solo dijo: "bueno". Apenas dejando de disfrutar a su amiga para contestar.

Y manoteando intentando encontrar a Iván en la oscuridad, encuentro su verga y agarrándolo de ahí lo acerco y le digo al oído:

- Jesi quiere que la cojas, es toda tuya. Aunque después me di cuenta que quizás exageré con lo de "toda".

Él, sin dudar, se fue ubicando detrás de mi mujer y arrodillándose detrás de su culo, comenzó a chuparle la conchita y jugar con sus dedos. Ahora eran las dos quienes gemian sin contenerse. Al rato Iván se para detrás de mi mujer quien estaba al borde de la cama, quedandole su cola a la altura perfecta. Jesi se encontraba con la cola levantada y las rodillas separadas. Nuestro amigo comienza lentamente a hundirle su pene, que si bien es igual de largo que el mío por lo que pude notar al tacto, es bastante más grueso, ya que apenas me entró en la boca.

Los movimientos de Iván comenzaban siendo lentos, pero con fuerza, sacando y metiendo su pija y empujando al fondo. Movimientos que a su vez se transmitían a la concha de Romi, cuando con cada embestida, Jesi enterraba más su lengua en su amiga. Yo estirándome un poco para tocar los pechos de mi mujer, dejo mis huevos a la altura de la boca de Romi, la cual comenzó a lamerlos y meterse de a uno en su boca y jugar con ellos.

Los cuatro estábamos disfrutando al extremo, cada minuto era mejor y más caliente. Romi agarrándome de las nalgas me empuja hacia delante, quedando prácticamente sentado sobre su cara y comienza a lamerme el culo! No lo podía creer! Nunca había sentido esa sensación.

Iván seguía cogiendo cada vez más fuerte a mi mujer mientras ella seguía chupando a su amiga y creo que también jugando con su culito.

Sentí la lengua de Romi entrando en mi culo, me estaba literalmente cogiendo con su lengua y comenzaba a jugar con un dedo. Iván saca suavemente su verga del interior de Jesi y agachandose un poco comienza también a comerle el culo al igual que su mujer lo hacía conmigo. Luego de un rato de haber jugado con el culito de Jesi, Iván me preguntó en voz alta buscando mi aprobación:

- Puedo hacerle la cola a Jesi?

Y justo cuando estoy contestándole que a mi mujer no le gusta el sexo anal, ella me interrumpe contestándole a él, o mejor dicho, casi implorándole:

- Si! por favor, cogeme la cola.

No podía creer lo que escuchaba. Jesi no suele pedirme, ni dejarme hacerle el culo, solo un par de veces pude convencerla. Pero en cambio a Iván estaba prácticamente rogándole que lo haga.

Nuestro amigo apoyó su glande justo sobre el hoyito de mi mujer, quien tomando una bocanada de aire y reteniendo su respiración se aparta un poco de su compañera echando su cabeza hacia atrás, encorvando su espalda y levantando más su cola.

- Tranquila amor, disfrutá, va a ser delicado. - Le digo, como aprobando esa situación.

Alcanzo a tomar de mi mesa de luz una botella de lubricante la cual le alcanzo a Iván quien aprovecha para untarse en su miembro y también en la cola de mi amada. Y comienza a empujar delicada y muy lentamente su pija dentro del culo de Jesi. Romi, había tomado sin darme cuenta el lubricante poniéndose un poco en su mano para luego seguir jugando con mi cola. Tanto yo, como mi mujer, estábamos ambos disfrutando por el culo, una locura.

Yo tenía 2 dedos jugando dentro mío, que Romi se dedicaba a mover sutilmente dando vueltas y sacándolos un poco para luego volver a introducirlos con suavidad. Mientras Iván ya había metido la mitad de su verga, sin provocar un solo quejido de dolor de mi mujer, sino todo lo contrario. Jesi había dejado de chupar a su amiga y gritaba de placer sin control.

- Ayy si métemela toda, quiero sentirla toda. Uff me vas a romper la cola! Que rico, siento como me estás abriendo el culito! - Eran algunas de las frases que repetía como poseída.

Esa situación no sé porque, me tenia loco. El imaginar a mi mujer (porque no podía ver su cara ni nada) disfrutando de otro hombre, de otra verga. Y más aún, que le estuvieran haciendo la cola, esa que tantas veces me negó por miedo al dolor. Y ahora una verga aún más gruesa que la mía la iba a destrozar.

-Rompele la cola a mi mujer con esa verga grande! Dejale el culito bien abierto! - Alcance a decir sin razonar, a quien en ese momento sodomizaba analmente a mi esposa.

Creo que eso disparó algo en Jesi, que haciendo un movimiento hacia atrás, ella misma se terminó de clavar toda la pija de Iván hasta chocar con sus huevos. Quedándose unos segundos quieta, para luego comenzar a moverse ella hacia adelante lentamente hasta casi sacarse la pija del culo y nuevamente se echaba hacia atrás con fuerza volviendo a clavársela hasta el fondo. Iván prácticamente no se movía, era ella quien parecía estar cogiéndolo o aprovechándose de él.

Iván comienza a cogerla cada vez más fuerte y mi mujer comienza a pajearme, mientras su amiga juega ya con TRES dedos, dentro mío. En ese instante comienzo a acabar varios chorros fuertes que cayeron algunos sobre la cara de mi mujer y el resto sobre las tetas y la panza de Romi. Y mientras Jesi se encarga de limpiar con su lengua a su amiga, Iván la toma fuertemente de la cintura, embistiéndola ferozmente una y otra vez hasta llenar el culo de mi mujer de su leche caliente, quien temblando por un gran orgasmo que aflojó sus piernas y todo su cuerpo se dejó caer exhausta sobre el cuerpo de su amiga.

Iván muy despacio quita su verga del culo de Jesi quien siente como esa leche espesa comienza a salir casi sin fin, recorriendo el interior de sus muslos para continuar bajando por sus piernas.

Esta vez, caímos todos rendidos. Las mujeres fueron a tomar algo y a lavarse un poco. Iván creo que también iba al baño y yo quedé tirado en la cama descansando. Creí que todo acabaría ahí esa noche, pero me equivocaba.



Continua...



Yo me había quedado dormido, y despierto cuando escucho entrar a las chicas riendo como cómplices de algo. Mi mujer se acerca, y acostándose boca arriba me dice:

- Hagamos un 69! Y guiándome sobre ella le comento que por un rato no creo volver a tener una erección.

- Eso lo vamos a ver.. déjamelo a mí.

Y comienza a lamer mi aún flácido pene, mientras yo disfrutaba chupando esa concha que me encantaba y haciendo que se retuerza con cada lengüetazo que le propinaba.

En uno de esos movimientos con mi lengua, la paso por su culito y me sorprendo al darme cuenta como había quedado abierto. E incluso parecía todavía contener algo del semen de Iván. Mi mujer me dice:

- Viste como me dejó la cola tu amigo? jaja me las vas a pagar... (no sé a que se refería, ni que tenia que ver yo, si tampoco fué que la hubiera obligado a nada.)

De pronto, sentí la lengua de Romi, jugando nuevamente en mi culito y mis huevos.(parecía que eso le encantaba). Yo estaba gozando nuevamente, pero aún mi pija estaba flácida. Me preguntaba a todo esto que estaría haciendo Iván. Cuando siento que Romi comienza a chuparle el culo a mi mujer, mientras yo hacía lo mismo con su concha.

En ese momento me di cuenta, que el que me estaba chupando el culo era Ivan!! De repente siento que al igual que su mujer comienza a jugar con sus dedos en mi culo ayudado también del lubricante. Así estuvo un rato, hasta que en un momento, siento como algo grueso intenta entrar en mi culo. Claramente no era un dedo y tampoco parecía ser alguno de los juguetes que tenemos con Jesi.

Antes de poder reaccionar, siento como mi mujer me agarra las piernas. Y con sus piernas aprisiona mi cabeza con la ayuda de Romi que también me agarraba de la nuca hundiéndome más en la concha de Jesi, quien me dice:

-Tranquilo amor, disfrutá, va a ser delicado. (lo mismo que minutos antes le había dicho yo a ella). En ese momento entendí su venganza, y porque no iba a necesitar que mi verga estuviera erecta.

Me sentía dominado por los tres, pero sobretodo por mi mujer, quien parecía estar disfrutándolo más que nadie. No sé si tenía forma de zafarme, pero tampoco lo intenté. Simplemente me entregué a lo que ellos querían.

Sentí como empujaba Iván su verga intentando abrirse paso dentro mío, cosa que creí que iba a ser imposible, al menos sin sentir un dolor insoportable. Pero estaba equivocado, se nota que sabia realmente lo que hacía y ayudado por el lubricante y el haber estado ambos jugando con mi cola previamente, siento como la cabeza de su verga gana terreno, logrando ingresar en mi.

Intento tranquilizarme, respiro profundamente y relajo mi cuerpo a la vez que siento como lentamente y centímetro a centímetro esa pija gruesa y dura, iba deslizándose hasta sentir su pelvis contra mi cola y se queda un rato inmóvil en esa posición.

- Relajá esa colita amor! - Escucho decir enloquecida a mi mujer, al tiempo que me daba un cachetazo en la nalga.

Por otro lado, Romi había encendido la linterna de su celular apuntándola directo a la acción, como para no perderse nada entre los tres. (quiero creer que era solo la linterna y no la cámara).

- No lo puedo creer, te entró toda! jaja yo sabía! dice contenta Romi, como si de ganar una apuesta se tratara.

Yo intentaba demostrar, que si bien me dejaba coger por mi amigo, no era algo que me volvía loco. Intentando demostrar algo de cordura. Pero el placer era más fuerte que yo y comencé suavemente a moverme hacia adelante y atrás, aumentando el ritmo y perdiendo algún gemido en el camino.

Mi mujer se aparta de abajo mío, haciendo un 69 con su amiga. (Después me comentó que lo hizo para que yo no me corra rápido por su boca y asi disfrutara un rato más). Yo estaba gozando muchísimo, sin embargo mi verga aún seguía flácida, ni mi mujer pudo levantarla. Iván ya me cogía más y más fuerte, incluso dándome alguna nalgada. Y algunas frases como las que antes dijo Jesi cuando estaba en mi posición comenzaron a salir de mi boca sin siquiera pensarlas:

- Aahh sii, Sii, cogeme. Que rico! Parecía no haberme quedado una gota de vergüenza o haber sido poseído por una puta. A nuestro lado se escuchaba como se reían un poco las chicas, pero no en tono de burla sino como asombradas de mi expresión. Iván me tenia agarrado de la cintura y sacaba su verga para luego volver a meterla hasta el fondo fuertemente.

- Que rica cola! la voy a llenar como la de tu mujer!

Y dicho eso, comienza a cogerme como animal, cada vez más y más fuerte y profundo. En ese instante mientras siento como se inunda mi interior, sintiendo su semen caliente dentro mío, comienzo a acabar yo, sin tocarme y lo más loco fue que mi pija aún estaba flácida. Nunca me había pasado algo así, creo que fue lo que llaman orgasmo prostático.

Las chicas siguieron un rato con lo suyo. Jesi acercándose a mi me da un beso con el sabor de Romi y me dice:

- Yo sabía que te iba a gustar, por eso les dije a ellos.

Con los días fuimos hablando de lo que sucedió y contándonos las partes que el otro se perdió, por no poder ver y reconstruyendo así esa aventura, para poder plasmarla en este relato. Aunque sospecho que pasaron más cosas de las que se contaron.

Fin.
 
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